«El enamoramiento es un estado de miseria mental en que la vida de nuestra conciencia se estrecha, empobrece y paraliza.—José Ortega y Gasset»

[...]

«que idiota soy»—se reprendió mentalmente, después de que su versión pequeña conociera a Sasuke básicamente Sakura en cuestión perseguía al niño por dónde quiera que vaya hasta su actitud cambio con respecto a él y era más dulce o atenta con el trayendo le bentos de comida para dárselo, pero por vergüenza no se lo daba.

En ese instante Sakura pequeña estaba con un bento en sus manos detrás de un árbol queriendo acercarse, pero en ese momento fue cachada de infraganti espiando lo y Sakura se sonrojo por ser descubierta.

Sakura quería cambiar de recuerdo su actitud de pequeña ya la estaba hartando, pero no podía.—«Shannarō»—pensó frustrada por su actitud.

Sakura se dio cuenta que estaba chiquita o mejor dicho estaba en el cuerpo de su yo pequeña ella no sabía cómo entro en su cuerpo, pero no podía moverme por su cuenta su cuerpo se movía solo.

—I-no... —empezó Sakura— tú estás enamorada de Sasuke. —lo último lo dijo muy bajito.

Ino la miraba interrogante por su pregunta obvia— ¡Claro que si! Acaso no es obvio.

Sakura no quería presenciarlo y más si estaba en su cuerpo de pequeña y ver por como sus decisiones alejaron a su amiga más cercana y todo por un chico.

—A mí también... —no quería arruinar su amistad por tonterías, pero si con esto podría ser más fuerte y conquistar a su morocho— ¡me gusta Sasuke!

Ino no le creía porque su amiga se enamoraría también del mismo chico que también gustaba ella eso era trampa las amigas no se hacen eso.

—Desde este momento ya no somos amigas... —Ino estaba sorprendida por sus palabras— Ahora, somos rivales de amor.

A Sakura le dolió decir eso, pero era por un bien mayor se decía así misma intentado creer en sus palabras.

Ino no sabía que decir, pero acepto el reto— Entonces el que gane el corazón de Sasuke-kun gana frente.

Ella estaba viendo como ella declaro su rivalidad con Ino por el amor de Sasuke ella quería gritar cambiar las palabras que dijo en ese entonces, pero no podía. Ino era su amiga la única que la apoyo, aunque ella sabía que no pensó muy bien sus palabras en ese entonces, pero no podía cambiar el pasado solo aprender de sus errores y ser mejor.

Ahora su cuerpo estaba corriendo de frente sin detenerse y ella no sabía porque no podía controlar su cuerpo de niña y solo corrió.

Mientras corría su cuerpo cambio empezando a crecer hasta convertiste en una adolescente.

«La academia»—pensó estaba en el salón de clases momentos antes de que anunciarán los equipos, como ella no controlaba su cuerpo este se movía como en el recuerdo.

Sakura tiro la puerta para entrar y sentarse junto al amor de su vida, pero Naruto interrumpió su caminar porque este le saludaba y decía linda ella ya sabía que era hermosa nadie tenía que decírselo, pero sin embargo las palabras de Naruto la hicieron sentir rara ella no sabía que era ese sentimiento, pero lo único que hizo fue golpearlo para dejar de sentir eso.

Sakura sentía rabia las palabras de Naruto le hacen sentir rara y ella solo quiere que ese sentimiento solo lo cause Uchiha Sasuke por eso siempre intentaba llamar la atención de él.

Naruto estaba hartó que tenía ese pelele de Sasuke que no tenga él: —«Sasuke es guapo»—él también o más.—«Sasuke es inteligente»—él no tanto, pero se esfuerza por ser lo. —«Tiene notas altas»—él no tenía notas altas.—«Las personas lo aman»—él no tiene a nadie que lo quiera.—«Es bueno en todo»—él no era bueno en todo y siempre fallaba. —«Ese teme es un desgraciado con suerte»—se levantó de su asiento para confrontarlo.

