Después de bajar y traer muchas golosinas, Muzrael propuso escoger una película y ambas chicas estuvieron de acuerdo, aunque segundos después todos se encontraban discutiendo sobre la película que escogerían.

- Pongamos El Código Da Vinci-insistió Muzrael.

- ¿El Código Da Vinci? Ya vimos esa 3 veces. No, me niego. Es preferible misión imposible, hay mas acción y sin duda es mucho mejor-Replico Abril.

- Esa también ya la vimos y mas de 5 veces, Abril. ¿Qué tiene de malo Legión de Ángeles? - Cuestionó Shyra.

Abril y Muzrael giraron hacia ella y hablaron al unisonó.

- No es realista.

- ¡Oh claro que es realista!, ¡puede haber una legión de ángeles en cualquier momento si Dios así lo quiere!.

- Bueno. ¿Qué opinan de Jurassic Park?-Propuso el chico.

- No estaría mal...realmente es interesante y tiene acción. ¿Qué opinas Abril?-Preguntó Shyra.

Abril llevo una mano a su mentón, suspiro totalmente rendida y accedió.

- Sera mejor que se coman a un niño o estaré muy decepcionada.

Shyra y Muzrael sonrieron chocando palmas, después sacaron la película y la pusieron en el televisor. Apagaron las luces y se acomodaron todos en el sillón. A mitad de la película Shyra estaba recargada en el hombro de Muzrael y Abril se encontraba recostada en sus piernas comiendo palomitas.

Como de costumbre, cada que veían películas se repitió el patrón que los tres conocían bien. Shyra hablando, Abril callándola, Muzrael asustándolas en ciertas partes, Abril golpeando a Muzrael por asustarla, Shyra regañando a Abril y después silencio. El patrón de siempre que raramente cambiaba.

Al final de la película Shyra estaba recostada en las piernas del pelinegro y Abril estaba recargada en su hombro. Justo al contrario de como estaban al inicio.

- No me gustó el final -Gruño la rubia.

- Ay vamos, ¡el final estuvo genial!- exclamó Muzrael

- Siento que no hubo la masacre que esperaba. Aunque parece que Shyra se aburrió mas que yo.

Abril observo las piernas de Muzrael y el giro su cabeza hacia el mismo lugar. Shyra estaba durmiendo con una respiración leve y constante, tenía los labios entre abiertos y su cabello realmente alborotado, algunos mechones incluso cubrían su rostro. Una de sus manos estaba debajo de su mejilla mientras que la otra cubría su oreja.

El moreno sonrió con ternura quitándole los mechones sueltos de la cara.

- Supongo que estaba cansada. Aunque no lo creas ella adora estas películas.

Muzrael se levantó con cuidado de no despertarla y se colocó a lado de la rubia. Ambos miraban a Shyra con cierta preocupación. Abril fue la primera en decir algo al respecto.

- Desde que llegó casi no duerme, se despierta llorando o gritando a mitad de la noche. Ella cree que no me doy cuenta, pero obviamente esta equivocada, claro que me doy cuenta-sonrió sin ánimos- Me preocupa... Aún no me conto del todo lo que le hicieron esos bastardos.

- Lo supuse. Averiguare quien le hizo esto y todos esos idiotas terminaran muertos-Muzrael apretó la mandíbula- Vamos, hay que llevarla a su habitación.

Abril asintió y ambos comenzaron a subir las escaleras, (Muzrael con Shyra en brazos) cuando llegaron, la rubia se encargó de quitar las sábanas para que Muzrael acostara a Shyra, finalmente los dos terminaron tapándola.

- A veces la veo tan frágil -comenzó a decir el pelinegro- y otras veces tan fuerte...

- Lo se...-respondió Abril-Lo se...

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En los sueños de Shyra...

- No mami...por favor no

Una Shyra muy pequeña se encontraba en el rincón de una habitación, mientras que al otro extremo se encontraba una mujer rubia de ojos azulados sosteniendo a una gatita de color gris.

- ¡¿A caso no viste todo el desastre que hizo?!, ¡asume tus consecuencias!. El gato se va-Gruño la rubia.

La pequeña pelinegra giro su cabeza observando los rasguños en los muebles y los jarrones rotos.

- Ella no sabía, solo la deje unos segundos para ir a comer algo...

- Pues por esos segundos se irá.

Akatriel camino hacia la puerta mientras Shyra la seguía a tropezones.

- ¡No mami!, ¡no la tires! -rogó la pequeña- ¡Yo limpiare todo esto y no la dejare en ningún momento sola!.¡Por favor mami, no la dejes de nuevo afuera!.

Los ojos de la pequeña comenzaron a empañarse. Aquella mujer ignoro sus ruegos junto a los maullidos de la gatita. La aventó a la calle y cerró la puerta.

- ¡No!

Shyra se apresuró a abrir la puerta pero la mujer se interpuso entre la puerta y ella.

- No Shyra -Gruño Akatriel- A tu habitación, ¡Ahora!.

- ¡No puedes dejarla ahí afuera!. Esta sola e indefensa, le puede pasar cualquier cosa, esta muy pequeña para estar en el frío y sola. Por favor, déjame ir por ella.

-¡Debiste pensar eso antes de que hiciera este desastre!-Exclamo la mujer- ¡Ahora limpia todo y ve a tu habitación!.

