Se quedaron dormidos después de platicar sobre los diferentes colores que Taehyung quería teñirse el cabello, en su mente se grabó un "se te vería más lindo en gris, quizá deberías probar" de Hoseok.

El reloj marcaba las 4:54 am y el menor giró para toparse con el mayor, quién respiraba profundamente, sus ojos estaban cerrados, sus labios formaban una línea recta, Taehyung pasó su mano por los mechones de cabello que caían en su frente y ahí estaba, admirando cada parte de él, se acomodó y sintió como sus piernas se entrelazaron, el pequeño se alarmó, mientras que Hoseok seguía en su sueño profundo. Siguió viendo su rostro hasta que cayó dormido nuevamente.

Ninguno de los dos sabía lo que sucedía, Hoseok se sentía atraído hacia el menor, pero sólo de pensarlo era absurdo, quería cuidarlo, pero no podía por el simple hecho de no ser libre completamente.
Taehyung no tenía nada, sólo a sus padres y las ganas de terminar la Universidad, para él era suficiente aunque en su lista se sumara el punto de tener a Hoseok viviendo en su departamento, no quería dejarlo ir, no por ahora, la compañía del pelirrojo lo hacía estar feliz.

-Buenos días- el mayor se removió, ya no sentía dolor en las costillas- ¿Cómo te sientes?- alzó la vista y observó al pelilila en un short holgado y una playera negra, estaba sentado a lado suyo jugando en su móvil.

-Creo, mmmhhh creo que ya no me duele tanto- se reincorporó y sonrió, realmente no sentía nada de molestia- La pomada de tu abuela funciona de maravilla- y levantó los pulgares.

-¡Genial!- se paró de golpe y puso las manos en sus caderas- Intenta pararte de la cama, debemos cambiarte la venda de cualquier manera.

Lo hizo, se puso de pie y no tambaleó.

-¿Ves?- Taehyung chasqueo su boca y empezó a quitarle la venda blanca de su torso- Lo hago yo si quieres- Tae negó y continuó.

Después de que se diera una ducha y fuera envuelto de nuevo su estómago gruño.

-Pedí comida a domicilio- Taehyung seguía con la misma ropa- Supongo que hoy no vas a querer dar un paseo, ¿verdad?.

-Me quedan dos días Tae- Hoseok acarició su cabello y se recosto en la cama- Salgamos mañana.

-Vale- salió de la habitación y el mayor quedó pensando, ¿debía hacerlo?.

¿Por qué de repente hacía lo contrario a lo que su cerebro le ordenaba? Con cuidado empezó a ponerse unos jeans y una sudadera gris, sus converse y fue a encontrarse con Tae en la sala.

-Desayunemos fuera- el menor asintió y corrió a cambiarse también. 

✴

Entraron a un centro comercial enorme, había diferentes lugares para comer, pero escogieron un pequeño restaurante que parecía familiar.

-¿Qué quieres desayunar Tae?

-Ummm...- el pequeño formo un puchero mientras veía el menú- Se me antojo un ramen con pollo y jugo de naranja.

-Hay que pedir lo mismo, aunque tu combinación es rara- dijo mientras regresaban el menú al mesero parado frente a su mesa.

-Lo sé, pero me gusta.

-Tae... yo, quería hablar contigo de algo- Hoseok debía parar ahora todo lo que pasaba.

-Claro, ¿sobre qué es?- lo miró con intriga y al ver que no contestaba creyó que algo había hecho mal- No me digas... ¿no te gusta ir por mi en la noche?... sé que es peligroso, nunca me dió miedo, o tal vez ¿te da miedo ir a oscuras?, tiene sentido porque las lámparas del barrio no sirven, una vez quise mandar una carta para que las arreglaran pero un gato me espantó y el sobre cayó en un charco casi me pongo a llorar pero recordé que tenía 19 años y no debo llorar por es...

-Me gusta ir por ti, olvida lo que dije- Hoseok no pudo parar- Entonces, ¿te espantó un gato?

-Si, pero porque no lo había visto- el pelirrojo se empezó a reír y Taehyung ladeó sus ojos- ¡No da risaaaa!

-Si la da- el mayor le sacó la lengua y sus platillos se aparecieron en la mesa- Come, anda bebecito.

Después de varias risas y conversaciones triviales, los chicos fueron a dar la vuelta a aquel centro, veían juguetes, ropa, accesorios ... el teléfono de Hoseok sonó.

-¿Bueno?

-¿Cómo sigues?

-¿Suga?

-¿Este es un juego de quién pregunta más?

-Lo siento, es que estoy ocupado- espetó el pelirrojo volteando a ver a Taehyung.

-No me interesa, desocupate, voy a pagarte por los primeras tres entregas de hace una semana.

