Jin hyung💫:

Hola Jiminnie habló conmigo Nam, estoy a punto de llegar a tu casa, ¿podrías recibirme?

Claro que si hyung, aquí lo espero.

Bueno Chimmy, ahí nos vemos 😘

✔✔ 5:37p.m.

Jin había llegado 10 minutos después con pollo frito, comimos en la barra de la cocina.

— ¿Cómo te sientes? — dijo Jin para después beber de su vaso de agua.

— Normal — piqué mi espagueti.

— ¿Seguro? — insistió. 

— Seguro hyung, digo, desde un principio debía saber que él es así — Jin frunció el ceño y yo ignoré el nudo en mi garganta — ¿por qué alguien debería quererme tan rápido? Si ni siquiera mis padres lo hicieron —.

— Oye, no digas eso —.

— Lo siento, ¿a qué venía? — lo miré a la cara.

— A estar contigo, ya casi no pasamos tiempo juntos Jiminnie, te la pasabas ocupado —.

— Oh, pues si quiere hacemos tarea, voy y llamo a Tae para que se una — Jin asintió y yo le marqué a Tae.

— ¿Hola?, Jin hyung y yo pensábamos hacer tarea toda la tarde, ya sabes como antes jajaja ¿quieres venir? —.

Porque inclusive si éramos de diferentes grados, pasar tiempo entre nosotros siempre nos reconfortaba.

— Por supuesto!!! Llevaré helado —.

— Hecho — colgué y comencé a recoger los platos donde comimos. 

❅

Pov JK.

— Tu tuviste la culpa, debías decir que si estás saliendo con él y negar todo lo que dijo Baek de ti, como eso de aburrirte de Jimin después — desde que terminaron las clases me la pasé en el departamento de Nam y Hoseok, solo que Namjoon se había ido al gimnasio y yo estaba con Hobi tomando cerveza.

— ¿Y cómo lo digo sin el consentimiento de Jimin? — bajé mis pies de la mesa de centro de su sala.

— Debes ser muy estúpido para no darte cuenta que él aceptaría mil veces estar contigo —.

— Esto esta yendo muy rápido, ¿no lo crees? — agaché la mirada.

— Tal vez Kook, pero, ¿tú puedes detenerlo? — Hoseok era muy bueno escuchándome, dándome consejos y cuidándome.

— No, no puedo —.

— Entonces no importa, no importa porque por ahora nadie está en contra de lo suyo, este es el momento para que aproveches que no hay nada que impida que estén bien y juntos —.

Hoseok tenía razón, no había alguien que estuviera en contra de lo que sentíamos. Jimin aceleraba mi corazón, el hecho de que me tomara la mano me hacía feliz, poder besarlo, poder estar con él después de clases, incluso su mamá me hablaba con mucho cariño, ¿qué había de malo avanzar un poco más?

— ¿Debería ir a buscarlo? — de un trago me acabé la cuarta lata de cerveza.

— No lo sé, puedes hacerlo pero que no se te note el olor a alcohol, ve a ducharte y sal — tomó la basura y la depositó en su lugar.

— Gracias Hobi — sonreí y él me correspondió.

— Ten, se la llevas y ahora tienes un buen pretexto para iniciar la plática —.

Después de haberme arreglado Nam ya estaba en el departamento, habló conmigo y salí de ahí a las 8 de la noche.

Pov JM.

— ¿Será que ya nos vamos? —

— ¡Pero solo te la pasaste comiendo helado Taehyung! —.

— Ahhhh, no me regañes, hablar idiomas no es lo mío —.

— ¿Y por qué escogiste esa carrera? —

— No lo sé hyung —.

Jin llevaba peleando con Tae casi toda la tarde y a mi me parecía de lo más gracioso, me cayó muy bien la visita de ellos.

— Anda toma tus cosas —.

— ¿Me llevarás en tu auto a mi casa? — dijo emocionado.

— Nooo Tae, tu vas a ir corriendo detrás de mi — Jin habló con sarcasmo.

— Oh, bueno, mejor tomo el bus, no me gusta correr — Jin rompió en carcajadas por las ocurrencias de Tae y comenzó a recoger sus cuadernos, yo solo estaba leyendo un libro que mi papá me había regalado, era para aprender fácil y más rápido según.

— Nos vemos mañana Jimin — Tae me abrazó y me dio un beso en la frente.

— Descansen, lleguen temprano — fui hasta la puerta a dejarlos y me despedí de ellos.

—  Adioooooos, duerme bien — Jin se había subido a su auto y Tae en el copiloto.

Cerré y cuando me acerqué a la barra donde estábamos estudiando vi el libro de Antropología de Tae, si que era despistado. Tocaron el timbre y yo caminé rápido suponiendo que era mi mejor amigo regresando por lo que le pertenecía.

