Capitulo XVII

ShikaHina

Uso de Ooc| capítulos cortos| Saltos en la historia.

Ningún personaje me pertenece, todos son creación de Kishimoto yo solo los utilizo para darle vida a esta historia.

" Debería de considerar morderte los labios antes de salir de casa, de ese modo es casi seguro que tú sabor jamás abandonará mi cuerpo"

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Shikamaru poso su dedo índice en la espalda de su esposa, mientras tomaba una gran bocanada de aire luego siendo lo bastante delicado para no despertarla pues era de madrugada dibujo el símbolo Nara sobre aquella delicada y blanquecina piel tal pulcra como su portadora misma, lo hizo al menos 6 veces antes de sentirla removerse ligeramente aun recostada sobre su brazo izquierdo. Pero aun así no se detuvo, estaba tan encendido que de sentirla dispuesta la volvería a tomar como un loco, aunque estaba casi seguro que su amable esposa no se negaría a complacerlo debía tener en cuenta que aquella había sido su primera vez y debía contenerse al menos hasta medio día.

—Hi-na-ta— deletreo su nombre tan despacio recibiendo gustoso el calor de su cuerpo.

Pego su nariz sobre su hombro y tomo un poco de su delicioso aroma de mujer aquel que lo había vuelto loco, volvió su mirada por todos lados de la habitación esperando no haber sido observado, aquella acción era bastante tonta pero no podía parar de hacerlo, su aroma le entregaba tranquilidad y anhelo.

Miro de reojo la habitación, todo a su alrededor estaba hecho un desastre, la ropa estaba esparcida por todos lados, la cama había sido movida ligeramente hacia el lado izquierdo, mientras una almohada estaba atorada entre la cabecera y la pared de la misma evitando así hacer el mínimo ruido posible aunque sus gruñidos y gemidos no habían podido controlarlos, lamentaba seriamente por no haberse negado de los rondines nocturnos que sus subordinados solían realizar, pues justo en este momento podía imaginarse al pobre chico que había tenido la mala suerte de escucharlos mientras vigilaba su hogar, preguntándose a quien estarían torturando o quizás asesinando en su hogar.

—Bueno, un día debían de madurar— soltó sintiéndose bastante ligero, en otras circunstancias habría hecho todo lo posible por aclarar aquella situación, pero ahora entendía que aquello no tendría sentido pues de ahora en mas viviría su sexualidad.

Hipnotizado por el aroma de la peliazul, el azabache termino por quedarse dormido de nuevo después de todo debía de recuperar un poco de fuerza.

[...|

Aun sobre aquella silla, aquella delicada mujer que había logrado cautivarme me miraba de reojo, como intentando pedirme algo.

—libérame— era lo único que podía imaginarme —Soy inocente— pero incluso un idiota como yo, sabia que aunque tuviera aquel angelical rostro, tan dulce, había entrado a nuestra tierra destruyendo todo a su paso, matando a diestra y siniestra, era nuestra enemiga, aliada de aquellos que tanto daño habían causado sobre mis tierras, debía odiarla, pero entonces aun cuando en sentimiento era claro, por que no podía apartar mi oscura mirada sobre ella.

Abre ligeramente las piernas dejando ver un poco mas de su pálida carne, siendo lo bastantemente seductora logrando captar de nuevo toda mi atención y aunque yo intento parecer desinteresado, creo no haberlo logrado a la perfección cuando la veo sonreírme.

Siendo incapaz de evitarlo, correspondo como un idiota a su sonrisa y ella automáticamente muerde sus labios dejando a la vista un delgado hilito de saliva.

Entiendo a la perfección cual es su plan, sus crueles intenciones para conmigo, pero un después de saberlo todo no puedo dejar de mirarla, cada movimiento, cada suspiro y cada acción proveniente de su candente cuerpo lograba cautivarme. Se que aquel deseo hacia mi, no es natural después de todo no soy lo bastante atractivo para que una mujer se me lancé de esa manera, es bastante claro ella a sido entrenada toda su vida para ello, entregarse a cualquier hombre a cambio de libertad o información y ahora justo en este momento cuando había sido capturada por mi gente, estaba poniéndolo en practica.

