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FIN DEL ACTO I

Academia de Ballet
(Phoenix)


Alice

Mi mandíbula está rígida, tan solo pensar en William con ese estúpido vampiro, me provocaba un nudo en la garganta; sabía perfectamente lo que era capaz James y lo que era capaz mi compañero por proteger a Bella.

Aceleré aún más mi velocidad, pero en medio de eso una visión vino a mi mente.

Era el mismo lugar de mi visión, una sala llena de espejos, que algunos estaban rotos y destrozados, producto de una pelea, lo que aún más me lleno de alerta fue ver la sangre en el frio piso y que esa sangre no me atraerá. Escuchar la respiración entrecortada y agitada, y los gritos desgarradores, también penetrantes jadeos sueltos de él, la razón de mi existente inmortalidad.

Mis ojos se llenaron de lágrimas, lágrimas que jamás derramaría, aún asi, aún con la presión en mi pecho y el nudo que empezaba a formarse; Aumente aún más mi velocidad, hasta llegar al lugar, pude escuchar y oler el olor de Edward con el del rastreador, estaban peleando. Mi mirada busco con ansiedad a mi compañero, quién estaba en el suelo, igual que en mi visión.

-¡Alice!- Escuche la voz de mi hermano, Jasper, pude ver como también habían llegado los demás-

Inmediatamente separamos a James de Edward, quién estaba perdiendo, pero debido a la distracción del rastreador, el cobrizo pudo golpearlo apartandolo de él.

No esperé a mis demás hermanos, fui detrás del vampiro rubio, voy a hacerlo lamentar su maldita existencia, por hacer daño a mi compañero. Me abalance sobre él, lo tome del cuello, tirandolo al piso, lo escuché gruñir, sus ojos se entrecerraron, estaba molesto, no, yo debería estarlo, lo estoy, mejor dicho, senti varios golpes en mi cabeza, no me importo, no pienso soltarlo hasta decapitarlo.

-Me diverti bastante con él, ¿Sabes?- Lo escuche decir, aún teniendo esa sonrisa descarada en sus labios- ¿Vas a matarme?

-Tocaste lo que es mío.

Jamás fui una persona posesiva, ni mucho menos me escuche hablar así jamás, tal vez era por la cólera y el enfurecimiento que sentía ahora, había tocado a Tosiek, mi compañero y eso me hacia sentir miserable, el no poder protegerlo.

Mordi su cuello, provocando un grito de él, a lo que él otra vez me golpeo pero esta vez quitándome de encima, en eso vinieron mis demás hermanos a ayudar. Entre Emmet y Jasper lo pusieron de rodillas, para poder quitarle la cabeza, mientras que Rosalie usaba las tablas del piso para poder después quemar el cuerpo.

Iba a dirigirme a él para poder decapitarlo pero fui interrumpida por una asquerosa risa, se estaba riendo.

-Has estado peleando conmigo que no te diste cuenta de como el pobre de tu compañero esta muriendo...

Mis ojos se abrieron rápidamente, deje mi atención que estuvo puesta en él desde que llegué, estaba tan cegada por mis emociones que no me di cuenta, Tosiek, lo busque rápidamente con mi mirada, estaba en el suelo junto a Carlisle, mi compañero estaba desangrado, con la respiración entrecortada, los latidos de su corazón.

El rubio soltó un quejido debido a la fuerza que usaron mis hermanos, se escuchaba lejos, mi atención estaba puesta en Tosiek.

-Alice, hazlo rápido- Me apuro Rosalie a lo que yo asentí-

Me impulse con mis piernas, corriendo, con ayuda de eso y con mi fuerza, al fin su cabeza quedo en el suelo, pronto el fuego se propagó, quedando solo cenizas de su cadaver y provocando así el incendio en aquel edificio.

Después de eso, me dirigí rápidamente hacia mi compañero, quien estaba realmente herido, con la respiración agitada y los latidos de su corazón era como si ni siquiera pudieras contarlos por la rapidez y la desesperación en la que latía. Sentia la mirada de Carlisle, de mi familia, pero no podia evitar dejar de verlo a él. Rápidamente el arrepentimiento vino a mi mente, arrepentirme de haberlo dejado junto a Bella, de haber bajado de la habitación del hotel, si tan solo me hubiera quedado, tal vez, solo tal vez no hubiera pasado esto y el no sufriría.