Sakura estaba sentada esperando al profesor mientras miraba a Sasuke de vez en cuando, pero algo llamo su atención era Naruto.

Naruto estaba sobre la mesa de Sasuke mirándolo fijo sin apartar la mirada de él y eso a ella le incomodaba, pero de un momento a otro los dos se estaban besando todo el salón quedó en un silencio total después de aquel beso ellos se separaron, pero la población femenina estaba furiosa y golpearon a Naruto.

Sakura fue la última en golpear a Naruto ella no lo sabía, pero ese beso le produjo sentimientos extraños porque le habían quitado la oportunidad de besar a Sasuke, pero no era lo único raro ver a dos hombres besarse -por accidente- oh qué Naruto fue el que lo beso su imaginación voló tanto que le salió sangre de la nariz y rápidamente se lo seco.

Iruka anunciaba a los equipos que formarían los grupos de tres mientras tanto Sakura estaba intentando tomar el control de su cuerpo o más bien del recuerdo para poder salir del genjutsu, pero por más que lo intentará no podía intentaba cualquier forma o idea que se le ocurría para poder salir de esta pesadilla en donde no sabía cómo se metió.

«¡¡Shannarō!!»—pensó frustrada quería romper todo con sus puños las ideas se le acabaron.

Sakura estaba en el receso ella quería invitar a Sasuke a comer con ella, pero no lo encontró así que se sentó sola y empezó a comer ella odiaba estar sola y pensar que por qué estaba en el mismo equipo que Sasuke cambiaría algo.—«que tonta fui al pensar que él llegaría amarme»—ella no era exactamente hermosa era escuálida y sin talento, pero creyó que si comía menos o se volvía inteligente él se enamoraría.—«Ino»—pensó con tristeza sabía que su amistad con Ino se fracturo cuando era pequeña, pero con el tiempo mejoró, aunque siempre discutían por a quién Sasuke hará caso, cada esfuerzo no funcionaba.

Estaba metida en sus pensamientos que no se dio cuenta que Sasuke que la estaba mirando— Sakura .—la llamó.

Sakura se asombró por qué el amor de su vida le hablaba sin su tono frío o su distanciamiento en ese instante sé sintió especial que quería recordar lo para siempre.

—Tu frente están grande y encantadora —se extrañó que el dijera eso— Me dan ganas de darle un beso —dijo con una sonrisa leve.

—A-ah. —Sakura se sonrojo por sus palabras.

—Solo bromeaba, solo ese tipo de tonterías que Naruto diría. —Sakura de cayó con sus palabras, pero pensó en Naruto.

—Quisiera preguntarte algo —se sentó al lado de ella. Sakura solo movió la cabeza en afirmación— Naruto ¿Qué piensas de él?

Sakura miraba todo eso, pero nunca presto tanta atención al comportamiento de Sasuke en ese entonces, pero viéndolo de nuevo se daba cuenta de algo: nunca Sasuke le dirigía la palabra si no fuera necesario, él nunca sonrió ni nuca lo vio hacer eso, él siempre se aleja de las chicas o sus acosadoras, su tono de voz siempre fue plano sin ninguna expresión que denote en su voz, pero este Sasuke comparado con el que convivio eran diferentes—«esa forma de ser se parece a... Naruto»—eso no podría ser ¿cierto o sí?, pero ¿Por qué Naruto haría eso?

—«¿Porque solo me muestra mis errores?»—se preguntó internamente con rabia.

Sakura quería escapar de esa oscuridad en la que estaba y no podía salir intento cuánto pudo, uso los sellos para salir del genjutsu, pero nada pasaba se sentía miserable, inepta por no poder hacer algo tan simple como salir de un simple genjutsu. Pensó que era por falta de chakra o que la sellaron, se sentía patética. Quería que Naruto la abrazará con esos brazos fuerte que siempre la protegieron de cualquiera que le hiciera daño con su aroma a ramen, sudor a pasto con su cabello dorado como el sol que le dijera que todo estaría bien que pronto saldría de ahí, pero la realidad era que él no estaba con ella.