La pequeña se soltó en llanto y se acerco a su madre juntando sus manitas.

- Por favor, al menos déjame buscar alguien que la cuide - rogó de nuevo lágrimas- No la dejes afuera, por favor, ya es tarde y le puede pasar algo.

Con una mirada inexpresiva Akatriel se cruzó de brazos y clavo su mirada en la niña.

- Tienes dos opciones. O limpias todo y vas a tu cuarto o limpias todo y pasas la noche afuera con esa estúpida gata, decide.

Shyra parpadeo y por un segundo se sintió más tranquila, sabia que su madre no la dejaría entrar hasta el día siguiente pero al menos Hope (su gatita) no pasaría la noche sola.

- Limpiare todo esto y saldré- anunció con entusiasmo.

- Bien, apresúrate entonces.

En cuanto Shyra termino de limpiar subió corriendo a su cuarto para abrigarse, cuando lo hizo bajo y camino hacia la puerta.

- Por un segundo creí que te quedarías en el cuarto, pero después de todo eres una niña insensata. No me sorprende.

La pelinegra se quedó callada y camino hacia la puerta estirando sus piecitos para abrir la manija. Cuando lo logró y estaba por salir su madre hablo de nuevo.

- Shyra - la nombrada giro- No quiero verte el resto de la noche, debes saber que si regresas no te abriré.

La pequeña miro por unos segundos a su madre pero al final termino asintiendo y salió.

- ¡¿Hope?!-la niña comenzó a gritar-¡¿Pequeña donde estas?!.

Una ventisca hizo que el cabello de Shyra se alzara y varias hojas terminaran en el. Ella miro hacia lo que sería su cielo, estaba por caer una tormenta.

Comenzó a preocuparse, no encontraba por ningún lado a la gatita.

- ¿¡Hope?!, ¡¿linda, donde estas?!.

Entonces un maullido cerca de una fuente llamo su atención, la pequeña camino hacia allá llamando a la gatita.

- ¿Hope? - la gatita camino sobre la fuente mirando a Shyra con sus ojitos aceitunados- ¡Hope!.

La gatita salto hacia ella soltando un maullido. Shyra sonrió acariciando su grisáceo pelaje.

-Estaba preocupada, me alegra que estés bien - La gatita ronroneo.

Y la tormenta comenzó.

- ¿Shyra?, ¿Qué haces aquí afuera?- El padre de Muzrael la observo confundido sosteniendo un paraguas.

La pequeña estaba sentada en la fuente, totalmente empapada y con la gatita en brazos.

-Señor Dawson -Saludo la niña con una sonrisa- Estaba buscando a mi gatita - Le mostró a la gatita gris que en esos momentos estaba tan mojada como ella.

-Estas empapada Shyra; Vamos, hay que ir con tu madre.

El hombre se acerco a la pequeña para cubrirla con la sombrilla, ella bajo de un salto y se coloco a su lado.

- No abrirán, mamá dijo que no me dejaría entrar hoy -murmuro Shyra seguido de un estornudo.

El hombre observo con confusión a la niña mientras se acercaba a tocar el timbre de la casa. Estuvieron ahí por 10 minutos, al menos hasta que fue evidente que no abrirían. El hombre suspiro.

- Ven Shyra, hoy te quedarás con nosotros, ¿ te parece bien?.

La pequeña sonrió tomando la mano del padre de Muzrael y asintió abrazando con fuerza al gato.

- Claro Señor Dawson, gracias.

Muzrael se sorprendió al ver que su padre no llego sólo esa noche. Pues iban con él una gatita y una chica que el pequeño niño conocía bien. Saltó de las cobijas donde se encontraba con su madre y abrazó a Shyra, que estaba temblorosa del frío.

- La encontré fuera de su casa, cuando llamé a la puerta nadie abrió.- relataba el padre de Muzrael.- No podía dejarlas ahí, así que la traje a nuestro hogar. Es parte de esta familia después de todo.

El pequeño asintió contento. Le dio a Shyra ropa seca y unas mantas. Secaron juntos a la gatita y después, envueltos entre las mantas, Muzrael y ella miraron películas protegidos de esa tormenta horrenda, por los brazos de esos ángeles guardianes que ahora no sólo cuidaban del chico, sino de una niña muy importante para él.

Cubierta por aquellos recuerdos que ahora se reflejaban en sueños, la pelinegra sonrió, era cierto que a pesar de todo tenia personas que siempre la habían protegido y amado, justo ese pensamiento fue lo que hizo que sonriera inconscientemente mientras continuaba soñando.

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No se ustedes pero yo adore escribir este capitulo, me quede pensando que debería de hacer otro pequeño libro sobre todos los detalles del mundo donde vive Shyra para que no se pierdan de cierta forma.

Por ahora me limitare a explicarlo por aquí, En el mundo donde existe Shyra hay varios niveles de cielo, el primero donde habitan las almas humanas, el segundo donde habitan las almas de animales, el tercero donde habitan dominaciones, virtudes y potestades, el cuarto lo habitan principados, ángeles, arcángeles ,serafines y querubines y el ultimo y quinto es el gran cielo de las deidades y su descendencia, mas adelante explicare mas de esto.

Realmente todos habitantes de todos los cielos pueden convivir entre si , pero ambos se mantienen en sus niveles generalmente .

Por ahora a eso se refería Shyra con que llovía "desde su cielo".

-Merry🌻.