Sarah estaba en la etapa de bonificación a cuadros marrones mientras caminaba hacia adelante. Luther se iba por donde vino, Sarah jadeó porque esta era su oportunidad.

— Okey, ahí está, solo hazlo bien, Sarah. No lo mires, no le sonrías, no le digas buenos días. ¡Solo mantén la vista al frente y él comenzará a extrañarte, luego crecerá y crecerá y crecerá y luego estarán JUNTOS! — Sarah pasó junto a Luther, sudando mucho pero sin siquiera mirarlo. Luther también miraba al frente, estaba claro que aún no lo extrañaba. — ¡¡¡WAAAAAAAAAA!!!

— Hice lo que exactamente dijiste que hiciera, no dije hola, ni tampoco te amo, ¡y ni siquiera me miró o algo! —

Sarah estaba sentada en un taburete mientras Atem trabajaba en algo en su escritorio. Desde que sus planes cambiaron de cumplir la venganza a simplemente relajarse, había estado haciendo cosas usando las herramientas que estaban en el código de Miles Prower para mantenerse preocupado. Sin embargo, ella no sabía exactamente en qué estaba trabajando el en ese momento: es difícil saber cuándo tus manos están cubriendo tu rostro mientras lloras.

Atem se volvió hacia ella y se puso las gafas en la frente.

— Oh, Sarah, lo siento mucho. Creí que iba a funcionar, pero no llores, ¡hay más de una manera de despellejar a un zorro! —

.....¿no era el dicho “hay más de una forma de despellejar a un gato”? Sin embargo, Sarah no pensó demasiado en su redacción, probablemente solo se expresó mal. Atem señaló con su dedo ídex hacia arriba.

— ¡Lo tengo! Negando! —

— ¿N-Negando.....? ¿Qué es eso? — Preguntó, su cabeza ligeramente inclinada hacia un lado. —

— Bueno, es algo así como un cumplido indirecto, es como si dijera..... — Atem señaló a Sarah, que estaba sentada en un rincón, leyendo. algún libro. — Que lindos lentes negros grandes, realmente me distrae de tus horribles y grandes orejas. —

Era difícil saber cómo se sentía Sarah debido a sus anteojos que usaba siempre que leía, pero probablemente estaba desconsolada.

— No lo sé, Sarah, eso suena algo grosero. — Incluso con Sarah desesperada, eso todavía sonaba.....un poco hecho un desastre. —

— ¡Ese es todo el punto! Tienes que tratarlo mal para que vea cuánto te necesita. Tienes que ser cruel para ser amable. Dale lo que te da a ti. — Se dio la vuelta hacia su escritorio, encogiéndose de hombros. — Al menos que no estés comprometida..... —

— ¡LO ESTOY! ¡LO SOY, LO SOY, LO SOY! Negando. Sé mala. Lo tengo. Okey, gracias, Atem, ¡eres la mejor! — Se dio la vuelta para irse mientras Atem saludaba. —

— Por supuesto, juntos para siempre, ¿Verdad? —

Green Hill Zone, Luther y Martin estaban charlando sobre algo. Atem cerca de ellos, aunque en realidad no contribuye.

— Está bien, ahí está, puedes hacerlo, Sarah. Sé mala. Sé mala. SÉ MALA. — Sarah se exaltó a sí misma por esto cuando Atem todo el hombro de Luther, y la señaló a Sarah. —

— ¡Oh, hola, Luther, oh, guau! Amo mucho tus zapatos. —

Atem levantó el pulgar en señal de aprobación.

— Y-Y emmm.....ammm.....¡amo la manera en que cubren tus horribles y espantosos pies! —

Dios, se sentía mal ser mala con él nuevamente y de esta manera, pero era solo parte del plan, al final funcionaría.

Luther estaba tan conmocionado como sus pupilas partidas podían mostrar.

