Una semana después.

Sentía como si me hubiera caído un gran puño directo a mi cabeza, justo ahí pero donde palpitaba como si tuviera vida. Pero esa gran gripe que tuve después de mi gran caída al barro.

Esperaba tener alguna reacción sobre esto, ya que ni siquiera me preocupé de cambiarme la ropa o secar lo que tenía. Pero no creí que iba a estar muriéndome  de dolor de cabeza.

¿Otro dolor de cabeza no tan molesto?

Kim. Estaba enojadísimo, regañandome que porqué no cambié mi ropa después de esa trágica caída. Tiraba fuego por su nariz como si de un dragón se tratara. Iba del baño a mi cama, todo lo hacía gritando, ese niño es muy escándaloso pero...así me gusta.

"Eres un irresponsable, hyung." Botó una gran aire aún furioso.

"¿Ya terminaste?" Cuestione con miedo
O sea, Kim no se ve de los que golpeaba pero en ese estado gruñón si daba mucho miedo. "Eres un niño gruñon, Kim. Así te vas a arrugar."

Fruncio sus cejas hacia mí. Sí, daba miedo.

"¡Entonces no te cuido más!" Lanzo un grito que se oyó por todo mi departamento y se fue pisando fuerte directo a la puerta para salir.

"Mierda."

Como pude me tuve que levantar de mi cómoda cama y fui tras él. Aún no salía estaba recogiendo sus cosas, asi que aproveche de eso y me puse entre la puerta y él.

"Déjame pasar, HoSeok." Gruño. Golpeó mi hombro y en menos de dos segundos me tuvo fuera de su paso.

"Kim, no seas así." Susurre adolorido por su golpe. No creí que no recurriría a la violencia. Me equivoqué.

Se quedo mirándome antes de irse, pues  ya había abierto la puerta y estaba listo para dejarme.

"Solo quiero cuidarte, hyung." Hablo  más tranquilo después de escucharme.

"Me encanta que me cuides, Kim." 

No gané la batalla pero si la guerra. Me aproxime en menos de lo que él quiso detenerme pero lo abrace. Besé su frente en medio de un tierno beso.

Solo eso basto para calmarlo.

"Me encanta que seas un niño gruñon, me dan unas enormes ganas de  besarte de ese mal humor." Hable rozando sus labios con burla, pues no alcanzo nuestra cercanía para ser un beso real.

Antes ya habíamos compartido un beso, unos días atras. Después de ese día de bajo de la lluvia hemos salido tres veces. La primera cita real fue en la biblioteca. Él tenía que estudiar pero quería leerme lo que estudió  y asi saber lo que realmente estaba preparado. Accedí y escuché toda su materia. Su forma de hablar, en como se movían sus labios  y en como sus ojos se evitaban con los míos. No lo pensé más y lo besé. Un toque casto, tan solo fueron segundos. Su rostro no se enrojeció como creí que lo haría pero si mordió su labio.

"Que atrevido, hyung." Me habló burlón. Ahora si dudaba  esa faceta de niño la imaginaba y que este niño burlón siempre ha sido Kim.

Ni siquiera pude responder. Él solo tomo la iniciativa y junto por segunda vez nuestros labios. Sí, sus labios son la puta gloria. Eran suaves y esponjosos, y juro que podía morderselos todos los días.

La segunda cita fue una idea de SeokJin. Nos invitó a su casa a celebrar que Namjoon aprobó su tesis. Sólo era excusa de beber alcohol y aprovechará
que Kim estaría borracho para pasar al segundo nivel.

Lo planeado de todo esto, es que Kim no bebía. Estuvo sobrio toda la noche. Éramos los dos más sobrios entre tantos los inconscientes por el alcohol. Después de abrigar a todos los ebrios  que quedaron sobre el suelo, subimos  a la cama de Seokjin y NamJoon y nos acostamos.

No, no hubo sexo.

Se acurrucó a mi pecho y fingió dormir. Hasta que me despertó besando mi cuello. El paro cardíaco que casi me da fue grande, desperté de golpe incluso asustando a Taehyung.

"Kim, me asusté."

No dijo nada. Solo de abalanzo un poco más, quedando arriba mío y siguió besando mi piel. Entonces lo atraje a mí y nos besamos durante un buen tiempo.

La tercera si fue real y decente. Fuimos a caminar por el parque, le compre helado y nos sentamos bajo una manta en el césped  del parque.

"Tienes un poco de helado ahí, Kim." Murmure acercándome sobre la mancha de helado en los labios de él.

Lamí sobre estos, pasando mi lengua  lentamente para limpiar bien el rastro de helado. Pura basura, yo solo quería provocarlo como él a mí.

Después del incidente nos besamos toda la noche, realmente sus labios son tan adictivos  se siente tan bien besarlo.

Ahora antes de que se marchara enojado de mi departamento, sólo bese su frente para demostrar que lo sentía.

"Perdón por no cuidarme, Kim. Te juro que para la próxima vez lo haré." Lo bese otra vez y lo miré. "¿Puedes cuidar de mí?

"Hyung es un tonto." Murmuro amurrado. "Esta bien, te cuidaré."

Tomo mi mano y camino junto conmigo siguiéndole en la cama. Me acosté de nuevo mientras él fue por más paños húmedos para mi cabeza.

Sentí que cambiaba los paños húmedos cada unos minutos. Podía sentirlos cerca pero la verdad dormí toda la tarde y tan sólo podía sentir su presencia.

Era de noche cuando abrí mis ojos. Lo primero que vi fue a  Taehyung semi desnudo a mi lado. Podía ver la espalda ancha pero mas abajo su cintura muy firme. Un bóxer rojo era lo único que lo cubría de mis ojos depravados. Su cuerpo es estupendo y deseable.

Reí despacio acercándome a su cuerpo tibio. Tenia la boca abierta levemente y un hilo de saliva caía por las comisuras y caía directo  a la sábana de la cama.

Me levante un poco y comencé a besar su espalda. Parte por parte hasta llegar a su bóxer.  No quería tocar mientras dormía. Eso si sería enfermo. Así que solo lo besé su espalda.

"Mhg..." Soltó un gemido pequeño ante el tocado de mi boca. Ahora no solo besaba sino que mis dientes mordian un poco y mi lengua acariciaba suavemente. "Hyung..."

Abrí mis ojos sorprendido. Esos putos dos sonidos tan cortos me encendieron tanto como una estufa de invierno.

"Te quiero, hyung." Habló después de otro gemido.

Estaba soñando conmigo. Con lo que yo le estaba haciendo

¿Qué es este sentimiento?

También lo quiero.

¿Pero porqué me siento tan sorprendido?

¿Por qué me siento incapaz de corresponder?