ᴇʟ ᴄᴀғᴇ ᴅᴇ ᴛᴏᴅᴀs ʟᴀs ᴍᴀɴ̃ᴀɴᴀs

ᴊᴜɴɢ ʜᴏ sᴇᴏᴋ

—Namjoonie apúrate —protesté mientras esperaba impaciente mente a que mi Nam terminara de arreglarse.

No cabe aclarar a donde voy, o tal vez sí, voy al Coffee Star's, muchas veces, como en esta, Namjoon me acompaña, claro, el dice que es para no hacerme pasar pena, aunque en parte se lo agradezco, porque muchas veces me quedo como un tonto mirándola cuando viene a ver mi pedido, es que es algo inevitable. Ella es hermosa, ella nunca se fijaría en un chico como yo. Por eso voy todos los días a verla, todas las mañanas, muchas veces también me quedo haciendo mi trabajo allí.

Patético verdad, pero bueno, en el amor todo vale, y espero que algún día se fije en mi, en un chico como yo, aunque sé que eso es algo imposible.

Muchas veces trato de darme ánimos a mi mismo, pero no puedo, no se porque.

Pero me alegra que sea ella siempre la que toma mi pedido cuando voy, aunque ahora cada vez que me ve me dice ¿Lo de siempre? Y yo solo aciento.

—Hyung espérame me falta ponerme los zapatos.

—Joonie te pusiste las medias de un color diferente cada una.

Bueno, de todas maneras estoy acostumbrado a ello, mi amigo, es así, siempre distraído y todo lo que ve lo rompe, por eso tengo algunas cosas guardadas muy bien para que no las pueda romper.

No como aquella lámpara que había en sala que me costó cantidad, creo que solo duro una semana.

—Oh tienes razón.

Me reí, de todas maneras era mi amigo, con una media gris y la otra azul pero era mi amigo, y yo no podía hacer nada, y le agradecía a la vida por haberlo conocido.

Siempre iba a la misma hora, muy pocas veces iba en la tarde, mi horario era alrededor de las nueve, pues la cafetería abría a las 8:30am y yo iba temprano también cuando casi nadie estaba, aunque esa cafetería ya era muy famosa.

Y yo creo que también soy conocido allí. Jung Hoseok, el chico que va todos los días al Coffee Star's a la misma hora, y siempre es atendido por Byun Kaet, impresionante, creo que hasta me gusta como suena eso. Bien, ya estoy delirando.

—Vámonos hyung.

Ya era hora ¿no?

—Vamos Nam.

—Tranquilo que tú prometida estará esperando por ti.

—No es mi prometida, apenas me conoce. No digas burradas Nam.

Siempre me jodía con eso, y lo peor es que me dolía, porque quisiera que eso pasará, quisiera que ella fuera mi prometida, bueno, al menos mi novia, salir, ser algo, más que amigos, pero por ahora me conformo con verla atendiendo las demás mesas en el café.

No sé qué más puedo pedir. Al menos así, sabe que existo.

ᴊᴜɴɢ ʜᴏ sᴇᴏᴋ

—¿Lo de siempre?

Ven, a eso me refería. Yo solo aciento, Nam también lo hace, y vaya, la verdad fue que nunca fui de tomar café, no me gustaba, pero ahora vengo todos los días menos los domingos porque no abre.

Y si, pues aprendí a tomar café por ella, para verla. Aunque al principio no me agradaba para nada la idea, pero que tiene de malo, por amor todo se vale, como si tengo que tirarme de un cuarto piso.

Oh bueno, eso suena... Aterrador.

—Hyung ¿no crees que es extraño?

—¿El que?

—Esa chica —oh sí, Nam apenas sabe el nombre. —Cada vez que venimos, o cada vez que vienes siempre nos atiende, cuando pudiera hacerlo otros meseros, siempre ella.

Y ahí va Nam. Eso es bueno, es bueno que sea ella porque no vengo aquí para verle la cara a unos estúpidos meseros mientras ella anda atendiendo otras mesas, al menos así compartimos un poco de contacto visual.

—No —respondo cortante.

Hace mucho me plantee invitarla a salir, pero soy muy miedoso por así decirlo, me pongo muy nervioso, una vez solo me quedé como un idiota tartamudeando, entonces al final solo pedí —como siempre— un café y ya, así me ahorraba un mal rato.

Además, también miedo de él rechazo, ella no tendría porque salir conmigo, no me comparó en nada con todos los demás pretendientes que de seguro tiene.

