Pov SeokJin.

Ansioso, nervioso, no sabía cuál era peor o si ambos estaban mesclados, mi pareja y yo viajamos hasta T/P, pues nos han comentado que existe un orfanato ahí donde las parejas homosexuales pueden adoptar sin ningún problema

Rentamos un auto para nuestros contantes traslados a aquel orfanato. Yo no podía dejar de jugar con mis manos gracias a las emociones antes mencionadas, pues sentía que esas simples palabras eran muy poco para lo que sentía en realidad. Al parecer mi amado lo noto ya que poso una de sus manos sobre las mías sin despegar la mirada del camino.

—Mi vida, relájate. Veras que todo irá bien—su comentario no hizo que me relajara del todo.

—Lo sé cariño, pero ¿Y si no encontramos al indicado? ¿Somos aptos para esto? ¿Nos verán raro? ¿Nuestro idioma será un problema para la comunicación mutua? — muchas preguntas invadían mi mente, ninguna era positiva al parecer.

—Amor, solo respira profundo e intenta pensar en positivo ¿Bien? —beso con delicadeza el torso de mi mano que anteriormente tomo.

Después de cierto tiempo llegamos al lugar, la entrada era linda, pues estaba rodeada de enredaderas florales y arbustos bien mantenidos. Bajamos del auto para después tomarnos de las manos y poder entrar, pero justo al pie de la escalera se encontraba una niña quien lloraba en desconsuelo, yo me acerque.

—Pequeña ¿Éstas bien? —la niña me miro con ojitos tristes y confusos, pero recordé que mi idioma seria confuso para la niña.

Mas esta solo negó.

—Rompí mi peluche—grande fue mi sorpresa al recibir una respuesta en mi idioma. La niña me enseño un peluche de una alpaca con un roto pañuelo rojo —Es mi peluche favorito— lo abrazo con ternura aun llorando en silencio.

—No te preocupes, tesoro, esto tiene reparación—le sonrió con ternura.

De la mochila que traía conmigo, pues siempre iba precavido, saque un estuche de costura, lo llevaba por si mi pareja rompía alguna prenda que era casi común y más en sus chaquetas. Tomé aquel peluche y delicadamente cosí ese pañuelo roto. Al terminar y revisar que no estuviera roto de otro lado, se lo regresé a una niña que saltaba de felicidad.

—Muchas gracias— La niña dio una reverencia y se fue corriendo a dentro del orfanato.

La mirábamos con una sonrisa a la hora de que regreso a las instalaciones.

—Dios, es una niña hermosa...—me levanté del lugar y tomé nuevamente la mano de su pareja para entrar al lugar.

—Corriste como una madre al rescate de su hijo—sonrió.

—Sentí bonito—y de igual forma, sonreí.

Al entrar fuimos directamente con la directora la cual es una señora mayor muy buena. Nos habló de los fáciles trámites, o eso me explicaba NamJoon ya que mi inglés no es para nada bueno en ningún sentido.

La niña de hace rato seguía en mi cabeza así que le hable a NamJoon.

—Cariño... ¿Crees que podrías preguntarle sobre la niña de hace rato? —me sonrió y solo asintió.

—Disculpe Señora C, cuando llegamos había una niña llorando en las escaleras de la entrada. Al parecer a mi pareja le ha interesado esa niña—hablo en inglés para comunicarse con la señora de frente.

—¿Recuerda alguna seña en particular? —hablaban entre ellos y NamJoon me lo tradujo.

—Alpaca—dije, la señora sonrió y se dirigió con mi pareja nuevamente.

—Esa niña es única, ella es latina, aunque habla varios idiomas. Es muy inteligente y realmente tiene suerte de estar viva—NamJoon me traducía todo y yo me sorprendí por lo último.

—Nammie, preguntarle ¿Qué fue lo que le paso porque dijo eso último? —me hizo caso, le pregunto a la señora y siguió.

—Fue abandonada cuando solo tenía un año de nacida, me contaron que vago sola en las calles a la mitad de una tormenta. Su cuerpo no resistió y se desmayó cayendo cercas de un río...—ella hizo una pausa y NamJoon me explico hasta ahí.

—¿Qué paso después? —NamJoon se sorprendió por que hable en inglés, hago mi esfuerzo para aprenderlo, pero no me es fácil ¿De acuerdo? Pero en ese momento salió de la nada.

