Es el día cuatrocientos veintiuno. En realidad, ¿La noche cuatrocientos veintidós? Wei Ying está acurrucado contra el costado de Lan Zhan, como de costumbre, disfrutando de la comodidad y el calor de estar tan cerca de otra persona. La emoción de todo esto aún no ha desaparecido.

Wei Ying pasa de acostarse de lado a apoyarse más en el pecho de Lan Zhan y parpadea en la oscuridad, inquieto.

Difícilmente puede quitarse de la cabeza el concepto de hacer ya sabes qué con Lan Zhan. Es bastante vergonzoso la frecuencia con la que su mente divaga pensando en la polla de su amigo, cuando todo lo que están haciendo es charlar. Todo el día la imagen de él, desnudo y mojado, lo acosa, como pájaros de dibujos animados alrededor de alguien que acaba de ser noqueado. Solo que en lugar de pájaros, están los pectorales mojados y la polla de Lan Zhan.

Además, no es que haya mucho más que hacer mientras camina que hablar con Lan Zhan sobre cosas. No tiene idea de cuántas veces le ha contado anécdotas de sus viejos amigos y familiares; incluso podría haber repetido algunas, aveces.

Sus días pasan con bastante facilidad. Wei Ying sigue esperando ver el mar en la distancia, pero Lan Zhan dice que todavía están muy lejos. Sin embargo, Wei Ying espera que solo esté exagerando, porque caminar todo el día, desde el amanecer hasta el anochecer, requiere mucha energía. Energía que simplemente no tiene, con la dieta que sigue actualmente, aunque Lan Zhan se asegura de comer al menos dos comidas al día. Todo lo deja exhausto. De hecho, está empezando a sospechar que se está enfermando; ¿Por qué otra razón estaría luchando constantemente contra los sofocos? A veces tendrá que detenerse en medio de una conversación para concentrarse solo en respirar.

Es todo muy extraño, y él nunca había sentido algo así antes.

Incluso cuando había estado lidiando con una infección, no había sido este tipo de cansancio. Ese había sido el tipo de cansancio delirante, en el que no había distinguido arriba de abajo y había estado febril y con un dolor constante. Esto es casi agradable, en comparación; se siente somnoliento, casi mareado como si estuviera boracho. Desafortunadamente, además de la fatiga de caminar millas todos los días, solo es debilitante.

Y, sin embargo, ¡todavía no puede dormir!

Está lleno de energía frenética y animada. Está haciendo todo lo posible para no inquietarse (¡mucho!), Pero todo lo que Wei Ying quiere hacer es patear sus piernas, rodar y gritar. Cualquier cosa para deshacerse de este sentimiento demasiado cansado, demasiado despierto, demasiado cálido. Wei Ying suspira ruidosamente, jugando con la cremallera sin usar del saco de dormir de Lan Zhan.

Luego se congela.

Solo escuchó un ruido, proveniente del exterior de la tienda. Agudiza el oído, escuchando cualquier otra cosa. Lan Zhan sigue durmiendo, ajeno.

Otro sonido de pelea, silenciado pero definitivamente presente, hace que Wei Ying se ponga tenso. Casi no puede ni respirar. Es una de esas cosas, está seguro. La última vez que trató de pelear con uno de esos, no tenía un cuchillo. Ahora está armado, por lo que tiene muchas más posibilidades de luchar esta vez.

Necesita... necesita conseguir su cuchillo. Por si acaso.

Tomando una respiración lenta y profunda, y conteniéndola, Wei Ying se separa lentamente de Lan Zhan y se arrastra lo más silenciosamente que puede hacia la entrada de la tienda, pisando con cuidado sobre sus rodillas en la oscuridad total. Con los dedos contra la tela transparente que forma la cámara interior de la tienda, escucha.

Ya no puede escuchar nada, pero eso no significa que se haya ido. Son inteligentes, estos... lo que sea que sean. Deseando que sus manos dejen de temblar, tira de la cremallera de forma experimental, moviéndola solo una pulgada más o menos, y se estremece. ¡En el silencio, parece tan fuerte! Si hay algo ahí fuera, no hay forma de que no haya oído eso.

El corazón de Wei Ying late con fuerza en su pecho, ahogando cualquier señal de que la criatura está cargando contra ellos hasta que es imposible pasar por alto. Ciego por el pánico, Wei Ying tira de la cremallera, tratando de llegar a su arma. Queda atrapado. Wei Ying maldice en voz alta. Alcanza a Lan Zhan, sabiendo que no lo despertará a tiempo.