Ella merece más, ella merece mucho, cosas que yo no le puedo dar.

Porque apenas lo que tengo lo gasto aquí para venir a verla, porque dentro de una hora tengo que ir a mi trabajo en una empresa publicista mientras yo solo tengo que editar los textos cuando lo terminan e imprimirlo.

Al menos gracias a ello puedo comprarme lo que me haga falta, así que por decirlo tampoco tengo un trabajo digno.

—Ándale no es como si ella necesitará un principe azul —dijo Namjoon levantando las cejas.

Iba a hablar pero lo ignoro al ver que Kaet viene con nuestro café, ella sonríe como siempre lo hace, esa sonrisa que hace que me derrita, es la sonrisa más hermosa que haya podido ver en mi vida. Es muy pero muy hermosa. Se lo que digo.

—Sus café —dice y los pone en la mesa.

También su voz es bonita. Agradecemos y ella se vuelve a ir, mientras veo como habla con Hanna, bueno, se puede decir que se algo sobre las personas que trabajan en la cafetería.

Si, porque al principio cuando iba me atendían otros, mientras yo solo deseaba que Kaet lo hiciera, y ahora lo hace.

—Gracias —dice Joonie.

—Gracias —sonrió tratando de dar mi mayor sonrisa.

Todos mis pensamientos se esfuman cuando ella corresponde a mi sonrisa, es hermosa, el como me mira y sonríe para luego irse.

Me hace sentir en las nubes.

—Hyung invítala a salir.

—¿Por qué aceptaría salir conmigo?

—Hyung —suspiró sobándose el puente de la nariz.

Nam a punto de perder la paciencia no es nada bueno. Créanme.

Tome un poco de mi café mientras esperaba a que se calamra y hablara.

—¿Por qué siempre eres tan negativo? Date una oportunidad a tí mismo, no pierdes nada con intentarlo, estás peor que un niño de quince años con su primera novia.

—Vale vale.

Suspiro rendido, Namjoon no sabe, pero cada vez que la veo mis nervios salen a flote. Él no me entiende.

Yo no tengo nada que ofrecerle a ella, y merece más que eso.

—Además parece un poco interesada en tí.

Si claro, Joonie siempre anda diciendo lo mismo, con eso solo va a lograr que si me dice que no, que me duela más.

—Vamos, tenemos que trabajar.

Es verdad, y yo no me quiero ir, soy un idiota que sufre por amor —si es que así se le puede decir—

Dejo el dinero encima de la mesa y cuando me levanto le hago una seña y rápidamente salgo. Cuando estoy afuera volteó a verla, y lo más extraño de todo es toparme con su mirada encima de la mía.

Ella me estaba mirando y después me regaló una de sus sonrisas para seguir limpiando la mesa y volver con nuestras tazas.

De verdad Kaet, haces que me confunda enormemente.

¿Y si es verdad lo que dice Nam?

ᴊᴜɴɢ ʜᴏ sᴇᴏᴋ

Hoy estoy decidido a pedirle una cita a Kaet, si me dice que no pues que más da, pero al menos lo intenté, Namjoon tiene razón, y es que estoy actuando como un niño, llevo unos meses llendo a la cafetería y nada, además no voy a llamar su atención simplemente pidiendo un café. Aunque eso no entraba en mis planes, yo solo quería verla.

Es que es imposible, ella es tan hermosa que ya me estoy llendo por los hilos. Suspiro y entró en la cafetería, me siento en una de las mesas mientras la veo a ella en una de las mesas de atrás.

Un chico se me acerca, trato de dar una sonrisa pero me sale una mueca ¡Yo quería que Kaet me atendiera!

Vete idiota vete, vengo aqui por Kaet, no para verte la cara a tí.

—Bienvenido a Coffee Star's ¿qué desea?

Una Kaet para llevar por favor.

—¡Hey! —Siento la voz de la chica —te puedes ir, es mi cliente —el se ríe y se fue. —Lo siento, ignora todo.

¿Cómo hacerlo? Si tan solo estás palabras me hicieron la persona más feliz de el mundo. Siempre he dicho que nunca sería propiedad de nadie, porque odio cuando mis hermanas se pelean entre ellas por mi entonces digo eso pero supongo que viniendo de Kaet no me molesta.

—¿Lo de siempre verdad Hoseok?

—Si —sonrío pero entonces mi sonrisa desaparece cuando proceso lo que acabo de decir.

