—Bien, si así quieres jugar, de forma tan madura como tu edad, adelante hyung, no voy a estar soportando más. -Sentenció el menor y caminó a paso decidido hacia la puerta.

—En una semana me iré del país. -Confesó y el azabache se detuvo abruptamente. —Me aceptaron en la Academia de Artes que te mencioné hace meses en Canadá... -Seguía mirando por la ventana. —Así que me iré, haré mis prácticas allá, sólo te lo quería informar.

El chico estaba en shock, con sus manos hechas puño, sintió como si una patada fue a parar a su estómago.

— ¿Y me lo dices así, sin más? -Su voz sonó entrecortada. — ¿Por qué hyung?, ¿por qué actúas así? -Se sentó en la orilla de la cama de nuevo.

—Quería decírtelo como se debía, pero las cosas han empeorado entre nosotros... -Suspiró para después sentarse en el piso, a los pies del menor. —JungKook, he estado pensando mucho sobre nuestra relación. Y he llegado a la conclusión de que debemos tomarnos un tiempo, este viaje nos ayudará a meditar sobre todo lo que hemos estado haciendo... -Tomó las manos del menor y las acarició. —Yo no quiero ocultarte, y sé que tú tampoco, pero no podemos decirle a nadie sobre lo que pasa con nuestros sentimientos hasta que tú seas mayor de edad... Y entiendo perfectamente que quieras mostrar afecto, y que además te sientas atraído por otras personas, es muy normal, pero a mí me duele, me duele porque siento que tomas esto como un juego y no puedo más con la inseguridad. -Cerró sus ojos unos segundos y luego siguió. —Quiero que sigas viviendo sin ataduras, aún eres demasiado joven y no quiero que a futuro te arrepientas de permanecer conmigo por tanto tiempo...

El chico observaba el semblante triste de su hyung mientras hablaba, ¿así que él no pudo transmitirle la confianza necesaria para que supiera que él si lo amaba de verdad?

Definitivamente había sido un mal novio.

—Jinnie. -Se sentó a su lado y lo atrajo en un abrazo. — ¿Prácticamente me estás diciendo que terminas con nuestra relación para que yo salga con otras personas mientras tú estás lejos? -Rió sin gracia. —Eso es absurdo amor, es absurdo porque yo sólo te quiero a ti.

—No, no es así JungKook. -Se soltó del abrazo. —Dejemos que el tiempo y la distancia decidan por nosotros. Estaré fuera medio año, tiempo suficiente para que aclaremos nuestros sentimientos.

Kook lo miraba con una mezcla de decepción, dolor y frustración. No podía creer lo que su hyung le pedía.

—Bien. Si eso es lo que deseas... -Se levantó y lo miró por largo rato, cuanto amaba a su hyung. —Cuando vuelvas, te darás cuenta que a pesar de lo joven que soy, estoy muy seguro de mi amor por ti, hyung. -Lo abrazó con fuerza, ya casi eran de la misma estatura. —Esperaré por ti, así sea por toda la vida, porque te amo mucho.

SeokJin lo miraba con ojos lastimeros, él también lo amaba, por supuesto, pero quería que su joven novio... Bueno, ahora ex novio, tuviera mayores vivencias.

—Cuidate mucho, Kookie. -Le besó la frente y luego se separó.

El menor asintió y luego de unos minutos mirándose fijamente, el niño salió de su habitación para después desaparecer tras la puerta principal.

—Por tu cara, parece que las cosas con ese mocoso terminaron mal. -Comentó TaeHyung con suavidad al ver los ojitos tristes de su mayor.

—Digamos que... Sólo nos dimos un tiempo. -Dijo cauteloso.

El rubio no entendió, ¿tiempo? Ni que fueran pareja.

—Bueno Jinnie, sabes que yo estoy aquí apoyándote siempre, ¿de acuerdo? -Abrazó al mayor y este asintió en respuesta.

Jin estaba triste sí, pero también sabía que había hecho lo correcto, con el tiempo, Kook lo entendería y se lo agradecería.