CAPÍTULO 5
Jimin se despertó sintiéndose terrible, la garganta la sentía seca, abrió lentamente los ojos reconociendo su habitación, pero se sentía extrañamente incómodo, al sentir algo apretando su cintura con fuerza, con un poco de miedo levantó la manta.
Envolviendo su cintura estaban un par de brazos, ¿pero de quién? Pensó aún un poco desorientado por el alcohol, vio que solo estaba vestido con su ropa interior, se movió para poder sentarse y fue entonces que reconoció las cabezas de quienes estaban a sus lados.
Un par de gritos y dos golpes secos se escucharon antes de que Jungkook y Taehyung se vieran tirados en el suelo.
—¿Por qué me pateas? —gritó Jungkook con voz ronca.
Jimin inmediatamente agarró la manta y se cubrió hasta la barbilla, Taehyung y el pelinegro lo miraban confundidos ante su actitud tímida, se pusieron de pie y los ojos marrón claro del rubio se abrieron con sorpresa y apartó la mirada de ellos.
—¿Por qué están durmiendo en mi habitación, desnudos? —pregunto sin verlos directamente.
—¿Qué, no te acuerdas de anoche? —preguntó Taehyung.
—¿Qué? ¿Anoche? ¿Que diablos pasó? —pregunto por toda respuesta.
En su mente comenzaron a formarse mil y un pensamientos sobre lo que había pasado la noche anterior entre ellos, mientras su rostro se ponía rojo y su corazón latía acelerado.
—Te pusiste muy borracho, hiciste un lío, fue difícil tener que lidiar contigo, tuvimos que limpiarte y ponerte a dormir —le dijo Jungkook compadeciéndose de la expresión de terror de Jimin.
—Entonces, ¿por qué están durmiendo desnudos conmigo? Ustedes tienen su propia habitación.
—Teníamos sueño, también estábamos un poco borrachos y fuimos demasiado vagos para caminar hasta nuestro cuarto —habló Taehyung con una sonrisa ante la mirada preocupada de su amigo.
—No me hicieron nada raro ¿verdad? —les pregunto de nuevo.
—Si te hubiéramos hecho algo no podrías sentarte ahora idiota —lo regaño Jungkook antes de salir del dormitorio, pero no por enojo sino porque ver la expresión de timidez del rubio lo estaba provocando.
—Levántate y toma una ducha —le dijo Taehyung antes de salir y volver a su habitación.
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—Tae, creo que ya es tiempo de comenzar a atacarlo, estoy comenzando a impacientarme —dijo Jungkook cuando vio salir al castaño de la habitación.
Taehyung asintió mientras sonreía de acuerdo con él.
—Está bien, yo tampoco puedo soportarlo más —respondió antes de entrar a su cuarto.
Una vez que estuvo solo Jimin se puso en pie, su corazón aún latía acelerado, la imagen de sus dos amigos de pie en solo ropa interior volvió y por una fracción de segundo pensó en lo atractivos que eran, antes de desechar el pensamiento y meterse a la ducha.
—Woo me sentaré contigo — anunció Jimin cuando entró al comedor y vio el asiento al lado de Eun Woo vacío.
Había salido de la casa mucho antes que sus dos amigos, no sé atrevía a verlos a la cara después de lo que había pensado de ellos, sobretodo cuando todavía tenía muy clara la imagen de ambos de pie solo en ropa interior. Se frotó la cara y miró alrededor viendo si aún no llegaban.
—¿Y tus queridos amigos? —preguntó Eun Woo por los otros dos que normalmente nunca dejan que Jimin se siente y coma con otras personas que no sean ellos.
—No han terminado de ducharse y vestirse y he salido de casa antes, estoy muriendo de hambre —le respondió el rubio.
Su compañero asintió antes de volver su atención a la comida, mientras Jimin fue a servirse, cuando estuvo de vuelta vio a Jungkook y a Taehyung caminando hacia él, se sentó inmediatamente al lado de Eun Woo haciendo que ambos fruncieran ligeramente el ceño, mientras se veían el uno al otro.
—Ve a hablar con él, yo tomaré la comida para los dos —dijo Jungkook sabiendo que Tae era más tranquilo que él.
El casto asintió y fue hasta la mesa donde estaba Jimin que no volteó a mirarlo, centrando su atención en la comida, por lo que Eun Woo lo pateó suavemente por debajo de la mesa.
—¿Por qué no esperaste para salir con nosotros Jimin? —preguntó Tae
Jimin levantó la cabeza para mirarlo un momento antes de volver a desviar la mirada.
—Tenía hambre, así que me apresuré a salir —respondió el rubio tratando de mantener su voz normal.
—Ven a sentarte con nosotros.
—Ya estoy sentado, siéntense y coman juntos, ya todo está casi lleno —respondió Jimin, negándose a cambiar de lugar.
Tae frunció un poco el ceño antes de mirar a Eun Woo que solo se encogió de hombros y negó con la cabeza, en señal de que no sabía qué pasaba con el rubio.
—Aún hay lugar para que nos sentemos los tres —insistió el castaño.