¿Cómo sabe mi nombre? No creo nunca habérselo dicho. ¿Cómo ella puede saberlo? ¿En algún momento lo dije? No lo creo.

Ella me sigue sonriendo, pero por mi mente solo pasa la pregunta sobre cómo ella me conoce, en realidad nunca le había dicho mi nombre, se los juro, y ahora aquí me dice Hoseok es... Ni siquiera sé cómo es.

Me siento confundido.

—¿Cómo sabes mi nombre? —pregunté cuando ella se dió la vuelta para irse.

Detuvo su paso y me miró, pude notar como se puso nerviosa, entonces ella me sonrió, aunque sabía que estaba nerviosa, es normal, o eso creo, aunque ahora que lo pienso ella no tendría motivos para estar nerviosa ¿O sí? Ya ni siquiera se en lo que estoy pensando, ay dios, creo que me estoy volviendo loco. Creo que hubiera sido mejor no haber preguntado nada.

Pero las ganas me vencieron, fueron más fuertes que yo.

Quizás en serio le atraigo un poquito y tuvo curiosidad e investigo. Nah, no puede ser, ¿por qué le gustaría un chico como yo? ¿Qué tengo yo para llegar a gustarle? Nada, solo soy un chico sin gracia.

Vale, creo que no debo de pensar así de mí, pero cuando la veo a ella me hace cuestionarme cada uno de mis actos, de todo en general.

Me hace volver loco.

Ella llamo a una chica, puedo ver qué es Hanna. Entonces pide dos café.

Genial, parece que tiene una historia que contarme, y yo de seguro la escucharé como un chico tonto enamorado porque eso es lo que soy.

—Se tú nombre, ese chico que viene contigo.

Namjoon, no podría haber sido otro.

—Yo se lo pregunté y el me lo dijo.

—Oh.

Sin embargo otra pregunta inundó mi cabeza.

—¿Por qué?

—Bueno, la verdad es que-

—¿Quieres salir conmigo? —pregunté.

Soy un idiota, ni siquiera la dejé de hablar y segundo, pero más importante, no se a donde la voy a llevar. Si estuviera solo estuviera jalandome los pelos. Porque soy un imbécil. Regla número cuatro según Namjoon; nunca interrumpas a una mujer en medio de su relato. Y es la primera que rompo.

¡Se me han pegado los poderes de Namjoon!

Ahhh, pongámonos serios.

—Lo siento, no pensé antes de hablar —sonreí —tranquila.

Ella iba a decir algo pero Hanna viene con nuestros cafés. Ella le sonríe y cuando está se va habla conmigo otra vez.

Y yo solo quiero desaparecer de el mundo.

—¿Por qué no saldría contigo?

—¿Porque quién saldría con un chico como yo?

Bien, creo que se han dado cuenta de que soy muy negativo. Siempre apoyo a mis amigos en todo y los ánimo a hacer cosas, y siempre les digo que no pueden ser negativos, pero yo lo soy conmigo mismo, soy negativo.

Siempre lo he sido, y más con respecto a mi, aunque eso no quiere decir que no haya salido con chicas, claro que sí, sino que al final no se daba, creo que todo era culpa de mi negativismo.

—Yo. Yo saldría con un chico como tú.

Ella sonrió y mi corazón se aceleró.

¿Eso que quiere decir exactamente?

Lo primero es Hoseok, que cierres la boca.

—¿Eso es un sí? —Pregunté nervioso.

—Si, acepto salir contigo Hoseok.

—¿Cuando te parece? —pregunté rápido.

¡Debo decirle esto a Namjoon! Debo planearlo todo. ¡Debe salir perfecto!

—¿El sábado te parece?

—Bien. Después te mando un mensaje con la hora —sonreí, ella acintió.

—Dame tu mano —dijo y extendió la de ella.

Me quedé atómico y sin decir una palabra lleve mi mano lentamente hacia la de ella y con su bolígrafo en la palma de mi mano escribió números, creo que es su número, su mano se siente algo fría, pero es tan suave a la vez.

¿Esto es posible?

Me siento en las nubes.

—Este es mi número. Esperaré tu mensaje. Ahora debo ir a trabajar.

—Oh está bien —iba a pagar.

—Hoy eso va por mí —dijo ella.

—No gracias, yo puedo-

—Entonces no saldré contigo.

Creo que a la velocidad de un rayo guarde el dinero. Me despedí y me fui, bueno, de todas maneras debía de ir a trabajar, y ya estaba algo retrasado. Pero lo bueno de todo es que pude invitar a salir a Kaet, y lo mejor fue que ella aceptó.