El lado de la tienda se derrumba y el mundo se inclina hacia un lado.

"¡Mierda! ¡Ay!" Fuera lo que fuera, aterrizó en él con fuerza. Un gruñido gorgoteante proviene de algún lugar delante de él, y Wei Ying se da cuenta de que la criatura corrió a través de la tienda y regresa para una segunda ronda.

"¡Lan Zhan!" grita, esperando no estar herido.

Su cuchillo. ¿Dónde diablos está su cuchillo? Cuando se mueve, su muslo derecho palpita. No puede encontrar nada en la oscuridad, todo está demasiado desordenado. La criatura se está acercando de nuevo, pisadas pesadas incluso sobre la tierra blanda.

Con las manos hurgando en toda la tela que ahora está suelta, aleteando por todas partes, interponiéndose en el camino, Wei Ying lucha por encontrar su arma. ¡Es tan estúpido! Se ha vuelto tan relajado; dormir con un alfa justo al lado de él debe haberlo adormecido con una falsa sensación de seguridad, por lo que ha estado dejando su cuchillo en su bota por la noche en lugar de mantenerlo junto a él.

La criatura los pisotea nuevamente, y esta vez Wei Ying escucha un leve gruñido de Lan Zhan. Esto los ha lastimado a ambos ahora, y Wei Ying no está ni cerca de encontrar un arma para poder defenderse . Maldice de nuevo, enojado más allá de las palabras, asustado más allá del sentido.

—¡Lan Zhan!— dice de nuevo, su voz saliendo rota, —¿estás bien?

—Mhm—, responde Lan Zhan, pero suena tenso. Parece que al menos se está moviendo, lo cual es una buena señal.

El crujido de la tela mientras luchan por salir de ella, llama a la criatura. Regresa por tercera vez, y Wei Ying todavía no puede encontrar su cuchillo.

—¡Lan Zhan!— Wei Ying grita, entrando en pánico aún más, —¡Lan Zhan!

¡Su bota! Ha encontrado su bota entre el desorden de material, ahora solo tiene que encontrar el 一

¡Pum!

El sonido hace que sus huesos traqueteen. Wei Ying se lanza hacia adelante, acurrucándose en una bola, con las manos sobre las orejas.

¿Qué mierda fue eso? Wei Ying está temblando. ¿Está muerto? ¿Lo atrapó la criatura? No, solo le zumban los oídos por el sonido. Él está bien. Lentamente, se sienta, todavía acurrucado sobre sí mismo por seguridad. Lan Zhan está aquí. Él también está bien. Está sosteniendo algo brillante, metálico. Wei Ying lo mira fijamente, sin comprender, hasta que entrecierra los ojos en las sombras y se da cuenta de que es... una pistola.

Bien. Eso explica mucho. Wei Ying parpadea con fuerza y ​​respira muy lento. Todo esta bien. Entonces Lan Zhan le disparó a la criatura, ¿dónde está ahora? ¿Está muerto? Mira a su alrededor, pero aún es medianoche y no puede ver nada.

—¿Lan Zhan?— Wei Ying jadea, una pequeña parte de él está aterrorizada de que se esté desangrando estoicamente y de que también vaya a perderlo, —¿estás bien?

—Estoy bien.

Wei Ying asiente para sí mismo. Por supuesto. Lan Zhan está bien. Tiene un arma, por supuesto que está bien.

A medida que la audición de Wei Ying regresa gradualmente a él, se da cuenta de un jadeo húmedo y enfermizo. Entonces, el monstruo sigue vivo. El impacto se asienta en algo dentro de él, algo oscuro e inesperado. Algo feo. ¿Cómo se atreve esta cosa a atacarlos mientras duermen? ¿Y ahora ni siquiera puede morir correctamente? Wei Ying se levanta y da unos pocos pasos hacia su forma corpulenta, levantando el cuchillo sobre su cabeza.

—Vete a la mierda—, sisea.

La punta del cuchillo entra en una parte blanda, ¿tal vez un ojo?, y Wei Ying lo empuja más profundo, lo retuerce , hasta que la horrible respiración se detiene.

Se siente bien. Se siente bien saber que los monstruos pueden ser asesinados.