— Tómame— es lo que logro leer, con ayuda del improvisado fuego.

Sus ojos azules como el cielo me miran con evidente pasión y sus dulces labios comienzan a producir sonidos eróticos provenientes de una excitación, su delicado cuerpo comienza a simular movimientos propios de una penetración y aunque es casi imposible que sea real, sus bragas o lo poco que alcanzo a ver comienzan a humedecerse.

La segunda fase del juego esta comenzando así que decido desviar la mirada, intento refugiarme en mi compañera pero ahora lo recuerdo, estoy solo, hace mas de 2 horas que se a ido, alegando que debía irse de inmediato hacia otro punto de la ciudad y que el éxito de la misión ahora recia en mi.

—Mierda— maldijo a todo pulmón y de nuevo la escucho reír, de manera angelical que me resulta difícil odiarla por todo el daño que su gente a causado —Cállate— le grite, pero de inmediato me siento mal acto seguido me pongo de pie caminado a paso lento, en un intento por calmarme.

El sonido que proviene detrás es bastante fuerte haciéndome girar instantáneamente, la veo de pie sonriéndome de nuevo sosteniendo un kunai entre sus pequeñas manos, ahora lo entiendo, su intención jamás fue seducirme solo intentaba distraerme lo suficiente para poder cortar el cordón con el cual la había sujetado.

—Me iré ahora, mi familia me espera soy su única esperanza — me explica despacio como si estuviera tratando con un retardado —Espero que lo entiendas—

Respiro profundamente, debo reconocerlo el error a sido mío y aceptarlo ahora, antes de que alguno de los dos comience una pelea interminable a muerte, donde posiblemente ninguno resulte victorioso.

—Largo— le exijo en un tono bastante marcado, sin perderla de vista a lo que ella asiente.

— Te lo agradezco— me agradece de manera inusual, pues de manera hábil me toma de la barbilla para besarme delicadamente, mientras muerde mi lóbulo.

—No juegues conmigo, niña— le advierto antes de separarla con ambas manos — De lo contrario no podre parar—

Ella sonríe mostrando todos sus dientes — Y por que deberías contenerte, deseo pagarte, siendo tuya—

Luego de un rato donde realmente eh quedado mudo ante sus palabras, ella vuelve a tomar la iniciativa y comienza a desvestirse.

— Adelante puedes hacerlo, lo eh observado antes me deseas—

Habla de manera casual que realmente logra sorprenderme, como es que puede ser tan libre sobre este tema, su rostro apenas grita tener unos 17 años, me golpeo mentalmente ahora lo recuerdo, su aldea es famosa por tener ninjas sexuales las cuales sirven a un solo propósito y en mi interior realmente siento pena por ella.

—Como te llamas?— Atino a preguntar y ella me mira intrigada — Acaso, no tienes uno?— vuelvo a cuestionar, pero esta ves soy yo quien comienza a colocarle la ropa en su lugar.

— Que sucede— dice ella bastante confundida intentando detener mis manos —No, se supone que deba funcionar de esta manera—

—Puedes irte—

—Pero...—

—No tiene que ser de esta manera, no tienes por que pagarme— de pronto sus ojos azules se tiñen y la miro detenidamente —Eres solo una niña, ahora vete a casa, diré que eh perdido tu rastro, que inclusive me has superado en batalla, pero por favor lárgate ahora—

— Yo, realmente te lo agradezco— se tallo los ojos intensamente conteniendo sus lagrimas, pues por primera vez en su corta vida había experimentando un sentimiento tan real como la compasión.

