ᴄᴀᴘɪᴛᴜʟᴏ xx : ᴇʟ ʀᴇʏ ʏ ᴇʟ ᴠᴀɢᴀʙᴜɴᴅᴏ
- Liam, ¡¿cómo lo supiste?!
- Nicol, ¡no te puedes casar con él!
- ¡Ya tuve suficiente! ¡Alfred, llama a seguridad!
- Liam, lo mejor sería que te fueras.
- Pero, Nicol... No nos puedes hacer esto.
- Liam, mi corazón le pertenece a otro hombre. Tienes que aceptar eso.
- ¿Dónde está la maldita seguridad? ¡¿Por qué se tardan tanto?!
El registrador se hace a un lado, todos están asombrados. Papá se acerca a Liam y lo toma del hombro.
- Hijo, lo mejor sería que te fueras por ti mismo. No hagamos una escena.
- ¡No! Benjamin, usted sabe que Nicol es la mujer a la que amo. He pasado por tantas cosas solo por ella. ¡No puedo dejar que se case con otro hombre!
- Pero, hijo, ella ya tomó su decisión. Anda, ven conmigo, vamos a dar un paseo.
- ¡Yo no vine aquí para dar un paseo! ¡Vine por ella! ¡Nicol, la elección es tuya! ¡Te amo!
Me quedo parada y agitada, mis ojos se llenan de lágrimas.
- Por el amor de Dios, Liam, ¡¿por qué haces esto?!
- ¡Porque te amo!
Los de seguridad se nos acercan.
- ¡Vamos, no tenemos mucho tiempo! ¡Ven conmigo!
Extiende su mano hacia mí.
- Jimin, por favor. Solo quiero explicarle todo por última vez.
- Está bien. Ve, aquí te espero.
Le entrego mi mano a Liam y lo aparto a un lado para hablar.
- Primero, tienes que saber que no debiste haber hecho esto. Todo esto fue un gran error.
- ¿Lo elegiste porque él tiene una fortuna y yo no tengo nada?
- Lo elegí a él porque es el amor de mi vida. Es muy sencillo. Sé que esto es muy difícil para ti, pero por favor, vete. No sé quién te dijo que estaba aquí, pero fue muy estúpido de tu parte haber aparecido. ¡Por favor, si tienes algún respeto por mí, solo vete, lárgate!
- Ya veo. ¡Lo siento! Me acabo de dar cuenta de lo que hice.
Se da vuelta y se va calmadamente. Sabía que tenía que ser dura con él. Esa era la única manera de hacerle ver que me tenía que dejar ir.
- ¿Estás bien?
- Estoy bien.
- Hiciste lo correcto al hablar con él.
- Estoy de acuerdo.
- Te amo.
- Yo también te amo.
Nos acercamos al registrador y continúa con la ceremonia.
- Así que, repetiré la pregunta... Si alguien sabe de alguna razón por la cual esta pareja no se debería de unir en sagrado matrimonio, ¡que hable ahora o que calle para siempre!
Temo que alguien nos vuelva a interrumpir. Por suerte, nadie rompe el silencio y podemos seguir donde nos quedamos.
- ¿Tú, Park Jimin, aceptas a esta mujer como tu futura esposa?
- ¡Acepto!
- ¿Y tú, Nicol Wolf, aceptas a este hombre como tu futuro esposo?
- ¡Acepto!
- ¡Ahora los declaro marido y mujer!
• ୨❀୧ •
Dos semanas más tarde
- ¿Esto es para mí?
- No sé.
- Jimin, no juegues conmigo. ¿Tú me compraste estas flores?
- Yo no, te lo juro.
- Yo fui. Hey, ¿no puede un niño comprarle flores a su mamá?
- ¡Claro que puedes! El niño sí que se esforzó, ¿o no, Jimin?
- Es un niño de oro. ¡Y todo un galán, como su papá!
- Jaja...
- ¿Cuándo vamos a saber si es niño o niña?
- Va a ser una gran sorpresa. Pero tendremos que esperar hasta entonces... ¡Y pronto!
- No puedo esperar a que este bebé venga al mundo.
- ¿Qué te gustaría que fuera?
- Una niña.
- ¡Nooo!
Jiwoo sale enojado de la habitación.
- Solo está siendo dramático, no le hagas caso. Dime, ¿qué te parece la habitación de nuestro bebé?
- Es perfecta.
- Igual que tú. Pronto tu estómago se pondrá como un globo.
- Sí. Espero que me quieras estando así.
- ¡No te preocupes por eso, seguirás siendo perfecta!
No puedo encontrar las palabras correctas para describir el brillo en sus ojos. A veces hasta creo que me ama más de lo que me amaron mis padres.
- Sabes, a veces me pregunto qué hice para merecer tanto amor tuyo.
- Sinceramente, no lo sé. Te amo, simplemente es así. Es indescriptible. Amo todo de ti. Tus lindas manos, tus ojos, tu nariz.
- ¡Ya sé!