—Es lo mismo donde quiera que te sientes.
Jungkook llegó hasta ellos, aunque no había escuchado lo que dijeron, por la cara molesta de Tae y la actitud de Jimin, entendió que algo pasaba.
—Ven, vamos a sentarnos a comer —le dijo Taehyung caminando hacia otra mesa.
—¿Qué te pasa hoy? —le susurró Eun Woo a Jimin en voz baja.
El rubio inmediatamente negó con la cabeza.
—No pasa nada.
—¿Por qué no vino a sentarte con nosotros? —preguntó Jungkook mientras se sentaban en otra mesa.
—No lo sé. ¿Se habrá enojado porque los dos nos burlamos de él está mañana?
—No lo creo, si estuviera enojado no nos hablaría.
—Sí, pero esta es la primera vez que se niega a sentarse con nosotros —volvió a quejarse Taehyung.
—¿Quieres que lo arrastre por el cuello y le pregunté? —le preguntó Jungkook con voz tranquila, mientras volteaba a ver al rubio.
—Es mejor preguntarle cuando no haya nadie más —respondió Taehyung antes de seguir comiendo.
Vieron como Jimin se levantó de la mesa en cuanto terminó y salió del comedor hacia la parte de enfrente de la casa.
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—Hey Jimin, pensé que te ibas a quedar en la casa todo el día, por culpa de la resaca, ¿estás bien? Te ves pálido —saludo Yoongi al verlo un rato después.
—No no estoy bien, me duele la cabeza y me siento mareado, creo que no volveré a tomar —respondió Jimin, dejando lo que hacía para acercarse al mayor y sus palabras fueron escuchadas por sus dos amigos.
—Vete a la casa y descansa, hoy es día libre para todos —le dijo Yoongi preocupado por cómo se veía, pues no parecía ser malestar por tomar de más.
Jimin asintió y le agradeció antes de caminar hacia su casa, bajo la mirada preocupada de Taehyung y Jungkook.
—Jungkook, ve a echarle un vistazo, en caso de que se desmaye antes de llegar a casa, y tú Taehyung vea decirle a Nana que le preparé algo contra la resaca —les ordenó el mayor.
—Sí —respondieron ambos al unísono antes de dispersarse rápidamente.
—No es nada, sólo estoy un poco mareado —dijo Jimin al percatarse de que Jungkook entró detrás de él a la casa.
Al sentirlo cerca sintió su rostro enrojecer y su corazón latir rápido, Jungkook se acercó más a él y Jimin se sorprendió un poco.
—¿Qué haces? —preguntó nervioso al sentir la mano de su amigo tocar su rostro.
—Compruebo si tienes temperatura, quédate quieto —respondió el pelinegro antes de usar el dorso de su mano y colocarlo en su frente.
Jimin trató de mantenerse lo más quieto posible, el toque de Jungkook lo estaba poniendo nervioso y no entendía el porqué.
—Estás un poco caliente. Creo que es mejor tomar algo para bajar la fiebre primero, no quiero que te enfermes —hablo Jungkook realmente preocupado por su bienestar.
A pesar de su nerviosismo, Jimin se sintió bien ante las palabras de Jungkook, le gustaba saber que el pelinegro se preocupaba por él, pero esa misma sensación lo hizo sentir un poco de vergüenza.
—Ya puedes quitar tu mano de mi cuello —le dijo Jimin.
La mano de Jungkook había pasado de su rostro a su cuello mientras seguí comprobando su temperatura y la había dejado ahí por pura inercia, y al percatarse de eso la retiró lentamente, causando un escalofrío en el enfermo que se paró de golpe del sillón.
—Me voy a dormir —anunció y Jungkook frunció el ceño.
—¿Te vas por mí?
—No, solo quiero dormir, aún me siento mareado.
—Estoy preocupado por ti.
—Bueno... lo sé... estás preocupado, eso es… —trato de decir Jimin, sin saber realmente cómo explicarle su actitud, sin morir de vergüenza.
—¿O es que no quieres ver mi cara? —preguntó Jungkook de nuevo.
Esto hizo que Jimin frunciera el ceño.
—¿Por qué dices eso? preguntó de inmediato.
—Desde está mañana nos has estado evitando a Tae y a mi, ¿por qué estás enojado con nosotros? —preguntó el pelinegro directamente.
—Oh… no, no los evitaba —respondió obstinadamente.
—¿Estás seguro? —volvió a preguntar Jungkook y Jimin desvío la mirada.
—Deja de interrogar me, estoy mareado —se quejó Jimin.
No entendía porque de pronto se sentía tan tímido, en la presencia de sus amigos, no quería verlos a la cara porque su corazón late de manera extraña cada que los ve.
Jungkook no hizo más preguntas, solo se quedó mirándolo, haciendo sentir culpable a Jimin, pues su amigo sentía que estaba enojado con ellos, volteó a verlo y lo pateó suavemente.
—Puedes hablarme, te prometo que no estoy enojado, creo que es por la enfermedad que me siento raro —le dijo tratando de sonar convincente.