Amo la vida.

Si, me enamore de Kaet cuando comencé a ir por el café, ella fue la primera chica que me atendió, entonces, cuando eso aún era una aprendiz, y sin querer terminó derramando la bebida encima de mí.

Ella había sido la chica mas linda que había visto.

Tiempo después comencé a ir a seguido y digamos que ella me comenzó a gustar, además de que la mayoría de las veces siempre era ella quien me atendía, ya que no siempre lo hacía, no como ahora, que lo hace siempre.

—Hola Jung —me saludo mi colega cuando entre en el trabajo.

Me senté en mi puesto, justo a él lado de él. —Hola Yoongi.

—¿Estás de buenas hoy? No me digas que invitaste alguna chica a salir.

—¿Eres adivino o que? —Junto mis cejas. —Oh señor adivino dígame ¿qué ve en mi futuro?

—A veces pienso que eres idiota.

Ay si, yo también.

ʙʏᴜɴ ᴋᴀᴇᴛ

Estoy nerviosa, me he probado creo que todas las prendas que tengo en el closet y ninguna me convence, soy un desastre, como se supone que veré a Hoseok en una hora si ni siquiera de que ponerme.

Eres asombrosa Byun Kaet. Había llamado a Hanna, ella siempre sabe qué hacer en estos casos.

Y al menos mal que llegó temprano porque lo que menos quiero es llegar tarde a mi primera cita con Hoseok.

Todavía recuerdo su pregunta, ¿Por qué saldría con un chico como el? Quién no saldría con un chico como él. Él es una grandiosa persona, y todo lo que se de el es gracias a ese amigo, pues una vez nos pusimos a platicar cuando lo ví, pues ambos estábamos en la cola para un cono de helado y entonces el se ofreció a pagarmelo.

Entonces de alguna manera cuando el menciono a su amigo yo saqué el tema de conversación, y pude saber muchas cosas de él.

Cómo que no quería invitarme a salir porque cree que merezco algo más. Tampoco es que mereciera un principe azul, y si es así, estoy segura de que el es mi príncipe azul.

—Haber Byun Kaet —dijo Hanna mirando el desastre que era mi habitación.

—Ayúdame, en una hora Hoseok vendrá por mí.

—Cálmate primero si. A ver respira hondo —ella lo hizo conmigo —exhala. Ahora veamos.

Comenzó a buscar entre la ropa.

—Me gusta esto. Creo que podría quedar bien. El color no es oscuro, es blanco. Úsalo.

—Bien.

—Del maquillaje me encargo ya. Dale vístete.

Fui hacia el baño, me puse el pantalón de mezclilla que me dió Hanna y la blusa blanca que me había dado que era una que había comprado nueva, a decir verdad nunca me la había puesto. Eran las ocho de la mañana y yo como loca buscando ropa, en serio soy un desastre, pero ahora es lo de menos.

Al menos la blusa no se ve tan sencilla pues es de encaje.

Cuando termine salí y ella que al parecer estaba mensajeandose con alguien dejó el teléfono a un lado y me miró y dejó el teléfono a un lado.

—Me gusta. Hoseok se va a babear.

—No seas idiota.

—Vamos, veremos qué hacer con ese pelo.

—Algo simple.

Bien, al menos en eso me hizo caso. Si Hanna es la diosa de el maquillaje, pues me lo hizo y tampoco creo que resalta tanto, no tengo ese exceso que algunas personas se dan y pues el peinado me hizo una simple coleta alta, el tiempo no daba para más.

Además de que después de que termine de arreglar todo el desorden que era mi habitación sentí la puerta ser tocada.

Y es en estos momentos cuando siento que mi fortaleza mental se va.

Ya estoy nerviosa de nuevo.

—Hola —saludo al abrir la puerta.

—Hola ¿Ya podemos irnos? —Ahh, claro que sí.

—Claro —digo y cojo mi bolso.

Estamos caminando hacia la parada mientras conversamos alegremente cuando vemos que el autobús nos pasa por el lado, me alegro de no haberme puesto tacones porque Hoseok toma mi mano y sale corriendo diciendo que no podemos perder el autobús.

Pero al menos pudimos llegar. Y pudimos coger asientos.

—¿A donde vamos?

—Es una sorpresa.

