「𝑪𝒖𝒂𝒕𝒓𝒐: 𝑈𝑛 𝑝𝑎𝑠𝑎𝑑𝑜 𝑞𝑢𝑒 𝑝𝑒𝑠𝑎」
De niño alguna vez leí:
Cada vez que tomes una decisión en tu presente, procura que esa sea buena, para que si algún día tu pasado te alcanza, este mismo no interfiera en tu futuro.
¿Saben qué hice? Ignorarlo. Sí, fué lo que hice, pero ahora mismo me doy cuenta...
¡Vaya! cuánta razón tenía.
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Sus lágrimas continuaban acumuladas en sus ojos, aún estático frente a él, Leo sonríe un poco nervioso debido a la actitud de su hijo.
—Bueno, pasemos a la sala. —Indica el mayor. Alif y Leo comienzan a caminar, Mew va tras ellos, pero Gulf lo detiene tomándolo del brazo
El cuerpo de Mew tiembla pero aún puede mantenerse firme, con Gulf es diferente, sus manos tiemblan e incluso el agarre es muy inestable, sus ojos no son capaces de detener las lágrimas que en este momento salen una tras otra bañando su rostro. Mew traga grueso y simplemente se detiene sin volver a ver atrás, únicamente observando de reojos la mano de Gulf sobre su brazo.
—P-Perdón... —susurra. Mew cierra sus ojos y forma una línea fina con sus labios, guardando silencio —de verdad lo siento tanto, y-yo... —Solloza y vuelve a tomar aire —yo nunca quise... —Niega, sabiendo que Mew no le creerá si le dice que su intensión no fué lastimarlo —yo era un tonto en ese entonces pero te juro que ya no lo soy más, Mew, yo te a--
—Disculpe, Kanawut, nuestros padres nos esperan y es de mala educación hacer esperar a los mayores. Lo veo en la mesa, permiso. —Se suelta de su agarre.
Gulf rápidamente se dirige al baño de la primera planta y cerrando fuertemente la puerta tras de él, apoya sus palmas en sus rodillas y continúa su llanto. Sus lágrimas siguen saliendo una tras otra, lleva una mano a su pecho y da una bocanada de aire, su llanto es capaz de escucharse incluso a unos pasos fuera del baño.
Mew detiene sus pasos a una distancia corta del comedor pues escucha un ruido extraño, pero creyendo que es únicamente su imaginación, vuelve a retomar el camino y finalmente tomar asiento al lado de su padre.
—¿En dónde está Gulf? —pregunta Leo.
—Oh, — Mew arregla su saco —dijo que quería retocarse un poco — dice lo primero que se le ocurre.
—Ya veo, normalmente no es tan vanidoso pero creo que entiendo la excepción de esta vez. — Alif y Leo sonríen juntos.
—Sí, pero si gustan puedo ir por él — Mew se ofrece.
—Por supuesto hijo, deberías. — Alif dice —Tu prometido debe estar presente en la cena. No perdamos más tiempo para que puedan conocerse. —Sonríe.
—Hay que aprovechar cada momento —secunda Leo, compartiendo una sonrisa con su futuro consuegro político.
—Está bien, vuelvo en un momento. —Se pone de pie y se retira del comedor.
—Como te decía, Kanawut Technology...
Mew camina a pasos lentos hacia el baño, pues algo le dice que Gulf está ahí. Se detiene frente a la puerta de este y levanta su mano en un puño el cual detiene frente a la puerta, decidiendo si debería tocar o no.
De pronto esta es abierta dejando sorprendidos a ambos jóvenes por verse frente a frente, tan cerca, desde hace siete años que no se tenían tan cerca, siendo capaces de sentir las respiraciones del otro. Los corazones de ambos golpetean tan fuerte que podría ser posible que salgan volando de sus pechos. El puño de Mew continúa en el aire, Gulf siente como la respiración comienza a faltarle y el oxígeno se vuelve menos cada vez.