Se perdió tanto en sus lamentaciones que no se dio cuenta que ya estaban en las presentaciones de equipo.

La de kakashi fue obviamente lo más simple y aburrido que escucho nada cambio hasta ahí, la presentación de Naruto fue como recordaba muy brillante y optimista de él mismo, la de Sasuke fue obviamente sombría y llena de venganza, pero ella no noto eso solo por estar enamorada y le tomo poca importancia.

Ella sabía que su presentación no fue lo mejor y aún se avergüenza por eso ella hubiera querido haber dicho algo más que solo su obvio interés por Sasuke como alguna meta o sueño, pero en ese entonces solo pensaba en ser todo de Sasuke.

Cada uno se fue a su casa para el día de la prueba. Para Sakura la prueba ponía en riesgo su futuro con Sasuke tenía que esforzarse si no nuca será su esposa.

Al llegar a su casa sus padres la interrogaron con un montón de preguntas ¿En qué equipo estaba? ¿Hay chicos lindos? ¿Quién es el sensei? ¿Demuestra que eres el mejor ninja?

Sakura nunca quiso ser ninja, pero eso no era una opción. Sus padres la impulsaron a eso, aunque a regañadientes lo hizo, pero todo mejoró cuando descubrió que el amor de su vida también asistió en el mismo lugar, pero los separaba una brecha.

En la academia cuando ingresaban te evaluaban por capacidades que definirán y los separaban por salones a los que son inteligentes y los que no, pero como necesitaban formar equipos y que interactuarán entre ellos por eso los mezclaban y veían su desarrollo y avances de acuerdo a esto elegían a los equipos que se formarán.

Antes no tenía un sueño o una meta en si solo era una niña común que pensaba en jugar hacer amigos, juguetes, comer, dormir y ser feliz con sus padres, pero todo cambio por la ambición de sus padres ellos querían ser reconocidos -en especial su madre- por eso su madre le enseño aspirar a más y como resultado los sueños de sus padres se volvieron los suyos. Entró a la academia para volverse ninja y siempre le decían que buscará a alguien que le dé estatus o poder ella no entendía eso solo quería ver a su madre feliz e hizo todo lo que dijo.

Ella sabía qué su camino ya estaba trazado y no podía replicar así fue siempre, pero siempre tenía a Ino y a los pocos amigos que la acompañaban poco tiempo también ella misma arruinó su amistad convirtiéndola en una rivalidad que después se arrepintió de haber iniciado, la culpa y el orgullo golpearon a su joven razonamiento y no tuvo el valor de arreglar su error, pero siempre estaba feliz de encontrarse la, aunque siempre peleaban cada vez que se vieran.

—¡¡Sakura!! —grito Kizashi. Sacando a Sakura de sus pensamientos.

—¿Qué pasa papá? —talvez debería dejar de pensar eso no la ayudaría a pasar la prueba.

—Mi linda niña ya está creciendo — recordó con nostalgia como su pequeña creció para convertirse en una adolescente, pero aún debía protegerla de este mundo cruel.— Sabes... hace mucho que no hablamos.

—Papá hablas casi todo el tiempo. —no entendía que bicho le picó a su papá para que se ponga sentimental de repente.

Kizashi negó él sabía que no fue un buen padre y que sus problemas afectaban a su única hija, pero todo era para prepararla para los problemas, personas que la puedan hacer daño o de hombres que la lastimen y al final termine rota— Talvez hablemos siempre, pero no de esa forma Sakura hace tiempo que no hablamos de padre e hija. —dijo mientras caminaba hasta Sakura para después abrazarla.

No sabía cuándo fue la última vez que su padre le dio un abrazo se sentía nostálgico y reconfortante.

La presión que su madre le metió se fue disipando con el abrazo de su padre y se permitió llorar. Talvez se tardó en comprender a su hija ella era tan solo una niña que recién empezaba a crecer y no podía pedirle o exigirle ser mejor cuando no se siente bien con ella misma—«Eres igual a tu madre»—pensó con dulzura su esposa era un hueso duro de roer, pero debajo de esa fachada dura estaba una frágil mujer con problemas igual que él.