ᴊᴜɴɢ ʜᴏ sᴇᴏᴋ

Bajamos de el autobús y la veo saltar de felicidad, sus ojitos brillan, debo agradecerle a Yoongi por haberme dado la idea. Pues la verdad no sabía que hacer, bueno, no sabía a donde llevarla, entonces el me sugirió el zoológico en vez de una cena, pues según él es algo cliché. No sé, sinceramente me vino bien, además de ver la expresión entusiasmada de Kaet me pone muy feliz.

—Ya casi nos toca.

Dijo feliz. Estábamos esperando que nos diera el pase para poder entrar.

Aunque creo que se va a demorar un poco, aún así ella no deja de observar todo el lugar por fuera, y hay bastante gente, supongo que es normal, es fin de semana y las personas salen con sus familiares, o como yo, van a tener una cita.

Una cita.

Ni siquiera me lo creo. Es que no puedo. Después de tanto tiempo ahora puedo salir en una cita con Kaet, no, corrección, estoy en una cita con Kaet.

—Vamos —dijo y tomo mi mano. Pues ya nos tocaba.

Nos dieron el pase y pudimos entrar, después de una cola que pensé que nunca saldría de allí, que sería de noche y estaríamos allí mismo.

Creo que a veces exagero pero vamos, no soy un chico de colas, la paciencia no es lo mío.

Creo que Kaet ya lo descubrió.

Lo primero que hicimos fue comprar algo para comer, así como chucherías, todo elegido por Kaet, y algunas por mí, amé ver ese brillo en sus ojos.

Luego fuimos a el área donde estaban los animales.

Kaet tomaba foto de todo, incluso se tomaba fotos ella.

—Ven Hoseok, tómate una foto conmigo —sonrió.

Sonreí ante la cámara y ella también lo hizo mientras hice una V con mis dedos, y después ambos formamos un corazón. Después le pediré que me pase las fotos.

¡Ella es tan linda!

—Vamos —dijo para caminar hacia el autobús que nos daría un recorrido por dónde andan los animales sueltos.

Debo armarme de valor. No puedo quedar como un idiota al lado de Kaet.

ʙʏᴜɴ ᴋᴀᴇᴛ

—¿Podemos tener otra cita? —pregunté mordiendo mi labio inferior.

—Claro, podemos ir al cine —sonrió.

—Está bien.

Entré en mi casa cuando ví a el chico alejarse, tiré mi bolso en el sofá y suspiré, creo que fue la mejor cita que he tenido en mi vida. Tenía como veinte mensajes de Hanna y no les miento cuando digo veinte, esa chica me va a volver loca pero así la quiero, además de que si no fuera por ella ahora mismo no se que hubiera sido de mí.

Conteste todos sus mensajes y apague mi teléfono. Tampoco iba a comer algo, estaba súper llena, pues creo que lo que mas hice aparte de ver los animales y tirar fotos fue comer.

Fui hacia el baño y me di una ducha, nunca olvida el de día de hoy.

Cuando termine me tire en la cama y comencé a ver las fotos que tenía con Hoseok, es un chico muy lindo. Creo que pondré una de las fotos de fondo de pantalla, aunque luego desistí de esa idea, pero yo soy Kaet y se que terminaré haciéndolo.

Incluso ahora mismo me preguntó si el miércoles a eso de las ocho estaba disponible. Una estúpida sonrisa sale de mi rostro mientras grito eufórica.

Le respondo con un sí para luego dejar el teléfono de lado y dormir un poco, pues aunque no lo sepan son las siete y yo ando muerta.

Oh, también descubrí que muchas cosas sobre Hoseok, como que no es de mucha paciencia y le tiene miedo a ciertas cosas como son la altura, pues el mismo me lo dijo y a eso de los animales sueltos, además no es como si estuvieran tan sueltos, literal.

Deje de pensar tanto hasta que mis párpados se volvieron pesados y caí en un profundo sueño.

ᴊᴜɴɢ ʜᴏ sᴇᴏᴋ

Estábamos sentados uno frente a él otro, lleve a Kaet a comer a un restaurante, uno que me recomendó Namjoon, al menos era verdad que estaba bueno, ya que por ahora no me quejo de la comida, eso es lo único importante aquí, además de que Kaet la este pasando bien por supuesto, nada más que eso, porque si ella no la pasa bien me sentiría super mal, pero creo que no al ver como devora todo lo que tiene delante.

Es tan linda.

No me cansaré de verla. También descubrí que una de sus comidas favoritas es el camarón. A mí no me gusta mucho, pero si por ella aprendí a tomar café también puedo aprender a comer camarón, aunque no es malo, creo que prefiero la langosta.