—Como si de milagro se tratara, unas personas la salvaron, la acogieron en su hogar hasta que estuviera bien y la trajeron aquí—sonrió con nostalgia la señora. —Cuando la trajeron me informaron que no tenía nombre, así que le puse uno—.

No pudo terminar de hablar porque la puerta se abrió de golpeé dejando ver a un niño llorando.

— Madre C, T/N me ha pegado—el niño lloraba desconsoladamente.

—Ya mi niño—soltó un suspiro pesado. —¿Qué fue lo que paso? —el niño y la señora hablaban en inglés.

—Es que yo tome su peluche y de repente ella se enojó—sus sollozos cesaban.

—Ven, voy a hablar con ella—la señora se levantó. —Vengan, así conocen más a T/N—NamJoon se paró y yo le seguí.

Pov NamJoon

Salimos a un enorme patio de juegos, donde al parecer era hora de que los niños tuvieran su tiempo de diversión. Pude visualizar muchos niños totalmente diferentes, como de distintos lados del mundo. Realmente se veía un lugar lleno de armonía.

—Está sentada en aquel árbol—dijo aquel niño.

Nos acercamos y nuevamente la niña lloraba.

—T/N, me puedes explicar por qué golpeaste a Valentín—la señora lo tomaba con calma sin lucir enojada.

—Tomo mi peluche sin pedírmelo, así que quiso quitármelo a la fuerza y lo rompió mucho—su llanto era tranquilo, pero aun así se notaba su tristeza.

—Cariño, ¿De qué tanto hablan? —pregunto SeokJin muy confundido.

—Te explicare después ¿De acuerdo? —el solo asintió y seguir concentrado en la conversación.

—¡No es cierto! Ya estaba roto cuando lo tome—dijo el niño.

—T/N, sabes que mentir es malo—eso me hizo enojar un poco.

—Disculpe que me meta señora C, pero T/N no miente—dije muy seguro de mí.

—¿Por qué lo dice señor Kim? —me cuestiono.

—Cuando mi pareja y yo llegamos la niña lloraba porque su peluche solo tenía el pañuelo roto, así que mi pareja lo cosió y reviso que no estuviera de algún otro lado roto—la señora me miraba atenta mientras yo veía a una niña muy sonriente. —Además, T/N dijo que no le dio permiso al niño y este hace unos momentos dijo que ya estaba roto cuando lo tomo, prueba suficiente de que T/N no miente—.

—Tiene razón señor Kim—la señora entro en razón. —Valentín, pídele una disculpa a T/N—.

—Lo siento T/N....—se cruzó de brazos y rodo los ojos el niño.

—No te mato porque aun soy una niña y estoy encontrar del maltrato animal—hablo en coreano la niña sonriendo triunfante, SeokJin la vio sorprendido y yo solo quería reírme, me recordó a un amigo mío.

—Eres una rara—y salió corriendo del lugar.

—Disculpen por este mal entendido—dijo la señora.

Nos despedimos de la niña y regresamos a la oficina ya que se terminaba su hora de diversión. En el transcurso para ir a la oficina le explique todo a Jin y él se veía contento.

—Creo que ya sé a quién adoptar—dijo sonriendo.

—¿Seguro que no quieres ver a más niños? —le pregunte tomando su mano.

—Sé que ella es la indicada, desde que llegamos el destino nos la puso enfrente—sus ojos brillaban y pude entender todo.

Llegamos a aquella oficina, tomamos nuevamente asiento y hable.

—Señora C, hemos tomado una decisión—ella se sorprendió un poco. —Nos gustaría adoptar a T/N—.

Sonrió, firmamos papeles y muchas cosas más. Se nos dijo que en una semana podríamos venir por T/N para al fin llevárnosla. Nos entregaron documentación de ella para poder saber mejor sobre la niña, además de un pasaporte vigente, realmente seria de ayuda a la hora de irnos y así sin más nos fuimos no sin antes agradecer a la señora por todo.

Una semana después

Pov SeokJin

Quería gritar de la emoción, en unos minutos más partiríamos a recoger a nuestra niña. Este día la sacaremos a pasear, a comprarle ropa y juguetes y... ¡No puedo esperar más! Lo único que sabemos de ella es que tiene solo Cinco años, le gusta el chocolate y su color favorito es T/CF.

