『019』


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¿Como morir sin morir?

Lo que acaba de hacer HoSeok no tenía perdón de nadie. Una acción horrible y catastrófico, faltar la lealtad de esa forma. Por qué si, HoSeok era un descuidado de primera a lo que Taehyung siempre le reprochaba lo mismo.

Supuestamente perdió el anillo de bodas. Mala idea.

Había dejado en la mesa de la sala para reparar el lavavajillas, sin embargo, a los pocos minutos desapareció de su lugar dejando con un gran misterio e incógnita en su mente. 

¿Quién pudo agarrar sin permiso su anillo de bodas?

¿Acaso hay alguien fuera de lo común divagando en su nueva casa?

¿Taehyung haría su drama al perder su anillo?

No estaba dispuesto en afrontar todo ello, es demasiado y hasta incluso se sentía culpable. Bueno, no quería morir tan joven, no hoy. Ahora ruega por su vida buscando desesperadamente cada horizonte de la casa grande y no había ninguna señal de ella.

Yeontan apareció en su panorama correteando hacia él.

―No es momento para jugar, Yeontan ―gimoteó―, hoy seré hombre muerto.

Aun andaba con su plan de búsqueda, desde los cojines del sofá, en los cuadros de la repisa, hasta en las alfombras. ¿En dónde lo dejó? ¿Por qué no puede recordar nada?

― ¡Me rindo! ―bramó. Dejo su cuerpo caer en el sofá. Derrotado. Dentro de unos minutos Taehyung vendrá acá desde su trabajo. Trataba de planear en su mente escogiendo palabras correctas para tratar con su esposo, con la finalidad de extender mas su plazo de vida.

Sintió que el perrito pequeño subió a sus piernas. Lamió su mano, pero a HoSeok no le gustaba eso ya que era algo aficionado a la limpieza.

―Yeontan ―se quejó. Formando en su rostro una mueca―, deja de hacer eso.

Sujeto a su perro y lo dejo en el sofá, se levantó de su asiento volteando para ir al baño, al rato escuchó un sonido muy raro... volteó por donde estaba Yeontan. Oh no, esto no era un bueno para HoSeok. Definitivamente no lo es. 

Yeontan acaba de orinarse en el sofá. El sofá favorito de HoSeok.

―Bájate de ahí ―regaño al perro. Y sin más Yeontan se fue dejando su rastro de orina ― ¿En donde has aprendido eso? 

¿Ahora quién se va a dignar en lavar el sofá? Ni loco va decirle eso a Taehyung sería para que reciba una reprimenda. Pero no es nada peor que perder tu propio anillo de bodas.

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―Amooooorr ―canturreó Taehyung abriendo la puerta de su casa―, ya llegué.

Hubo un silencio total.

― ¿HoSeok? ― avanzó un poco más hasta llegar al comedor. Empezó a dudar Taehyung. ¿Acaso había salido a estas horas repentinamente? Camino más adelante y justo vio de reojo a HoSeok pasando a la otra habitación como si se escondiera de algo.

― ¡Hey! ¿Por qué tan misterioso?

Es allí donde camino con sus pasos amenazantes dirigirse a su esposo.

― ¿Qué me escondes?

― ¿Yo? ―se señaló el mismo un tanto nervioso.

―Sí, tú, ¿A quien mas? Te estuve llamándote y no me contestabas, ¿Acaso tienes miedo de mi o qué? ―cruzó los brazos.

―Pues limpiando ―murmuró cabizbajo.

― ¿Y que estabas limpiando ¿Tu obsesión a la limpieza llego a controlarte? ―preguntó más su esposo.

―No sé si esto te va a afectar o no.

―Dímelo.

―Pues... Yeontan se orinó en el sofá.

―Ah, solo eso ―suspiro―, me haces asustar pensé que sería algo peor como por ejemplo meter algunas de tus amantes en nuestra propia casa ―dijo todo ello tan neutral Taehyung, aunque simplemente lo hacía por fastidiar. Sin embargo, se sorprendió bastante HoSeok referente a la reacción que hizo su mascota y aún más cuando mencionó ese tema de los amantes.

―Pensé que me ibas a gritar por ser descuidado en la limpieza.

―No tengo ganas de discutir por eso, ¿Además para que te voy a gritar si estas siendo descuidado? Yo soy el más desordenado de los dos. 

―Pero también, no sé porque dices sobre los amantes. Jamás te engañaría, me siento muy bien contigo en nuestro matrimonio. ¡Recuerdo nuestros votos! ―medio reclamó HoSeok.

―Hoy día es viernes, mi amor. Te aseguro que no estoy de ganas para discutir ―lo advirtió―, si tuviera energía ya no estarías durmiendo en la cama y Yeontan reemplazaría en tu lugar.

―Entonces, vamos al dormitorio ―sugirió HoSeok.

―Esta bien.

―Peroooo ―HoSeok detuvo a Taehyung poniéndose al frente de él.

― ¿Qué sucede?

―Merezco mi beso de la noche ―señalo su dedo hacia sus labios extendiendo como si fuese un patito. Ante esto Taehyung medio rio por la acción de su adorable esposo.

―Okay, solo cierra tus ojos ―indicó. Tal como dijo el otro, Taehyung agarró las mejillas de su esposo y acercando su rostro para poder juntar sus bocas. Sintió los dulces belfos de HoSeok, tan suavecito y blanditos.

Inmediatamente esa aura de tranquilidad se esfumó en minutos cuando escucharon a Yeontan con su garganta defectuosa, el pobre animal se acaba de atorar algo, al instante los dos recurrieron a su mascota.

― ¡¿Qué sucede con mi bebé?! ¡Has algo, HoSeok!