- Me acabo de dar cuenta de por qué te amo tanto.
- ¿Ah, sí? Dime.
- No puedo.
- Por favor.
- De solo pensar en que te podría perder me hace sentirme más atraído a ti y mi amor se hace más poderoso. Me parece que no pasa ni un día que no piense que podrías cambiar de idea, dejarme y escapar.
- Jajajaja... Tiene sentido, pero te quiero decir que puedes olvidarte de todo eso. Nunca escaparé de ti.
- Sí, pero esa es un arma de doble filo. Si me convenzo de que es así, entonces dejaría de amarte tanto, y comenzaría a amarte menos intensamente.
- ¡No me importa! ¡Bésame!
Me abraza fuerte y me besa como si fuera la primera vez. Se escucha el sonido del timbre.
- ¿Esperas a alguien?
- No. Voy a ver quién es.
Jimin se va y no vuelve en unos minutos. Escucho voces masculinas desde el balcón y decido ir a ver quién es.
- ¿Qué dice? ¿No es suficiente?
- Así es. Sammy tiene cuatro hijos y dos ex esposas.
- Billy tiene razón. La cantidad en el cheque es muy pequeña.
- Oh, carajo, detectives, detectives...
- ¿Qué sucede aquí? ¿Qué hacen aquí los detectives de mi padre?
- Uh, oh... Ahora sí está jodido, jefe...
- Llegó la hija del plomero, Billy.
- ¡¿Por qué te llaman "jefe", Jimin?!
- Los chicos vinieron a recoger su cheque...
- ¿Por qué?
- Bueno... ¿Recuerdas esa mañana cuando vinieron...?
- ¿Sí...?
- Bueno... podría haber incluido a que algunas cosas sucedieran esa mañana...
- ¿Jimin...? En este momento vas a decirme exactamente lo que pasó. ¡Quiero escuchar qué paso esa mañana! ¡Ahora! Estos detectives no aparecieron de la nada, ¿verdad?
- Tienes razón, amor. Yo los llamé... De hecho, Alfred fue... Pensábamos que eras una ladrona...
- ¿¿¿YO??? ¿¿¿UNA LADRONA???
- Teníamos todo el derecho a pensarlo... Son los mejores detectives de la ciudad.
- Y los más rápidos...
- Así es, Billy.
- Ahora que todo está arreglado...
- ¿Qué cosa quedó arreglada?
- Los chicos recibirán su dinero por venir aquí esa mañana y por no denunciarte por robo.
- No entiendo, ¿qué robo?
- ¿Recuerdas que les dijimos que eras la hija del plomero? Pues unos días más tarde atraparon de verdad a una chica con el mismo nombre que el tuyo, y que de verdad era hija de un plomero.
- Sí, robaba dinero de los cajeros automáticos y entraba a las casas de la gente.
- Pero no fui yo.
- Claro que no fue usted, señorita.
- Así es. ¿Usted cree que es fácil engañarnos?
Recuerdo esos momentos cuando me disfrazaba y no me reconocían.
- Claro que no. Ustedes son expertos para reconocer a la gente.
Me río por dentro.
- Jefe, lo mejor será que nos vayamos ahora...
- Tienes razón, Sammy. Tenemos mucho trabajo.
- ¡Gracias, detectives!
Alfred los acompaña a la puerta.
- ¿Me puedes hacer un favor?
- ¿Qué cosa...? ¿Qué se te ofrece?
- Ve a vestirte, ¡te quiero llevar a un sitio!
- ¿A dónde?
- Es una sorpresa... Solo obedece... ¡Te va a gustar!
- Bueno. ¿Debería ponerme algo elegante o algo casual?
- ¡Elegante!
- ¡Muy bien!
Entro a nuestra recámara, preguntándome a dónde me va a llevar...
- ¿Qué me pongo?
~ Conjunto elegido ~
- Te ves como una diosa. ¡Apresúrate, apenas vamos a llegar a tiempo para la cena!
- ¿Cena?
- ¡Sí! El helicóptero ya está listo.
• ୨❀୧ •
Varias horas de vuelo después
- ¿Europa? ¿Nos trajiste a Grecia solo para cenar?
- ¿Y por qué no? Pensé que podríamos pasear un poco...
- Eres un hechicero...
- Y tú eres una mujer mágica que me dejó hechizado...
Toma una copa de vino de la mesa y hacemos un brindis.
- ¡Por nosotros!
- ¡Por nosotros!
- Sabes mi bisabuelo tenía ascendencia griega.
- ¿De verdad? No lo sabía.
- Sí. Mañana te presentaré a mis padres.
- ¿Padres? Perdón por la pregunta, pero ¿están vivos?
- Sí. Seguro que se me olvidó mencionarlo.
- No te creo. Me pregunto qué más se te habrá olvidado mencionar.
- Seguramente muchas cosas. Pero no te preocupes, tenemos toda una vida por delante para conocernos.
- Jimin, estás loco.
- ¡Te amo, Nicol!
- ¡Yo también te amo, Jimin!
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top