Hoy nos dedicaremos a ella ya que mañana iremos de regreso a Corea. Nos vestimos casuales y sin más nos subimos nuevamente a aquel auto rentado. Durante todo el camino NamJoon y yo no nos soltamos las manos, estábamos ansiosos.

Cuando llegamos la señora nos recibió y nos llevó a la oficina, cuando llegamos no hablamos de nada y la señora hablo por teléfono.

—Sofía, llama a T/N y que venga a mi oficina—NamJoon nuevamente me tradujo.

—Juro aprender inglés, ciento que te molesto cada vez más—dije un tanto triste.

—Sabes bien que por ti haría todo—y nos sonreímos mutuamente.

La niña no tardó en llegar, entro abrazando aun ese peluche, nos vio y sonrió.

—¿Paso algo madre C? —pregunto preocupada.

—T/N, creo que tendrás que recoger tus cosas...—se mostraba seria la mayor.

—Ya están recogidas de hace una semana—la señora se veía sorprendida.

—¿Por qué T/N? —entendí la pregunta simple.

—Porque sé que ellos son los indicados, desde que repararon mi peluche el destino me los puso enfrente—la pequeña nos sonrió y yo quería llorar, algo similar dije hace una semana, NamJoon le explico lo que dijo a la señora.

—Bien, entonces T/N ya se puede ir—la mencionada chillo de felicidad y me abrazo.

Después de que la niña se despidiera de algunos amigos y de la señora subimos su mochila al auto y partimos.

—Así que... ¿Son coreanos? —pregunto la niña abrazando a su peluche.

—Así es T/N, realmente me llena de alivio que sepas nuestro idioma—dijo NamJoon sin despegar la vista del camino.

—¿Cómo es que sabes el idioma, cariño? —voltee a verla y ella se puso a pensar.

—Cuando llegue no hablaba con nadie y solía pasarla todo el tiempo en la biblioteca, descubrí diccionarios y libros de otros idiomas ¡Leí todos y así se mucho más! —se notaba su entusiasmo.

Apenas la conozco y ya me siento orgulloso de ella.

—Me sorprendes mucho T/N—hablo NamJoon. —Ahora por eso te llevaremos a pasear—volteo a ver un poco ya que estaba en rojo el semáforo.

—¿Lo dicen en serio? Muchas gracias señores—decía súper feliz y yo reí.

—No nos digas así, me siento viejo—dijo NamJoon mientras volvía a conducir.

—Es que no nos hemos presentado—la niña asintió. —Yo soy Kim SeokJin, pero puedes decirme Jin, cariño—asintió nuevamente.

—Y yo soy Kim NamJoon, dime Nam ¿Sí? —cuestiono sonriendo.

—¡Si! —grito con entusiasmo, NamJoon y yo solo reímos.

Pov NamJoon

Todo el día de hoy nos la pasamos divirtiéndonos con T/N, es realmente una chica energética, pero un tanto tímida. Los tres terminamos cansados y decidimos ir al cuarto de hotel que tuvimos por toda la semana.

—¿Aquí viviremos? —pregunto la niña no sin antes haber bostezando.

—No pequeña, Nam y yo estuvimos aquí para esperarte—menciono Jin mientras acariciaba su cabeza.

—Si... T/N ¿Has viajado en avión? —la pequeña negó —Pues mañana te subirás a uno—.

—¿A dónde iremos? —me pregunto atenta.

—A nuestra casa, en Corea—dijo SeokJin.

—¡Si~! ¡Yo quiero! —saltaba de emoción.

—Jaja tranquila, claro que iras—me senté en la cama, mis pies estaban que me mataban.

—Ven T/N, vamos a que te bañes para poder dormir—SeokJin comenzó a buscar la supuesta pijama de T/N.

—No quiero...—-se veía muy linda haciendo un berrinche.

—Que lastima, entonces no voy a pedir la pizza ni pondré una película...—.

Cuando menos la niña ya estaba en el baño apresurando a Jin para ser bañada, Jin me miro y me sonrió para después darme un beso corto en los labios.

—Ve que te esperan—no lo corría, pero los gritos de la niña seguían y más que enfadarme, me divertían.

—Y eso que es solo un pequeño gran inicio—se retiró para poder atender a nuestra niña y yo solo reí. Esto apenas empieza.

Editado: 29/08/2021