—Los mayores esperan por usted — Mew habla bajo, sin separarse y sin mover ni un solo músculo para alejarse del azabache. Gulf traga grueso.
—¿Seguirás actuando así? ¿Por qué me tratas tan formal? ¿Por qué finges que no me conoces? —su voz utiliza el mismo tono que Mew.
—No tarde, los mayores lo esperan. — Mew da la vuelta, pero esta vez Gulf sí que es más astuto y tira de su muñeca con fuerza para llevarlo hasta el baño y cerrar la puerta detrás de ellos. —¿Q-Qué está haciendo? —pregunta asustado, su corazón va a salirse en este instante, incluso le da un tic nervioso en su ojo. Su expresión se suaviza al notar los ojos llorosos de Gulf, su ceño se frunce y su corazón se encoge.
¿Por qué Kanawut?, ¿por qué incluso después de siete largos años, mi cuerpo, mente y corazón, siguen respondiendo a sus toques, a su cercanía? ¿Por qué? ¿Por qué sigue jugando conmigo después de tantos años?
La cintura de Mew golpea contra el lavamanos, ese baño es pequeño y a duras penas ambos caben ahí, Mew tiene sus pies en puntitas y sus muñecas pegadas a la pared del baño, Gulf está tan peligrosamente cerca de él. El azabache inclina su cabeza, tomando aire para conservar el poco valor que encontró, Mew aprovecha esa oportunidad para cerrar sus ojos y exhalar el aire que había contenido.
Gulf levanta su rostro y al mismo tiempo Mew abre sus ojos. —Lo siento, perdóname. — El azabache continúa sin soltar sus muñecas.
—Eso ya lo dijo. — Mew habla frío, con todas las fuerzas que logró reunir.
—Sé que ya lo dije, pero por favor debes creerme, yo lo siento tanto, por favor. —Relaja el agarre, pero al sentir como Mew protesta con movimientos, vuelve a presionar.
—Por favor, Kanawut, suélteme. — Mew vuelve a mover sus muñecas.
—Conmigo no necesitas hacer eso —dice, serio pero dolido por el actuar del menor.
—¿Hacer qué? — Mew desafía.
—Fingir que no me conoces, tú sabes que tú y yo nos ama--
—¡Cállese! — Mew reniega —no diga eso.
—¿Por qué no? — Gulf observa el sonrojo en las mejillas de Mew y una ola de seguridad se dispara por todo su cuerpo —¿Acaso no me amaste? — Mew mantiene su vista clavada en la suya, pero no responde —¿Cuánto tiempo crees que podrás seguir fingiendo no conocerme? —Acerca su rostro más a él. Mew ladea su cabeza y cierra sus ojos. —Mew...
Los recuerdos de todas las ocasiones en que Gulf lo llamaba de esa forma, por su nombre pero con tono seductor, comenzaron a apoderarse de su mente y sus piernas flaquearon, pero no iba a rendirse tan fácil.
—No sé de qué me habla, suélteme por favor. —Vuelve a decir, pero esta vez su voz sale un tanto apagada.
—¿Ya olvidaste que me amaste? — Gulf susurra en su oído, Mew cierra y presiona sus ojos —Tú me ama--
—¡Está bien! — Mew bufa interrumpiendo al moreno —Sí lo hice, amarte fué lo único que hice. Pero queda claro que yo fuí el único, — El ceño de Gulf se frunce —te amé con locura, te entregué todo de mí... — Gulf siente su corazón oprimirse de nuevo al contemplar el brillo que se asoma en los orbes de Mew.
—N-No... por favor no llores —dice casi en súplica, él no quería eso, no quiere volver a hacerlo llorar, no quiere eso, únicamente quiere hacerlo feliz, no infeliz.