-Alice... ¿Estás bien?

Su voz suave y débil me hizo reaccionar y que mis malos pensamientos desaparecieran. Aún él, estando agonizando de dolor, aún se preocupaba por mi, cuando ni siquiera era yo quien estaba desangrandome en medio del suelo, sino él.

Note como tenía una marca en su cuello, lo habían mordido.

-¡Se transformará, Carlisle!- El miedo me invadió y lágrimas que jamás caerían nublaron mi vista- ¡Él no quiere hacerlo!- Recordaba que siempre que le insistía con el tema, siempre se negaba-

Solo podía escuchar sus latidos que iban demasiado rápido, sus jadeos y gruñidos por el dolor. El veneno se iba expandiendo más y más por todo su cuerpo.

Una visión llego a mi, lo ví a él, solo que ahora su piel era más pálida, igual que la nuestra, estaba observando lo profundo del bosque por la ventana, se dio cuenta de mi presencia y se giro para observarme, sus ojos oceánicos, azules que ya no lo eran, ahora eran un mar rojo de sangre.
Queria, no, anhelaba que él fuera como yo, que estuvieramos juntos en nuestra vida inmortal. Pero no era mi decisión. Si Tosiek no quería hacerlo, entonces no puedo obligarlo y amarrarlo a mi.

Tenia una mirada gélida pero suave, cualquiera pensaría que estaba bien, pero no, su ceño estaba levemente fruncido, sus labios tenian una pequeña mueca. Estaba pensando en algo, algo que lo mantenía deprimido. Note la dirección hacia donde estaba mirando, solo había bosque, profundicé aún más mi vista y agudice mis oídos, era la suave y ronca voz de tanto llorar de la pelirroja, su tía, junto con otra voz y el olor repugnante a perro mojado. No reconocí a la segunda persona pero deduje que era de la manada.

La visión se desvaneció y volví nuevamente en mí.

-Succiona el veneno- Escuche el murmullo de mi padre adoptivo-

Mire a mi compañero, viendo que estaba sufriendo.

-Cariño... Aliviaré el dolor ¿Si? No te pasará nada, no dejaré que te pase algo...

Le susurré al lado de su oreja, oli su olor, su sangre no me llamaba, no lo hacía, eso lo volvería más fácil... Aguanta Tosiek, te prometo que estarás bien...

Mordi su cuello, justo donde estaba la marca de James, si yo lo hubiera marcado... Tal vez, tal vez no hubiera pasado esto, si lo hubiera mordido yo y hubiera dejado en claro que era mío, que me pertenecía, que era de mi maldita propiedad. Esto no hubiera pasado, él no estaría sufriendo, estaría feliz a mi lado...

-¡Alice! Basta. Lo estas matando.

Si te transformó, ¿Estarás a mi lado por y para siempre? ¿Me amarás hasta toda nuestra inmortalidad juntos?

-Alice.

¿Serás mío?

Senti un apretón en mi brazo y salí de mis pensamientos, por Dios. ¿Qué estaba pensando? Me aleje de él rápidamente, levantándome del piso, mi respiración estaba agitada, a pesar de que no pudiera hacerlo.

No, no, no, no debo pensar así...

Estoy siendo egoísta.

Solo estaría pensando en mí, ¿pero que hay de Tosiek?

Dejaría a su única familia que tiene, solo porque yo lo obligaría a hacerlo... No, no podría, eso lo arruinaría.

-Tranquila, todo esta bien...- Escuche la suave voz de Edward, lágrimas que jamás caerían se acumulaban- Él esta bien.

-¿Qué me está pasando? ¿Por qué solo pienso en...

No pude terminar de hablar, en vez de eso un gemido salió de mis labios. Por Dios, estaba siendo posesiva. Edward pareció leer mis pensamientos y lo supe cuándo terminó abrazándome, dándome algo de apoyo. Después él se fue con Bella, que también parecía tener problemas, pero parecía estar bien, supongo que gracias a mi compañero.