—Wei Ying—, le llama suavemente Lan Zhan. Como un zombi, Wei Ying se tambalea hacia él y cae en sus brazos. No se dio cuenta de que estaba temblando hasta que su cuerpo se presionó contra el de Lan Zhan, tan firme debajo de él.

Lan Zhan le acaricia la espalda de arriba abajo, tranquilizándolo. Wei Ying agarra las solapas de su chaqueta con fuerza, vibrando fuera de su piel. No quiere que lo calmen. Él está demasiado vivo en este momento. El necesita.... algo más.

¡No puede dejar que esta oportunidad se le escape de las manos! ¡Esta noche demuestra que podrían morir en cualquier momento!

Esto es por la humanidad, piensa Wei Ying, inclinándose para besar a Lan Zhan.

Por un momento terrible, Wei Ying piensa que Lan Zhan no le devolverá el beso. Es como una estatua. Wei Ying gruñe, tirando con más fuerza de su ropa con frustración, presionando sus labios con más fuerza contra los de Lan Zhan, y finalmente Lan Zhan parece romperse. Sus brazos rodean su cintura, atrayéndolo más cómodamente hacia su regazo, y sus labios se mueven contra los de Wei Ying, guiándolo.

—Wei Ying...

Lan Zhan lo acuna y lo constriñe todo a la vez. Es lo suficientemente fuerte como para evitar que Wei Ying se disuelva en el aire, sus manos aprietan su cintura con fuerza para mantenerlo unido.

Si. Esto es todo, piensa Wei Ying, esto es lo que necesitaba.

Sabe, a través de la neblina y la desesperación, que está haciendo ruidos extraños. Ruidos que de otro modo le harían querer cavar un hoyo y meterse en él para siempre. ¡Aunque no puede evitarlo! Lan Zhan ya no se lo toma con calma, su lengua está moviéndose dentro de la boca de Wei Ying, que está abierta porque está jadeando, y se siente tan bien. Toda la frustración, el miedo y la ira se han fusionado en algo diferente, algo más, algo caliente que quema bajo su piel .

Wei Ying se mueve, tratando de acercarse, más y más, pero en su lugar se desliza hacia un lado. La mano de Lan Zhan lo agarra, lo sostiene, los dedos alrededor de su muslo.

Wei Ying pensó que se sentía vivo antes. El Wei Ying de hace cinco minutos era un idiota; ¡Él no sabía cómo se siente 'vivo', en absoluto! La sangre zumbando, la piel en llamas, Wei Ying se zumba febrilmente contra Lan Zhan, su polla se arrastra contra el estómago de Lan Zhan. Esas enormes manos encuentran su trasero, controlando la forma en que se mueve contra él.

Los besos de Lan Zhan tienen un filo, una nitidez que va más allá de los mordiscos. Es como si él tampoco pudiera tener suficiente de Wei Ying, como si ambos necesitaran esto. ¿Está pensando lo mismo? ¿Lan Zhan cree que esta podría ser su oportunidad de salvar a la humanidad también? La forma en que está rasgando la camisa de Wei Ying no puede significar otra cosa.

Tal vez si Wei Ying estuviera en su sano juicio, le importarían más los gemidos que hace cuando Lan Zhan se roza los dientes en el cuello. ¡Si hay más de esas cosas por ahí, podrían escucharlo, seguro! Pero el pensamiento ni siquiera se le ocurre.

—Mnnn, fuera—, Wei Ying hace una pausa para decir, tirando del cuello de Lan Zhan, —fuera, ahora.

Con la ayuda de Lan Zhan, se quita la camisa. Su impaciencia significa que queda atrapado en su piel, el tirón de la tela lo corta a pesar de que es suave y está muy gastado. La propia ropa de Lan Zhan sigue después, perdida en algún lugar entre los montones de ceniza para que la encuentren por la mañana.

—¡Ahhh!— Wei Ying no tiene palabras. Puede sentir el balanceo del cuerpo de Lan Zhan debajo de él, mientras se mueve y respira. Más importante aún, puede sentir la polla del alfa a través de sus jeans, presionándose contra él.

Lan Zhan cae hacia atrás, sujetando con fuerza a Wei Ying, luego rueda hacia un lado para quedar debajo de él, todavía enredado en el desorden de la tienda rota y el material del nido. Lan Zhan no es mucho más grande que él, pero se siente enorme, elevándose sobre él, bloqueando la noche invisible.

