Capitulo atrasado de ayer ^^ estaba algo ocupada pero aquí subiendo!! Ojalá acabar en la noche el de hoy.

Disfruten!!

Una linda mañana, el aire frío hacia presencia en el ambiente lo suficientemente agradable como para caminar alegremente por el pavimento que llevaban a la gran entrada de la academia todavía más grande.
Pero..la alegría no dependía solo del agradable clima, otros factores influyen mucho y un ejemplo claro es cierto joven quien caminába alegremente por el camino que le llevaría a la entrada.

Portaba una sonrisa característica de el con la diferencia que ahora no tenía muchas razones para tanta alegría en su rostros agraciado, apenas piso en camino largo de esta se alegrío al instante ¿Por qué? Quizás es un alumno aplicado que ama la escuela nada que ver con los demás o quizás..solo quizás algo le alegraba y no específicamente de la escuela, de lo que se estaba seguro es que estaba alegre por algo..o por alguien..el punto es que caminaba más alegre de lo usual, su sonrisa no parecía con intenciones de irse al contrario era una radiante sonrisa que le acompañaria de manera breve porque seguro sus planes se involucran con sus emociones.

Quería verse tranquilo y alegre y si bien esto segundo queda claro también unos nervios le carcomían por dentro, se sentía ligeramente vulnerable y eso era mucho para el diciendo que se volvería fuerte y no puede ni callar sus latidos contínuos que si fuera porque están en sus mundos los del alrededor seguro notaban si nerviosismo extremo.
Acomodó su maletín colgado de si hombro para caminar con la mínima confianza de si mismo, su plan constaba de menos de tres fases, uno y a con Amane su amigo más cercano, dos darle un regalo casi insignificante pero significativo al menos para el joven exorcista, y por último echarse a correr para no morir en pena frente a el por sus acciones tan repentinas pero no podia evitar planear esto y todavía más de darle algo..no podía evitar pensar en lo mucho que se merece algo ¿Será por no poderse sacar al pelinegro de su cabeza? Quizás, con una persona tanto tiempo rondando en sus pensamientos es inevitable pensar en cosas así es normal ¿No? Le tiene tanto afecto que veía debido un presente pero sus razones tampoco son de las mejores

—Ojala esto valga de algo..—dijo en un susurro a si mismo.

Apresuro su caminado, debía apresurarse tanto porque no quería pasar la pena de su vida sin excusas para irse en la salida y también como su única excusa tiene que las clases están por empezar por lo que el paso apresurado se ameritaba para alcanzar unos minutos de pena frente a el para irse como el exorcista cobarde que es.

»Me dijieron que a él..le gusta la luna pero..¿que tal si esto es tan insignificante?«

Había una posibilidad de eso ahora pensando..el puede ser un desgraciado y si bien es agradecido con lo que le dan no podia evitar cegarse en la negatividad posible para pensar en las posibilidades mal terminadas y con finales incómodos que no querría vivir y menos con el.

Sin darse cuenta ya se encontraba dentro de la academia, seguro se estreso tanto que no presto atención a sus últimos pasos, fue rápido a la taquilla para sacar los libros que necesitaría, fue de mala gana a ello ya que lo era de su mayor interes ello pero no tenía muchas opciones, fue cauteloso de lo que llevaba y hay seguía el "regalo insignificante" que lo carcomía vivo.
Por alguna razón se sentía observado o comido por las miradas pero nada que ver solo la presión dándole un nudo en la garganta para sentirse peor, tenía un revoltijo que no pensó al salir de su casa pero hay estaba ese malestar causado por darle tantas vueltas a la situación.

Embarcó caminado, ya ni era por el timbre sino oro librarse de esto para poder respirar en comodidad al menos en sus asquerosas clases pero seguro con librarse de su presente podría estar más tranquilo en el día, huyendo de el claro pero más cómodo para no sentir presión en su pecho.
Posó su mano en el pasador de las escaleras para subir con más "rapidez" en su cabeza eso tenía lógico para tomar rienda en su caminado apresurado para pasarse el nivel de las escaleras tortuosas para llegar al boss final.
Hay fue cuando toda su seguridad sé si mismo se esfumó, ni una pizca de esta que tanto ocupaba ya que sus piernas comenzaban a temblar al ver el aula de su amigo más fiel, su dirección actual en dónde embarcó caminado de cobarde.