Cuando Sakura termino de llorar deshicieron el abrazo, Kizashi revolvió el cabello de Sakura y le sonrió. Sakura no sabía por qué, pero la sonrisa de Kizashi le pareció familiar como un déjà vu era extraño pensar eso.

Sakura le contó todo a su padre como: su primer amor, su equipo, la prueba, sus amigos, la rivalidad, sus inseguridades, las burlas de pequeña y como se siente con respecto a su madre.

Kizashi se sintió culpable su hija paso por todo eso y él no estuvo para ella talvez no estuvo tan pendiente de ella antes, pero ahora la aconsejará, la guiará, le enseñará lo que su viejo padre sabe.

—Sakura... lamentó no haberme dado cuenta cómo te sentías no puedo cambiar el pasado, pero ahora me tienes no estás sola —Sakura se sintió conmovida con su padre todo lo que tenía guardado por fin se liberó— No papá no es tu culpa es m-ia t-odo siempre es mi culpa. —nunca pensó que su hija estuviera tan rota por dentro que se hacía la fuerte.

—Sakura... las personas no son perfectas siempre cometemos errores, pero de ellos se aprenden y depende de nosotros arreglar nuestros errores y mejorar como persona. —miro el cielo ya estaba anocheciendo miro a su hija de nuevo— Es solo un consejo que podrías poner en práctica talvez con alguien.

Sakura sabía a quién se refería Ino talvez era hora de arreglar lo que una vez destruyó sonrió talvez su papá no era el mejor de todos, pero cuando necesitaba su apoyo él siempre estaba con ella.

—¡¡Bien!! Párate si no vamos al comedor tu madre nos matará — Sakura río su padre siempre sabía cómo ponerla de buen humor, aunque tenía razón su madre si da miedo.

Por primera vez no se sintió sola, asfixiada o con tristeza por primera vez sonrió de verdad y con el mismo sentimiento se fue a dormir.

Sakura lloraba como pudo olvidar algo tan importante sabía que su relación se había roto con sus padres, aunque ellos siempre pedían hablar con ella, pero no quería ya que ellos se interponían con su amor por Sasuke. Ahora veía ella era la culpable no debió poner primero a Sasuke que a su propia familia. Dónde quedó todo lo que sus padres le enseñaron, ella maduro en apariencia, pero no lo hizo sentimentalmente talvez era hora de dejar lo que una vez amo con locura y arreglar sus errores y ser mejor persona y no rogar amor por alguien que antes no la vio, pero siempre lo apreciara como un amigo.

—Sakura levántate vas a llegar tarde a tu prueba —grito Mebuki desde la cocina.

—cinco minutos más. —murmuró con sueño, pero su madre no la escuchó y la tiró de la cama para que se levante.

—Recuerda Sakura tienes que demostrar a tu sensei que eres la mejor ¿Ok? —dijo con convicción a su hija. Sakura solo resopló ¿Por qué su madre era tan difícil?

Por qué su madre le decía algo que ya sabía siempre hablaba de lo mismo siempre se esforzaba en ser mejor en todo no importaba el precio como su madre decía, pero algo aprendió de Ino que si quería algo luchará por ello por eso ya no importaba si su madre quería que fuera mejor o ninja para tener una mejor posición en la aldea solo importaba lo que ella deseaba y ella quería a Sasuke.

—¡¡Oiga llegó tarde!! —Gritaron Naruto y Sakura.

—Un gato negro se me atravesó en el camino así que tuve que tomar el sendero largo —perezosa mente levanto la mano restándole importancia.

—Bien. —aburrido puso sobre un tronco partido un reloj— está puesto para el medio día —señaló el reloj y de su porta kunai saco dos cascabeles— tendrán que quitarme los antes de mediodía.

—Un momento, solo hay dos cascabeles y nosotros somos tres —dijo Sakura.

