𝟡. Welcome NEW Home

Hola, continuo la historia, aunque esta vez, será desde el punto de vista de Taehyung ya que según lo que me contaron, en la línea del tiempo, él va primero, luego os cuento lo sucedido con nuestro protagonista K-82.

Hoy hace un día que se llevaron a Jungkook... No me siento con muchos ánimos hoy...  Pero igualmente seguí con mi rutina, me desperté por culpa del despertador, me duché, me vestí, preparé mi mochila y me fui a la universidad.

Esta vez... No desayuné, no me apetecía, puede que luego pase un poco de hambre pero... Podré aguantar.

Al llegar, como siempre, Jimin me vio y vino conmigo, él se veía animado, como siempre, todo lo contrario a mí.

- Tete - me llamó mi mejor amigo

Yo sólo le miré y le dejé ver como de mis ojos salían algunas cuantas lágrimas.

- Tae... No llores.... Porfavor - dijo Jimin para después abrazarme - dime que esas pijas no te hicieron nada...

- ¿que? No... No no no.... Tranquilo, no es eso - dije para después limpiarme las lágrimas

- estás triste por lo de Jungkook, ¿no? - me recordó y yo simplemente asentí con la cabeza.

Más lágrimas comenzaron a salir de mis lágrimas, lo ignoré y comencé a caminar hacia mi clase, siendo seguido por Jimin, que no le tomaba importancia por dos razones, la primera, es mi mejor amigo y la segunda, vamos a la misma clase.

Y... ¿os acordáis de las chicas que le hacían bullying a Taehyung? Bueno, justo hoy volvieron a molestar...

- ¡Miralo! Esta llorando - dijo Ji-Eun mientras se reían para burlarse de mi

- seguro que su noviecito o lo que fuera de la última vez, le ha abandonado - dijo Jennie mientras también reía - Que es normal porque eres horrendo

Aquel comentario hizo que las chicas se rieran más fuerte, haciendo que retumbaran sus voces en mi cabeza.

- callaros... - dije en un susurro mientras cerraba mis manos en puños

No las aguantaba más...

- oh, ¡ya se que ocurrió! Tiene una novia mejor que tú, ¿a que sí? - dijo Chaeyoung, o como muchos conocen como Rosé

- seguro que sí, te habrá visto desnudo y se habrá ido con su chica, nunca serás como las mujeres. - dijo Lalisa con un tono borde y con desprecio

Respiré hondo para intentar controlarme, pero no funcionaba, lo único que pude controlar fue no pegarlas.

- dije... ¡Que os calleis! ¿Estáis sordas? Dejadme en paz. No soy vuestro maldito muñeco antiestrés.

- ¡tú a mí no me grites bola de grasa! - gritó Hyuna

Jimin, aunque se mantuvo todo el tiempo en silencio, ahora se puso a mi lado y trató de calmar la situación.

- ya basta, porfavor - dijo él, tratando de ser pacífico.

Pero todo eso que él intentaba, yo lo destruí por así decir.

- No estoy de humor para que estéis tocándome los cojones de esta forma. ¡Os gritaré todo lo que me de la gana! - hice un pausa y continué - ¡No sois nadie para seguir tratándome así! ¡Os odio! - finalmente al terminar las empujé con rabia y me fui directo a mi clase.

Jimin suspiró y me siguió, se sentó a mi lado y simplemente me abrazó.

Jamás dije esto antes pero, me enamoré de Jungkook y ahora ya es tarde para haberme dado cuenta.

- Fui tan tonto al haberme enamorado de él... Jimin... Soy tan tonto... - admití

- no, no fuiste tonto Tae, tú no puedes elegir de quien enamorarte, además ese Jungkook era muy guapo, todo el mundo podría enamorarse de él - dijo Jimin para animarme

- lo sé... Pero la vida es tan injusta, mi tío dijo que me podría hacer daño, pero yo sé y puedo asegurar que Jungkook jamás.... Jamás me haría ningún daño - lo afirmé

Yo podría poner la mano en el fuego defendiendo aquello que acabo de decir. Estoy muy seguro de que no me haría daño, me protegería, me cuidaría.

