Casa Evans
(Forks)

Tosiek

Sentia un peso un poco liviano sobre mi, aparte de la iluminación del sol a través de mi ventana y no podia evitar escuchar una suave y melodiosa voz femenina a lo lejos.

-Despierta... Lindo, despierta- Escuchaba decir pero seguia sin abrir mis ojos-

Después de unos segundos la voz paro y senti algo suave tocar mis labios, mis mejillas, mi nariz y frente. Abrí los ojos por las cosquillas que sentia, encontrándome con una chica, de cabello corto duendecillos, sonriendo y esparciendo besos en mi cara.

-¿Alice...?- Pregunté con mi voz un poco ronca al despertarme-

-Buenos días, Tosiek.

-Buenos días, Alice.

Sonreí al despertar de una manera un tanto adorable. Recorde que me habia quedado dormido con ella en mis brazos.

Vi como aún la tenia abrazada a mi, ella encima de mi, asi que deje de hacerlo un poco avergonzado, no queria incomodarla. Alice dejo un beso en frente y se acomodó a mi lado para luego sentarse.

-Aún es temprano- Dijo mientras revisaba la hora del despertador, eran las seis-

-Y aún asi me despertaste.

Sali de mi cama para luego dirigirme al baño, para lavarme la cara y los dientes. Para luego comenzar a bañarme e ir a la escuela después de días.

Después de eso, no encontré a Alice por mi habitación, baje hacia la cocina para encontrarla preparando un sándwich.

-Llegas justo a tiempo, toma y come.

-Gracias, pero no tenias que hacerlo- Dije mientras lo probaba-

-¿Y dejar que te saltes tu desayuno?

Me encogi de hombros restandole importancia pero luego senti un golpecito en mi frente. Alice.

-El desayuno es lo más importante para ti, sobre todo que estas enfermito- Expreso a lo que yo me sobe mi frente-

-Esta bien, lo siento- Dije a lo cuál ella sonrio- Mandona- Murmure-

Ella lo escucho debido a que me dio otro golpecito en la frente mientras soltaba una pequeña carcajada.

-Ire a mi casa, te quiero- Dijo a lo cuál yo asenti un poco nervioso ya que no sabia que decir-

-Nos vemos en la escuela.

Ella asintio con una sonrisa ladeada y salio de mi casa.

Preparatoria
(Forks)

Narrador Omnisciente

-¿Edward? ¿Enserio?- Expreso incrédulo el ojiazul-

-Pense que lo sabias- Respondio Bella-

-Tenia mis dudas, es muy... Raro, solo mirale ese cabello de espanta pajaros.

Bella rodo los ojos divertida, sabiendo que el cobrizo los estaba escuchando.

-Quiero decir, mi perfecta amiga con ese... Cabello de escoba?- Decía incrédulo debido que siempre encontraba a ambos peleando-

-Sabes que te esta escuchando, ¿Verdad?- Miro a su amigo con la ceja levantada-

-¿Por qué crees que le sigo poniendo apodos?- Dijo logrando que Bella rodara los ojos bastante divertida-

Y asi era, Tosiek tenia el hobbie de molestar al vampiro. Era bastante divertido al igual que para los demás Cullen, sus hermanos estaban evitando soltar una carcajada, mientras que el cobrizo estaba con una cara de muy pocos amigos.

Ambos azabaches se sentaron en su tipica mesa de la cafetería, Tosiek entre medio de Angela y Bella. Los demás los saludaron y así empezaron a hablar de cualquier tema que se les viniera a la mente.

Y asi termino el almuerzo como terminaron las clases de hoy, obviamente el leucemico salio regañado por varios maestros por faltarse las clases y que tendria que ponerse al día porque sino reprobaría el año.

El chico se fue rápidamente al estacionamiento para irse antes de que otro profesor lo regañara.

-¡Tosiek!- Escucho la voz de Alice detras de el, sintiendo como lo abrazaba fuertemente-

Los alumnos que aún estaban en la escuela y en el estacionamiento, se quedaron sorprendidos, viendo como una Cullen abrazaba al azabache, se preguntaban algunos, ¿Desde cuando son tan cercanos?, mientras que otros pocos solo los pasaban de largo.