Acompañada de la luz de la luna la vio partir hacia su aldea, armada con solo un kunai y visiblemente herida, camino hacia la ventana de aquella improvisada choza, y pidió a kamisama por que aquella chica no tuviera que volver a ofrecerse a sucios hombre a cambio de libertad, información o comida y que en algún punto de sus vidas cuando la guerra terminara y sus naciones lograran la paz y se unificaran volvieran a encontrarnos esta vez no como enemigos, si no como simples ciudadanos.

De momento la vio parase en seco y su corazón latió de prisa temiendo lo peor, pero se relajo al verla girarse justo delante de el estirar su brazo y despedirse mientras gritaba algo que sonaba como:

— Me...llamo...Sa-Yu-Ri—

Después de leer lo ultimo, Kakashi cerro su tan amado libro erótico, aunque de erótico últimamente no tenia nada, pues debido a la ausencia tan prolongada de su amada, solía saltarse aquellas escenas y prestaba mas atención a las situaciones románticas que tenia el libro.

— Mierda, Sayuri debe tener una vida tan difícil— cerro los ojos, manteniendo los pies en el aire —Espero, que al final logre tener un destino diferente— y aunque no podía engañarse pues conocía a la perfección el cruel final de ambos protagonistas deseaba creer que en aquella ocasión podía ser distinto.

—Hokage-sama— llamaron haciendo que se levantara de golpe al escuchar la puerta abrirse bruscamente.

—Shizune... Ah!, Eres tu Shikamaru— volvió a dejarse caer como si fuera una pluma tan ligeramente.

—Veo, que a vuelto a su tan preciada lectura— dijo mientras caminaba hacia el escritorio dejando una cantidad enorme de papeleo.

— Algo, aunque debo admitir que estoy sorprendido por la manera tan limpia en que Jiraya-sama lograba transformar estos sentimientos puros en una grandiosa trama sexual— cerro los ojos, como si estuviera analizando cada palabra en su interior, como si lo que aquello que hubiera leído sirviera para darle sentido a su vida —Pero ya fue bastante de mi, por un rato, espero con ansias la llegada de mi querida Hinata-chan— el azabache sonrió coquetamente recordando la candente despedida que su amada esposa le había obsequiado antes de salir a trabajar —Iug, Shikamaru contrólate— bastante asqueado por el comportamiento del Nara, el Sexto se puso de pie.

— No es lo que se imagina— intento aclarar su mente, pero lo único que lograba visualizar era el rostro sonrojado de la peliazul.

—Esta claro que estoy en lo correcto, puedo olerte— arrugo la nariz.

—Como es eso posible— exclamo manteniéndose lo bastante calmado para no ser descubierto, pues si bien podía ser un genio pero ante alguien como el peli plata solía dejar caer todas sus barreras de su vida personal y lo que menos deseaba era tener que confesarle que al final había consumado su matrimonio y que por todos los dioses no debía molestar a Hinata con aquello.

—Es bastante complicado, posiblemente con un poco mas de tiempo podía mostrarte como identificar cuando Hinata este en sus dias fértiles o cuando sea lo bastante seguro como para hacerlo sin riesgo alguno— le guiño un ojo, pero al mismo tiempo sonrió pícaramente —Pero, no es el momento tenemos cosas que hacer—

Aquella actitud le pareció anormal al azabache quien siempre tendía a luchar con su líder para lograr que este cumpliera con el mínimo de horas de trabajo establecidos por la antigua Hokage, Lady Tsunade. Y aunque debía pasar de largo y agradecer internamente que aquel estaba en la mejor condición para cooperar laboralmente hablando no pudo ignorarlo cuando lo vio fijar su mirada en el techo con evidente melancolía.

—La extraño— dijo de la nada, asombrando al azabache quien de inmediato entrecerró los ojos al escucharlo hablar, en todo aquel tiempo trabajando bajo su servicio jamás lo había escuchado hablar de ese modo tan humano, que incluso le causo un poco de pena.