- vayamos a clase - dije mientras me adentraba a una clase- para una vez que vengo...

Mi comentario hizo reír a Jimin y segundos después noté como me cogió de la mano impidiendome seguir andando.

- esta no es la aula que nos toca ahora - dijo entre risas

- ah... Y... ¿Dónde toca? - Pregunté un poco confundido

Jimin negó con la cabeza y comenzó a andar hacia el segundo piso, la verdad sí que estaba despistado hoy...

Cuando estábamos llegando un chico se nos acercó a nosotros y me miró... Se quien es... Es el novio de Hyuna, Hyojong... Espero no me haga nada...

- Hola... - nos saludó Hyojong

Nosotros confundidos también le saludamos, al menos yo pensaba que tenía malas intenciones

- Tae... Te he notado triste... Si quieres al terminar las clases podemos ir a la cafetería... Y tal vez así... Te olvides un poco de los problemas - dijo amablemente

- oh... Mm... Está bien - dije mientras un pequeña sonrisa aparecía en mis labios

- por cierto, toma, esta carta no quiero que la leas, al menos no hasta que estés a punto de irte a dormir, ¿vale?

Yo sólo asentí y él me dio un pequeño sobre que seguramente en su interior se encontraba la carta

Miré a jimin y él simplemente sonreía, supongo que se alegraba de que al menos ahora pudiera salir con alguien que no fuera él.

- Oue Hyojong... Perdona eh, pero tenemos que ir a clase ya...

- oh, sí, perdoname a mí - dijo para después despedirse de forma simpática con nosotros

Tras aquel extraño encuentro, cada uno siguió su camino, él se fue a su clase y Jimin y yo a la nuestra.

Cuando llegamos a nuestra clase, nos sentamos al fondo, juntos, como siempre. Dejamos nuestras cosas  y sacamos lo importante de la clase, es decir, el libro, la libreta y el estuche.

- al parecer irás con él luego, pues cuando puedas quedas conmigo - dijo Jimin sin malas intenciones

Aunque yo creí que se lo había tomado a mal... Pensaba que se había molestado.

- oh, perdón... - me disculpe primero de todo - después puedes venir a mi casa si eso y... vemos una peli, si quieres claro - le ofrecí a mi mejor amigo

- ¿Que? No te disculpes Tae, de hecho me pone feliz que vayas con él, así te distraerás y también está bien que hagas nuevos amigos, ¿no? - me dijo Jimin

Eso hizo que saliera una sonrisa de mi cara, me ponía tan feliz oír aquello de mi mejor amigo... Le quiero tanto...

- pero... ¿Vendrás? - dije después de varios segundos

- pues claro alien tonto - dijo Jimin haciéndome reir

Nos quedamos varios segundos en silencio ya que no teníamos ningún tema de conversación y hablar de Jungkook no creo fuera buena opción.

- Y... Hyojong es mono, ¿no te parece? - Jimin rompió ese silencio

Yo le miré atónito, ¿le gusta Hyojong?, es decir, es mono sí, pero no sé.

- a ver... Sí, pero no es el tipo de chico que a mí me gusta - dije

- ¿Por qué? - me preguntó

Simplemente alcé los hombros. Y yo que sé, no lo sé todo, ¿por qué no te gusta alguien? Pues eso.

- pobre chico, seguro que lleva años detrás de ti, además - hizo una pausa dramática - es guapo, amable, cariñoso.... ¿Que tiene de malo? - siguió hablando de Hyojong

- no sé.... - dije y luego solté un suspiro pesado

- mi TaeTae, no te quiero estresar, pero cuando superes a Jungkook... Yo le daría una oportunidad - me dijo Jimin

¿No le gustaba a él? Este Jimin me confunde.

- Tae, eres muy alegre, ¿me oyes? No quiero que pierdas esa alegría solo por... Por un androide

¿Androide? Jungkook no se parecía en nada a un androide... Ya empezamos de nuevo

- No le llames androide, ya te dije que no lo es, es como nosotros

La clase empezó y Taehyung tenía los ejercicios hecho, ¿por qué lo recalco? Bueno, pues porqué él pocas veces iba a clase y cuando iba era porque había examen, ¿y los deberes? Nunca los tenía hechos, y ahora era gracias a Jungkook que los tenía.