No fue mucho por la distancia, miro nervioso en la puerta para tocar con la educación debida ya que si bien aún no está su profesor debía tener la mínima educación al irrumpir un salón ajeno, dió tres golpes a la puerta deslizable asomándose por la ventanilla para ver a la superior acercarse en la puerta.

La joven de cabellos cremas con puntas turquesas le saludo energéticamente a su amigo, ya tenía una idea pasajera de la situación pero le alegraba más verle por los rumbos del 2-A dónde se lo localiza la de mayor grado quien le miro curiosa levantando su ceja a su amigo quien trago saliva dando un escape de aire para hablar.

—Senpai..¿podrías decirle a Amane que salga..?—dijo el nervioso.

La chica soltó una risilla por aquella pronunciación tan simple, su rostro agraciado apareció en respuesta a su nervioso amigo al que no le quitaría el privilegio que hablar con el antisocial del aula y su amigo, de todas formas no habían clases todavía y solo es algo amistoso ¿Verdad..? Mientras no sea nada más allá la chica estaría tan feliz de fortalecer su tensión.
Está asintió en respuesta para hacer volar sus cabellos por es acción, le miro con una sonrisa en sus labios para hablar al borde de la puerta deslizable dónde mantenían un choque de miradas.

Con su mano hizo una muestra de espera brevemente a la llegada del nombrado.

—Sip. Solo espera que debo sacar a Amane de su asiento.—lo último lo dijo con cierta fatiga.

El rubio se limito a asentir para ver la puerta deslizable cerrarse y llevándose consigo a la alegríe superior quien acataría al llamado de tan antisocial alumno.

Dijo que esperara brevemente pero.. realmente no sabía que tanto podría estar ileso en su puesto tratando de eliminar la idea de echarse a correr para dejar plantando a quien por fuerza saca de su hábitat natural de asiento en la clase.
Su pie chocaba contra el piso provocando un sonido que a inicios era nuestra de su nerviosismo y ahora era hasta molesta peor lo podía evitarlo por mejor reflejo jugueteaba con sus dedos mientras veía impaciente a la puerta para cuando se abriera y fiera por vista a su propósito de estar frente a la puerta.

Cerro sus ojos para respirar repetidas veces, devia calmarse un poco para no parecer un lunático frente a el pero era imposible para el y más cuando la puerta deslizable fue a dónde indicaba para ver parte del salón junto a una pelicrema que le alentaba por detrás, por ende el joven citado fuera estaba viendole de pues a cabeza interrogandole con la mirada y sus ceja arqueada que pedía respuestas lo más pronto posible.
Ese silencio tan culposo forzó al sacado de su habit natural de asiento a hablar.

—Joven..¿Sucede algo?—le miro interrogando.—Yashiro me dijo que me hablabas, ¿Que pasa?—

El joven trago saliva para ver a su amigo directo en esos dos ambares que lo inspeccionaban con su actitud tan sospechosa y nada propia de el, como si recobrara valentía tomo aire dispuesto a hablar.

—B-bueno..la verdad es que te quiero dar algo..—se veía nervioso todavía.

Recobrar valentia la verdad sería mucho ya que su lado más cobarde seguía a flote pero ya era tarde para echarse atrás y más cuando está frente a el..no tenía nada que perder de todas formas ya perdiendo dignidad al estar frente a el con su dificultad para hablar a causa de el.

Trago saliva para ponerse alerta y tomar su maletín colgado en su hombro para ahora tenerlo en manos, lo abrió con toda la prisa del mundo aunque realmente la tenía en estos momentos era critico hasta para olvidar el tiempo del que disponía, rebuscó su maletín de lado a lado revolviendo sus pertenencias y utiles para su día a día hasta que musitó alegro me de encontrar en insignificante regalo hasta el fondo casi ocultó de su búsqueda exprés, en una de sus manos sostenía la correa de su maletín para colgarselo con dificultad en su hombro y en la mano restante tomaba una clase de cajita de color negro apenas del tamaño de su mano, miro detenidamente el detalle insignificante para extenderlo frente al destinado quien miro sorprendido todo ésto.

