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No se inmutaba, quedó perpleja mediante lo que estaba revisando sus papeles. Su tono de color de piel era blanco, casi palideciendo.

―Esto es extraño. Debe de haber una falla ―susurró para ella misma.

Sabía que esto era la segunda vez de verificación del estado de salud en HoSeok. Desea omitir el recuerdo que se le vino éste preciso instante. Sin embargo, le es muy imposible, ahora todo encaja a la perfección mediante va cavilando algunos hechos anteriores. Realmente sabe porque el Señor Jung nunca se lo llevó a HoSeok. Jamás tuvo la forma de explicar a través de palabras. A decir verdad, ya no estaba en su ultima cordura de conciencia en él.

Y ahora viendo estas pruebas cada vez llega a la conclusión más concreta. Que en verdad algo está mal y por otra parte es tan lamentable. Su vida esfumándose como una vela.

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Hodae se encontraba desorientado y un poco apenado, todo ello surgió tan rápido. Al saber del secreto oculto de su propio padre le dejó desconcertado y un tanto taciturno como si recién lo está procesando la información. Realmente no es fácil de asimilar lo sucedido, ¿Quién iba a imaginar que su padre iba a llegar a tal extremo de clonarlo? ¿Realmente había perdido las esperanzas que no iba a sobrevivir y reemplazarlo, así como sin nada? Su estado de animo no era lo mejor, se sentía usado y recibido por lastima como si fuese un objeto común y corriente.

Por otro lado, se siente derrotado lo que está fluyendo dentro de él; desahuciado, cabizbajo. Su vida no sabía a dónde giraba. Tenía en cuenta de los errores que tuvo en su pasado y tal vez al perder una gran persona importante en su vida.

Porque lo que vio hace unos minutos atrás era la tanta devoción y cariño que le miraba Taehyung a HoSeok. Un amor tan único e inefable, totalmente no encajaba allí, porque no estaba en ese paraíso de ellos dos. Sí alguien tiene que hacer diferencia, él sería la mala versión y Jung HoSeok la mejor. ¿Quién iba a imaginar que ellos dos si pudiesen coincidir?

Siempre fue así, comparados de por vida.

Su carácter cálido, serio, introvertido y sobre todo una persona quién está dispuesto amar y valorar a la persona que está a su lado. No como él que es ajeno a todo eso.

Éste apabullante sentimiento no dejaba de molestarle ni en sus sueños perezosos, se adueñó en su mente. Meses atrás nunca pensó que con Taehyung sería algo que le cale hasta el tuétano.

Es un gran perdedor e idiota. Dejar plantado a Taehyung aquella noche de la cita y sin si quiera pedir unas disculpas adecuadamente.

¿Cómo se supone que va a conquistar de esa forma a Taehyung?

Desde hace años le gustaba a Taehyung solo que no le manifestaba de manera transparente como el otro lo hacia, no sabía como corresponderlo. Era bastante obvio como Taehyung demostraba interés a él. Lamentablemente, por ser muy lento en el amor no lo supo aprovechar a tiempo y el único que si se dio cuenta de la cuán magnífico es Taehyung no es nada mas y nada menos que HoSeok.

―Me pregunto si algún día se podrán encontrar una vez más... ―las palabras de Hodae salieron de su boca como un murmullo.

Él no es bueno presagiando la situación, no obstante, ya sabe a lo que se viene. Y es así que entro al cuarto. No tenía que callarlo más.

Abrió la puerta lentamente para dar paso en entrar a la habitación blanca.

Justo encontró a HoSeok parado en la ventana dando una observación a las calles de Seúl lo más curioso es que el clima estaba radiante. Prácticamente le daba la espalda a él, pero de todas formas si lo llamará para que se acercara con él no lo haría en definitivo.

―Hola ―no sabía como entablar una conversación con él, porque la mayoría de las veces que lo hacía no fue tan amigable. Usualmente, utilizando su voz de despecho, disgustado.

