Sarada estaba dispuesta a decirle a su padre sobre la extraña señora que había conocido, total, ella dijo que conocía a su padre. No habría problema, ¿o sí?

Sarada llego a su casa, pensando un poco sobre el extraño sentimiento que sintió cuando esa señora la tocó, era algo súper extraño, no lo había sentido con otra persona, ni con su propia madre.

Al entrar no había nadie en casa, subió a su habitación y ahí se quedo un rato más. Tomó su celular y busco en google “por qué me sentí extraña cuando una mujer mayor tomo mi mano”

Muchas respuestas coincidían, “es porque tal vez te gustan las mujeres" y solo encontró una con sentido común. "Eso normalmente se siente cuando tienes contacto con alguien que no has visto en mucho tiempo, tú madre o hermana sería lo más probable” ¿Madre?

«Pero si mi madre ya la conozco y es Hinata. ¿Hermana? No podría ser, se veía como mis padres» pensó
—Todo esto es tan raro... Mejor se lo contaré a mi padre.

Se colocó los audífonos y colocó The Cranberries, cerro sus ojos hasta quedarse completamente dormida.

3 horas más tarde.

—Hoy si fue un día muy agotador Sasuke-Kun

—Ni que lo digas Hinata, pero por lo menos estuvimos juntos todo él día— le sonrió y luego la besó.

—Iré a ver a Sarada-chan— le devolvió la sonrisa 

Hinata subió hasta la habitación de Sarada y la encontró durmiendo, tranquilamente, su hija era hermosa hasta dormida. Le sacó los audífonos y le puso pause a la música. Y la comenzó a despertar.

—Sarada, Sarada-Chan, despierta cariño, ya llegamos— besó su frente.

Sarada aún dormida la abrazo.

—Me alegra tanto cuando éstas conmigo madre — beso su frente también y abrió los ojos — te amo mucho madre

—y yo a ti cariño.

Sarada se levantó y juntas bajaron hasta el living.

Se sentaron al lado de Sasuke y lo abrazaron

—¿Como les fue hoy padres?

—Muy agotador, pero en buena compañía no cansa tanto— dijo Sasuke mirando a Hinata —¿y a ti hija?

—Pues bien... Pero, al salir, una señora me habló. No la conocía, pero dijo que era pariente tuya.

—¿Así?— Sasuke se extraño, ya que no tenía ningún pariente. 

—¿Cuál era su nombre?— pregunto Hinata

—Si, se llamaba Sakura. Dijo que me conocía y pues, yo jamás la había visto.— Sarada emitió por completo lo que sintió cuando Sakura tomó su mano.

—¿Sakura?

A Sasuke le comenzó a hervir la sangre. Otra vez Sakura, y esta vez había excedido los limites. Se levantó del sillón y se dirigió a la salida.

—¿A donde vas?

—Olvide algo, voy y vuelvo, Sarada ayuda a tu madre con la cena.

—Esta bien...

Sarada sintió que estuvo mal al decírselo, pero ya estaba hecho. Miró a Hinata quién tenía una mirada preocupada.

—¿Ocurre algo mamá?

—N-no, nada cariño. ¿Me ayudas?

—¡Si!— la abrazó.

...

Sasuke fue a casa de la Haruno nuevamente. Ésta vez si que la mataría y no tendría compasión alguna.

Al llegar no toco la puerta, la pateo y comenzó a gritar su nombre.

—¡SAKURA, SAKURA, SAKURA!

Sakura al oírlo supo que era él y no tuvo miedo. Lo enfrentó.

—¿Que diablos haces aquí maldito idiota?

Sasuke no dijo nada y la agarro del cuello.

—Te dije, te dije que no te acercarás a mi hija maldita. Te lo dije y te lo advertí. Ahora afronta las consecuencias. Morirás aquí y ahora 

—N-no, creó q-que lo harías — decía apenas y lo miraba con una enorme sonrisa.

—¿Quieres apostar?

—¡Señor, suelte a la señorita Sakura!— le dijo la sirvienta.

—¡Fuera!— le gritó.

Ella miro a Sakura y ésta solo asintió.

—S-sasuke, a-amor. Es n-nuestra hija— le hizo cariño en el rostro.

Sasuke sentía tanto asco que la soltó. Sakura recuperó el aire y se levantó

—Así que, tarde o temprano sabrá que yo soy su madre. Te odiara a ti y a tu estúpida “mujer”— dijo entre comillas.

—Me das pena.— comenzó a reír

A Sakura no le gusto para nada.

—Tú eres el que da pena cariño — rió también

—Soy mucho más que tú, en todo. No ganaras a mi hija, es mía. No te vuelvas a acercar a ella  o sino, para la próxima no la cuentas.

—Hahahah, ¿tú y cuantos más?

Sasuke la empujo y luego se fue, sin decir nada más.

—Señorita Sakura, ¿esta usted bien?

—Si, tranquila.— le sonrió

Sakura sonrió aún más. Ella ganaría a Sarada y eso todos los sabían.

«Estúpido y tonto Sasuke, no sabés con quién te éstas enfrentando»