-¡Perdio mucha sangre, debemos llevarlo rápido al hospital!- El grito de Carlisle me desconcertó-

(Forks)

Lector Omnisciente

Los días ya habían pasado, incluso semanas, desde aquella noche en la que Tosiek resultó herido, estaba en el hospital, inconsciente. Mientras que Alice lo visitaba, a pesar de hacerle mucho daño verlo de esa manera, con varias heridas y vendajes en su rostro como en varias partes de su cuerpo.

Sin darse cuenta de que su enfermedad lo mataba cada vez más. Janeth estaba al tanto, pues ya habia regresado hace una semana de su viaje de negocios, Carlisle había informado acerca de la condición en la que su sobrino se encontraba, la pelirroja no había dia y noche en la que pensaba en él, en como pudo haber permitido viajar hasta aquí sin siquiera tomar medidas como la quimioterapia, más medicamentos, una cura. Pero a pesar de eso, a pesar de las posibilidades, él destino ya estaba marcado.

La pelirroja pensaba que era su culpa, que el sufra todo esto.

Por otro lado, una pequeña vampiro se encontraba encerrada en su habitación, también pensativa, había pensado y tratado de ver posibles futuros, pero todo terminaba igual. Tosiek sufriría. ¿Tal vez ese era su destino? No quería aceptarlo.

Además sin olvidar que todavía quedaban dos vampiros más, aunque Laurent había dejado claro que no seria y era participe de los intentos de James de matar a ambos humanos. Todavia faltaba aquella otra pelirroja, Victoria, aquella que el Aquelarre de vampiros sabian que ella estaba dispuesta a vengar a su compañero.

-Si él no se transforma, sufre. Si no lo hace también sufre.-Murmuro suavemente para ella misma, sus ojos cristalinos-

-Ey, Alice...


La nombrada alzo la cabeza, su rostro normal y comúnmente tenía una sonrisa en su rostro, una expresión llena de felicidad; ahora era remplazada por una contraria, llena de preocupación y temor, pues se encontraba llena de culpa.

Para los vampiros, su compañero era su vida, la vida que les había sido arrebatada. No tener a su compañero junto a ellos, era un sufrimiento, y mucho más si el compañero no había sido marcado por el vampiro, tenían la necesidad de poseerlo, aferrarse a él al menos 24/7, muchos sentimientos más que eran difíciles de soportar y esconder.

En medio de todos los pensamientos que mostraba Alice, fue calmada por la ola de calma, acción del rubio, que estaba apoyado en la puerta. La pequeña vampiro abrazó a su hermano, buscando consuelo en él, quien seguia enviando olas de calma y relajación, que sirvió de algo.

-Tranquila, no es tu culpa...- Susurro acariciandole el cabello, brindándole empatía y apoyo-

-Jass...

-¿Mhm?

-...Tú crees que el ya no quiera estar conmigo?- Preguntó la pequeña hada en un murmuro, apoyandose en su hermano-

Jasper miro hacia abajo, más concretó en su pequeña hermana y sonrió, estando sumamente seguro en su respuesta dijo:

-Él... Estaba en el piso, ensangrentado- La vampiro hizo mueca al recordarlo- Pero... aún asi, estaba más preocupado por ti que por él...- Concluyó con una sonrisa-

Algo que a la pequeña vampiro le iluminaron los ojos, que estaban cristalizados, sonrió al recordar cómo el pregunto que si ella se encontraba bien... El amor que Tosiek le tenía, era tanto que ponía a su compañera por encima de él. Era algo que Jasper tenía un poco de envidia pero también le hacía feliz de que su hermana haya encontrado a su compañero...

-Gracias, Jass...

El nombrado sonrió y asintió, contento con haber logrado subirle el animo a la vampiro con complejo de Golden. Salió de la habitación, pero paro su camino en medio del largo pasillo, recordando que Carlisle le había pedido que le dijera a Alice, acerca de la recuperación de Tosiek y de que él ya había despertado.