Entró en pánico Taehyung, repentinamente HoSeok sostuvo al perro al examinar su boca.

―Tranquilízate, creo que se calmó.

Sorprendente fue la acción del perro que escupió algo... ese algo era el fin de HoSeok, nadie se espero de aquello, pues había sido que Yeontan arrojo de su boca el anillo.

Al instante Taehyung le miró con desdén directo a su esposo.

―Puedo explicarlo ―se puso a la defensiva con sus manos evitando el futuro golpe de su esposo en el caso si tuviese un arrebato.

―Explicar qué. ¡DIME! ―gritó Taehyung―, que nuestro perro casi se muere por atragantarse con el anillo de bodas.

―Este sí ―musitó HoSeok con los ojos muy abiertos lleno de terror. Tenía más miedo el enojo de Taehyung y sus locuras.

― ¡Te dije que no quería renegar hoy día! ―medio regaño el rubio.

―Pues yo tampoco no te quiero hacer renegar, bebé ―trato de hablar suave y neutralizar las cosas― ¿Sabes? ―intento de relajar el ambiente, camino hacia donde estaba el anillo y lo recogió para después meter en el bolsillo, aguantando toda la baba asquerosa de su perro ―, puedo remediar las cosas, sé que te gustará.

― ¡No vas a sacarme el enojo! contaré diez segundos mentalmente para que hagas una acción reparadora... si no, dormirás en el sofá.

Los segundos ya estaban contados para HoSeok, no sabía que acción hacer, ¿Como quitar el enojo enorme de su "lindo" esposo? De repente su mente se ilumino prendiendo una idea... tendrá que sacrificarse.

―Ya pasaron los diez segundos ―Era ahora o nunca.

―Yo... puedo... ―dudó un decirlo.

― ¿Puedes qué?

―Puedo ser un estríper por una noche. ―Murmuró. Se abrieron en grande los ojos del contrario.

― ¿Qué cosa? ¿Estas bromeando, verdad?

―En realidad no. Puedo intentarlo, bailes eróticos... bueno al menos tengo mas o menos la idea.

―Estoy empezando a creer la palabra de YoonGi al decir que tenías una noche con las señoras de los automóviles cerca de la universidad dónde íbamos a estudiar ―entrecerró sus ojos no despegando su mirada en su esposo.

― ¡¿Qué?! ―exclamo―N-no como crees, jamás tuve esos encuentros ―trago saliva.

―Imagínate como si no hubiese dicho nada... entonces, aceptó tu oferta. 

Las ideas de Taehyung andaban maquinando ahora de las cosas que va a hacer esta noche con su esposo. 

―Porque siento que te sobrepasaras con mi cuerpo, me voy a sentir extraño. Te conozco, Taehyung ―explicó con sinceridad HoSeok.

―Eres mi esposo, puedo hacer lo que yo quiera con tu cuerpo. Y quizás... si se da la oportunidad tal vez cambiemos de roles esta noche―dijo sonar un poco cómico, sin embargo, HoSeok se lo tomó muy a pecho.

―Oye sabes, cambió  de planes. Iré a dormir en el sofá, te veo en la mañana, amor. ―Totalmente se espantó el azabache al saber la confesión de su esposo.

― ¡Heeeeeyy! Solo bromeaba. Ahora si quiero mi baile erótico hecho por ti ―jaló de su antebrazo para detenerlo.

―Entonces ―suspiro ―, espérame en el dormitorio.

―Allí te espero, guapo ―sonrió bastante adorable guiñándole el ojo coquetamente. Oh sí, su esposo puede ser jodidamente ardiente, pero no esperaba que fuera a manipular de esta manera, prácticamente en la cama se va sentir dominado pues claro con el único detalle que él será el activo.

Ahora en estos momentos se arrepiente de su idea, ¿No había mejores?

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Taehyung tumbo el cuerpo de HoSeok impactando su espalda contra la cama. Gateo en el espacio sentándose en su regazo sintiendo el miembro de su esposo despertarse, devoró completamente el cuello de su esposo brindando besos y mordidas en su piel. De paso haciendo fricción debajo de sus prendas.

― ¿Te gusta cómo me estoy moviendo? ―brincaba en su regazo moviendo circularmente, ante ello provocaba en el otro salir pequeños gemidos. 

―Joder, ¿Por qué me vendaste los ojos? ―gruño― ¿Qué clase de fetiche o filia estamos haciendo, pervertido?

―Shhh... ―llevo el dedo índice en los labios del otro― no digas nada ―su voz sonó tan seductor―, disfruta lo que yo hago, pastelito.

― ¡Ahora soy pastelito! ―exclamo indignado.

―Shhhhh... ―silencio a su esposo otra vez. Sus pecaminosas manos viajaron por su cuerpo, desde su torso hasta sus abdominales moldeando su figura perfecta― eres perfecto, mío ―sonrió con picardía.

―Hugh... ―salió el pequeño gemido de HoSeok― ¿Que vas a hacer? ―sintió que su bóxer se iba bajando paulatinamente.

―Hacerte una oral, ¿Por qué? no te niegues a esto como un inocente que no sabe nada, cuantas veces hemos esto hecho ―hablo super casual Taehyung, mentalizando que paso seguir.

―S-si... pero aún tengo pudor.

―No me importa tu pudor, esta noche serás mío y de nadie más―sin más que añadir, Taehyung acerco con su mano frotando el falo de su esposo al rato con su lengua chupaba y lamia el glande del mayor. Duro así por un momento y sin más remedio de uno solo se lo metió.

Sin duda alguna, esto sería una larga noche para estos amantes extasiados en la lujuria.

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Dos capítulos más y éste fanfic ya queda concluido. 

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