Sus manos viajaron a los bolsillos de su sudadera.

Habían perdido contra el otro equipo del instituto, y el capitán les estaba echando la bronca como si fuesen niños pequeños.

Dejó escapar una pequeña risa al ver como el capitán se enfrentaba a Seokjin, quien intentaba calmarlo.

Su mejor amigo, Jimin, le tocó el hombro levemente.

—No te rías. — Susurró. — O se enfrentará a ti.  —

Park jimin era un beta con el que había hecho buenas migas al entrar al equipo, convirtiéndose en su mejor amigo, y tristemente, el único que tenía.

—Jeon, respira despacio...

— ¡Cállate de una puta vez, Namjoon! Hyunjin se ha reído en mi cara. —

Y Taehyung soltó una risa, siendo observado por el capitán.

— ¿Se te hace gracioso, Kim? — Jimin miró con miedo a su amigo.

— Jaja, sí. — Contestó el más bajo.

Jungkook lo empujó a las taquillas, y Kim sacó las manos de los bolsillos para sobarse los hombros.

— No seas tan debilucho, estúpido beta. Así no lograrás nada en la vida.  —

- ¿Como tú? - Dijo el chico peliazul, sonriendo levemente con burla.

Levantó el puño, dispuesto a golpearle, pero una voz fuera de los vestuarios lo interrumpió.

- ¡Jungkook, necesito hablar contigo! -

Era una voz femenina, por lo cual Jungkook dejó al chico allí, y salió a hablar con Ryujin, que así se llamaba la chica.

- No salgas del vestuario, necesito hablar contigo en privado. ¡Los demás, largo ya! -

jimin se despidió de él, y Yoongi se le acercó. 

- Suerte tío. - Le dijo, para luego irse con los demás.

Taehyung esperó sentado en un banco, mientras miraba de forma desinteresada su móvil.

- Ardilla. -

Han levantó la mirada, encontrándose a Jungkook con los labios levemente pintados de rojo.

- Esa chica te dejó marca. - Se limitó a decir.

Jeon se extrañó, pero luego se dio cuenta y limpió sus labios con su propia mano.

Se acercó a él, y lo agarró por los hombros, acercándose a su rostro.

- ¿Quién crees que eres para reírte de mí, estúpido? -

Kim tragó duro. Sentía miedo por el tono tan grave que había puesto Jungkook en su voz.

Ahí fue cuando sintió más calor del normal, e imaginando lo que se venía en ese momento, intentó separarse del alfa.

- ¿A dónde crees que vas? -

- Necesito usar el ba-baño. -

 - ¿Ahora es cuando tienes miedo? -

Kim intentó pensar en una excusa, pero no se le ocurrió ninguna.

- Tengo ganas de hacer caca. -

El capitán puso cara de asco, pero lo soltó para que fuera.

Salió corriendo al baño, bajando sus pantalones y ropa interior cuando cerró la puerta.

Y ahí sintió el espeso líquido bajando por sus piernas.

- Mierda. - Susurró.

Seguramente ahora el vestuario entero apestaba a su maldito olor característico como omega, y contuvo la respiración al ver los pies de Jungkook enfrente de la puerta del baño.

- Sal. ¡Ahora! -

Se limpió con papel, tiró de la cadena y subió sus pantalones junto a sus bóxers.

Abrió la puerta, encontrándose con la mirada oscura del alfa.

- ¿Qué quieres? - Dijo Kim.

- ¿En serio eres un omega? -