Aun así, Lan Zhan no se está moviendo lo suficientemente rápido. Impaciente, Wei Ying tira del cuerpo de Lan Zhan más cerca, usando toda su fuerza para sujetar a Lan Zhan contra él, para que no pueda liberarse y dejar que el aire fresco se interponga entre ellos. No es suficiente. Nada es suficiente; incluso cuando Lan Zhan desliza una mano por la parte delantera de sus jeans, ¡no es suficiente! Wei Ying sabe cómo quedar embarazado, ¡y esto no es suficiente!

—¡Lan Zhan!— Wei Ying grita, arqueándose contra la presión burlona, ​​arañando sus hombros con uñas romas, —¡Vamos, por favor, Lan Zhan!

Lan Zhan no tarda mucho en cansarse de esto. Toma las muñecas de Wei Ying con una mano y las sujeta por encima de su cabeza, usando la otra para quitarle los jeans. En su mayoría apagados: cuelgan de un tobillo, se olvidan rápidamente.

Lan Zhan apenas se molesta en probar que Wei Ying está mojado, antes de desabrocharse los pantalones y sacarse la polla. Wei Ying no puede verlo bajo esta luz, pero sabe que es grande. Lo sabría, incluso si no tuviera la imagen posterior grabada en la parte posterior de sus párpados: es Lan Zhan, así que, naturalmente, es grande. Wei Ying se queja, sonando exactamente como los omegas en celo de los videos que solía ver con sus amigos. ¡Ni siquiera ha sido follado todavía!

Lan Zhan no pierde más tiempo, presionando la punta de su polla entre las mejillas resbaladizas de Wei Ying y empujando hacia adentro. El cuerpo de Wei Ying le abre paso, abriéndose alrededor de la intrusión a pesar de la distante descarga de dolor. Eso es todo. Realmente está sucediendo. La boca de Wei Ying cuelga abierta, sus ojos cerrados con fuerza.

Para cuando está completamente sentado, la respiración de Lan Zhan es irregular y húmeda en la mejilla de Wei Ying. Wei Ying todavía quiere más. Se siente como un corredor en una carrera en la que la línea de meta sigue moviéndose. El es codicioso. Nada de lo que Lan Zhan le dé será suficiente, siempre querrá más y más de él.

No hay tiempo para adaptarse a ser abierto; Lan Zhan comienza con pequeños empujones apenas visibles y se vuelve más rápido. Sostiene a Wei Ying por la rodilla, estirándolo más y permitiendo que Lan Zhan alcance aún más su interior.

—¡Ahnn-nn-nn! Lan Zhan, es—ah—es— su cuerpo está siendo empujado lo suficientemente fuerte como para que Wei Ying luche por pronunciar las palabras. ¡Cómo se suponía que iba a saber que sería así! ¡Nunca ha hecho esto con nadie, y mucho menos con un alfa como Lan Zhan! Todo su mundo se reduce a ese sentimiento, ese estiramiento, y todo lo demás se desvanece en un ruido de fondo.

—Qué—. Es la primera palabra que pronuncia Lan Zhan desde que Wei Ying lo besó, y es áspera por el esfuerzo. Wei Ying apenas puede ver un destello, donde están sus ojos, pero puede sentir el peso de su mirada, —¿qué?— repite.

—Uhnn... ¡demasiado!— Wei Ying gime, apretando fuerte a Lan Zhan entre sus muslos. ¡Es demasiado, pero todavía no es suficiente! Necesita que Lan Zhan entre en él y, más que nada, necesita su nudo.

La única advertencia que da Lan Zhan es un suspiro entrecortado, antes de soltar sus muñecas y tirar de él más cerca por la cintura. Es todo lo que Wei Ying puede hacer para aferrarse a su querida vida, mientras Lan Zhan lo folla. Incluso a través de la neblina que ha descendido sobre él, tiene la presencia de ánimo para sentirse avergonzado por los sonidos húmedos y aplastantes que Lan Zhan le está arrancando.

—Lan Zhan—, jadea, —¡L-Lan Zhan, sí, Lan Zhan!— su nombre se confunde, cuanto más lo dice, —¡por favor, por favor!

Siente que Lan Zhan se tensa y percibe el cambio antes de que suceda; La polla de Lan Zhan comienza a hincharse en la base, el escozor aumenta hasta que Lan Zhan apenas puede moverlo. Sin embargo, sigue moviéndose, moliéndose contra él, perdido en el instinto. El instinto también debe ser lo que obliga a Lan Zhan a inclinarse sobre él, a rozar con los dientes la parte más blanda de su cuello, a morder.