Kakashi quería seguir leyendo su Icha Icha no entrenar mocosos así que le explicó rápido lo que tenían que hacer, pero como en todo grupo hay siempre un payaso -Naruto- que interrumpió su explicación y tubo que demostrar sus capacidades poniéndole un kunai atrás de su cabeza mientras agarraba su antebrazo luego lo soltó y dio comienzo a la prueba.

Los tres chicos se separaron en diferentes direcciones para cumplir la prueba que kakashi dio y volverse ninjas mientras tanto el leí su libro esperando alguna acción por parte de los mocosos como los llamo en su mente.

Naruto sabía que tenía que esforzarse por eso dio el primer paso y lo atacó, aunque su ataque no fue efectivo lo intentó una vez más, pero esta vez con sus clones y fue a golpear al de peinado rarito como él creía.

Sakura veía todo eso con asombró por la valentía y estupidez de Naruto, pero se preguntaba ¿Dónde está Sasuke? Ella no lo sabía, pero lo encontraría y lo ayudaría y el vería lo buena que era y luego él le pediría ser su novia.

Corrió buscándolo por todos lados, pero no lo encontraba hasta que callo preso en un genjutsu.

La prueba termino como recordaba con un Naruto amarrado un Sasuke enojado y ella deprimida por no haber sido rápida o útil para ayudar a Sasuke.

—Díganme por qué creen que los pusimos en un grupo de tres —cansado espero una respuesta. Acaso todos los niños solo pensaban en ellos mismos y no en los demás—«obvio que si»—se respondió solo, por eso el mundo no tenía esperanza. Pero puede que solo está generación salve lo que queda de humanidad en algunas personas y lo cambié.

Naruto no sabía que decir no entendía el punto del sensei el lucho dio de sí, aunque callo en trampas y quiso comer se solo los bentos, pero no funciono así que forzó a sus neuronas a comprender lo que trataba de decir.

Sasuke aburrido él sabía que les hablaba a esos dos idiotas que tenía por compañeros en cambio el tocó uno era mejor a nada sonrió arrogante esperando las alabanzas hacía él.

Sakura estaba asustada ella no hizo nada excepto desmayarse o gritar y caer en un genjutsu que ni siquiera noto se sentía patética talvez la eliminen del equipo.

—Trabajo en equipo —recalcó lo obvio esperando que entendieran su error.

«Bueno Kakashi-sensei tenía razón»— sin el trabajo en equipo o una buena relación con sus compañeros la misiones no se podrían realizar con eficacia y la aldea no ganaría las recompensas de estás una regla que a su equipo le costó trabajar.

—Aquellos que rompen las reglas son escoria —la frase para Kakashi era su mantra su camino a seguir uno que le costó ver, pero después de perder a sus compañeros uno por uno aprendió la lección que Obito quiso enseñarle— pero aquellos que abandonan a sus amigos son peor que la escoria.

Esa frase para Sakura le abrió los ojos hacía su camino. No era ella sola tenía a dos personas más que le acompañaban en esa ruta y por lo tanto debía protegerlos por igual, pero para eso tenía que hacerse fuerte se prometió así misma se fuerte por ellos por qué juntos podrían lograr más que separados.

Tenía que volverse fuerte, pero cómo lo haría si no tenía ninguna habilidad exepto ser inteligente no lo sabía, pero apoyaría a su equipo tanto como le sea posible.

Sakura se prometió así misma cambiar y para empezar tenía que arreglar sus errores empezando por Ino.

Después de que el equipo 7 pasará la prueba cada uno se fue por su camino. Sakura se preguntaba dónde estaría Ino ella no lo sabía hace tiempo que no hablaban o coincidían, pero pronto cambiaría.

Sakura la busco en la academia, en la zona de entrenamiento, el cementerio, en el mercado, con su equipo, pero nada.

«Talvez... ¡¿Espera en su casa?!»—se regaño mentalmente por qué no empezó por ahí corrió en dirección a la florería de Ino.

