𑁍┊Cᴀᴘɪ́ᴛᴜʟᴏ xx

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▗ ▘➤ “Una cosa preciosa”
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El fin de semana pasó rápidamente y el lunes comenzó normalmente hasta que las clases terminaron exitosamente y los estudiantes regresaron a sus respectivos salones, a excepción de (T/N).

Había horneado bizcochuelos para todos sus amigos en la clase de cocina ese día, pero solo tenía que dárselos a Ray. Esperó hasta después de la clase para dárselos o se metería en problemas innecesarios con sus fanáticos locos.

Como resultado, fue a su habitación, llamó a Ray y esperó su respuesta. Al no recibir respuesta, la joven volvió a tocar con fuerza y ​​perseverancia la puerta.

— Oh, vamos, Ray... -Hablé en voz alta a propósito- No soy uno de tus acosadores.

De repente se abrió la puerta y apareció el niño, visiblemente perturbado por sus palabras.

— ¿Que quieres saber?

— Está bien, no seas tan brusco… -Suspiré y le di el pastel- Me tomé la molestia de venir a verte solo para regalarte algo que horneé con mis propias manos… Como agradecimiento por tu ayuda con mi tarea.

— Oh... Hablas en serio. -Le pareció recordar que no hacía falta

— En resumen... ya lo hice, así que guárdalo.

— … -Levantó una ceja y se lo devolvió- Sostenlo.

— ¡Oh, no!

La peli-rosa tomó la mano de Ray y se la volvió a ofrecer, sonriendo molesta y fingiendo cortesía.

— Insisto en que los conserves. -Lo miro fijamente- No aceptaré que me rechaces… Vine aquí para dártelo y no me iré con las galletas solo porque tu estúpido y noble estómago come comida de “calidad”.

— Tks… -Frunció el ceño-

— No vine aquí para que me trates como a un trapo sucio, así que tienes dos opciones… -Le frunzo el ceño- Cambias tu actitud de mierda hacia mí, o lo juro sobre la tumba de mi madre que te daré un buen golpe. -Dejó de señalar con el dedo-

La joven se alejó preparándose para regresar a su habitación, pero fue detenida por la voz del rubio y cuando se giró, él la miró de reojo, dándose cuenta de lo avergonzada que estaba y desvió la mirada.

— Solo lo intentaré si te comes un pedazo delante de mí. -Dijo avergonzado-

— Tienes mucho cuidado…

Ella suspiró resignada y regresó, tomó un pedazo y se la comió sin que pasara nada.

— ¿Satisfecho? -Lo miré seriamente-

— Hump… -Desvió la mirada avergonzada-

Él decidió tomar el pastel, mientras ella lo examinaba y dudaba si comérselo, pero (T/N) lo tomó de su mano y se lo ofreció, acercándose a la boca del vampiro.

— Abre la boca… Este bizcocho contiene gelatina de arándanos. -Dijo molesta y lo miró esperando que se lo comiera-

Él solo asintió y se inclinó, comiendo el maldito pastel y por el contacto del dedo de la joven con la boca de Ray, hizo que se tensara, pero se alejó después de comerse el pastel y miró hacia otro lado, mientras sus orejas parecían tomar un color rosado y causo ternura en la contraria.

— ¿Está delicioso el pastel? -Pregunté un poco más emocionado-

— No se siente bien… -Lo dijo sin mirarlo primero-

— ¡Muy bien! Por primera vez no dijiste nada desagradable. -Él sonrió alegremente y la felicitó-

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· •「 ░╎❝. Narra Ray . ❞╎░ 」• ·
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En el momento en que una verdadera sonrisa apareció nuevamente en su hermoso rostro, la miré y quedé hipnotizado por su belleza. Tosí levemente, me paré junto a la puerta e hice una sugerencia.

— Déjame compensar mi mal comportamiento ofreciéndote una taza de té. -Lo digo en serio-

— Que caballero... -Se burló de mí-

— No me molestes, si no retiro la oferta mía. -La estoy mirando con atención-

— De todos modos, gracias por la invitación. -Sonrió alegremente-

Cuando pasó a mi lado, tuve la oportunidad de oler su delicioso aroma, pero controlé mis instintos primarios y cerré la puerta detenida cuando noté que se detenía y me revisaba. habitación.

— ¿Por qué eres tan hermosa? Eso no significa que no puedas disfrutarlo todo.

