𑁍┊Cᴀᴘɪ́ᴛᴜʟᴏ xɪɪɪ

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▗ ▘➤ “Los dulces 100 años”; las fiestas de cumpleaños son para disfrutar un año de vida más y dónde las familias o amigos pueden reunirse a disfrutar un buen momento.
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Durante el fin de semana, los estudiantes esperaban ansiosamente que sus abuelos fueran a buscarlos. Cuando un imponente carruaje apareció frente a ellos, el cochero abrió la puerta y Winston Nathair y Cordelia descendieron del carruaje.

— ¡Abuelo! -La más pequeña, sosteniendo a Shiva, corrió a abrazarlo-

— ¡Abuela! -El joven abrazó a su abuela y sonrió con alegría-

— Hola, mis queridos nietos -Correspondió al abrazo de sus nietos-

— ¿Cómo han estado? -Les preguntó su abuelo-

— Muy bien. -Responden al unísono-

— Es bueno escucharlo. -Contesta la mayor de las de pelo rosa-

— ¿Y ese pequeño amigo? -El anciano nota la cría de lobo-

— ¡Guau! -Ladra-

— Es Shiva, un amiguito que decidimos adoptar en secreto. -Responde la joven y le guiña el ojo-

— Tan bondadosos como siempre. -Ríe ligeramente-

Los cuatro subieron al carruaje y partieron hacia su hogar. Al llegar y descender del vehículo, entraron a su casa y dejaron a Shiva en el suelo mientras recibían a sus abuelos y conversaban sobre su fiesta de cumpleaños.

— ¿Deseas hacer algo especial este año? -Preguntó Nathair-

— Sí, me gustaría organizar una fiesta e invitar a mis amigos. -Contestó su nieta con entusiasmo-

— Estoy de acuerdo con mi hermana. -Dijo su hermano con alegría-

— ¡Está decidido! -Exclamó emocionada- ¡Mis nietos cumplirán 100 años!

— Hablaremos con nuestros contactos y nos encargaremos de la ornamentación con tu abuela.

— Oh, abuelos -Los miró apenada la menor- Déjenos ayudarles.

— ¡No! -Habló Cordelia con seriedad- Cumplirán 100 años mañana y no dejaré que se rompa la sorpresa, así que solo les dejo encargado su vestuario, ¿entendido?

Los muchachos asintieron apenados y Robin entró a su hogar, donde se encontró con sus suegros. Confundido, dejó su maletín de trabajo y se ajustó los anteojos.

— Me perdí algo. -Se le notaba confundido-

— ¡Papá! -Sus hijos expresaron su decepción-

— ¡¿Cómo pudiste olvidarte del cumpleaños de tus hijos?! -Lo reprendió Cordelia-

— Oh... lo siento -Sonrió levemente y se rascó la nuca- He estado muy ocupado con el trabajo y perdí la noción del tiempo.

— Ya están cumpliendo 100 años -Comentó, dejando al doctor sorprendido-

— Entonces, con más razón ayudaré -Dijo-

— ¡Evidentemente que lo harás! -Suspiró y sintió que su marido le tocaba el hombro suavemente-

— No te molestes con él, querida. Recuerda que no ha sido sin su culpa. –Sonrió un tanto-

— Oh Natsume. –Sonrió suavemente y sostuvo su mano en vez de-

— Nuestra madre estaría muy contenta de vernos a todos. –Dijo Acyn-

— Estoy de acuerdo con este tonto. –Sonrió más ampliamente y se apoyó en el hombro de su esposo-

Los asistentes se rieron y pasaron toda la madrugada juntos, hasta que los mayores se responsabilizaron de organizar todo. Acyn, (T/N) y Shiva salieron a la ciudad en busca de un atuendo adecuado para ellos y su pequeño amigo. Una vez que lo encontraron y adquirieron, regresaron a casa para guardar el conjunto hasta el día siguiente.

(. . .)

Al día siguiente, los gemelos despertaron y sus abuelos y su padre los felicitaron por haber cumplido 100 años y les entregaron su regalo, pero les informaron que solo podrían abrirlo cuando estuvieran a solas.

— Gracias por todo. -Sonrió contento Acyn y los abrazó-

— También… gracias. -Corrió hacia donde se encontraba, uniéndose al abrazo y le extendió la mano a su padre-

— Oh… pequeños. -Sonrió feliz y también los abrazó-

No sabían cuánto tiempo se habían abrazado, y justo después de separarse, los adultos salieron de la habitación y permitieron que los gemelos se prepararan para su fiesta, vistiéndose junto a su pequeña mascota, Shiva. Al salir de la habitación, notaron que sus abuelos y su padre ya estaban listos para ir a la fiesta, así que subieron al carruaje y se dirigieron a su destino. Tan pronto como llegaron, bajaron y entraron en la quinta, lo que sorprendió a los hermanos por su hermosa decoración.