—Dijo que no le gustaba comer solo— recordó el Nara en voz alta —Quizás, si Usted lo desea, pueda venir a cenar con nosotros — y aunque lo dudo un poco, al mirarlo de ese modo un poco mas humano dejando su depravación a un lado prosiguió — Ya sabe, después de terminar con todos los deberes— termino y el peliplata se levanto de golpe mientras estiraba sus brazos en el aire.

—Eres un buen hombre— se limpio una lagrima y camino un poco mas animado tomando un pergamino en el proceso —Animo, Shika debemos terminar a tiempo—

—Entiendo— sonrío de manera ingenua, mientras que tomaba asiento.

[...|

Como era de esperar las no tan buenas noticias llegaron a Sunagakure bastante tarde, causando un sin fin de sentimientos en aquellos que habían logrado conocer al involucrado y ahora tema de conservación en aquella cerrada y asfixiante sala de reuniones.

—Nara Shikamaru, esta seguro?— volvió a cuestionar Kankuro ganándose un pisotón por parte de la asistente y alumna de su hermano Gaara —Pero que demonios te sucede por que me pisas— exclamo bastante molesto quejándose como un niño pequeño a lo cual la morena agacho la vista bastante apenada.

—El mismo, Kankuro-san, según mis informes a contraído nupcias con Hyuga Hinata, la princesa del Byakugan— tanto Gaara como el mencionado asintieron mirando de reojo a su hermana, y aunque aquella estaba actuando de manera profesional sabían que la noticia le había caído como balde de agua helada.

—Pero que sucede con eso —tomo bastante aire antes de continuar, tanto Temari como Matsuri lo miraron fijamente— Esto debe de ser una broma o en donde quedo todo el supuesto amor que tenia por Temari—

—Kanku...— la castaña intento calmarlo al ver el rostro decaído de la rubia.

—Todo debió tratarse de un matrimonio arreglado— musito por lo bajo. —Jamás, los vi conversar mas que un simple Buenos dias— y aunque aquello no cambiara nada, Temari se reconforto asi misma.

—Es verdad— salto a su ayuda el moreno —Aquella chica es tan Sosa, que no logro imaginarme que aquel matrimonio sea por decisión propia— su molestia era evidente que incluso podía sentirse en el aire.

—Cuida tus palabras Kankuro— en automático Gaara salto a regañarlo.

El moreno arrugo las cejas ante el comentario de su hermano menor—Pero que sucede contigo, tal parece que tu hermano, estas divirtiéndote con toda esta situación —Su mirada ahora estaba repleta de coraje —Yo vi a nuestra querida hermana llorar todas las noches por ese bastardo, la vi desvanecer de dolor— se levanto de golpe de su asiento golpeando la mesa —No, me pides que cuide mis palabras por que no lo hare, ese idiota junto a esa tonta merecen todas mis maldiciones, en cuanto tenga la oportunidad lo hare— termino por salir del lugar, detrás suyo salió Matsuri obviamente por ordenes del kazekage.

Por un momento todo quedo en silencio, pues no era ningún secreto para nadie en esa habitación, que Temari la hermana del Kazekage había mantenido una larga relación con aquel muchacho la cual se había fortalecido en la cruel guerra.

—Entiendo— a sabiendas que no podía ayudar a su hermana en este momento Gaara se limito a seguir con el tema que involucraba al Nara — Ahora, me pregunto en que debería de beneficiarme a mi el saberlo— Temari, agradeció el tierno acto de su hermano por dejar el tema atrás.

—Es sencillo Lord Kazekage— el anciano respiro lentamente —Próximamente los exámenes Chunnin se llevaran a cabo en la Aldea de la Hoja la cual a sido escogida para llevarse acabo los juegos y creo que no debo recordarle que Temari-san es la actual representante de nuestra Aldea, la cual la obliga a asistir y permanecer en Konoha hasta que los juegos terminen—

Era verdad, había pasado bastante tiempo sumergido en sus propios asuntos que se había olvidado por completo de ese detalle.