La verdad es que aquí toda la clase se quedó flipando con él. Y así pasaron todas las horas, e incluso hizo el examen, que como no saque 10 es para matarlo.

La quedada con Hyojong fue exitosa, la amistad entre ambos creció, aunque la verdad es que yo nunca llegué a conocerle, en fin... La quedada no hay nada relevante, y Tae tampoco es que me contara detalles.

Cuándo me contó fue a partir de que llegó a casa junto a Jimin, que antes habían decidido ir a ver una película.

Ahora mismo, para poneros en contexto, se encuentran en la habitación de Tae viendo una película.

Cuándo de repente, escucharon la puerta abrirse y luego cerrarse. Eso asustó a los dos estudiantes, ya que pensaban que sería algún ladrón o a saber que o quien.

- tae... ¿Quién es? - me preguntó Jimin en un susurro

- no lo sé Jimin, no tengo rayos x - dije también susurrando, haciendo que incluso en esta situación ambos soltaramos una pequeña risa

Tras conseguir callarnos, me levanté y me dirigí al salón con mucho silencio. Me asomé y vi a un androide.

Así que, voy a suponer que él es el androide que mi tío me envió... Salí de mi "escondite" y me dirigí a él.

- hola.... ¿Quién eres? - le pregunté

Ese androide me miró y sonrió amablemente.

- perdona, pensé no había nadie, soy el androide M-82, encantado de conocerte - se presentó tratando de ser lo más amable posible.

Y yo.... La verdad es que no pude contenerme, las lágrimas salieron de nuevo, su nombre era demasiado parecido a K-82, a Jungkook.

Noté como el androide se acercó rápidamente y me abrazó, no me importó, simplemente escondí mi cara en su pecho y me imaginé que era Jungkook quien me abrazaba.

- ey... ¿Necesitas algo para estar feliz? - dijo, y eso que Jungkook desapareciera de mi imaginación

- n-no...

- ¿como quieres llamarme? - siguió hablando

Me separé de su abrazo y me limpié las lágrimas....

- ¿Sukhyo? - dije para después alzar los hombros

La verdad es que no era algo que me importaba demasiado, simplemente sería un nombre.

- ven... Te presentaré a mi mejor amigo... - dije para seguidamente ir a la habitación donde Jimin se había quedado dormido - Jimin, despierta

Le moví un poco y él casi sale disparado del susto, ni que le hubiera pegado, que exagerado.

- ¿quién es ese? - Preguntó Jimin

- Sukhyo, encantado - dijo el androide mientras hacía una reverencia

Yo me mantuve en silencio hasta que recordé que él había sido enviado por mi tío.

- Sukhyo.... ¿Sabes algo de Jungkook?... K-82.... - Pregunté con esperanzas

El silencio inundó mi habitación, se podría decir que inundó toda la casa.

- No - comenzó a hablar el nuevo androide - sólo se... Que ahora se fue a trabajar fuera, pero nada más, lo siento

- oh, no te disculpes, no es culpa tuya - dije amablemente y sonreí un poco

A partir de aquí... Las cosas cambiaron mucho para Taehyung, pero también para Jungkook.

Como M-82 dijo, Jungkook se fue a trabajar fuera, pero no era tan fuera como decía, se encontraba por las afueras de Seúl, ¿donde? Pues en un campo militar.

Os preguntaréis, que hacía ahí, bien, pues... El tío de Taehyung decidió utilizarlo para que entrene a los militares ya que no haría falta que durmiera.

Me encuentro ahora mismo, haciendo una prueba de resistencia, resisto mucho, obviamente, soy una máquina... Los entrenadores son muy duros, pero, yo seré mejor, lo prometo.

Estoy esforzándome tanto... Que... Que mi piel.... Empieza a desaparecer por diferentes partes del cuerpo, no he podido recargarme todavía, creo que eso están viendo, la resistencia de mi batería.

Al terminar esto, espero al menos, poder descansar en un lugar cómodo.

En cuanto menos lo espere, me hicieron parar, ya era hora...