-Ok- colgó y volvió al pequeño- Oye Tae...

-Dime

-Debo ir rápido a un lugar, ¿te veo en casa?- Taehyung sintió como si hubieran revolcado su corazón unas cinco veces, la forma en que lo dijo fue tan linda que no sabía si aún respiraba- ¿Tae?

-Ahhh, si Hobi, ve con cuidado, no andes por lugares solos- le dijo mientras lo miraba fijamente.

-No lo haré- se acercó y le dió un beso en la frente- Regresa también con cuidado.

Taehyung emocionado entró a uno de los locales después de ver como Hoseok desaparecía entre la gente, tenía un plan, no era un plan, pero Tae creía que lo era porque quería sorprender a Hoseok.

Jung llegó a donde siempre y Yugyeom lo recibió con un abrazo, al igual que Namjoon, al parecer todo había vuelto a la normalidad.

-Procura no ser así de inconciente la próxima vez- Yoongi le aventó un sobre color crema- Algún día vas a chocar con una pared y no habrá salida.

-Pero ya no hay salida- Hoseok se quejó.

-No sé cuanto dures con esa actitud- el chico de piel clara hizo una forma de arma con su mano y apuntó a Hoseok.

-Eso ya me tiene sin cuidado, a lo mejor ya estaba condenado a vivir de esta manera.

Una risa sonó y Min se fue.

-¿Por qué no te defendiste?, sabes pelear muy bien Hoseok- Namjoon se sentó y puso dos bancos más- Me sorprende, tú bien pudiste acabar con WooBin.

-Creí que de verdad no podía defenderse- dijo Yugyeom sorprendido.

-Pequeño no sabes nada de él- Namjoon palmeó su espalda- ¿Entonces Hoseok?

-Simplemente no me gusta pelear y ya- se encogio de hombros.

-Eres estúpido- habló el pelirubio

-Y tú un idiota- replicó Hoseok mientras que Yugyeom reía.

-¿Tomará los días de reposo?- dijo el chico.

-Si, debo hacerlo, estoy en una micro recuperación.

-¿No puedes beber?

-¡Claro que si!, dame eso- tomó una lata de cerveza y comenzó a beber.

Pasaron las horas y Taehyung llegó al departamento, hizo limpieza y esperó con emoción a su mayor.

Yugyeom estaba enfadado, sus hyungs estaban completamente ebrios, balbuceaban cosas sin sentido, sin embargo no había mucho problema pues Jackson llegó al rescate de Namjoon y se lo llevó.

-Hoseok hyung, ¿donde vive?, debo llevarlo- Hoseok le puso un dedo en los labios y el chico se sorprendió

-Shhh, tú no me digas hyung, no me gusta, solo me gustó una vez y fue de alguien especial...

-Oh, lo siento, aún así digame donde vive

-Nononono, solo subeme a un taxi, yo sé llegar- se reincorporó y trató de caminar derecho, le funcionó.

-Está ebrio, aunque no lo parezca- Yugyeom pidió el taxi y ayudó a subir a Hoseok, iría con él y aprovecharía para irse a su casa también.

-Ahhh, ya sé, bueno... vámonos, no importa- el conductor hizo unos minutos.

Hoseok se despidió y miró el gran edificio, suspiró un par de veces y comenzó a subir los pisos, lo deseaba, deseaba tanto poder oler su presencia, fresas, lo único que pensaba, su cama, su cocina, su sillón, todo a su alrededor olía a fresas, abrió la puerta torpemente.

Taehyung se paró de inmediato y corrió a recibir a Hoseok... los dos se miraron.

-¡Sorpresa Hobi hyung!

El menor traía su cabello gris y no sólo eso, ahora también lo tenía rizado, se veía jodidamente bien, Hoseok abrió sus ojos, creía estar alusinando, todo le daba vueltas y era gracioso para él.

-¿Ho-Hoseok?...- tartamudeó al ver que el mayor se acercaba peligrosamente después de cerrar la puerta- Huele a licor- Hoseok no pensaba, no quería pensar.

-Te vez muy bien Tae- lo besó, lo besó haciendo que el sabor a alcohol se mezaclara en sus bocas y Taehyung dejo embriagarse de esa manera- No sé que pasa, me gustas demasiado...

-Y... y tu a mi- Taehyung dudaba, él sabía que a veces el alcohol no era bueno pues las personas hacían cosas sin pensar- ¿No estás muy ebrio?
Al ver su cara de temor, el mayor sostuvo su rostro.

-No te preocupes, estoy besándote porque quiero, porque me gusta hacerlo- Tae sonrió y se puso de puntas para besar al pelirrojo

-Ven...

Y ambos entraron a la habitación.

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What if...? ✴