Wei Ying se sacude, corriéndose sobre sí mismo con un gemido golpeado. No mucho después, el dolor comienza a quemarse a través de la falta de definición del momento, y Wei Ying se retuerce debajo de Lan Zhan (¡quien aún no se ha corrido!)

—¡Lan Zhan!— suplica, arqueándose hacia él, empujando hacia atrás contra Lan Zhan mientras se folla inútilmente, —¡Lan Zhan, por favor, lo necesito! Tienes que-! Necesitas-! ¡Lan Zhan, anúdame, por favor! ¡Por favor, tienes que ponerme un bebé! ¡Ah! 

Los dientes de Lan Zhan se aprietan aún más cuando se corre, gruñendo.

Wei Ying no esperaba sentirlo, caliente y brotando dentro de él. ¡Hay tanto! Agarra la espalda de Lan Zhan, abrumado por todo. No solo la oleada de semen inundando sus entrañas, sino también la oleada de emoción. ¿Debería estar llorando? ¿Debería estar riéndose? Él quiere hacer ambas cosas; quiere gritar al respecto; quiere correr millas; ¡Quiere quedarse aquí para siempre!

Wei Ying recuerda un 'experimento' que hizo cuando tenía unos trece años, en el que vació un paquete completo de mentos en una botella de cola. En ese momento había sido emocionante, desordenado, peligroso, casi. Nunca esperó relacionarse con esa botella, más de una década después.

Finalmente, Lan Zhan relaja la mandíbula y se sienta encima de él, jadeando con fuerza.

Lame la marca de reclamo, disculpándose, luego apoya su mejilla sobre ella. Tal vez no fue su intención hacer eso. Probablemente fue solo el calor del momento. Sin embargo, probablemente esté bien; afirmar que las mordeduras solo son permanentes si son mutuas. Está bastante seguro.

Lo más importante es algo que no se desvanecerá con el tiempo: ¡lo logró! ¡Su plan funcionó! Se exalta en el sentimiento. Entre ellos, Wei Ying desliza su mano para descansar sobre su estómago, palmeando la suave piel allí. No está distendido, pero parece que debería estarlo. Lan Zhan realmente lo llenó bien.

Sin embargo, todavía existe la posibilidad de que no funcione, por lo que tendrá que asegurarse de hacer esto nuevamente, por si acaso. Tal vez, como, tres o cuatro veces. Sólo para estar seguro. De hecho, puede sentir la necesidad de hacerlo de nuevo, hirviendo a fuego lento en el borde de su conciencia, su piel enrojecida y cálida.

Pasa sus manos por el cabello húmedo de Lan Zhan, incapaz de calmarse. El subidón de preservar la propia especie es una gran droga, piensa Wei Ying, riendo a carcajadas. El movimiento despierta a Lan Zhan, y presiona más besos fuertes en su mandíbula, y la risa de Wei Ying se convierte en un gemido.

.

Amanece mientras Lan Zhan se folla a Wei Ying por tercera vez; esta vez, Wei Ying está boca abajo en las ruinas de su nido, por lo que apenas se da cuenta. Solo se le ocurre cuando Lan Zhan le da la vuelta mucho más tarde, para follárselo lentamente, y puede verle la cara.

Las mejillas de Lan Zhan están rosadas y mechones de cabello se le pegan a la cara. Wei Ying nunca lo había visto sudar antes, le gusta. Se balancea suavemente contra él, casi lo suficientemente lento como para que estén como... ¿acurrucados? Mareado, le sonríe a Lan Zhan y se coloca un mechón de cabello empapado detrás de la oreja.

—¿Me vas a anudar de nuevo?— pregunta, sin aliento. Si lo hace, será la cuarta vez. Sin embargo, Lan Zhan está claramente exhausto. —¡mi alfa, tan bueno! Tan bueno conmigo...—, palmea la mejilla de Lan Zhan.

Wei Ying se pregunta si podría manejar gemelos. Bueno, independientemente de eso, definitivamente puede llamar a este plan un éxito. Se estremece, notando finalmente el frío de la mañana, así como la espesa humedad que cubre su piel. Trozos de tela de la tienda se pegan a él, pegados en su lugar por el sudor y semen.

