capítulo seis
kai y coincidencias

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WONYOUNG POV

—Son tendencia mundial y no dejan de hablar de ustedes. Todos están pendientes de jangkku y yo aún no puedo creer que me enteré por un hashtag.

Puse los ojos en blanco y me dejé caer en la manta que habíamos puesto en el pasto suave y recién cortado. Miré a Kai y entrecerré los ojos cuando los rayos del sol se hicieron demasiado fuertes.

—No vinimos aquí para hablar de eso. Ayer te dije que nos reuniríamos porque tengo que confesarte algo, no porque necesito que me recuerdes lo que dice la gente.

Y sí, tal vez fui demasiado hostil y ruda con mi pobre mejor amigo, pero me sentía frustrada y abrumada con mi vida como para seguir dandole vueltas a la situación.

—Al parecer alguien está de malas hoy— Exclamó, mirándome de reojo.

Suspiré y me incorporé, sentándome de una mejor manera frente a él.

—Lo siento, Hyuka— Me disculpé— Es sólo que, tú no sabes.

—¿No sé qué?

Tomé una fuerte respiración y medité mis palabras. Debía decirle, tenía que decirle. Kai era mi mejor amigo y su apoyo me ayudaría muchísimo en estos momentos.

—Mi relación con Sunghoon es falsa— Solté.

Y su cara fue todo un poema.

Kai por poco y se ahoga con su propia saliva. Parecía incrédulo y estaba más que confundido, eso se notaba en su expresión facial.

—Es un contrato entre Starship y Belift. Es largo, demasiado. Tiene unas pautas, como salir a citas juntos e intentar ser la gran pareja de Corea, hasta que se termine el contrato— Le expliqué, pero él seguía en completo estado de shock— Yo no conocía a Sunghoon, ni un poco. Fuimos obligados, creo que de milagro y nos soportamos. Además, tiene novia— Agregué.

Kai me miró en cuanto esas palabras salieron de mi boca, se veía confundido y con una pizca de diversión en el rostro.

—¿Sunghoon? ¿Novia?— Preguntó— ¿De dónde sacaste eso, Wony?

—Lo vi besándose con Isa de STAYC— Respondí simplemente, después empecé a jugar con un poco de pasto, hasta que escuché la carcajada que soltó Kai.

—Ellos no son nada. Se gustan, pero con todo esto dudo mucho que Isa quiera tener algo con Sunghoon. Destruiría su reputación y la del grupo.

Y tal vez sentí alivio cuando me dijo que entre ellos, no se podía dar nada. Digo, si Sunghoon ya no pensaba en otra chica sólo iba a estar enfocado en el contrato y ser un buen novio falso para mí.

Sólo por eso se dio mi alivio ¿Verdad?

—Eso no quita que todo esto sea horrible, una verdadera pesadilla— Murmuré— A la compañía no le interesó que por esto medio mundo se me viniese encima. La cantidad de odio se hace más cada día y me siento muy agotada, Hyuka— Me sinceré.

Era inevitable no pensar en eso, aunque intentara con todas mis fuerzas pretender que los comentarios de odio no están ahí, era imposible no leer uno que otro.

Jamás había recibido tantas críticas y amenazas como las de esta semana, sentía que me odiaban hasta por existir. Ayer mi miedo de salir a la alfombra roja con Sunghoon se debía principalmente a cómo reaccionarían todos al vernos ahí parados.

Siguiendo el papel de la obra que crearon nuestras compañías.

—No te preocupes, Wony. Ellos no saben lo que sucede cuando se apagan las cámaras. Además, tienen que entender que su idol en algún momento tiene que enamorarse, aunque sea una relación falsa es algo que ellos deben aceptar tarde o temprano— Me consoló— Y si tengo que salir a defenderte yo mismo, créeme que no lo dudaré, ¿Me escuchas?

Reí por sus últimas palabras y asentí rápidamente, para después darle un gran abrazo.

Haber hablado con Kai fue como quitar un poco de peso. No sabía que necesitaba tanto sus consejos y palabras, hasta que los tuve.

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WONYOUNG SE DESPIDIÓ DE KAI con una sonrisa en la cara. La salida con su amigo le había subido el ánimo de cinco por ciento a cien por ciento, lo disfrutó demasiado.

Ahora, era momento de volver a su realidad. Tendría presentaciones con las chicas y debían prepararse para los golden disc awards de ese año, donde también estaría ENHYPEN.

Caminó un poco, recorriendo cada lugar del río han y confirmando el por qué es su lugar favorito en Seúl. Simplemente, se le hacía mágico.

Se imaginaba tomando la mano de alguien, mientras caminaba bajo las estrellas; una escena digna de película.

Suspiró, ahora lo único que tenía era una relación falsa donde todo lo vivido, no era real. Las citas, sonrisas, fotos y todo, sólo eran parte de pautas en un papel, nada era genuino como le gustaría.

Mientras que para el público se estaban convirtiendo en una pareja iconica entre idols, de puertas para adentro ni siquiera tenían el número del otro.

