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Hoseok dejo el plato de comida delante de su esposo mientras se sentó. Taehyung sonrió y dijo: "gracias" posteriormente empezó a comer un poco rápido, devorando similar a un tigre; procurando deleitar su porción. Por otro lado, Hoseok miraba con detenimiento la acción de su esposo y ni siquiera el dio un bocado de su comida. Era tan sorprendente, básicamente Taehyung no comía... él solo tragaba como un cerdito, claro uno bonito.

―Mi amor, ¿es necesario ir justamente cuando es sábado? ―se denotaba en la voz de aburrimiento y desánimo.

―Sé que de lunes a viernes son mis labores, pero debo ir urgente, la empresa me necesita ―habló con la comida dentro, era adorable al momento de comer. Por su parte de Hoseok tenía días antes planeando en realizar una maratón de películas y mucha comida chatarra a lado de su hermoso esposo, abrazados tan apegaditos durante todo el día en la cama sin levantarse. Lamentablemente, eso no se pudo dar al cabo, llevando una gran decepción en el azabache.

―Pero me vas a dejar solito aquí... ―abulto su labio inferior el mayor de los dos, Taehyung se percató y penso un poco más, situó su mano hacia el mentón.

―Haré todo lo posible para estar los dos y junto con Yeontan. Solo será unas cuantas horas, mi amor ―tornó su voz aún más dulce volviéndose melosa.

―Tenía planeado... hacer otras cosas contigo ―levantó sus cejas sugerentemente. El truco de siempre, chantaje, chantaje y más chantaje para que finalmente acceda a otros asuntos subidos de tono.

―Ya me la sé de memoria tus mentiras de niño, Hoseok ―rio leve Taehyung, al instante dejo la mitad de su comida, no lo pudo terminar y de frente se levanto de su silla.

― ¿Tan pronto? ―se asombró HoSeok al ver como su esposo se iba tan rápido perdiéndose en la esquina de la cocina. No dudo en levantarse y recoger los platos sucios y llevarlos al lavatorio.

Sintió una opresión en su pecho, una sensación extraña que se albergó dentro de él. El trabajo y la sobrecarga que se presentaban en ello se juntaban los horarios más de lo normal, casi no han dedicado esta semana larga están ellos dos, pues claro, luego de la visita de los padres de su esposo desde allí empezó la sensación extraña de Hoseok como si fuera alertándole de algo.

Fue casi escabulléndose detrás de la puerta y observo a su esposo como hablaba animadamente con alguien desde el celular, se le escuchaba esa risa exagerada muy nato de él. Tenía que admitir que sintió celos, pues a las pocas semanas así no sé presentó de esa forma Taehyung. Siempre buscaba algo para hacer reír Hoseok para su esposo, no obstante, el menor no le encontraba sentido frunciendo el ceño o en algunas ocasiones se reía leve.

―Solo falta pocos minutos, estaré puntual como siempre, ya estoy cambiado justo para la ocasión ―Hoseok seguía escuchando el tema de conversación, Taehyung era muy hermoso, con cualquier ropa que se vistiera aún seguía luciendo muy atractivo.

―Le dije que estaba apurado.... sí, sé que falta como treinta minutos, pero es qué tenía ganas de verte ―sonrió tan eficaz. Notaba ese rubor de sus mejillas y sumamente ya estaba comenzando a sospechar HoSeok, la curiosidad de saber, ¿Quién la persona que estaba hablando a través de su celular?... se mordió el labio muy dubitativo.

―Sip, es como una mentira piadosa que hice, no creo que vaya afectar en un matrimonio, ¿O no?...¿Entonces?

Tachó de su cabeza lo que se le vino primero en la mente. Su adorado esposo nunca haría tal semejante situación. Ellos se comprendían, se amaban, se apoyaban mutuamente, no obstante, la falta de tiempo era otro rumbo distorsionado.

―Allí te espero, en el lugar de siempre y después nos vamos al trabajo. Adiós, niño ―bromeó Taehyung, de inmediato cortó la llamada, finalmente suspiro y fue de frente al espejo para verificar algún descuido en su apariencia.