Amane le alzó la ceja para tomar con total duda la cajita para tenerlas entre sus manos, por unos segundos aprecio el detalle junto al listón amarillo para tirarlo sin pensar mucho y tener la facilidad del contenido que era nada más que un brazalete de hilo rojo con un dije de media luna color dorado y unas variantes de estrellas rodeando el listón para hacerle más voluptuoso con los mínimos detalles, lo saco por completo de su cárcel de cartón prensado para verlo de lado a lado con la total duda y seguido dirigirle la mirada al rubio ardiendo en rojo que seguía algo parecido a esta pillado a cuándo se extendió a el.
Kou apenas pudo reaccionar a la mirada ámbar para hablar con rapidez antes de que se arrepentirá de aceptarlo.

—¡E-es..es un brazalete de hilo rojo! T-tal como en la leyenda del hilo rojo..—se encorvo de hombros para tocar su nuca con su mano y caer en vergüenza.

Tenía tanta vergüenza de sus palabras, tampoco quería ser malinterpretado pero apenas le salieron esas palabras que ameritaban saciar la duda del pelinegro quien miro nuevamente ese brazalete color rojizo con detalles dorados en dónde se viera, lo miraba como el chico curioso que es para dirigirle una sonrisa juguetona al avergonzado quién se limitaba a desviar su mirada.

—La leyenda del hilo rojo eh..~ ¿te refieres a la de los destinados?—alzo su ceja burlonamente.—Mhm..que yo recuerde ese leyenda es muy cliché amoroso jeje..—solto una risilla.

Amane tan burlón como de costumbre, pero veía la oportunidad de su vida como para no burlarse en lo mínimo de el por mera costumbre aunque tenía que decirse que sus mejillas portaban un rosado peculiar pero que apenas resaltaban comparadas a las del Minamoto menor.

—Si y no. Es esa leyenda pero..no todo es relaciones amorosas en torno al hilo rojo..—jugueteo con sus dedos mientras aclaraba su garganta para hablar.—Tambien habla de la amistad..después de todo es más que nada para los entrelazados a conocerse..—

¿Que era eso? Ha si! Parte de la valentía del joven volviendo a el para mantener contacto visual de quién veía de reojo al brazalete para verle nuevamente al joven exorcista.

—B-bueno..nose siento que..¡no fue casualidad que nos conociéramos! Es tonta lo que digo seguro jaja..—con eso último se desánimo un poco.

Miro al suelo para restregar si calzado sobre este mostrando una clase de impotencia/tristeza de sentir que esto en verdad es una tontería cuando el aún con su dignidad llendose al caño se encuentra allí frente a el.

Hasta que..las mejillas del mayor aumentaron en rosa quedándose callado por estar anonado a causa de su amigo quien miraba entre triste y serio al suelo, un escalofrío recorrío la parte baja de su espalda cuando sintió la sería mirada del Minamoto sobre el para ver cómo sus manos se aproximaban a las de el sin poderlo decifrar hasta que captó todo.

—Se ve que no te gusta..mejor dámelo para..acabar con esto, de todas formas ya debo ir a clases..—se escuchaba muy desanimado este.

Las manos delicadas y tersas de Amane se cerraron casi por reflejo para tener el tacto de el en su puño formado por ambas manos, le miro con la vergüenza posada en sus mejillas para negar repetidas veces con su cabeza para que se retractara a sus acciones.
El puño con el brazalete lo llevo a su pecho para tenerlo lo más alejado posible del aparente arrepentido.

—¡N-no! No hay necesidad de que lo pidas de vuelta..—hizo una pausa dramática.