—No lo haré, —responde firme, aún con sus ojos cristalinos —ya dejé de ser el chico estúpido y... — Gulf lo observa con dolor y sorpresa combinados —¿cómo fué que me llamaste?... — El moreno traga grueso y su corazón vuelve a doler —idiota, ingenuo y confiado. — Gulf cierra sus ojos. —No te preocupes, Kanawut, ya dejé de ser ese idiota que cayó rendido a tus pies, el mismo idiota que te perdonó una y otra, y otra vez, el que con solo una de tus palabras y caricias volvía a creer en tí, ya no te lloro por las noches, ya no te pienso, ya no te extraño, ya no te sufro. Descuida, ahora por fín... ya no te amo. — Las lágrimas se deslizan nuevamente por aquellas caneladas mejillas, su labio inferior comienza a tiritar y todo a su alrededor se destroza nuevamente, como aquel día en que Mew se fué para siempre de su lado. —Ahora, por favor, — el castaño se suelta de sus manos —por el bien y la comodidad de ambos, hagamos como si esta es la primera vez que nos conocemos, usted, Kanawut, finja que no me ha conocido antes. —Pasa a un costado de Gulf, dejando a este sin palabras y nuevamente con sus ojos acuosos, dentro del baño.
Mew sale del pequeño cuarto de baño y se dirige a la cocina, en la cual la pared del refrigerador y de la puerta cubren su figura, su semblante se mantiene serio hasta que está seguro de que nadie va a observarlo. Lleva su mano a su pecho y la otra a su boca, cierra sus ojos y ahora que su mano calla sus sollozos, comienza a llorar, perdiendo la fuerza en sus rodillas y callendo al suelo. Su mano derecha se aprieta sobre su pecho y reposa su cabeza en la pared, la mano que cubre su boca es humedecida por sus propias lágrimas y su corazón duele nuevamente.
Durante todo este tiempo creyó que ya lo había superado, que Kanawut era parte de su pasado, que el hecho de no querer alguna relación con alguien más se debía a que simplemente estaba cansado de ello y no al hecho de que aquel azabache aún mandaba en su corazón. Que el no querer salir de la biblioteca y dedicarse únicamente a sus estudios, se debía a que quería ser alguien triunfante en la vida y no a que ello realmente le ayudaba a distraerse de pensar en Gulf.
Él... ya lo había superado, o al menos... eso creyó.
Durante mucho tiempo pensó que ya se había desecho de todos sus recuerdos y su amor por Gulf, pero no, no había sido así. Algo, aún había algo que se quedó en su corazón, pensó que ya lo había olvidado, que ya no le dolía recordarlo ni recordar lo vivido con él. Pero no, al verlo nuevamente se quebró, toda su tranquilidad desapareció de su ser, se sintió vulnerable nuevamente así como hace siete años. No fué suficiente el tiempo invertido sin acariciar su piel, todas aquellas noches en las que se preguntaba: ¿qué pudo haber pasado si todo hubiese sido diferente?, ahora que lo vió nuevamente todo el proceso se reinició, su dolor, su vulnerabilidad...
Su amor por Gulf
Y entonces lo supo...
Gulf le seguía haciendo daño.
28 de Marzo - 2020
Universidad Chulalongkorn / Bangkok.
—¡P'Gulf! Espéreme por favor — Mew corría sosteniendo su mochila que se deslizaba por su hombro, la ilusión y la alegría podían notarse en su rostro.
—¡Hey, hey, hey! ¿A dónde tan rápido? —Detuvo de inmediato su corrida.
—P'Soo, buenos días, —saluda educado —disculpe, ¿podría darme permiso? Es que P'Gulf no me escucha y quiero alcanzarlo. — Soobin traga grueso, hace un momento escuchó la conversación de Gulf con un chico de su mismo curso, ambos habían quedado de verse detrás del jardín de la universidad.
—¿Gulf? Él no está aquí, Mew. — El castaño frunce el ceño y acomoda sus gafas .
—P-Pero... yo acabo de verlo, era él.
—Por supuesto que no, no era él. — Soobin observa su reloj, eran exactamente las 8:45 AM —Es que Gulf aún no llega. —Miente.
—¿Cómo? — Mew vuelve a fruncir su ceño —Pero yo acabo de verlo...