— ¡Está precioso! -Dijo sorprendida Damaris-

— Es verdad. -Observó todo con una sonrisa-

— Me alegro que les haya gustado. -Sonrió su abuela-

— Ahora solo deben recibir a los invitados, que son compañeros de tu padre y su familia. -Mencionó el abuelo-

— ¡Es verdad! -Comentó el doctor, animado-

— Está bien. -Respondieron al unísono-

— ¡Woof! –Movió su colita Shiva-

No tardaron en llegar los invitados, recibidos por los gemelos. Los últimos en presentarse fueron sus amigos y familiares, encabezados por Erica, quien venía acompañada de sus padres y sus tres hermanos mayores.

— ¡Te ves hermosa, (T/N)! -Exclamó con sorpresa la demonio.

— Oh, gracias, Erica -Sonrió y abrazó a su amiga-

— Sé bienvenida, amiga. -Comentó Acyn y notó cómo su contraria asentía- ¡Felicidades por cumplir 100 años! -Entregó un regalo a cada una- Espero que les guste.

— Gracias, mi vida. -Sonrió la de ojos celestes-

— Bueno, vamos a sentarnos.

— Siéntanse a gusto.

La segunda fue Cloe y junto a sus bisabuelos, pero solo parecía estar la mujer y apenas se sentía una leve presencia cerca de las mujeres.

— ¡Chicos! –Saludo la rubia- ¡Feliz cumpleaños! –Les entrega el regalo-

— Gracias Cloe. –Se sonroja un poco al ver a la más baja y su gemela golpea su hombro para que se concentre-

— Eres muy mable, gracias. –Ella sostiene su mano y sonríe tiernamente- Pueden entrar y sentarse donde deseen. –Sonrió- Señora Julia.

— Felicidades, jovencitas. –Saludo la mujer y, junto a su nieta, se fueron a sentar-

— Deberías aprender a aparentar un poco más. –dijo un poco molesta-

— Eres la menos indicada para hablar. –Se mantuvo serio-

— Me alegro que Cloe sea una buena mujer, así que más te vale no lastimarla si la pretendes. –Dijo sin más-

— Lo mismo tengo que avisarle a tus pretendientes. –Sonrió con burla-

— ¿Pretendientes? –Lo miro confusa- ¿Quiénes son?

— Eso debes descubrirlo por ti misma, hermanita. –Rio ligeramente y noto la llegada de dos personas que reconoció-

El tercero y cuarto eran Nagi junto a Natsume, parece que ninguno tuviese familia y se debe a que venían solos, lo que les pareció extraño a los gemelos y optaron por no preguntar.

— ¡Sean bienvenidos! –Hablaron al unísono-

— Oh gracias a ambos. –Sonrió amable como siempre el hombre invisible y le entrego un regalo a ambos-

— Gracias. –También entrego su regalo a los dos-

— Siéntense donde deseen. –Comento animada la joven-

— Está bien, gracias. –Rio Nagi y su contraria se avergonzó-

— Felicidades por cumplir 100 años. –Acomodo los cabello de la peli-rosa detrás de su oreja y causo un sonrojo enorme en ella-

— Oh, g-gracias. -Se alejó inconscientemente y sostuvo la mano de su gemelo-

El albino parecía confundido y solamente pasó a sentarse, mientras que la momia sonreía nuevamente y se marchó junto a Nagi. Por último, llegarían Ray acompañado de su familia y estos fueron recibidos por los gemelos.

— Sean bienvenidos. -Sonrieron-

— Gracias por la bienvenida jovencitos. -Habló una mujer refinada llamada Elisabeth-

— Gracias por la bienvenida... -Los miro de arriba a abajo Iván-

— Padre, madre… -Su hijo lo reprendió con la mirada y este simplemente se retiró junto a su mujer- Lo siento, pero mis padres… son un poco difícil de tratar.

— No te preocupes, ya tenemos que lidiar contigo. –Dijo Acyn sin más- Nos imaginábamos que de algún lado sacaste ese carácter.

— Hermano… cállate. –Se mantuvo seria y miró al rubio, notando a la pequeña escondida detrás de él- Por cierto, ¿Quién es la niña? 

— Es mi hermana. -La chica se encogió y la menor salió detrás de su hermano, percatándose del parecido físico que tenía con él-

— Hola pequeña, ¿cómo te llamas? -Sonrió y Acyn también cayó bajo los encantos de la niña-

— Soy Sara. -Se mostró tranquila y sostuvo la mano de su hermana- Hermano, ¿Ella es la chica de la que tanto me contabas?

— ¿Eh? -Se quedó en shock-

— ¡Sara! -Su hermano la reprendió y la pequeña simplemente sonrió victoriosa y se retiró junto a sus padres-

— Mira que tienes que tener cuidado con quién hablas de mi hermana. -Se notaba que el muchacho estaba molesto y llevaba tiempo resentido con el vampiro, así que su hermana los detuvo-

— Basta. -Miró a su hermano y le tironeó la oreja- No arruines nuestro día, ahora ve con Shiva y cuídalo.

— Tsk... 

Este se retiró y después de intercambiar algunas palabras, se retiró a la mesa donde estaba ubicada su familia y se sentó junto a su hermana. Mientras tanto, (T/N) se dirigió a la mesa y tomó asiento junto a su padre, percatándose de que los meseros comenzaban a servir las distintas clases de comida a los invitados.


— Continuará.

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