Declaración.
▩━━━━━━◈━━━━━━▩
【Traducido del árabe.】

Junio de 1951; El Cairo, Reino de Egipto.:

❝...he tenido tantos errores en mi vida de los cuales me lamento mucho en haberlos cometido. Te extraño tanto, no ha pasado un solo minuto en que no piense en ti ni en tu sonrisa.

Recuerdo a perfección el día en que te conocí, eras tan tímida y te sonrojaste cuando voltee a verte mientras ibas del brazo con Palestina. Creo que te quedaste observándome un buen tiempo desde que llegaste que con solo mirarte sucumbiste al pavor y nerviosismo. Me interesaste cuando te vi avergonzada, la piel de tu rostro no ocultaba lo roja que estabas.

Tus ojos fue lo primero que encanto de ti, tan extraños que nunca los había visto en alguien semejante a mi o a Palestina, tus cabellos rizados andaban sueltos que cubrian mayor parte de tu rostro y cuando te invite al jardín del palacio, pude sentir tu delicada piel entre mis dedos mientras depositaba una rosa amarilla sobre tu cabellera, acomodando los mechones de tu cabellera para que tu rostro reluciera como arte.

No se en que instante fue en que me enamore de ti, no se si fue cuando te vi por primera vez o cuando cruzamos nuestras miradas por primera vez en la cercanía de nuestros rostros. Solo se que te ame desde un preciso instante que no deduzco cual de todos es.

Fuiste para mi algo más que un pasatiempo, vi que tú llegabas a ser una parte esencial en mi vida. Te quise...te ame...inclusive te adore.

Sabes...hasta juraría que estábamos destinados a estar juntos y que nuestro encuentro fue planeado por el destino. Te quise cuando me visitabas cada mes en el Palacio Montaza. Se que te escapabas de la sobre protección de Palestina para verme y fue por ello que siempre te premiaba con que te deleitaras de mi jardín. Las visitas que Palestina me hacia días después de tu partida eran la respuesta del porque te ibas con rapidez. Un día entre muchos decidí robarte un beso y la situación se me fue de las manos. Quise poseerte, quise tomarte a la fuerza...quise hacerte mía en aquel lugar pero vi que eso era imposible.

Te pido perdón por mi actuar, se que me porte como un energúmeno, se que fue demasiado haberte tocado de la forma en que lo hice. Perdoname por haberte hecho sentir mal, Disculpame por  haberte hecho pasar aquel mal momento a mi lado, me deje llevar y por eso espero que me puedas perdonar.

Además de aquello pido que me perdones por haber participado en una guerra que tenia como fin acabar contigo. Jamas estuve de acuerdo con aquella finalidad que se torcía de la primordial. Todos buscaban su beneficio y entre los benéficos resaltaba tu muerte.

Motivados por el miedo fueron capaces de acorralarte hasta el punto de querer quitarte las esperanzas. Pensé que te perdería cuando los ejércitos te tenían bajo la mira. Pensé que jamas te volvería a ver cuando aquel día acabese, fue entonces que surgió la idea de una tregua que me dio la esperanza de que aun siguieras con vida. Fue aquella misma que me motivo a flaquear al igual que mi gobierno lo hacia por una extraña razón.

Aquel día jure que te protegería a toda costa, a pesar de que hubiesen puesto en mis manos un arma con solo una bala para matarte, fueron días en vela que pase pensando si debía hacerlo o no. No podría vivir con el peso de tu muerte en mi consciencia como también no podría dimitir de mi obligación ante los ojos de mis aliados.

Te quise más que mi a propia vida, te ame más que a mi existencia y mi lealtad a mi causa. Tuve oportunidades en las que pude apretar el gatillo y matarte cuando te vi aquel día en el bazar. En aquel día de la Mezquita, fui capaz de matar por ti e intente pero no fui capaz. Sufrí al no saber nada de ti en tus estados críticos.

Verte nuevamente seria un hermoso regalo, una oportunidad de oro que disfrutaría al máximo aun cuando no sea del modo en que más quisiera hacerlo. Quisiera pasar mis últimos días a tu lado en el lugar en donde nos conocimos. Te amo mucho, te quiero y ese amor que te tengo me impulsa a seguir viviendo esperando con ansias tu llegada, volver a ver tu sonrisa. Volver a ver tu mirada y el brillo de tus ojos.

Volver a besarte, volver a acariciar tu rostro con delicadeza mientras parto complacido con tu sola presencia. Ten en cuenta una cosa entre muchas.

Siempre seras el amor de mi vida, aun cuando haya partido siempre te tendré en mi memoria y mi corazón. Tú seras la única en mi vida. Te quiero. Te amo.

Solo he de lamentar una cosa, el no haber podido siquiera compartir mi existencia contigo. El no haberte hecho mi reina, mi mujer, mi hermosa dama...

Hasta siempre habibata.

Atte: Reino de Egipto.❞