El día del primer juicio había llegado, Jungkook salió de la ducha. Por primera vez acomodó su cabello de lado usando mucho gel, la camisa que le había conseguido su mejor amiga le quedaba algo justa, terminó de quitarse la pieza de su perforación en la ceja y luego la de su labio inferior.

Park Rosita:

Pasé por la Señora Xan,
ya está lista junto con Minnie.
Te vemos en cinco minutos.

Por cierto, va Taehyung conmigo.

Jungkook giró los ojos mientras terminaba de acomodar sus zapatos negros.

Bien, Lisa también estará allá
espero no haya inconveniente.

Con eso se dio por concluida la conversación de aquellos jóvenes. A decir verdad, Jeon estaba muy nervioso, dos días pasaron para acomodar todo, la casa quedó casi pulcra, los trámites de la carrera que estudiaba en la Universidad estaban listos, incluso hasta el pequeño apartamento de la anciana tuvo que estar bajo una diminuta remodelación.

Lo de su trabajo Jimin lo tenía resuelto, así que solo esperaba que todo saliera bien.

Un claxon sonó fuera y Jeon bajó apurado.

— ¡Woah! — dijo Lalisa exaltada, ella estaba ahí con los papeles de ambos hermanos acomodados— deberían demandarte más seguido si te vas a vestir así — Jungkook la miró de mala gana — ya, ya lo siento, creo que Jimin ha llegado —.

— Lo sé — dijo el pelinegro y enseguida fue a abrir, recibiendo a su hermanito en brazos con mucho amor. Luego entró la anciana, Taehyung y el peli rosa — te extrañé mi vida — el bebé se movía con emoción en los brazos de Jungkook y ambos se regalaban infinidad de cariño.

Por su parte, Park trataba de no babear ante la imagen que tenía, Jungkook enserio se veía más atractivo que de costumbre con ese traje negro.

— Vaya... Deberían demanda...

— No lo digas — sentenció el pelinegro con una mirada amenazante y Jimin se sintió jodido.

—Ok, entonces vámonos. Jungkook llegarás en taxi junto a la anciana Xan y Minnie, yo puedo llevarme a Lisa y a Tae —.

—Hola— habló por primera vez el castañito.

—Hola Kim— bufó Jungkook— en marcha.

❄
[Agarren pañuelos].

— Buenas tardes a todos, les pido que tomen asiento y guarden el debido respeto — dijo un hombre de edad mayor, al parecer era el juez. — Estamos aquí debido a una contra-demanda de hijo a padres —.

Jungkook estaba sentado detrás de un escritorio junto con la abogada Min, el pelinegro giró un poco la vista, ahí estaban sus padres sin testigos, sin cuidado personal, solo su abogado y ellos dos.

— Si no hay más que aclarar... Comencemos —.

Los siguientes minutos se trataron de declaraciones por parte de ambos lados, Jungkook hervía de coraje cada que su madre subía y hablaba de lo mucho que le dolió alejarse de sus hijos, todo era una farsa pero no bastaba con solo decirlo.

— Entonces nosotros volvimos — esta vez el Señor Jeon era quien pasó al estrado — pero nos enteramos que Jungkook se encontraba en situaciones ilegales... Algo delicado y pues nos decepcionó demasiado — el mayor vio a su esposa quién abría un poco los ojos para indicarle que guardara silencio, no les convenía hablar de eso ya que ellos en algún momento se vieron involucrados.

— Pido la palabra — habló Tzuyun levantándose de su asiento.

— Palabra concedida — dijo el juez.

— Podrá ver con claridad que dentro del expediente mi cliente cuenta con un trabajo estable — comenzó Min y Jungkook se puso rígido al instante, quería ver a los ojos a Jimin, solo quería estar tranquilo y le rogaba a todos los santos que saliera bien.

El juez hojeó aquella carpeta.

— Es cierto, pero las investigaciones son las que realmente hablaran — respondió.

— Claro, entonces le pido también que a los Señores Jeon les realicen un antidoping ya que sus antecedentes no son del todo buenos así como sus trabajos e ingresos actuales.— Tzuyun tomó asiento y los padres de Jungkook trataban de perforarla con la mirada.

Todo lo hablado fue escrito y analizado por ciertas personas dentro del juicio. Los demás salieron a un descanso de cinco minutos para que después la orden del juez sea dada.