—¡Oh vamos! ¿Tan atontado te tiene? — Mew inclina su cabeza —Avisó por WhatsApp que vendría tarde. — Ahí va otra mentira, prefiere mentirle al menor, que verlo destrozado debido a Gulf.
—Pero él me prometió que desayunariamos juntos hoy, P'Soo, él... me lo prometió y y-yo... — Soobin traga grueso, observa en dirección hacia el jardín y niega.
—Mira, a lo mejor le ocurrió una emergencia de último minuto, quizás su padre está enfermo, debes ser comprensivo. — Mew asiente.
—S-Sí... tiene razón, a lo mejor estoy exagerando. —Sonríe triste. —¿Q-Quiere?... —Traga grueso —phi, ¿quiere ir por un café? — Soobin sonríe emocionado.
—Claro, por supuesto que sí —Rodea el hombro de Mew con su brazo y lo impulsa a caminar.
El castaño de gafas voltea hacia atrás repetidas veces, él está completamente seguro de haber visto a Gulf pasar por ahí, había gritado tan fuerte que creyó seguro que sería escuchado, pero no fué así. A lo mejor y Soobin tenía razón y solamente fué una ilusión.
•
—Ngh~ s-sí aahhh m-más — Gulf presionó sus dedos hasta que sus nudillos se volvieron blancos, sosteniéndose del cuello de Jair, el badboy popular de la universidad.
—Tan precioso. —Gruñó, besando el lóbulo de la oreja de Gulf y embistiendo ahora más fuerte. —Grita mi nombre, bebé. — Gulf niega.
—No soy una puta que gritará tu nombre mientras follan. — Jair lo mira molesto y vuelve a embestir provocando un espasmo en el cuerpo de Gulf.
—Dije que gimas mi nombre. —Vuelve a repetir molesto. Gulf lo empuja y suelta una risa.
—Y yo he dicho que no soy tu puta. —Toma una toallita que siempre lleva consigo y limpiando la humedad de su trasero, sube sus pantalones.
—No es divertido Kanawut, ni siquiera logré venirme. —Bufa molesto el otro.
—¿Y tú crees que eso a mí me importa, idiota? Eres un estúpido. Dejé plantado a alguien con un buen café, por culpa tuya, teniendo expectativas de que serías mejor que esto. — Se burla. Jair aprieta sus puños.
—¡¿Y te molestas únicamente porque te pedí que dijeras mi nombre?!
—Recuerda esto: yo nunca, NUNCA gimo el nombre de nadie. Que te quede muy claro, el sexo me gusta a mí manera y es solamente eso, sexo. Así que, ni siquiera pienses en que aceptaré tu invitación a cenar en tu casa ésta noche. —Termina de abrochar su pantalón y comienza a colocarse su chaleco.
—¡Eres un idiota! — Jair grita al momento en que Gulf comienza a caminar.
Este como respuesta simplemente alza su mano en alto y le enseña el dedo medio. El rubio da una patada contra la pared y bufa furioso.
Gulf sale en escena al pasillo nuevamente, su reloj ahora apunta las 9:30 AM, reniega molesto con balbuceos y llega a su salón de clases. Al entrar a este lo primero que enfoca su campo de visión, es a Soobin sentado en el puesto frente a Mew, estos están hablando quien sabe sobre qué y Mew sostiene unas notitas en sus manos.
Chasquea la lengua y camina a pasos rápidos hacia ellos, tira con fuerza del hombro de Soobin y lo aleja con tanta fuerza que lo hace caer al suelo.
—¡¿Pero qué?! —jadea sorprendido su amigo. Mew lo mira atento, observa su cabello revuelto y su rostro de un carmín tenue, sus labios están hinchados que incluso el inferior tiene una mordida y no lleva labial en estos. Y como si fuera poco en su cuello hay una marca, una que por supuesto no hizo él.
—Estás en mi lugar, quítate. — Mew se pone de pie de su propio asiento y ayuda a Soobin a levantarse, ha confirmado que Gulf no tuvo ningún accidente que atender.