HoSeok volteó su cabeza más no giró su cuerpo. Su rostro se veía solemne y tranquilo.

―No vengo hacerte daño, en verdad no lo tomes así.

De nuevo se situó en su posición antigua.

Se le hacía bastante dificultoso, cada oración que terminaba se le agotaba su aire, una opresión en su pecho totalmente inexplicable.

―En sí, vengo a hablarte que... ―hizo una pausa―, al parecer estar en ese apartamento cambio tu forma de pensar de ver las cosas. Supongo que recuerdas todo, ¿No?

Se mordió la lengua Hodae. Tal vez hablar del pasado era muy pronto para decir o asimilar al contrario.

―Bueno... de todas formas ya deberías de saber lo que sucedió en el pasado. Ninguno pensó muy bien lo que pasaría en algún futuro, esto se dio así a causa de papá. Nosotros no tenemos la culpa de nada, hay que mantenernos calmados a lo que va a suceder después.

HoSeok asintió mas no dijo algo al respecto.

―Me siento bien al saber que me escuchas. Y si es así, primeramente... te pido que perdones por todo lo que provoque, tú siempre fuiste el favorito de papá, un hijo que siempre te quiso en cambio yo no y-

― Te robaste mi vida.

― ¡¿Qué?!

― ¿No lo escuchaste? ¿Quieres que lo vuelva a repetir? Prácticamente en algún principio no debiste de despertar de ese coma, soy un fracaso de un intento fallido.

Vio como dio un gran suspiro HoSeok. No supo que decir o que palabras acotar, le tomó desprevenido debido a lo que manifestó. ¿Realmente se siente así él? ¿Un intento fallido?

―Hoseok, tú no eres un intento fallido, en realidad todo se debe a la culpa de... nuestro padre y de todas las aberraciones que hizo. Él nos arrastro a esto, a nosotros si pensamos nos queda encontrar una vida tranquila.

― ¿Una vida tranquila? Creo que son tan pocos los afortunados en tener aquello, yo no estoy incluido en eso ― murmuró HoSeok, le costaba levantar un poco la voz.

―No digas eso. Pronto saldremos de este embrollo, la doctora ha venido acá para tratar el asunto de nuestro, ¿no te parece bien? Por fin podrás vivir bien ― se encontraba ahora cauteloso en hablar con sus propias palabras Hodae. No deseaba extenderse mucho.

―No lo entiendes ―negó varias veces―. Por cierto, ¿a que veniste aquí para decirme? ―cuestiono con voz lúgubre y vacío.

―Yo   ―se sentía nervioso a lo que iba a declarar― vine aquí a confesarte que Taehyung te ama demasiado. Sonará estúpido lo que digo, pero es verdad, has podido dar todo lo mejor a lo que yo nunca pude. Desde un principio sé que Taehyung estuvo enamorado de mí, sin embargo, no lo supe corresponder por temor; es por ese motivo que vine aquí, lo supiste valorar. Gracias por ello ―esbozó una pequeña sonrisa―, hasta luego.

Dio media vuelta y salir de la habitación. Soltó lo que tenía guardado por muchos meses, de alguna manera se sentía la necesidad de aclararle eso. Estaba a punto de irse hasta que...

―Hodae.

Retrocedió unos escasos pasos el mencionado.

― ¿Tú aun sigues enamorado de Taehyung, cierto? ―ahora su cuerpo giro por completo y dar la cara.

Aquella pregunta resono en su pecho causando que se impresionará demasiado. Hoseok tenía la manía de sorprenderlo cada vez más cuando hablaba. ¿Seguir enamorado de Taehyung? no lo podía negar, claro que lo estaba. Todavía sigue ese sentimiento por él, no se puede borrar de la noche a la mañana.

― Sí, lo estoy. Es por eso que me siento bien por una parte que lo hiciste mejor, eres la versión buena mientras yo soy todo lo opuesto.

Y sin más que añadir fueron las últimas palabras antes de salir a la habitación blanca.

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