Se volvió a sentar en el sofá al lado de Jungkook, después de todo sus amigos no tenían la culpa de las tonterías que sentía últimamente.
—Solo porque estás enfermo no te pateó, me quedaré quieto y en silencio —se quejó Jungkook aunque su tono era claramente de broma.
Jimin asintió haciendo un puchero con sus labios y cerró los ojos, justo cuando comenzaba a sentirse adormilado Taehyung entró con un vaso grande en la mano.
—¿Cómo está? —preguntó el castaño pensando que dormía al verlo con los ojos cerrados.
—Probablemente solo sea la resaca —respondió Jungkook mientras Taehyung se sentaba del otro lado del sofá.
—Jimin levántate y bebe un poco del agua de jengibre que te hizo Nana, dijo que era buena para la resaca —le hablo Tae mientras lo movía con suavidad.
—¿Jugo de jengibre? —preguntó Jimin haciendo un gesto de
—Sí, anda, toma un poco —lo ánimo Taehyung.
Sin más remedio tomó el vaso y le dió un trago, antes de hacer gestos.
—Vuelvan al trabajo, o serán regalados por Yoongi hyung —les pidió después de tomar otro trago del agua, no quería que se metieran en problemas por su culpa.
—Yoongi nos dio permiso a los dos para venir a cuidarte —respondió Taehyung.
—Creo que también tiene fiebre —dijo Jungkook hacía Tae.
Lo que hizo que el castaño pusiera el dorso de su mano sobre su frente, lo que hizo que Jimin casi se ahogara con el agua que estaba bebiendo, su corazón volvió a latir con fuerza, de la misma forma que cuando el pelinegro lo tocó.
—Bebe despacio —lo regaño Jungkook.
—Solo me sorprendió —se quejó Jimin haciendo reír a Taehyung que movió su mano a su cabeza y lo acarició suavemente.
—Se siente caliente, creo que si tiene fiebre —le dijo Taehyung a Jungkook.
—Te daré una pastilla para que la tomes con el agua —anunció Jungkook poniéndose de pie para ir por el medicamento.
Jimin hizo una mueca pero no dijo nada.
—¿Estás enojado? —le preguntó Taehyung por la actitud anterior del rubio y por el gesto que había hecho.
Jimin lo miró inquieto, volviéndose a sentir mal al ver la mirada triste de su amigo.
—¿Por qué ustedes dos piensan lo mismo? No estoy enojado, pero si siguen diciendo eso, si me enojaré —volvió a quejarse.
—¿Entonces por qué nos evitaste? —volvió a preguntar Taehyung.
Jimin lo miró antes de suspirar y negar con la cabeza.
—No estoy enojado, en serio —respondió.
—Está bien, pero si no estás satisfecho con algo debes decirnos —le dijo Taehyung y Jimin asintió con una leve sonrisa.
Jungkook volvió con las pastillas, se las tomó y le entregó el vaso para que lo dejara en la cocina.
—¿O te enojaste porque dormimos en tu cama anoche? —volvió a preguntar Taehyung.
Jimin se quedó en silencio, pensando en cómo reaccionó su corazón en la mañana, su rostro se sonrojo ante ese recuerdo de ellos dos en ropa interior, pero de inmediato desechó el pensamiento.
—No, no estoy enojado. Los tres dormimos en la misma cama con bastante frecuencia —respondió por fin, tratando de no recordar la imagen.
—Bien, solo recuerda que si tienes algún problema debes decirnos.
Jimin volvió a asentir.
—Ve a dormir —ordenó suavemente Jungkook—. Ya no lo molestes más —dijo hacia Taehyung.
Ambos asintieron, Jimin caminó hasta su cuarto, con ellos siguiéndolo detrás.
—Llamanos si necesitas algo, volveremos a ayudar a Yoongi hyung —dijo Taehyung mientras cubría a Jimin con una manta.
Jungkook mientras abrió un poco la ventana para ventilar la habitación.
—No prendas el aire acondicionado, el día no es tan caluroso así que con la ventana abierta servirá —dijo el pelinegro.
Jimin volvió a asentir. Taehyung salió y volvió con un vaso con agua y lo dejó en la mesita a un costado, para que la tomara si sentía sed. Después de eso ambos salieron de la habitación y cerraron la puerta.
Jimin miró la puerta cerrada con expresión confusa, por los extraños sentimientos que sentía.
—Ustedes dos me están malacostumbrando —murmuró y cerró los ojos pensando en todo lo que sus dos amigos siempre hacían por él.
Notas de la autora que nadie lee:
Cómo se podrán dar cuenta la historia lleva un ritmo lento, pero como dije desde un inicio, más que drama se narra el como se fue desarrollando la relación de los tres y como los sentimientos de Jimin comienzan a cambiar, y todo el revoltijo de emociones que siente.
Como se empezó a ver desde este, ya está empezando a sentir cosas distintas y comenzar a confundirse. Y el otro par tampoco se la pone fácil.
Ahora díganme que no querrían un par de enfermeros con Jk y Tae jejeje.
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Nos leemos bellezas...
Besitos 😘😘😘
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