Tosiek obviamente noto eso y se puso bastante nervioso, el simplemente no quería llamar la atención. Se giro con una pequeña sonrisa nerviosa y la vampiro solto su agarre.

-Hola, Alice.

-Hola Tosiek, te ves lindo hoy- Dijo provocando un sonrojo en las orejas del chico, tratando de disimular-

-G-Gracias, supongo...- Tartamudeo

Alice sonrio aún más al ver como su azabache favorito se ponía aún más nervioso de lo que ya estaba. A ella le gustaba molestar a su chico.

-¿Iras caminando?

-Si, Janeth aún no vuelve, por suerte la escuela esta cerca de mi casa.

-Ven con nosotros, te llevamos- Señalo a sus hermanos y Emmet le saludo con la mano-

-No quiero molestar...- Dijo inseguro-

-No te preocupes- Suspire y asentio-

Vio como ella sonrio y nuevamente lo abrazó, pero esta vez el le devolvió el abrazo. Tomo su mano y lo jalo hacia el auto de Emmet, que también estaban Rosalie y Jasper.

-Tosiek- Llamo Emmet en un saludo-

-Hola- Saludo en el anterior nombrado hacia los demas-

Ambos Hale asintieron con una sonrisa ladeada. Después Emmet comenzo a manejar mientras que Tosiek le daba indicaciones para llegar a su casa.

La casa del azabache no estaba tan lejos, asi que llegaron en unos minutos. El se despidió de los Cullen, no sin antes darles las gracias por llevarlo.

Alice se bajo al igual que el, quien la miro confundido. La vampiro le dio un beso en la mejilla a pesar que sus hermanos podrian escucharles ella le susurro en el oido:

-Te vere en la noche.

El asintio nerviosamente mientras miraba a otra parte donde sea a la chica de pelo de duendecillo.

-Despues te lo comes, Alice- Solto el fortachon con una sonrisa picara y burlesca-

Casa Evans
(Forks)

Después que los Cullen hayan dejado al azabache en su casa, quien al llegar se dispuso a dormir para lo que restaba de la tarde.

Después de una "pequeña fiesta", se desperto alrededor de las 8 de la noche, Alice aún no aparecia, entonces se sento al lado de su ventana, observando la luna. Era algo que siempre hacia.

Para el, la luna era especial, podria considerarse extraño y raro, pero a el le gustaba hablarle a la luna. Era su acompañante para las noches.

Esta vez no era la excepción.

-Solo espero que ella jamás me deje.

Decia mientras soltaba un suspiro y miraba las estrellas y la luna. Pensando en Alice Cullen, hablándole a la luna de aquella chica vampiro que le robaba todos sus suspiros, respiros y latidos de su corazón.

Hablarle a la hermosa luna llena sobre aquella chica, fue algo tranquilizador para el.

Sin darse cuenta de que no estaba solo, sino que dichosa vampiro estaba escuchandolo, desde afuera de la casa del Evans. Dio un brinco al frente de la ventana del chico, sosteniendose del marco.

-¿Con quien hablas?- Dijo provocando un grito de su compañero-

El chico callo para atrás, en el piso de su habitación, sus latidos iban a mil por hora.

-¡Puta, mierda, Alice!- Dijo agarrandose del pecho que aún no se calmaba su pobre corazón del susto-

La anterior nombrada solto una carcajada ante el susto del chico, escuchaba su corazón, latiendo rápidamente y profundamente.

-Lo siento- Se disculpo con pequeña inocencia-

-Dios...- Decia recuperandose, ahora ya estaba calmado-

La pelicorto entro desde la ventana y le extendio una mano al azabache, quien la tomo para pararse.

-Perdón, pero me asustaste...

-No te preocupes- Rápidamente Alice lo envolvío en un abrazo muy tierno-

Asi estuvieron unos minutos, abrazándose entre si, ambos envolviendose en un lindo y feliz abrazo.

-¿Así que le hablas a la luna sobre mi?

Pregunto con una sonrisa ladeada y coqueta, provocando un leve sonrojo de su compañero y que se tapara la cara con sus manos por la vergüenza que sentía.

Alice solto una pequeña risa porque aunque el azabache se ocultara, ella escuchaba como su corazón latia como loco y sin olvidar que las orejas estaban rojas del chico.