Fecha de publicación : 28/5/2020

Anuncio : El 15 de este mes fue mi cumple, palneaba actualizar, pero fue un día de mierda, perdón. (Puse el capítulo un poco más largo de lo normal :) )

Anuncio 2 : No había actualizado, ya que abrieron mi escuela, e tenido más clases y problemas personales y familiares que a ustedes les debe importa un pepino.

Anuncio 3 : Soy una mierda, lo sé, no me lo digan.

Anuncio 4 : Cambiaré la portada :3
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Narra narradora

En la última actualización :

Chile : Toma. - Dijo entregándole unos de los platos, el peruano sólo lo miro confundido. - Agh! Toma, no tiene veneno. - El menor tomó el plato y le dio un mordisco, mientras el chileno tomaba el control remoto de el televisor. -

Perú : Gracias.

Chile : De nada, enano. - Dijo con una sonrisa, 'Siempre arruinas los buenos momentos mascota' pensó el peruano mientras lo miraba de mala manera.

En la actualidad :

Y hay estaba él, en otra aburrida y sin sentido reunión de la ONU. La palabra dormir era lo único que rondaba en su cabeza, sentía su cabeza y párpados pesados. Con sus manos trataba que estos se quedarán abiertos lo cual no dió resultados positivos. Más no podía hacer nada más que esperar a que terminara aquella "tortura". Su cuerpo le pedía a gritos un descanso y estaba cayendo en la tentación pero no quería a arriesgarse a recibir un regaño de la organización.

Veía cómo la mandíbula de la Organización se movía, luego la del alemán, para luego ver a su hermano México subir en la mesa de golpe y hacer que está temblara, pero tanto sueño tenía que ni se apartó del mueble. Este ya sobre la mesa caminó en dirección al estadounidense y empezó a gritarle cosas o eso suponía él, ya que su hermano no iría hacia su vecino a invitarle una taza de té.

Vio como su hermano volteaba hacia la ONU, "le están regañando" pensó, aveces su ex era un idiota. A veces el se preguntaba cómo se enamoró de él? Y lo peor es .... Que no el mismo sabía la respuesta.

Luego subió el argentino a la mesa reclamándole al americano sobre el dólar, luego el venezolano sobre el petróleo y de un momento a otro todos estaban peleando contra el estadounidense. Se mostro una pequeña sonrisa en los labios de nuestro protagonista, sus hermanos le sacaban de quisio pero también le sacaban muchas sonrisas y caracajadas.

ONU  : ¡¡¡BASTA!!! - Gritó ya estaba  harto de las típicas peleas en las que USA y México siempre entraban como los causantes, no podía creer lo infantiles que podían llegar hacer los países.

Un par de minutos después la reunión había concluido, todos salieron cómo caballos de aquella sala, excepto los europeos, él a diferencia de los demás salio de último para evitar ser empujado por la multitud.

Al salir de aquella habitación caminó por el pasillo del edificio distraído, no pensaba nada, su mente estaba en blanco, solo caminaba derecho por el pasillo. Tan distraído iba que no escucho cuando algunos países gritaban su nombre. Costa Rica caminó hacía la dirección del peruano con una sonrisa en el rostro, al estar frente al contrario colocó sus manos en los bolsillos delanteros de sus jeans para después decir su nombre, le tocó el hombro y el contrario lo miro de manera confundida, parpadeo un par de veces y le sonrió al costariqueño el cual venía acompañado de otros centro americanos.

De sus labios se escapo un pesado suspiro, miro a los countrys y le dedicó una de sus mejores sonrisas falsas. ¿Porqué? Se preguntarán, la respuesta es simple, lo único que quería era silencio, le dolía la cabeza terriblemente y tenía sueño y hambre, puesto que llegó algo tarde no tuvo tiempo para desayunar.

Perú : Lo siento, causas, pero tengo demasiado trabajo. - Dijo con una risa nerviosa para hacer su excusa más creíble. -

Los centroamericanos se miraron entre sí y voltearon a verlo al peruano el cual ahora soñaba que dormía plácidamente en su cama, le dedicaron unas hermosas sonrisas junto con unas miradas comprensivas.

Guatemala : No hay problema. - Dijo con una hermosa sonrisa hacia el peruano. - Nos vemos otro día. - Dijo alejándose con sus hermanos mientras conversaban entre sí. -

El peruano le devolvió el gesto a cada uno y se largo con pasos lentos a su casa, estaba feliz, podría dormir tranquilamente y sin interrupciones todo lo que quisiera hasta la próxima semana que tocaba reunión. Inconscientemente una sonrisa se formó en sus labios la cual desapareció y cambio a una seria al escuchar el sonido de su teléfono.

Con gran pesadez metió su mano en el bolsillo de alfrente del pantalón y miró la pantalla, "Chile" al ver aquel nombre su expresión cambió a una desinteresada, suspiro pesadamente para después deslizar el icono de llamada color verde. Lo primero que oyó  fue el grito de sus hermano.

'¿Eh? ¿Bolivia? ¿Qué hace el por ahí?' pensó el peruano por un par de segundos sin notar que al otra lado de la línea telefónica el chileno lo llamaba sin recibir respuesta. Recibió un fuerte dolor en sus cabeza, pues el de parche había gritado su nombre y éste tenía el teléfono en su oreja sin contar con su ahora aumentado dolor de cabeza.

Perú : Bolivia? - Preguntó confundido esperando una respuesta. -

Chile : Estoy bien, gracias por preguntar, weón.

Perú : Qué... quieren?

Lo siguiente que oyó del otro lado de la llamada fue : "No puedo, qliao" para luego ver en anuncio de WhatsApp preguntando cómo consideraba la llamada, en su rostro se hizo una cara de confusión.

Perdió precisamente 4 minutos y 38 segundos de su vida.

Se acostó en forma de estrella cerrando los ojos, tratando de conseguir en sueño lo cual para su mala suerte no consigo, se levantó de un salto de la cama y se dirigió a la cocina donde comió lo primero que encontró, ya con el estómago lleno trato de dormir. Se sentó en la cama para luego acostarse, cruzó los dedos de sus manos colocándolos en su pecho, cerró sus ojos y suspiro, una sonrisa apareció en sus labios.

Y como si fuera arte de magia el maldito teléfono volvió a sonar.

"¿Esta maldita está cosa o qué?" Pensó  tomando el teléfono en sus manos, "Chile" decía de nuevo la pantalla. ¿Qué acaso no tenía nada mejor que hacer? Rechazó la llamada y entró al chat que tenía con el chileno para escribirle. "Pe, causa, deja de llamarme por estupideces. ¡Quiero dormir!" Le contesto y tiró el dispositivo al suelo, ya estaba harto.

Se arropó, y cerró sus ojos haciendo que sus labios formarán una sonrisa

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Más de 1100 palabras, más estás.

Espero que lo hayan disfrutado, lo dudo pero bueno. ¡Perdónenme!

Que tengan una buena mañana/tarde/noche. ¡Adiós! Nos leeremos pronto, lo prometo.