Tomo aire rezando por qué este adentro. Empujó la puerta mirando de lado a lado, pero no la encontró talvez mañana podría hacerlo. Un estruendo se escuchó dentro de la tienda Sakura corrió para ver qué era.

Antes de que Sakura llegara Ino estaba encargándose de la tienda no había muchos clientes.

—Puff que aburrido —se levanto de su silla y se estiró. Estar en una misma posición era incómodo además su trasero se sentía desinflado— ¡Dios! Algún día si sigo así mi trasero no será redondo y será tan plano como la frente de... —no debería recordar cosas tristes.

—A ver a ver ¿Qué hago ahora? —se cuestionó pensando que hacer para que su día no sea tan aburrido. No había mucho que hacer— Por aquí debe... —empezó a buscar la lista de su mamá— ¡Perfecto! A ver qué dice umm no están difícil así que ¡Manos a la obra!

Regó las plantas de cada maceta—¿Por qué tenemos las mismas plantas? —que le importaba al final se iba a vender que importa si son las mismas.

Luego puso los precios y los acomodo en las repisas primero los que se vendían y por último puso las que quedaban al fondo. Intento alcanzar las repisas— ¡¡maldición!! —¿Por qué no crecía? Acaso le faltaba tomar más leche o era por sus dieta— Como sea ¿Dónde... está? —busco con la mirada ese estúpido banquito. Cuando lo encontró lo utilizo para poner las macetas en las repisas, pero el banquito tenía una pata rota.

Ino no sabía ese pequeño detalle y continúo con su trabajo, pero al poner la tercera maceta el banquito se empezó a mover Ino intento agarrase de algo y se apoyo en la repisa, pero se cayó con todo eso y las macetas cayeron sobre ella.

Ino no esperaba que alguien la ayudará a levantar se y menos espero que fuera su rival en el amor ¿Que hacía ella aquí? No lo sabía, pero la agradecía.

Ninguna de las dos decía algo cada una estaba en sus pensamientos con diferentes preguntás.

—Y... bien ¿Qué haces acá? —no es que la molestará si no que todo era incómodo desde que Sakura declaro su rivalidad entre las dos, aunque pensándolo mejor era una tontería sin sentido luchar por un "amor"—«Ja que tonta fuí al aceptar esa rivalidad»—nego con la cabeza y se cruzó de brazos esperando la respuesta de Sakura.

Sakura no sabía por dónde empezar ni como tocar el tema todo parecía más simple en su mente que en la realidad. Se armó de valor y hablo—Cómo te caíste? —evadío el tema con otra pregunta.

—Y a ti que te importa —si no quería hablar pues tampoco ella lo haría empezó a caminar dispuesta a limpiar el desastre—«Esto me tomará mucho tiempo»—agarro una escoba empezando a juntar la tierra. Sakura se agacho a recoger la flores que estaban en el piso sin importar le como Ino la miraba y trabajaron en silencio.

Tardaron como tres horas en limpiar, pero al final todo estaba acomodado— Ahora si dime ¿Que haces aquí? —acaso la quería volver a retar o quería pelea pues la tendría no se dejaría intimidar por la frente.

—¡¡Lo siento!! —lo dijo tan fuerte que sacó a Ino de sus pensamientos dejándola aturdida— Por mi culpa nuestra amistad se volvió una rivalidad de lo cual me arrepiento —agacho la mirada conteniendo su llanto esperando que Ino la perdone— Y-yo quiero recuperar a mi amiga quiero que volvamos a empezar s-solo si me d-dejas.

Ino estaba sorprendida y aliviada todo el asunto del amor era para tontos y a ellas las volvió una seco su casi lágrima y camino para luego— Te tardaste mucho en pedírmelo Sakura —dijo mientras la abrazaba.

Sakura se sentía aliviada pedir perdón no fue tan difícil como perder a su amiga.

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Uff otro capítulo largo, pero lo acabé espero que les guste.

Como sea como pronto Sakura vera su peor pesadilla y pasaremos a lo principal de esta historia.

Y para mí ship favorito ❤️

➽ Nera-Moon