— ¿Crees que algo malo pase? — preguntó Jungkook entre el círculo de sus conocidos, también estaba ahí la abogada sin embargo la pregunta fue para Jimin porque necesitaba sentirse seguro aunque el peli rosa no se veía convencido.

— Se lo diré yo — habló Min tocando el hombro de Jimin de forma cálida. — Jungkook... Si te diste cuenta, el tema delicado fue el trabajo y nada asegura que puede pasar, todavía ni siquiera sabemos cuánto tiempo debemos esperar para el próximo juicio, en todo caso pueden aislar a JungMin de ti y tus padres —.

— ¿Qué? — Jungkook abrió los ojos aterrado — ¿Por qué?

— Solo hasta que toda la información recopilada por nosotros como abogados sea confirmada —.

El receso había terminado y todos estaban de vuelta a su lugar.
Jimin logró tomar del brazo a Jungkook antes de entrar a la sala y lo abrazó por detrás.

—Sé que eres fuerte Kook, por favor no pierdas la paciencia ahí adentro pase lo que pase— Jimin apretó su agarre y Jungkook quiso huir de ahí con su hermano y con el peli rosa.

Pero obviamente eso no podía pasar.

— Muy bien — el juez se colocó sus lentes para leer una hoja donde venía lo que pasaría en unos instantes — según lo acordado con mis profesionistas y mi total consentimiento... declaro en este primer juicio que Jeon JungMin quedará bajo el cuidado de las autoridades adecuadas, refiriéndome a una casa de aislamiento solo hasta que las investigaciones esten terminadas. El próximo juicio será dentro de seis días hábiles — y entonces hizo sonar su mallete haciendo que al pelinegro casi se le fuera el aire.

¿Cómo no perdería la cordura?

De a poco todos iban saliendo de la sala, entre ellos sus padres. Jeon se acercó con desesperación al juez.

— ¿Cree que dejaré que se lleven a mi hermano a un lugar desconocido? — trató de guardar la calma.

— Es así o si no de otro modo me veré en la penosa necesidad de dar la patria potestad ahora mismo... Quizá un artículo diga que después de tres meses de abandono ya no tienen derecho sin embargo hay otro en el que los padres son tutores legales, joven, le recuerdo que usted ahora no es alguien mayor, al menos no en Corea del Sur —.

Jungkook soltó la bata del juez mirando  a la nada.

— ¡Kook! — gritó Lalisa y el peli negro volteó para encontrarse a unas chicas que parecían maestras de kinder, tratando de tomar a JungMin de los brazos de la Señora Xan.

Jungkook corrió hasta el lugar.

— Por favor... — habló la anciana — no se lo lleven... Por favor —.

Taehyung, Lisa, Jimin, incluso la abogada Tzuyun miraban con tristeza la escena.

— El bebé estará súper bien — dijo una de las chicas tratando de sonar amable — no es diario pero seguido nos llegan pequeños al lugar, así que de verdad puedes quedar tranquilo —.

Jungkook miró a Jimin con los ojos vidriosos y el peli rosa le indicó que obedeciera.

— Solo déjenme despedir — las jóvenes asintieron y Jungkook tomó en sus brazos al bebé quien lo miraba asustado— vas a regresar conmigo mi sol, pero necesito que mientras te portes bien, ¿si? — el bebé tomó con sus manitas la cara de Jungkook — te amo muchísimo y pronto vamos a estar juntos —.

Jungkook aguanto sus lágrimas y besó en la frente y en sus mejillas al pequeño. Park no pudo resistirse, al igual que Lisa y la anciana fueron en busca de un abrazo enorme.

Minutos más tarde llenos de melancolía las chicas se llevaron a JungMin entre risas porque sí, el bebé cedió su confianza a ellas dos.

De regreso la anciana Xan solo se la pasó recorriendo su apartamento con la compañía de Lisa.

La abogada pidió poder contactarse al menos una vez al día con el hermano de Jungkook.

Jimin llevó a casa a Taehyung quién también estuvo demasiado conmovido ofreciéndole todo su apoyo al pelinegro, después habló con sus papás para avisar que esa noche no estaría en casa.

Al final eran vacaciones y tenía que estar para Jungkook.

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Este no era el hot jaja.
No sé duerman.
M2/4 ❄