Uh, eso me recuerda a mi amigo Seokjin, en estos días quizás lo vaya a ver, al menos a él la vida le sonrió, pues hace unos días me llegó la invitación de su boda.

—¿No vas a comer? —me preguntó ella.

Creo que he estado demasiado tiempo mirándola y perdido en mis pensamientos.

—Oh sí, me entretuve.

—¿Qué pasa?

—Quiero preguntarte algo.

—Dime —se limpio la boca con la servilleta. —Soy todo oídos para tí.

—Bueno, uno de mis amigos se va a casar y quería invitarte a i-ir conmigo a la boda.

Me felicitó internamente, pues logré no grabarme tanto como pensaba que lo haría.

—Claro que acepto ir contigo.

—Que bueno.

—¿Cuando es?

—El lunes de la semana que viene.

—Oh, es pronto. Puedo tomar el día libre.

Tengo ganas de gritar.

—Si.

Cuando terminamos yo pagué, pues no deje que ella lo hiciera, aunque creo que se molestó un poco, aunque no le preste mucha atención a eso.

Estábamos caminando por un parque, que quedaba lejos de su casa y de la mía, pero quería dar una vuelta por ahí, además quiero intentarlo, y creo que este sería un buen lugar.

Ella sigue caminando mientras me sonríe, y pienso en sí debería hacerlo o no, pienso, pero la verdad quiero hacerlo, ella me gusta hace mucho, no sé si yo a ella también, pero de alguna manera espero que el sentimiento sea recíproco.

¿Cómo no? Creo que es lo que esperan todos cuando están enamorados de una persona.

Pasar tiempo con Kaet es lo mejor, y amo todo de ella, es genial y muy divertida, incluso me contó una anécdota de que una vez llegaba tarde a la escuela y se cayó en un charco de agua, pues la noche anterior había llovido.

Me reí mucho. Ella es muy divertida.

—Kaet.

—Mm. ¿Si?

Mordí mi labio inferior. —Quiero preguntarte algo, o más bien decirte algo.

—Me asustas —se rió.

—Hace mucho tiempo me gustas —ella abrió su boca para decir algo pero no la dejé —sé que esta es nuestra primera cita, y te entiendo si dices que voy demasiado apresurado, pero de verdad me gustas, desde aquella vez que derramaste el café encima de mí —ambos reímos. —No pude evitar sentir esa atracción por tí. A veces digo que no soy lo suficiente para ti, siento que mereces más que eso, porque me preguntó incluso porque sales conmigo, solo soy un chico sin chiste, no tengo nada que ofrecerte, solo mi amor sincero, te pido que me des una oportunidad, quisiera conocer todo de ti, quiero saber tus miedos, lo que te gusta, quiero ayudarte a cumplir tus sueños, quiero ser esa persona a la que presentes como tu novio. ¿Podría ser eso Kaet? ¿Podría ayudarte a cumplir tus sueños? ¿Podría... Podría formar parte de tu vida? ¿Me darías una oportunidad para conocernos mejor? ¿Saldrias conmigo?

Quería decirle en vez de salir conmigo si quería ser mi novia, pero no queria apresurar las cosas.

—Hoseok. La verdad no me esperaba esto —limpio una lágrima, ni siquiera me di cuenta de que había llorado —eres el chico más lindo que conozco —sonrió.

Mordí mi labio y baje mi cabeza. Temía al rechazó.

—No quiero que te sientas presionada —le dije —no quiero eso, que te sientas forzada a tener algo conmigo, apenas es la segunda cita que tenemos, aunque nos hemos visto todos los demás días y siempre conversamos un rato, no quiero que me respondas ahora-

—Yo quiero intentarlo, quiero que lo intentemos.

Cerré mi boca, esa no era la respuesta que esperaba, pero me alegra oírla, soy el chico más afortunado de todo el mundo de tener a una chica como ella.

—¡Tendremos muchas citas! —practicamente grité. —Despues, tú puedes decidir si quieres seguir conmigo o no.

Daré todo lo que tengo por hacerte feliz Kaet. Todo.

La abracé, ella correspondió al abrazó, le dejé un beso en su mejilla mientras entrelazabamos nuestras manos.

Y si, hoy es el día más feliz de mi vida.

Un día que nunca olvidaré.

Porque siempre la voy a amar.

Y estoy dispuesto a disfrutarlo el tiempo que dure.

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