—Que sugieres— Temari, los miro a ambos y le irrito la manera en que hablaban sobre ella sin tomarla en cuanto, como creyéndola tan débil para no enfrentarse al hombre que seguía amando.

—Si me lo permite, podemos hacer un cambio sin dejar en evidencia la verdadera razón por la cual Temari-san deja en puesto— añadió el nombre y Gaara termino asintiendo.

—Olvídenlo— la fémina tomo la palabra, dejando al mayor atónito, pues Gaara estaba realmente acostumbrado a aquellos arranques tan repentinos de actitud —No, tengo intención de dejar mi puesto solo por aquel incidente, nadie mejor que yo conozco las reglas, los contactos e inclusive las habilidades de nuestros participantes, mostrárselas a alguien mas seria una perdida de tiempo enorme—

Temari, se aferro al abanico que solía cargar a todos lados y aunque su molestia no era desapercibida por nadie, la femina intentaba a toda costa ocultarla. Pues no podía permitir que ninguno de sus subordinados observara ni un mínimo rastro de debilidad.

—Estas completamente segura, Temari— el pelirrojo le cuestiono directamente y ella asintió —Todo a quedado claro, agradezco su preocupación Rochi-san, pero mi hermana esta perfectamente capacitada para cumplir su rol, la reunión a terminado— El kazekage se levantó de su lugar y los demás lo imitaron haciendo una leve reverencia.

Cuando Temari se quedo completamente sola, se tomo el área del corazón de manera desesperada, era como si un ser totalmente despiadado intentara sacárselo y ella lo estuviera evitando a toda costa.

—Como pudiste, como pudiste, como pudiste— se repitió de manera constante antes de cerrar los ojos fuertemente evitando llorar.

De inmediato todos sus momentos juntos regresaron a su mente como una película romántica, y para ella fue tan claro como el agua, Shikamaru no había dejado de quererla de la noche a la mañana. Pues que ella recordara la conexión con las demás Kunoichis, sobre todo con la Hyuga era mínima, a excepción de Ino la cual miraba como una hermana.

Su amor había sido tan sincero y puro que tenia la seguridad que de pedírselo, el volvería a su lado, haciendo que todo volvería a ser lo mismo incluso ahora estaría dispuesta a dejar detrás a sus atolondrados hermanos y seguir su vida.

Había tomado la decisión correcta, su viaje a Konoha le serviría como excusa para volverse acercarse a el y liberarlo de ese absurdo matrimonio que estaba seguro estaba atrapado.

[...|

Nota del autor.

Dentro de poco el drama estará potente jejeje, solo espero no terminen odiando a Temari quien es por cierto una de mis tantas Waifus.

Por otro lado, debo confesarles algo bastante personal.

Cuando niña odiaba la navidad pues solía creer que interfería en mi cumpleaños (por cierto en lo personal me siento toda una celebridad por haber nacido en diciembre jejeje) a lo cual siempre decía que no me gustaba festejar, y siempre era obligada a ir con mi familia.

Y ahora debido al covid y la cuarentena que mi país a vuelto a establecer, la pasare completamente sola, bueno con mi pequeña familia, pero en estos momentos me gana la nostalgia al recodar mi niñez rompiendo piñatas, peleando por los dulces, desvelándome bailando o quemando cohetes junto todo mis primos, mirar el cielo y contar historias de terror, durmiendo cobijada solo por el cielo nocturno.

A veces me pregunto si después de esta situación las cosas volverán a tomar su curso habitual o simplemente tendremos que aprender a vivir de este modo, separados y aislados de nuestras familias.

Lamento haber sacado mi sentir en estos renglones pero realmente los considero mis amigos y creo que pueden entenderme aunque sea solo un poco.

Sin mas les deseo una feliz navidad y prospero año nuevo y en verdad espero que todo mejore.

Los quiere ItzelBadban.

Martes 22 de diciembre del 2020.