- K-82, ven aquí. - dijeron seriamente

Yo simplemente, obedecí, no tenía otra, ¿no?, me acerqué y este me comenzó a decir que las pruebas que había hecho hoy, las había superado.

- K-82, pronto serás uno de los comandante

No supe que contestar, así que me mantuve en silencio, de todas formas, tampoco me había dado ninguna orden.

- puedes ir a descansar K-82 - me dijo

Y me lo dijo, pero no me dijo donde podía descansar así que... No tenía más remedio que preguntar...

- ¿tengo una habitación para mí?

La respuesta fue un rotundo 'no'. Era de esperar...

- ¿una habitación para un androide? Eso es muy gracioso, duerme en algún banco, y si llueve te puedes meter al edificio, en el trastero - me explicó

Yo asentí con la cabeza y espere a que él se fuera, para así poder retirarme, que sucedió no muchos segundos después, el comandante se fue y yo... Me fui para ver el lugar ya que todavía no me habían dejado mirarlo.

Llegué a un gimnasio, no había nadie dentro, así que seguí mi camino. Encontré el comedor, tampoco había nadie... Así que... Seguí andando hasta que encontré una enfermería.

Entré allí dentro y había una mujer... Esa mujer era de tesitura delgada, era muy guapa, tenía el pelo corto y castaño, como por los hombros. Sus ojos eran marrones claro y eso hacía que diera el efecto de que fueran de color naranja, aunque obviamente no era así.

- Hola, ¿eres nuevo? - Preguntó la enfermera

- ¿Yo? Sí... Perdón, sólo estaba mirando el lugar... - dije mientras me disponía a salir

- ¿como te llamas? - me preguntó con curiosidad

Aquello me hizo girarme a mirarla, me quedé pensando en cuál era mi nombre, no porqué no lo supiera... Sino... Porqué no sabía si ahora me llamaba Jungkook o K-82.

- K-82 - dije yo, supuse que era lo más correcto - ¿cuál es tu nombre?

- ¿él mío? - dijo con una sonrisa amable - Dessa, mi nombre es Dessa, encantada de conocerte

Yo sonreí, creo que con ella podría confiar a partir de ahora, al menos tenía a alguien de mi lado...

Tras haber estado conversando un buen rato, K-82 se fue al patio de nuevo. Y buscó un banco, no quería desobedecer ninguna orden de sus superiores.

Al llegar se recostó y sus sistema se programó para apagarse temporalmente y así poder recargar su batería.

Cuándo pasaron las horas, empezó a llover, seguramente os preguntéis por qué se todo esto si K-82 estaba apagado, bueno, como dije al principio de la historia, al final lo sabréis, no os preocupéis, sólo os digo, que a partir de ahora, muchas cosas las he vivido yo personalmente.

Continuo...

Comenzó a llover y el sistema de K-82, se encendió ya que si se mantenía apagado bajo la lluvia, podría estropearse.

Mierda, me levanté rápidamente y busqué la entrada al edificio, y cuando lo encontré entré rápidamente.

Estaba empapado, que mala suerte joder, no es por ser pesimista pero estoy empezando esto del servicio militar fatal, ojalá que no sea así en los próximos días porque si es así, terminaré haciendo la autodestrucción.

Esperemos que eso no llegue a suceder...

- tú. - escuché una voz grave detrás de mí - ¿que haces aquí dentro?

Me quedé en silencio varios segundos, aquello me había sorprendido bastante, pero simplemente me giré y le mire.

- comenzó a llover señor, me dijeron que si llovía podía entrar y dormir en... En el trastero... - le expliqué calmadamente

El militar simplemente asintió con la cabeza y señaló una puerta para seguidamente marcharse y dejarme solo de nuevo.

Suspiré pesadamente y me acerqué a aquella puerta, traté de abrirla pero... Estaba cerrada con llave.

¿Por qué tengo esta mala suerte?

Me giré y miré alrededor, me di cuenta que había un pequeño armario con puertas de cristal donde se veían diferentes llaves guardadas ahí.

Me acerqué y lo abrí para seguidamente buscar la llave del trastero, no fue difícil encontrarla, así que, con la llave, volví a la puerta y abrí.