Está empezando a darse cuenta de que simplemente... se arrojó sobre Lan Zhan. Usó un poco la alta tensión de las noches de lista y lo manipuló para que lo follara durante horas y horas. Él también está dolorido y sabe que solo se sentirá peor cuando Lan Zhan se detenga por completo.

Tal vez si lo pide muy amablemente, ¿Lan Zhan lo cargará? El pensamiento lo hace reír. Ofendido por algún desaire imaginario, Lan Zhan gruñe y comienza a empujar con más fuerza, gesticulando en su cuello a modo de advertencia.

—¡No, no, estaba bromeando! ¡Lan Zhan, por favor no lo hagas! ¡No puedo, ah, no puedo soportar más!

Esta vez duele de verdad. Antes, el aguijón se nublaba detrás de lo que sea que lo cubriera (su primer celo en más de un año, se está dando cuenta. ¿Cómo no se dio cuenta antes?), pero esa neblina se ha desvanecido desde entonces. Se siente exprimido. Su agujero duele.

—¡Lan Zhaaan, ah! Eres demasiado rudo—, se queja, —eso duele, ¡soy delicado! ¡Ah, ah, oww! Piensa en lo que estás haciendo, ¿realmente quieres lastimarme?— Sin embargo, Wei Ying está demasiado cansado para hacer más que un esfuerzo simbólico para empujarlo.

Lan Zhan no lo vuelve a anudar, pero él sí viene, y Wei Ying llega a ver su rostro mientras sucede esta vez; sus cejas (rectas y hermosas) se juntan y su labio (rojo e hinchado) se abre. No queda mucho en él, y Wei Ying está tan descuidado y mojado que apenas siente nada. Se retira con una mueca, sintiendo el dolor también, y limpia la humedad acumulada en los ojos de Wei Ying.

—Owww—, Wei Ying hace un puchero, tratando de verse lo más lamentable posible.

Lan Zhan respira hondo y mira hacia otro lado. Wei Ying, que estaba mirando su rostro como si pudiera revelar los secretos del universo, ve que su expresión cambia. Él sigue sus ojos.

Oh sí.

Eso sucedió.

Nunca antes había visto a uno de ellos tan cerca a la luz del día, es feo. De repente, Wei Ying es muy consciente de su desnudez y del estado empapado de su cuerpo.

Envuelve los restos de su nido, húmedo y pegajoso como está, a su alrededor. Lan Zhan no se molesta en cubrirse por unos momentos, sino que opta por mirar el cadáver. Está tan concentrado que Wei Ying cree que está a punto de abalanzarse sobre él.

Cuando se mueve, finalmente, es para encontrar su propia ropa. Sus anteojos estaban guardados de manera segura dentro de su bota y, afortunadamente, ilesos.

Ver a Lan Zhan vestirse solo es más entretenido que ver a un extraterrestre muerto (aunque lamenta que Lan Zhan tenga que cubrirse el cuerpo, tiene un cuerpo tan bonito que ni siquiera pudo ver más que un vistazo de su trasero... ) pero mantiene medio ojo en el cadáver de todos modos. Es ilógico: si no se levanto y los ataco mientras estaban.... ocupados, entonces ¿por qué lo haría ahora?

Y, sin embargo, Wei Ying no puede evitarlo. Tal vez es solo porque todavía está todo confundido por el calor. Nunca ha tenido uno tan rápido; antes del meteoro, recuerda haber sufrido sofocos y mareos durante al menos una semana cada vez. Debería agradecer a Lan Zhan por 'ayudarlo' con eso, supone, pero no lo hará ahora: es demasiado pronto. Todavía necesita un minuto, o una hora.

—Quería preguntar—, comienza Wei Ying, mirando a su alrededor en busca de su propia ropa ahora, —¿desde cuándo tienes un arma?

—Siempre—. Lan Zhan lo mira.

—Bueno, ¿por qué no me dijiste?— Wei Ying dice: —¿No crees que es importante que conozca nuestras defensas?

—Supongo—, tararea Lan Zhan.

Wei Ying se viste, haciendo pucheros cada vez que cambia de posición y se desgarra mal un músculo. ¡Es tan tierno! ¡Lan Zhan realmente hizo un número con él! Cada vez que se mueve, más semen sale de él, es realmente vergonzoso y espera que Lan Zhan no pueda decirlo. Ha llegado a todas partes en realidad. ¿Eso es normal? ¿O es Lan Zhan simplemente increíble?

