Capítulo 24: Suegros.

Caminábamos calle abajo, la gente nos volteaba a ver, no era por nuestra ropa o el echo de que seamos líderes ambos, sino. . .por la unión de nuestras manos.

No habíamos despegado nuestras manos, y tampoco queríamos hacerlo, al menos yo, caminamos hacia una calle, una muy lujosa, de alta clase, enarqué una ceja no entendiendo lo que pasaba, ya que el me estaba guiando.

— ¿A dónde estamos yendo? — preguntó apretando ligeramente mi mano, no dije nada, mordí mi labio maldiciendo internamente por no haberle dicho, le estaba ocultando algo.

Me detuve en seco, en una gran casa, me miró por un segundo y volteó a ver a la mansión de color crema, que estaba adornada con luces y las lámparas colgando en la entrada, con un gran jardín, yo viví aquí durante mucho, me fui porque ya no soportaba más estar cerca de mi padre.

— Y esto? — me acomodé los lentes, tragando saliva y soltando su mano, toqué el timbre, haciéndolo resonar por toda la casa. — ¿Estados unidos?

Se escucho un sonidito estridente, la puerta se abrió dando a ver a Cambridge, el mayordomo de mi padre, o algo así, me reconoció, quizás no a Metsico. Nos dejó pasar con una sonrisa, le acerque mi mano al moreno para que la agarrara, dudó pero luego accedió a tomarla.

Entrando, intenté no mirar hacia ningún lado, no quería recordar mi antigua vida en esclavitud, lleno de lujos y oportunidades. Lo odiaba, odiaba esa vida, por eso me fui, para crear la mía.

Usa, no mames, ¿Donde estamos? — pregunté ya bastante extrañado de que no me haya dicho nada, seguíamos caminando hacia lo que parecía ser la sala de esta, bellísima, casa.
¿Dónde. . .?

¡Bonjour fils! — se escuchó en un mueble, volteamos al escucharlo, era una voz femenina, la ví, era una mujer muy bella, vestía bastante elegante, a mi parecer era muy guapa, ¿Que? También soy heterosexual.

espera. . .
¡¿Pasteles?! — se alteró la mujer mientras ponía un rostro de confusión y un poco de asco, pero no porque fuera racista ni nada, sino porque se esperó de todo, menos un latino.

.

.

.

Así que tú eres el afortunado hispano que tiene de novio a mi hijo, ¿Eh? — su tono era coqueto, la mujer era muy bella, y también una seductora de primera, aunque no me atrae tanto. . .¿Porque será? — Me alegro por ustedes.

Nos soltamos las manos,era muy incómodo ser vistos por su familia, pero al menos Francia me aceptaba, al contrario de su “flamante” husbando.

¿Ya tuvieron. . .relaciones? — M a m e s.

¡Mom! — chilló Usa alejándose un poco de mí, podía jurar que está rojo y no exactamente de enojo, yo también lo estoy, precisamente.

Trague saliva, recordando que casi lo hago muchas veces, por suerte el gringo tiene mucho autocontrol ( ya que yo no lo tengo ) y sabe alejarme cuando me paso de verga.

¡Diablos señorita! — exclamé refiriéndome a la enorme sonrisa en su rostro y por supuesto a su comentario, que persona más atrevida, pero no la culpo, hay mucha tensión entre nosotros dos.

Suspiró, cruzando las piernas.
Yo te vi cuando apenas eras un bebé. — dijo cambiando su sonrisa a una dulce, ¿Me conocía desde ese entonces? Supongo que era aliada de España en mi virreinato. — ¿Que tal es tu relación con tu padre?

Mmm, digamos, que puede mejorar. — acaricie mi cuello, nervioso, me llegaba España, y no de la buena manera, pero, tampoco iba a dar una mala impresión.

¡Hello México! — saludó Canadá, quién salía del baño y me reconoció, la francesa nos invitó a sentarnos , aceptamos mientras nos sentábamos juntos, ella enfrente de nosotros, sus hermanos a los lados, en muebles distintos.

So. . .¿Do you love my brother or not? — T s k, Nueva Zelanda solo lo preguntaba para molestar, pero al parecer la de boina también quería escuchar, solo suspire y. . .

Emm. . .miren. . .yo. . .le tengo mucho afecto a su hermano, y se que en el pasado tuvimos diferencias y ya lo hemos superado. En resumen, si, me gusta mucho, es más yo. . .lo amo.

Haber dime más. — dijo con interés la mujer. A este punto yo no podía ni mirar a estados unidos, era demasiado vergonzoso.

Amo. . .su carácter fuerte. . . su voz, que aún grave, no deja de ser dulce, je. . .su forma graciosa de llamarme “Metsicou” todo el tiempo, yo sé que en el fondo es alguien bueno, pero lo oculta tras esos lentes, como sus hermosos ojos zafiro. . .

(. . .)

Vaya. . .— énfasis en la palabra. La francesa cambió la pierna que cruzaba por la izquierda, me seguía mirando fijamente. — Si que realmente amas a mi hijo. . .

You can try it? (¿Puedes probarlo?) — esta vez fue una voz masculina, bastante grave. Era su padre, el gran Reino Unido ( o gringo mayor, es mejor nombre, ziono? ), quién se acercaba caminando con los brazos detrás de su espalda. Me siento. . .un poco forzado. — You can try it? — volvió a preguntar, pinche vieja impaciente.

S-sure. — contesté en inglés para que lo tomara como respeto, miré al gringito, lo sé mi amor, yo tampoco me lo creo. Agarré por la cintura a mi «“novio”» mirándolo para que capte lo que intentaba hacer, ya lo hicimos muchas veces, así que no creo que sea problema. ( Ah, excepto que lo hacíamos con sus padres. )

Con timidez se fue acercando a mí, besando la comisura de labios, la mitad, o más bien, una media luna.

Me sorprendió, ya que él tuvo la iniciativa de besarme, le seguí la corriente agarrando su cintura, haciendo que suelte un pequeño sonido sorprendido, escuché el gruñido de su padre. Si, yo también estaría furioso si alguien le hiciera eso a mis hijos.

Sonreí internamente, miré a mi padre, gruñía de rabia, ese idiota, y aunque estaba disfrutando el beso, más disfruté de su rostro lleno de molestia, debería saber cómo se siente ser besado por un latino, son muy buenos. . .

Me separé, no fue un beso de lengua así que no fue tan penoso, miré a Metsico, lo que dijo hace un rato. ¿Será cierto?¿O solo lo dijo para impresionar a mi madre?

Se escuchó a la francesa soltar risitas, al parecer estaba feliz por. . .esto. Por otro lado, Reino Unido no pudo aguantar más el asco y se alejó a no sé dónde, supongo que era la cocina.

Estoy feliz por ti, mi chiquito. — exclamó parándose del mueble para darle un beso en la mejilla. — deberías traer a este apuesto joven más a menudo.

Sure mother. . .— solo suspiró, debe ser muy penoso ser avergonzado así, su madre es increíble, son afortunados de aún tenerla. . .

Bueno, vámonos, “mi chiquito”. — bromeó en un tono muy meloso, me gusta fastidiarlo, sobre todo ver si rostro molesto. Gruñó golpeandome un poco, me quejé aún riendo.

.

.

.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top