Podría ser peor.... El lugar no es demasiado... Amplio, os cuento, hay dos estantes, uno al lado del otro, todo está completamente lleno de cosas, el único problema era que estaba desordenado y sucio; así que tal vez me tocaría hacer una pequeña limpieza, al fondo había un silla con una mesita, al menos ahí podría dejar cosas, y mi mochila.

Entré y cerré la puerta con llave, no quería que nadie me hiciera nada. Dejé mi mochila sobre la silla y comencé a ordenar todos los objetos, no tiré nada pero lo dejé en las estanterías, ordenadamente, para que al menos fuera un poco más.... ¿Acogedor?

Cuando conseguí hacer que el trastero pareciera decente apoyé mi espalda en la pared y solté un gran suspiro del cansancio, realmente era estresante dormir aquí, menos mal que solo es apagarme.

Miré hacia la pared que se encontraba frente a mí y dejé que mi mente me entretuviera con cualquier recuerdo guardado en mi sistema

Inmediatamente éste lanzó con rapidez un recuerdo con mi querida y amada Keyla, la sigo extrañando con todo mi ser, metálico, pero con todo mi ser.

En el recuerdo nos encontrábamos ambos jugando a las muñecas y ella exageraba y creaba con naturalidad un nuevo drama para que yo siguiera jugando con ella, como si temiera que yo le dijera que me quería ir, era tan adorable, mi querida niña....
Creo que tengo por algún lado una foto de ella, la guardé porque me afectó muchísimo su muerte, la recuerdo a la perfección, tanto el tamaño como la estética de la foto, esa foto se la tomé yo mismo con la intención de imprimirla ya que ella tenía un tablón con fotos de momentos felices, es por ello que le tomé aquella foto en forma de 'selfie', ya que ella deseaba que me vea también para poder acordarse de ese instante, aunque al parecer el que me voy a acordar seré yo cada vez que la vea. En la foto aparezco yo sonriendo mientras la miraba hacer el tonto y sacar la lengua, feliz, como es normal en una cría de su edad.

Suena extraño ya que todo esto lo digo mientras observo fijamente a la pared, sin siquiera buscar aquella foto, porque la seguridad de que tengo razón es grandísima, no es porque la haya visto miles de veces, que también, sino que tengo una memoria fotográfica muy buena para este tipo de cosas.

En fin, cuando el recuerdo terminó, se esfumó de inmediato, como si alguien me arrebatara la capacidad de seguir alucinando por el aburrimiento, ahora no tenía ninguna imagen en mente, mi sistema no parecía querer ayudar, así que opté por mirar hacia mis cosas y meter mi mano en la mochila con el objetivo de encontrar algo interesante en ella, aunque tampoco es que tenga joyas o objetos interesantes la verdad.

Al introducir la mano no duré más de cinco segundos en busca de algún objeto porque al instante mi mano se encontró con algo, lo cual agarré y saque para observarlo y quizá explicar el por qué lo tengo ahí, ¿por qué? Porque para estar loco, hablo conmigo mismo y me entretengo con algo.

Al dirigir la mirada hacia el objeto mis ojos se llenaron de lágrimas, era justamente la foto de ella, Keyla sacando la lengua y yo mirándola, exactamente como lo describí, era tan feliz junto a ella, maldito su padre.

Recuerdo a Keyla como una niña muy divertida y amigable. Siempre tenía una sonrisa en su rostro y era muy fácil hablar con ella. Me encantaba su sentido del humor y su energía positiva. Aunque ya no esté aquí, siempre la recordaré con cariño.

Dejé un casto beso sobre la fría imagen y a continuación seguí con la búsqueda de objetos en mi mochila

No muchos minutos después terminé de mirar recuerdos, me acosté y antes de apagar mi sistema... Simplemente... Me diré a mi mismo.... 'Bienvenido a tu nueva casa... K-82'

Y aquí termina el día de hoy... No os contaré más por hoy, creo que hubo mucha información...

Adiós, chicos y chicas...

ꫝꪖડ𝕥ꪖ ρ𝕣ꪮꪀ𝕥ꪮ, ᦔꪖⅈડડꫀꪶ.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top