Wonyoung estaba tan sumergida en sus pensamientos y ocupada quejándose consigo misma, que cuando chocó contra la espalda de alguien sólo pudo soltar un pequeño gritito.

En una ocasión cliché, la persona con la que chocó la hubiese atrapado de la cintura, evitando su caída. Después, estarían mirándose fijamente, como si se tratara de una película o serie romántica donde luego de este pequeño encuentro, se enamorarían y vivirían felices para siempre.

Pero, nada de eso le pasó a Wonyoung.

Lo único que pudo sentir fue como caía sentada en el pasto, su trasero doliendo de inmediato por la dura caída. Soltó un quejido bajo y cerró los ojos por un segundo, los rayos de sol siendo una molestia.

Sus manos se habían manchado con un poco de tierra, su flequillo estaba muy desordenado y no quería saber el estado de su pantalón.

—¿Wonyoung?

Abrió los ojos de par en par cuando escuchó esa voz ¿Era una broma? No podía ser que entre los millones de personas que hay en el mundo, justo se tuvo que haber chocado con quien menos quiere ver.

—Déjame ayudarte.

Oh, claro que no.

Ignoró olímpicamente la mano que Sunghoon le estaba tendiendo y se levantó por sus propios medios, aunque esto implicara apoyar sus manos, que al parecer se habían raspado un poco, en el pasto.

Ni siquiera lo miró, simplemente se limpió como pudo el pantalón y se quejó cuando los raspones de su mano chocaron contra la tela de este.

—¿Estás bien?— Cuestionó el chico, notando que la caída había dejado un par de secuelas en ella— Déjame ayudarte, no seas tan terca— Le regañó y Wonyoung frunció el pequeño ceño.

Ella no era terca.

—No es necesario— Dijo en tono seco, mirando los raspones en su mano. Pero, Sunghoon no se detuvo en buscar algo en la mochila que llevaba y Wonyoung sólo pudo soltar un suspiro— Te digo que no es necesario.

—No eres la única terca aquí— Respondió. Sonrió cuando escuchó el pequeño sonido de frustración que ella dejó salir inconscientemente— Voy a desinfectar eso.

Wonyoung esbozó una sonrisa burlona.

—¿Tan torpe eres que tienes que ir a todos lados con un mini botiquín?— Cuestionó. Sunghoon sonrió de lado.

—¿Tan distraída eres que no puedes ver cuando alguien camina frente a ti?— Dijo, para después tomar la mano de Wonyoung y abrirla, la última quejándose porque esa mano era la más afectada de las dos.

—Fue un accidente. Además, tú... —Se cortó a sí misma, cuando un quejido de dolor salió de sus labios. Sunghoon estaba desinfectando los raspones y ardía tanto— Mierda, pudiste haberme avisado.

—Esa boquita— Le advirtió con una mirada que Wonyoung no supo descifrar— Dame la otra— Pidió suavemente.

Mientras desinfectaba la otra mano, Wonyoung pudo darse cuenta de lo cerca que estaban. Más de lo que le gustaría.

Tener a Sunghoon a centímetros de su rostro, era sorprendentemente una posición satisfactoria para ella. Su cara de concentración era él con el ceño levemente fruncido y el resto de facciones relajadas, tal vez la mandíbula un poco apretada.

Pero aún así, pequeños momentos como estos donde la belleza de Sunghoon le daba tres vueltas y la dejaba débil, demostraba el por qué tantas personas se sentían atraídas por él.

—Deberíamos hacer algo con ese pantalón.

Perdón ¿Qué?

Sunghoon soltó una carcajada cuando vio la reacción de pánico y el rostro confundido de Wonyoung.

—Está lleno de tierra— Explicó aún riendo— ¿Qué pensabas que significaba?— preguntó burlón.

Él pudo ver como sus mejillas regordetas se ponían rojas a más no poder, dándole un aspecto muy adorable, debía admitirlo. Le parecía tierno como Wonyoung ahora no sabía hacia dónde mirar o hacia dónde correr para escapar de ese pequeño momento embarazoso.

Rió y en un movimiento rápido tocó levemente su cabeza: —Está bien, te daré mi saco y puedes amarrarlo a tu cintura.

Y mientras Sunghoon estaba muy ocupado buscando la prenda, Wonyoung solo podía pensar en que había tocado su cabeza. Fue una acción tan rápida y natural, que se le hacía difícil procesarla.

Tal vez lo que la dejó más aturdida fue el hecho de que le encantó lo que Sunghoon hizo.

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regresó por quién lloraban 🍓

por si no han dado cuenta,
cambié el título de esta
historia, este cambio me gusta
más y siento q suena mejor

no more "el contrato"
holi "i am you"

y bueño eso, regresé y con
ello el mini maratón q
prometí y por supuesto,
las actualizaciones de cada
viernes

muchas gracias leerme y
seguir aquí, les amo mucho,
graciass 💗