— Oh, está bien. Gracias, Sarah, yo eh.....me gusta mucho tu atuendo también. Debe ser agradable salir con el mismo viejo y apestoso suéter todos los días y no tener que preocuparme por cómo te ves. —

Ouch eso duele.

— Gracias, al menos lo lavo a diferencia de ti y tu capa manchada por ser muy emo. —

— ¡Oye! Es tan largo, ¿sabes lo difícil que es sacar toda la suciedad? ¡Es imposible! Solo.....déjame en paz. — Se teletransportó. —

Esta vez, Sarah estaba llorando mientras estaba acostada en una bolsa de frijoles. Era casi como si Atem se estuviera preparando para que ella regresara con malas noticias.

— ¡No funcionó! ¡No funcionó! ¡Fui tan mala como me dijiste que fuera y todo lo que hice es que se enojara! ¡MI VIDA SE ACABÓ! — La eriza estaba llorando en este punto, y no el buen sentido, pero eso es más una broma hablada. —

— Oh, cielos, Sarah.....tal vez negar fue una muy mala idea, ¡pero no podemos rendirnos! ¡Ya se que hacer para que Luther te amé! —

Esa fue mucha confianza viniendo de alguien cuyas ideas fallaron dos veces seguidas.

— No puedo. Me duele mucho.....no soy lo suficientemente para el. —

Atem hizo una pausa y pensó en lo que acababa de decir Sarah.

— ¡Eso es! Ese es el problema, ¡eres tú! No eres lo suficientemente buena para Luther. —

Sarah estaba a punto de empezar a llorar de nuevo cuando.....

— Pero, podemos arreglarlo. —

— ¿Cómo? — Estaba completamente desesperada en este punto. —

— ¡Simple! ¡Te cambiamos! ¡Te hacemos mejor, te hacemos la chica soñada de Luther! — La duda rápidamente se apoderó de el cuando se dio cuenta de lo que estaba diciendo. — Espera, ¿qué estoy diciendo? Demasiadas alteraciones. El proceso sería muy riesgoso..... —

— ¡HAZLO! Hare cualquier cosa, ¡CUALQUIER COSA, para estar con mi Luther!. Él es el único para mí y eso nunca va a cambiar, así que seré yo la que tenga que cambiar. —

— No lo sé, Sarah.....Sólo si estás muy segura. —

— Lo amo, Atem. Y si debo cambiar todo sobre mí para que el me amé entonces....yo lo haré. — Sarah por lo general no se emocionaba mucho más que su anormalmente grande sonreía, pero había un nivel casi extraño de comprensión por parte de ella. — Lo entiendes, ¿Verdad? Porfavor.....dime que me ayudarás. — Sarah se había desplomado en el suelo durante su monólogo. Un par de manos con garras la envolvieron en un abrazo. —

— Okey, Okey. Claro que te ayudaré. Después de todo. Juntos para siempre. —

Atem se había metido con el código y pensó que la forma más fácil de hacer que no pudiera sentir lo que le iba a pasar durante el proceso era desconectar temporalmente su alma en su forma de Sonic que estaba pilotando. Básicamente anestesia con pasos adicionales. La visión de Sarah se estaba volviendo borrosa.

— Eso es, duerme ahora y cuando despiertes, serás una nueva y mejorada tú~ —

La visión de Sarah se oscureció.

Sobre la mesa había una sierra, un bisturí, jeringas, un destornillador y muchas otras herramientas. Atem había trabajado durante horas.

— .....¡Sólo un poco más de rubor por aquí y.....perfección! — La bata de laboratorio que Atem había estado usando estaba cubierta de pintura y algunas otras manchas rojas. — ¡Luther se volverá loco cuando te vea! ¿Cómo te sientes? —

Sarah estaba completamente envuelta en la oscuridad.

— Me siento.....diferente..... —

— ¡Exacto! Diferente es bueno, ¿recuerdas?. —

— ¡Sí, diferente es bueno!. — Se liberó de las ataduras, sus brazos y piernas estaban cubiertos de vendajes y pintura. — Diferente GENIAL! —

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