Tomo el aire suficiente para hablar ya que ese joven en verdad sacaba un lado patético de el que parecía carcomerlo cuando se apoderaba de el mismo agachó su mirada al suelo en un breve tiempo para ver su pecho junto a su puño aún formado dónde podía sentir sus latidos a todo lo que podía bombear a causa del nerviosismo, ya le dolía bastante la mano por la fuerza utilizada por lo que le dió libertad al accesorio para ponerlo en su muñeca con algo de dificultad pero sonriendo victorioso de haberlo logrado por su cuenta.
Le dirigio la mirada al joven para sonreír con toda la alegría del mundo y una sonrisa deslumbrante que ganaban a cualquiera incluso a quien estaba "serio" en este caso el rubio quien callo rendido con un suspiro agotado.

—¡Me encanta! ¡Muchas gracias joven!—dijo el alegre mostrando su muñeca con el accesorio.—Estaba..algo impactado y más porque no soy de accesorios pero.. gracias, !en ese caso lo usare seguido!—

Eso alegro y enternecio el corazon de Kou para sonreír como un bobo en todo el sentido de la palabra mientras se perdía en esa mirada ámbar que le veía con la duda que le ganaba y algo de ¿Regaño? Su cabeza de dos neuronas no procesaba bien su regaño con la mirada que le acompañaba sus cejas fruncidas.

Al poco tiempo un golpe leve pero dañino se hizo presente en la frente de Kou quien se quejo al Instante para llevar sus manos en la zona adolorida, que quejo con el abusador de ella confianza quien seguia con la misma mirada de antes.

—¿Eres tonto? Las clases están por empezar y tú estas en los grados de preparatoria..—dijo con obviedad.—Sera mejor que te vayas si eres deboto a las clases joven.—

El rubio asintió al poco tiempo de darle una pensada Abla situación, debería estar en su aula esperando a su profesor pero no..al contrario se encontraba en el lado contrario con los de preparatoria cuando debería estar al menso rondando en la cercanía de los de secundaria, no media mucho el tamaño del problema hasta que se hizo presente la campanilla que anunciaba el inicio de clases para todos para que no estén holgazaniando o vagando como lo está el joven exorcista quien sintió toda la presión en si mismo para mirar apenado al suelo y juguetear con sus dedos para decidido dar media vuelta y embarcar un trote lento para irse no sin antes despedirse como es debido.

—Me pase el tiempo..¡nos vemos en el receso Yugi-san!—grito para alejarse ahora con rapidez.

De la mirada ámbar iba desapareciendo el exorcista quien se esmero en desaparecer rápido con su carrera contra el tiempo y profesor.
Este sonrió a la dirección en que se marchaba para seguido ver el brazalete con los dijes que se movían de lado a lado con su meneo de mano para despedirse del desaparecido.

No pudo evitar sentirse felíz y ensanchar todavía más, sumado su risa leve del recuerdo tan bello y apreciable para el que seguro le tendría como un bobo o hasta más por el inicio de clases, ni les presta atención pero con este presente a su persona no podría pensar en algo más que..el y su nerviosismo tan adorable para su gusto, una imagen difícil de sacar de su cabeza.

—Adios..joven bobo..—mantuvo su sonrisa.

Con eso se apresuró para dirigirse a su aula, el profesor no tardaría nada para llegar al aula y si le ve fuera sería mucho problema para el.
Y aunque la excusa no es buena..para el es lo mejor que lo pudo pasar aunque un mayor malhumorado con la vida no podría entender.
Entro al aula para dirigirse a su asiento siendo ignorado por sus compañeros que charlaban con alegría y una pelicrema que lo buscaba con la mirada en el gran salón y mar de alumnos.

Se sentó en al silla frente a su pupitre para sonreír nuevamente del pequeño detalle en su muñeca que tan bobo le ponía, ni tenía ganas de quitárselos por el significado tan apreciable que portaba..es algo que cuidaría con su vida aunque sea "un regalo insignificante" para muchos.

»Es lo mejor para mí..«

Espero les allá gustado <3 posiblemente en la noche publique el de hoy para reponerme de la semena.

Casi 3000 palabras pero no sé pudo gente 😔 faltó relleno para esa cantidad :( pero bueno..nose si esto es decente para ustedes jajaja

Bye~