25.
— Buenos días —.
— Hola Tae, ¿cómo te la pasaste estos días? no nos vimos — hice una mueca y mi amigo sonrió mientras entrabamos al salón de clases — tengo muchas que contarte —.
— ¿De verdad? — asentí — yo también pero bueno, será en el almuerzo porque ahí viene la gruñona — me reí por lo que dijo y comenzamos las clases como siempre.
— Jiminnie —.
— Dime —.
— ¿Te enojarías si te dijera que estoy saliendo con Hoseok? —
— Para nada, ¿están saliendo? — el castaño asintió y la sonrisa que traía creció más — me da gusto —.
❅
— Ahora si, cuéntame, cuéntameee — mi amigo daba saltitos mientras nos acercábamos a una mesa vacía, puso su bandeja de comida y destapó el pequeño cartón que contenía leche de fresa — vamooos date prisa —.
— Pues tengo varias. Dos a decir verdad —.
— Suelta ya Jimin —.
— Mis padres van a tener un bebé — mi amigo escupió el chorrito de leche que contenían sus mejillas y de repente sus ojos ya parecían linternas con lo que le brillaban.
— QUEEEEEE HERMOOOOOOSOOOOOOOOOOOOOO — casi se le salen los pulmones de lo expresivo que había sido — voy a tener un mini Jimin, bueno tu ya eres mini, pero me refiero a uno más pequeñito.
— ¡Oye! — fingí ofenderme y luego me abrazó felicitándome por mi nuevo hermanito.
— De verdad estoy muy feliz amigo, mucho, mucho — se limpió con su manga la comisura de su boca y suspiró — y bueno, ¿cuál es la otra?
— Emhh... ayer fui a comer con Jungkook —
— Ajá, ¿tuvieron sexo?— preguntó indiferente mientras comía del arroz que había en su bandeja gris.
— Noooooo, fuimos con mis papás para hacerlo oficial — giré los ojos.
— Ahhh — aveces era tan graciosa la forma en la que hablaba — entonces, ¿qué pasó? —
— Les dije que ya sabía todo — Tae abrió muchos los ojos, estaba claro que se sorprendió — pero tranquilo, les explique que los quería y que no estaba en lo mínimo afectado.
— ¿No estabas afectado Jimin? — negué — ¿Y entonces porque te la habías pasado llorando aquel día? — me encogí de hombros y comencé a comer.
— Tal vez el impacto —.
— Mmh bueno, te creeré, pero, ¿seguro que ahora si estás bien? —
— Si amigo — y antes de soltar otra palabra sentí como unos brazos me rodeaban por la cintura.
— Hola Minnie — ese aroma y esa voz eran imposible no reconocerlas.
— Hola Kookie, ¿cómo estás? — el sonrió y yo le indiqué que tomara asiento a un lado de mí.
— Bien pequeño. ¿amaneciste mejor? —ayer que estuvimos platicando en el parque me preguntó todo lo que había pasado, pues no entendió nada de la conversación, le expliqué pero aunque lo intentara mis lágrimas no se detenían. De alguna forma hoy estaba mucho mejor, más libre, sentía que nada podía arruinar mi vida, ahora era fuerte.
— Si Kook — esté ultimo me enrollo en su pecho y me besó en la frente — vamos a almorzar — asintió y no dijimos ni una palabra más. Tae nos veía con asco lo que me daba un poco de risa porque justo cuando Hoseok se acercó a él se convirtió en alguien diferente, dejándose mimar aunque hubiera muchas personas.
En la salida Jin hyung me esperaba recargado en un árbol de cerezas, estaba enorme, me dijo que nos fuéramos juntos a casa, así que acepté.
— Jimin, ¿quieres conocer a mis padres? —Jungkook pasó sus manos repetidamente por su cabello — digo, si no quieres no hay problema, después de todo sabes que ni siquiera me llevo bien con ellos —.
— Claro que si quiero — me sonrió permitiéndome ver ese precioso lunar y lo besé rápido —avísame con tiempo.
— ¿Para qué? —
— Para poder ensayar algo aunque sea — Kook soltó unas carcajadas y me miró con ternura.
— Eso no se vale, tú no hiciste lo mismo, te lo recuerdo — alzó una ceja y sus ojos me estaban retando — así que no diré que día —.
— Malooo — hice berrinche y se acercó mordiendo un poco mi mejilla.
— Agggh, hagan sus cosas en otra parte —Jin bufó y ahora los dos nos soltamos a reír.
Jungkook se despidió después de ver salir a Namjoon porque los otros dos ya se habían ido.
— ¿Por qué los espera si no viven juntos? — pregunté con intriga.
— Porque Kookie prefiere estar en su departamento que en su casa —.
— Ohhh ya veo, ¿pero de verdad no quiere a sus padres? —.
— Si los quiere, al menos a su padre, un poco a su hermanastro, pero es algo que él ha sabido sobrellevar, no se agobia y prefiere seguir adelante con sus estudios, muchas personas en su situación serían rebeldes, pero míralo con solo saber eso notas que es diferente a muchas personas.
Y tenía razón Jin, solo con lo poco que tenía por enterado me daba cuenta que Jeon Jungkook era la mejor persona que pudo cruzar en mi vida, la que me alegraba cada instante, la que con una sonrisa podía calmar al mundo entero, mi mundo entero.
— ¿Crees que sus padres nos acepten? —
— Supongo que si, nunca han hecho o por lo menos que yo sepa nunca se han interesado por completo en algo de sus hijos — estábamos sentados en la acera fuera de su casa, llevábamos platicando ya un buen rato.
— Bueno hyung, gracias — este asintió y se levantó ofreciendo su mano.
— Has tarea y no duermas tan tarde Jiminnie —.
— Está bien —sonreí y me adentré a mi hogar donde mi madre estaba tejiendo en el sillón.
— Hola hijo, ¿cómo te ha ido? — dejé mi mochila en la alfombra y me arrodillé en está misma acercándome al vientre de mi mamá.
— Súper — ella me miró enternecida — espero que crezcas rápido para que podamos jugar juntos y estés sano para que cuando llueva saltemos en los charcos que se formen.
— Eres un ángel Jimin — no respondí, tan solo me limité a hacer mi tarea en aquella cálida sala, donde se podía transmitir una paz inmensa.
::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::.
❅.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top