Rápidamente volvió con su velocidad sobrenatural, Alice lo miro confundida pero con una pequeña sonrisa divertida.

-Por cierto... Él ya despertó del coma.

Alice abre los ojos ante eso y sin dudar, con la misma rapidez del rubio de su hermano, rápidamente se dirigió al Volvo de Edward, no sin antes pedirle a su hermano que le avise al cobrizo que lo tomaria prestado su auto.

Jasper como buena lechuza, digo, como buen mensajero que es, transmitió las mismas palabras de su hermana hacia su otro hermano.

...Horas antes...

Hospital
(Forks)

Tosiek

Todo era oscuro, me sentía algo liviano, no recuerdo que hago aquí, empecé a caminar buscando una especie de salida, sentia el suelo húmedo, tal vez agua, después de varios pasos, todo se volvia poco a poco más claro. Hasta llegar a escuchar el ruido de varias voces, bueno, una voz, era femenina, estaba gritando, parecía estar enojada pero no sabía bien el porque, me resultaba realmente familiar.

-¡Por Dios, Willy! ¡¿De verdad crees que alguien más pueda simplemente entenderte como yo lo hago?!

Todo se volvía más claro cuando mis pasos se acercaban a la voz, al igual que mis oídos se agudizaban en ella, persiguiendola. Pronto la oscuridad desapareció, me desoriente cuando vi que estaba en una especie de habitación, era algo moderno.

Pronto una persona, mejor dicho, una mujer de cabello un poco corto y rubio casi platinado, estaba frente a mí, enfoqué un poco más mi vista, adaptándome a la luz. Reconociendola al instante, me aparte de ella, dando un paso hacia atrás, sin querer mis manos empezaron a temblar. Tenia miedo.

-Annabeth...

En ese instante, los muros que había construido a lo largo de los años para protegerme y mantenerme seguro, se derrumbaron.

Habia vuelto a tener la misma pesadilla de hace años.

Había vuelto a tener catorce años.

-¡Nadie nos entiende, solo somos tú y yo!

-Basta...

-No tenemos a nadie, nadie que nos ame o quiera o simplemente nos entienda.

-Cállate, por favor, solo cállate

-¡Nadie te ama! ¡Solo yo!

-...

-¡Nadie haría la misma mierda que yo hago por tí! ¡¿Por qué no lo entiendes?!

-¡Basta! ¡Déjame en paz!

Habia tapado mis oídos para no escucharla más, gritando para oir sus gritos, pidiendo que se callará y me dejará tranquilo. Ya había hecho esto antes.

La voz de la profesora iba siendo más baja, pero aún permanecían los gritos y las palabras. Hasta llegar al punto en no escucharla más, abrí mis ojos nuevamente, incorporándome. Ya no se encontraba ella, ya había despertado de aquella pesadilla.

Suspiré al sentir la luz chocar contra mi rostro, incorporandome en la camilla que había, la reconocí claramente, al ver las sabanas de color blanco, al igual que las paredes, me sentía débil, vi varios cables y máquinas conectadas a mi cuerpo, suero. Y escuchar la melodiosa y tranquila voz del doctor.

-Despertaste.

-Buenos... ¿Días?- Pregunté con el ceño fruncido al no saber la hora-

-Tardes- Corrigió- Quedaste inconsciente unas 3 semanas y 5 días.

-Perdón por las molestias... Um, tengo sed...- Sentia mi garganta seca al igual que mis labios-

El doctor Cullen me dio una sonrisa divertida y asintió, tomo la jarra de cristal que estaba en una mesita junto a un vaso y lo sirvió, dándomelo a mi, que termine el vaso de un solo sorbo, Carlisle tenía esa típica sonrisa, podría decir que la misma que Esme.

-Gracias.

-Me alegro que estés bien, bueno, un poco bien- comento bromeando mientras observaba como estaba rodeado de varios cables-

-No recuerdo que me haya golpeado tanto...- Bromee un poco, aunque en parte era cierto, si, pudo ser un vampiro y tomar tal vez un poco de mi sangre pero esto ya es exagerado-

Vi como la mirada tranquila y aquella sonrisa con dentadura perfecta de aquel doctor que ahora se que es un vampiro al igual que toda su familia, vi como se iba borrando.