— A ver si dejas de olvidar así tus cos... — alcé la mirada y en lugar de encontrar a mi amigo en la puerta encontré a Jungkook, un Jungkook con la mirada casi a punto de derrumbarse en tristeza. — ¿Qué haces aquí? — intenté cerrar la puerta pero éste puso su pie negando mi acción.

— Toma — detrás suyo saco mi mochila, ¿cómo pude haberme olvidado de ella? Hasta estudie hace unos momentos y no me percaté que no la tenía —¿podemos hablar?

— No, no quiero — dije reacio.

— Dios, Jimin ¿por qué haces esto tan grande?

— Vete por favor — dispuesto a cerrar la puerta él lo detuvo de nuevo y me saco de un solo jalón de mi casa.

— Vayamos a caminar — tomó mi muñeca y yo cerré como pude, mi mamá estaba en su habitación y no quería molestarla por problemas tan absurdos.

— No tan lejos, ¿si? y habla rápido —. 

— Jimin, sé que nunca tuve una relación oficial, nunca salí con alguien en serio y es por eso que me da miedo avanzar a algo más contigo, ¿qué si no funciona?, ¿qué si pasa el tiempo y nos cansamos el uno del otro? — su mano se puso roja.

— ¿Y cómo lo vas a saber si no lo intentas?, algún día deberías cambiar esa forma que tienes de pensar —.

—Y créeme que lo quiero hacer —.

— No soy un objeto —.

— No lo eres Jimin, vales tanto que mereces alguien mejor que yo —.

— Jungkook no me vengas con esas cosas, en el corazón no se manda — comencé a acariciar la mano que sostenía la mía.

— ¿Y tú corazón a quién escogió? —

— A ti —.

Jungkook me vio con melancolía y paró en seco en medio de un pequeño patio de una casa donde nadie vivía. Estaba ya bastante oscuro, no me quería poner más triste de lo normal.

— ¿Me perdonas? —

— No lo vuelvas a hacer, dime si quieres o no algo conmigo, no me utilices y no intentes poner una etiqueta en mí donde diga tu nombre —.

— Eso lo dije porque no sabía que otra cosa responder, me resulta complicado acoplarme a esto —.

— Esta bien, sea lo que sea intentemos dar lo mejor de cada uno — me acerqué y lo abracé por la cintura.

— Jimin —susurró en mi oído.

— Hmmm? —respondí.

—Creo que t-te quiero—me dio un beso en la mejilla y yo hundí mi cara en su pecho.

— Yo también Kook —.

Estuvimos así un buen rato, hasta que regresamos hasta la puerta de mi casa.

— No volverá a pasar, lo prometo —.

— Si Kook — sonreí un poco — oye... — jugueteé con mis manos antes de hablar.

— Dime Minnie —

— Bueno, es que mi papás saldrán de viaje la primera semana que nosotros salimos de vacaciones y se irán 15 días — dudé en preguntar.

— ¿Si? — los ojos de Jungkook brillaron y yo no supe como dejar el tema.

— Pues, si quieres, puedes estar aquí conmigo. Aún así sigo molesto eeeh — hice un puchero y Jung se rio para después acercarse y darme un beso, mis pies flaquearon y yo lo tomé del cuello.

— Claro que si mi pequeño, estaré donde estés tú — inhaló cerca de mi cuello y yo me ruboricé.

— Esta bien, ya es tarde y hoy no puedo invitar a quedarte, esta mi mamá, o si quieres pregunto —.

— No es necesario Jimin, ya me voy, te veo mañana en la entrada de la Universidad — asentí y antes que se despegara de mi lo besé de nuevo, sus labios sabían bien, eran suaves y por Dios que todo eso me encantaba aunque por un segundo odié haber cedido ante sus disculpas. Lo vi alejarse y entré a mi hogar.

— Así que... ¿me dirás que es un amigo? — habló mi mamá saliendo de la cocina, yo di un brinco al verla.

— Oh, mamá, ¿de qué hablas? — traté de no ponerme más nervioso de lo que estaba.

— No me quieras creer tonta Park Jimin —parecía que se divertía con mi cara. — Vamos a la sala, algo me imaginaba, ni con Tae eres así de atento.

— Es que Tae es mi mejor amigo, Jungkook me gusta — solté y mi mamá ni siquiera se vio sorprendida — ¿es normal?

— Pues, si para ti esta bien, para mi también hijo, no soy nadie para prohibirte cosas, eres libre de decidir —.

La comprensión de aquella señora con ligeras canas en su cabello, esos ojos pequeños y bellos me hizo sentir feliz, me acerque y me recosté en sus piernas.

— Gracias mamá —.

— Eres mi hermoso hijo, ¿cómo podría negarme a ver esa sonrisa tan increíble que tienes? — tocó mi nariz y me dio un beso en la frente — ¿quieres ver una película antes de ir a dormir? — asentí y subí corriendo a ponerme mi pijama.

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