 Sinceramente... mis padres nos criaron sin muchos lujos. -Se rascó la nuca-

— Eso explica mucho. -Comento- Siéntate, te prepararé un té.

— Bueno… -Siéntate en la silla- Has cambiado algunas cosas desde la última vez que estuve aquí. -Comenté alegremente-

— Sí, tuve que hablar con mis padres para cambiar de opinión… el resto es historia.

— Sí… Tus padres son muy amigables. -Dijo sarcásticamente-

Suspiré y comencé a preparar el té. Cuando terminé de prepararme, me acerqué a donde estaba (T/N) y le soy la taza, me senté al final del sofá y bebo un poco de sangre donada. Escuché un pregunta inesperada.

— ¿Cuántas chicas has traído aquí? -Pregunté de repente-

— ¡…! -Me atraganté con el líquido y tosí-

— Oh… pensé que te sorprendí. -Le dio unas suaves palmaditas en la espalda para calmar su tos-

— ¡¿Quién hizo estas preguntas?! -Lo miré molesto-

— Ah, solo quería hablar contigo. -Frunció el ceño incómodo-

— Mmm… -Me limpié con un pañuelo y la miré- Bueno, eran muchas.

— ¡Oh, en serio?! -Se sorprendió- Si no los invito, ellas también vendrán. La mayoría están locas por mí. -Respondí y bebo estaba mi taza-

— Tan confiado… -Inclinó la cabeza pensativamente y se bebió toda la taza de té-

— Simplemente seguí la verdad. -Suspiro- Además, todas las chicas que conocían mi clase social, familia, apariencia, notas y demás cualidades acudieron sin dudarlo. Por eso elijo las más bellas para satisfacer mis deseos. -La miré-

— Veo lo que estás diciendo... Creo que usarlos traerá beneficio mutuo. -Sonrió sarcásticamente y bebió té-

— Consideré esto solo un paso necesario para satisfacer mi deseo de beber sangre. -Respondió con una sonrisa-

— Sí... -Respondió con indiferencia y se bebió todo el café- ¿Y nunca has sentido que ninguno de ellos te ama?

— Yo amo. .. estas cosas no pasan -Sonríe- ¿Y me estás juzgando según tu experiencia personal?

— ¿Experiencia personal? -Riendo burlonamente- Nunca antes había estado así... además, esta es la segunda vez que entro a tu habitación. -Me miré con expresión tranquila-

— Me dijiste que fui la primera persona con la que te acostaste. -La miré con una sonrisa jocosa-

Vi sus mejillas sonrojarse y ella desvió la mirada, mientras fruncía el ceño y su reacción despertaba en mí una ternura cierta, por lo que acaricié su cabeza, pero la escuché atentamente. La pregunta me hizo pensar.

— Ray… ¿Crees que yo también soy tu objeto? ¿No es así? -Pregunté con expresión desconcertada-

— De qué diablos estás hablando... -Se rió levemente-

— Sí, tienes razón.. .-Terminó de beber su taza de té- A veces me vienen a la mente locuras. -Risa incómoda-

— (Si sabes mi gran deseo por ti... puedo responderte cómodamente que ella es mucho más especial para mí.) - Pensé seriamente y dejé la taza-

— Entonces... de ahora en adelante seremos amigos. -Sonrió mirándome-

— Mmm… -Pensé detenidamente en sus palabras- Me beneficiaré mucho si me hago amigo tuyo a partir de hoy. -Rió alegremente-

— Me imagino que aceptas por qué soy nieta del gran alquimista que triunfó en el campo farmacéutico, ¿No?

— Eso es en parte cierto, pero también porque creo que eres una chica maravillosa e interesante. -La estoy mirando-

— ¡Creo que debería irme ahora! -De repente lo mencionó preocupado y se dirigió hacia la salida- ¡Gracias por el té! Era tarde y tuve que regresar a mi habitación antes del toque de queda.

Me senté allí asintiendo y me despido de ella, viéndola dejarme en paz rápidamente, sintiéndome satisfecho de burlarme un poco de ella, pero al mismo tiempo, disfrutando cómodamente el tiempo que pasé con eso.

Más tarde, durante la visita, limpié la suciedad y me cambié de ropa, me puse pijama para quedarme en la cama todo el día porque mañana tengo que levantarme temprano.

— Continuará.

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