Minutos después entra Jair al aula y este va en peores fachas que Gulf, pues ni siquiera ha arreglado bien su camisa, el cuello de esta tiene una leve mancha en rojo, los ojos de Mew se cristalizan y observan a Soobin.
Gulf no dice nada, los malditos y traidores celos que siente ahora, se suman con la frustración y disgusto que Jair provocó en él. Está molesto y no quiere ni siquiera hablar.
—¿Está bien, P'Soo? — Mew pregunta pero su mirada está puesta en Gulf.
—S-Sí... estoy bien —responde bajo el otro —. Gracias por el café, — Gulf, que veía fijamente a la mesa, levanta su vista de inmediato de esta y presta atención a la plática ajena —estuvo super delicioso y... m-me gustó mucho pasar tiempo contigo —dice sonrojado. Mew ni siquiera está prestando atención, su mirada ahora divaga del suelo a Gulf.
—S-Sí... ehm, creo que debería volver a su asiento phi, la clase está por comenzar. — Soobin asiente triste y regresa a su puesto.
Jin y Sichamta observan desde el otro extremo del salón, Jin sabe lo que ha sucedido entre Gulf y Jair, así mismo como sabe de lo que ocurrió entre Mew y Gulf hace no más de dos días. Aunque no pasó a nada más sexual que simples toques, Mew parecía revolotear por toda la universidad desde ese día e incluso las burlas por ser el nuevo "idiota" que caía ante Gulf, ya habían iniciado.
—Y volvió a hacerlo —comenta Sichamta observando como Mew llora a escondidas, o al menos es lo que trata al inclinar su rostro.
—Pobre, en realidad Mew me cae muy bien —comenta un triste Jin.
—¿Por qué? —susurra, Gulf sabe que esa pregunta es para él, se recuesta en la silla y no dice nada, pero le indica a Mew que está atento a lo que dice —¿Usted sí me escuchó, verdad? — Gulf traga grueso —Phi, yo le hablé en los pas--
—¡Déjame en paz! ¡Ahora no estoy para aguantar tus preguntas estúpidas, sí, te escuché y decidí ignorarte porque tenía algo importante que hacer! ¡¿Felíz?! — Toda la clase observa la escena, Mew parpadea y sus lágrimas se resbalan por sus mejillas, aprieta sus puños y solloza.
—Pero, yo creí que nuestro desayuno también era importante —susurra, con un hilo de voz apenas audible debido al nudo acumulado en su garganta.
—¡Pues te queda de lección para que no vayas por la vida creyendo o asimilando cosas que no son, porque no fué así! — Gulf suelta.
Mew lo mira anonadado, sin poder creer lo sucedido, guarda silencio un momento, pero luego de limpiar sus lágrimas y tomar aire, habla.
—Bien —Toma su mochila y sin decir más, comienza a caminar rápidamente hasta salir del aula, Gulf lleno de furia se deja caer en su asiento y queda en shock.
Su subconsciente vuelve en sí y ahora la razón le grita en reproche, su pecho comienza a doler y su corazón le grita que vaya detrás de él, pero al girar su cabeza hacia la derecha ve a Jair y decide quedarse sentado en su lugar, cruza sus brazos y observa hacia el piso.
—¡Eres un completo idiota!, ¡imbécil! — Soobin le dice furioso, antes de salir corriendo trás Mew.
En su estómago se forma un nudo, lleno de celos decide morder su labio internamente y cerrar sus ojos, luchando con todas sus fuerzas por evadir la necesidad de ir tras Mew y alejarlo lo más que pueda de Soobin.
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Shale 🥺
Solo diré que la verdad sí me
duele el actuar de Gulf con Mew
en el pasado.
Pero también me duele su
sufrimiento y el de Mew en el presente.
🥺🤧🤧
En fin, díganme ustedes
¿qué opinan al respecto?
Los estaré leyendo
Besitoss y abrazitoss.
♡•Jeff Suppasit•♡
[Publicado: 14/03/22
Corregido: 20/01/23]
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