—¿Alguna vez has matado una de estas cosas antes?— Wei Ying pregunta, desesperado por redirigir sus pensamientos.

—No. Nunca uno se acercó lo suficiente como para ser una amenaza.

—Oh—. Tal vez las feromonas alfa también funcionen en estas cosas: incluso un extraterrestre sabría que no debe atacar a Lan Zhan. Él es demasiado asombroso.

—Parece una vaca mutada, o tal vez un caballo. Tiene pezuñas—, observa Lan Zhan, acercándose y empujándolo con el pie.

—¿Crees que todos son así? ¿Mutaciones, no extraterrestres?

—No sé.

—Tal vez sean ambas cosas: podría ser una espora alienígena que entró en su sistema y causó irregularidades genéticas.

—Entonces, ¿por qué no nos afecta?— Pregunto Lan Zhan.

—¿No afecta a los humanos? ¿Las esporas ya se extinguieron? Muchas razones—, se encoge de hombros Wei Ying, que no está realmente interesado en el argumento. Está mirando la carpa rota y preguntándose qué pueden hacer al respecto. El nido está hecho jirones, y ni siquiera pueden culpar a la criatura por todo. También hay residuos escamosos por todas partes. Él suspira.

—Aquí—, la voz de Lan Zhan está muy cerca de repente. Wei Ying se da vuelta para encontrar a Lan Zhan sosteniendo un termo lleno de agua, —probablemente estés deshidratado—, explica, cuando Wei Ying no hace ningún movimiento para tomarlo.

—Oh—, dice Wei Ying, tomando un sorbo, —¡gracias!— Tenía sed, en realidad . ¡Qué amable de su parte!

Pasan su tiempo desplegando la tienda, intentando repararla y limpiar las manchas de ya sabes qué. Wei Ying tuvo el momento más difícil con esa parte, pero Lan Zhan parece no pensar en eso en absoluto. Como si fuera cosa de todos los dias para él.

Tal vez encuentra omegas como Wei Ying en la naturaleza todo el tiempo, y los ayuda a todos a superar su celo. ¡Solo que esta vez, Lan Zhan probablemente no esperaba que hubiera sido un plan premeditado para salvar el planeta! ¡Él no tiene idea!

De todos modos, los dos en su mayoría se lo toman con calma ese día. Lan Zhan deja que Wei Ying toque y pinche al monstruo (Lan Zhan tiene razón, tiene pezuñas. Extraño. Wei Ying desearía poder dibujarlo) y hace la mayor parte del trabajo duro él mismo. Wei Ying trata de no sentir que extraña profundamente una parte de sí mismo, ahora que Lan Zhan no lo sostiene, y en su lugar se enfoca en las cosas buenas.

Definitivamente está embarazado. Tiene que estarlo, después de todo estaba en celo. Estar en celo multiplica la probabilidad de concepción por un amplio margen. Su cuerpo también debe haber estado en el plan, con una sincronización tan perfecta.

De vez en cuando, mientras descansa (está cansado, ¿de acuerdo? Y si se acuesta boca arriba, le duele el trasero, por lo que tiene que acostarse boca abajo y apoyar la mejilla en la mano para poder vigilar. sobre lo que está haciendo Lan Zhan) verá cómo la espalda de Lan Zhan se mueve desde atrás y se deslizará en una espiral de memoria. La forma en que se sintió cuando Lan Zhan lo sujetó y no se detuvo hasta que Wei Ying estuvo tan lleno que estaba a punto de estallar...

Es difícil mantenerse en la tarea. Especialmente cuando está constantemente goteando a través de su ropa. Lan Zhan, por otro lado, parece no tener problemas para continuar con las cosas. Él es tan competente.

¡Incluso lleva un kit de costura de emergencia en esa bolsa sin fondo que tiene! ¿Dónde encontró uno de esos? Tal vez Wei Ying debería haber buscado uno en el sótano de los Jiang; parece el tipo de cosas que podrían haber preparado. Realmente no había estado pensando con claridad en ese momento, y no es como si supiera cómo usar una aguja e hilo de todos modos. Sus especialidades están en otra parte. Algun lado. Es una pena que Wei Ying no tenga que cargar nada pesado, de lo contrario podría mostrar su fuerza. Lan Zhan seguramente estaría impresionado.

Mientras tanto, solo tendrá que observar a su amigo alfa mientras hace que todo vuelva a ser mejor.