Spoilers ffh

Tony estaba preparando la leche en polvo para la bebé.

Pepper estaba trabajando, y él como buen ama de casa, limpiaba y cocinaba para que las mujeres más importantes de su vida estuvieran cómodas.

–Papá, tienes una llamada —dijo Rubí extendiéndole el celular.

Ella tenía una apariencia humana, igual a cómo Visión había aprendido. Se sentía más cómoda así.

Tony le había ayudado a encontrar la apariencia que más le gustase. Y optó por una piel pálida y pecosa. Cabello largo, lacio y un pelirrojo similar al de Pepper. Ojos cafés.

–Gracias, cariño —Tony tomó el celular y se lo puso entre la oreja y el hombro mientras servía el agua tibia—. ¿Hola?

–Señor Stark.

–Ah, hola mocoso. ¿Qué tal va el viaje a Europa?

–Verá... Ocurrieron algunas cosas raras, y ahora estoy trabajando con Fury.

–¿Estás trabajando? ¿En tus vacaciones como Spiderman?

–Harley también está.

–Hola, viejo.

–Okey, okey. Hablaré con el pirata para que se bajen de esa tripulación.

–No, no... Bueno sí que me molestó un poco —dijo Peter nervioso.

–Pero conocimos a alguien genial. Se llama Beck.

–¿Beck?

–Quentin Beck. Viene de otra dimensión —Peter hablaba alegre—. Nos ayudará a salvar al planeta.

Tony meditó el nombre un momento.

–Voy para allá.

–No, no es necesario. Nosotros nos encarga-

–No le digas a nadie que iré. Hablaré con ambos y ustedes mantengan la boca cerrada y ponganse a salvo. Estaré allá en 1 hora.

–Pero señor Sta-

–Callados y a salvo. No se muevan —y colgó. Tomó la leche preparada y fue a la habitación de las niñas. Le entregó el biberón a Rubí—. Si Pep pregunta, salí a comprar para la semana. 

–Mentir es malo. Eso ya lo hiciste ayer.

–¿Quieres que me mate?

–... No.

–Buena chica —le acarició la cabeza y luego la mano a Morgan en sus brazos—. Regreso en unas horas.

Salió del garaje y fue en busca de uno de los trajes de repuesto, lo encontró,  se lo puso. Buscó las coordenadas y partió rápidamente.

—·•·—

–¿Estamos en problemas? —preguntó Harley. Ambos estaban en el techo del lugar.

–Eso parece... —y largó un suspiro.

Estuvieron así un largo tiempo admirando el cielo estrellado. Sin saber cuánto había pasado, conversaron de cosas triviales y de adolescentes.

Hasta que Beck, o Misterio, apareció frente a ellos.

–Hey...

–Hey —saludaron ambos chicos.

El hombre se sentó a una distancia prudente.

–Quizás esto sea demasiado para ustedes... Lamento que se hayan tenido que meter.

–¿Disculpa? Peleamos contra una paza gigante, así que ten más respeto —exclamó Harley con gracia. A lo que Beck rió suavemente.

–Ignóralo... —suspiró Peter—. Lamento... Lo de tú dimensión.

–Sí... Fue duro. Por eso necesito hacer esto, no quiero que éste mundo también se destruya.

–Eso es muy noble.

–¡Señor Stark! Llegó rápido —saludó Peter animado.

–Si, bueno... —levantó la máscara de su casco—. Te dije que vendría en una hora. El pirata está abajo, ¿no? —el chico asintió—. Y tú debes ser... Misterio, ¿no? Te vi en la noticias. Es un gusto. Te daría la mano pero volando es algo incómodo, ¿te parece si bajamos y nos saludamos?

–Cla... Claro —Beck estaba nervioso, se notaba.

Ya dentro de las instalaciones, él no tenía ni idea de lo que le esperaba.

–Así que... Eres de otra dimensión —habló Tony sin siquiera estar dentro de su traje. En verdad parecía estar tomándose enserio esa situación a su manera.

–Así es —Beck decidió seguir el juego—. Mí dimensión fue destruida por los  Elementales, y ahora vinieron hasta aquí e intentan hacer lo mismo.

–¿Por qué?

–Creo que es por los portales creados con la lucha contra Thanos.

–¿El chasquido o qué?

–Lo más probable es que sí —Beck miró el holograma y jugó con su anillo—. Ahora vienen a este universo, el 616, para destruirlo.

Tony lo miró serio un momento. Luego a Fury, Maria y a los menores.

Y soltó una risa, para luego ser una carcajada honesta.

–Espera, espera ¿Tierra 616?

–Señor Stark. Usted sabe del multiverso, no entiendo por qué no ve la gravedad de la situación —regañó Fury.

–No me digas. Por eso mismo me estoy riendo, Nick —se giró a Beck—. Creeme que esta no es la Tierra 616, ni siquiera está lo más mínimo de cerca. Éste es el universo 199993, creada a partir de la 199999 —Tony notó el notorio nerviosismo de Beck—. Y tú no eres un viajero de dimensiones. Eres un ex-empleado mío que ayudó a la creación de BARF —miró hacia los agentes—. No se crean todo y pregunten a Stephen o a mí sobre estos temas, ¿quieren? Y ahora dejen a mis niños tener sus vacaciones —se volteó hacia Beck—. Más te vale no estar planeando algo, porque yo mismo vendré a patearte el trasero hacia la Tierra 2149, y créeme, no es bonita —ahora hacia los chicos—. Ustedes son listos, así que sabrán que ahora tienen que volver por donde vinieron y dormir y disfrutar de sus jodidas vacaciones.

–S-Sí señor Stark —dijo Peter.

Ahora Tony se giró hacia Fury y Maria.

–Y ustedes. Ni se les ocurra molestarlos de nuevo. Investiguen a este tipo, y no vengan con estupideces. Y yo me voy antes de que mí esposa llegue porque no quiero dormir en el sillón de nuevo —se puso de nuevo el traje. Le hizo gestos a Beck apuntando sus propios ojos con su dedo y luego hacia él, clara seña de que lo estará vigilando—. Nos vemos en una semana —exclamó hacia los chicos, y simplemente salió volando de vuelta a su hogar.

Suerte para él que Pepper aún no llegaba.

Guardó el traje donde lo había encontrado y entró.

Sólo para encontrar a Rubí con el holograma de llamadas mientras hablaba con Nébula.

–Oh, ahí está papá.

–Sí... Perdón por la tardanza.

La bebé, quien estaba en los brazos de Rubí. Estiró sus pequeñas manos hacia el mayor, quien la tomó contento y se sentó al lado de la androide.

–¿Dónde fuiste? —preguntó Rubí.

–Secreto, secreto.

–¿No estarás de regreso a salvar la realidad, o si? —preguntó Nébula desde el holograma seriamente.

–No, no. Claro que no. Un par de problemas, es todo —rió el Stark—. ¿Y tú? ¿Cómo van las cosas con Mantis y el resto?

La mujer se puso notoriamente ansiosa. Mientras que la voz alegre de la mencionada se escuchaba a lo lejos.

–Estamos bastante bien, gracias.

Tony rió honestamente, al igual que Rubí, a lo que Nébula simplemente se molestó. Si pudiera sonrojarse ya lo habría hecho.

Y al castaño le encantaba eso. Que fuera cada vez más... Humana. Que pudiera sentir vergüenza y demostrar compasión.