Hoseok tomó las agallas de entrar al cuarto, tanteo su pasos, se recostó en el umbral de la puerta cruzado de brazos mientras veía detenidamente a su esposo. Bueno en estos momentos tenía que usar su profesionalismo con la finalidad de analizar a su esposo, porque algo raro ocurre y eso no le inspira una confianza buena.

―No es necesario que te arregles, así tal como eres estás bien ―se presenció la voz fuerte de Hoseok de un respingo se asustó Taehyung generando que volteé rápido y con la respiración errática... una señal más.

― ¿Hace cuánto tiempo estás allí?

―No mucho ―negó con la cabeza Hoseok, dio unos pasos adelantes hasta llegar frente al menor, observando fijamente a él―. Espero que te vaya bien en tu trabajo un día como sábado ―las yemas del azabache recorrió por los labios de Taehyung acariciando suavemente.

―Gracias ―susurró Taehyung mientras cerraba los ojos al sentir el tacto de su esposo. Muy dentro de Hoseok pensaba que todo estaba bien, es decir, Taehyung no le negaba las demostraciones de amor que le brindaba solo era el tiempo que los alejaba.

Hoseok agarró el mentón del contrario con la finalidad de aproximarse y sellar con un beso significativo transmitiendo en ello el amor, cariño y deseo. El beso era lento, saboreando sus labios finamente, sincronizándose al compás. Los labios de ellos son muy dulces hace que disfruten cada vez más.

―Sabes que te amo mucho, ¿verdad? ―al terminar apego la frente con la suya observandose fijamente mientras  tanto el rubio solo asintió.

―Te amo. Verás que llegaré temprano a casa ―sonrió enternecido abultándose sus mejillas, inesperadamente paso de la mano derecha a tocar la mejilla de su esposo. Finalmente se retiró del cuarto y atrás suyo venía Hoseok.

Al llegar la puerta principal, los esposos se abrazaron y como siempre nunca faltando la sesión de besos, lucían tan acaramelados uno al otro. Y sin más preámbulos estos se separaron. Taehyung mando un beso volado a Hoseok con sumo cariño.

¿Todo va estar bien?, ¿Verdad?

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Taehyung pago al taxista inmediatamente para no tener dificultades y sin más se fue corriendo a la cafetería de al frente. Ya dentro su vista recorrió por el panorama y fue más su impresión cuando lo vio, de pronto sintió su corazón acelerar de la emoción, ya era hora.

―Jungkook ―tocó su hombro provocando que Taehyung se asuste levemente cuando se dio cuenta de quien se trataba.

―Taehyung ―sonrió suavemente. Sin demasiada prisa tomaron asiento cerca a una mesa.

― ¿Y bien? ―sonrió.

― ¿Bien qué? ―frunció el entrecejo confundido.

―Me lo prometiste.

―Que ambicioso eres. ―Chasqueó la lengua mostrando fastidio y  desde su maletín abrió cauteloso rebuscando para llegar en sus manos el sobre amarrillo. ―¡Aquí tienes! ―Le entregó el dinero en sus manos y  vemos por la otra cara lo afortunado que esta Taehyung reflejando en su rostro esa aquella alegría inmensa.

―Woow, hasta siento que tengo dinero por todo un año ―toco un poco más el sobre por la contextura.

―Es bueno que te alegres. Eso es parte del proyecto que se acordó. Por cierto, ¿lo utilizarás en un lujoso restaurante para nosotros dos, cierto? ―ese modo disimilado en conquistar no se le quitaba en Jungkook. Quería sobrepasarse de lo atrevido.

No hay que ser inteligentes de las intenciones que tenía Jungkook. Era sencillo, solo quería llamar la atención de Taehyung y cortejarlo.

― ¡¿Estás loco?! Este dinero será para mi esposo y yo, que bromista eres, Jungkook ―salió de su boca unas leves carcajadas por la ocurrencia de su amigo en poco tiempo, que es Jungkook.

Hasta aquí creemos que el único tonto es Taehyung en no deducir de las intenciones verdaderas de Jeon.

―Oh bueno, en realidad lo decía en serio ―se rasco la parte de su nuca manifestando nerviosismo. Hizo un alto Taehyung sobre sus sentidos, abrió los ojos sorprendidos debido a lo que confesó. Sin embargo, paso a segundo plano fingiendo demencia.

―De todas formas, gracias, Jungkook. Eres el mejor, en tan poco tiempo llevándonos como amistad me muestraste que eres muy confiable y amigable ―dijo Taehyung guardando el sobre dentro de su casaca―. Y ¿para qué me llamabas?

―Para conocernos más, sinceramente hyung, no parece una persona casada, cualquiera se puede confundir que eres alguien recién haciendo su vida de adulto. 

―No te imaginas, piensan que Hoseok y yo somos novios ―de nuevo metió el tema de su esposo. Muy especialmente Jungkook detestaba ese tal Jung Hoseok que mencionaba siempre Taehyung, no le agradaba en absoluto, prácticamente era su competencia―. Casi nunca se percatan de nuestros anillos.

―Pero... casarse joven es muy extraño, ¿no lo crees?

―Es una locura de amor que nos dio a ambos. Además, no me arrepiento de nada, estamos felices conviviendo tres años juntos.

―Claro, debe ser bueno como según lo platicas, de eso no te niego. Pero, eso de casarse jóvenes te restringe varias cosas. Si no te casaras tan joven quizás conozcas diferentes personas. Como por ejemplo: un amor nuevo, un experiencia de choque y fuga, finalmente, ver si la persona es el indicado... tal vez, Hoseok y tú no estén destinados y pueda haber dificultades en su matrimonio más adelante ―lo hablo tan a la ligera.

Eso lo sonó muy entrometido de su parte, sin saber el detrás de la historia. Jungkook no sabe de esta experiencia, ni como uno se siente cómodo en un matrimonio.

En cierto modo se sintió ofendido y quizás un poco molesto respecto a sus palabras, pero desea respetar su opinión, no quiere refutarlo, pueda que tenga razón sobre las parejas que se casaron muy jóvenes y en pocos años fracasen con su matrimonio terminando en divorcio, por fortuna, ese no era su caso, mientras haya respeto, confianza y amor en su relación de esposos todo resultara bien. Porque Hoseok es el mejor hombre que tuvo en su vida y percibe que es el indicado para sus futuros planes y él está involucrado en ellos, no otra persona.

― ¿A qué quieres llegar con todo esto?

―De que eres una persona extraordinaria como para ser esposo de alguien.

De acuerdo.

Eso fue raro de lo habitual.

Últimamente Jeon se comporta de una forma extraña con él. Desea omitir tales pensamientos de su cabeza.

―Ah ―se percató de la hora de su reloj que llevaba en su muñeca―, ya es tarde, tenemos que ir al trabajo, hemos hablado lo suficiente, Jungkook ―se relamió los labios, súbitamente se paró torpemente, esquivando la inquieta mirada de su acompañante.

Era muy explícito que el ambiente es sofocante y embarazoso. Cualquier comentario que pone duda en su matrimonio a Taehyung no duda en evitarse ponerse enojado y disgustado.

Exactamente no esperaba ese tipo de comentarios por parte de Jungkook, el chico le parecía muy simpático y atento, sobre todo empeñoso con su trabajo, reflejando seriedad, disciplina. Habían tenido estas pequeñas citas en donde charlan por lo menos una hora ―cosa que no sabe Hoseok― sabe que es malo comparar personas porque está claro que pueda hacer sentir mal la otra persona. Pudo analizar bien los detalles que no tiene Hoseok, pero lo puede conseguir con Jungkook, e incluso suena estúpido lo que piensa.

Añadiendo más, sin duda alguna le bajo varios puntos de presentación a Jeon por opinar de su relación.

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Les dije que vendría los problemas  :'( lo que uno se confunde en una relación. Cadenita para qué Taehyung reaccione a tiempo y no haga una locura.