-Acerca de eso...- Comenzó buscando las palabras para hablar, pero en vez de eso soltó un suspiro-

-¿Pasa algo, Doc?

-Tosiek... Para mi esposa tanto como yo, te vemos como un hijo...- Comenzó a lo que lo miré, estaba siendo sincero- Los chicos, Emmet por fin tiene a alguien para jugar; como Jasper que tanto habla de sus libros; hasta Rosalie piensa y habla bien de ti... Y Alice... jamás la vimos tan feliz y eso es mucho-

Lo mire confundido pero tambien agradecido, aquella familia, aquellos hermanos con los que me he llevado bien desde que Alice me llevo a sentarme en la cafetería junto a ellos, me alegraba demasiado que fuera algo mutuo, pero, ¿Por qué lo decía con tanto dolor? Como si lo estuvieran apuñalando por el cuello, y su garganta, su voz sonará tan débil y para nada segura, de la cual me habia acostumbrado desde que conoci al señor.

-He llevado varios siglos con esta carrera, la experiencia que tengo me llevo a darle las noticias buenas como malas a múltiples pacientes que tengo... Hasta llegó a ser normal- Continúo, ¿Por qué me decía esto? ¿Tal vez se esta desahogando?- Tosiek, tienes nuestro apoyo para convertirte como nosotros.

No entendía nada, ¿Por qué sacaba el tema de la nada? ¿Por qué su voz sonaba tan mal? Pero algo en mí estaba felíz, podía ver su sinceridad y su honestidad en sus palabras y eso me alegraba

-Gracias por las palabras, Doctor Cullen, yo al igual que ustedes les tengo aprecio desde que llegue a conocerlos y pasar tiempo con ustedes...- Le exprese con una sonrisa para tranquilizarlo, se que tenía que decir más cosas-

-Junto con los demás doctores del hospital, hemos revisado varios informes que llegaron de la anterior clínica en la que estabas... Hasta llegar al punto en que... En el tiempo que te queda de vida...

Vi como estaba tenso, ya vi el porque la mención de convertirme, quieren que siga con ellos, quieren que viva, si se podria decir así, el "vivir" como ellos. Yo al igual que él, estaba tenso, tenía miedo de que fuera tan poco, tenía miedo a la muerte, ¿Y quién no la tiene? Cuando estas a punto de morir, cuando lo sabes.

-¿Cuánto tiempo me queda?

-Un año es lo que podemos rescatar, si tomas tus medicamentos, hacemos revisiones y análisis cada cierto tiempo.

Solo un año, es como si hubieran lanzado un balde de agua. Varias personas se preocupan por mi, Janeth, ¿Qué pasaría con ella? ¿Quién le haría de comer y la regañaria por comer comida chatarra? Por Dios... ¿Qué sería de mi Alice?

-Tosiek...- Puso su mano en mi hombro- Quiero que sepas que cualquier decisión que tomes, nosotros te apoyaremos, te queremos- Se apartó y me asintió, mirándome con cierto dolor en su mirada. Después salió de la habitación-

-Doctor- Lo llame antes de que se largara- Mantengalo en secreto de los demás, por favor- El asintió, dándome una ligera sonrisa y se fué-

Elya... Después de todo, encontré personas que me aprecian demasiado, tanto como para hacer esas expresiones; preocuparse por cosas que yo no lo hago, son personas que me quieren y yo a ellos; que entienden y respetan mis decisiones. Una familia. Espero que donde sea que estés, a pesar del daño que me hayas causado, espero que por fin hayas encontrado algo como yo y si tienes suerte, que encuentres a tu Alice.

Revise mi celular, si, había pasado 3 semanas en coma, mi sueño más húmedo, es dormir más de un día y lo logré. Lo único bueno de todo esto, es decir, saber con exactitud cuando vas a morir y que es demasiado poco para un simple ser humano como yo; encima que me he perdido aquél baile de graduación, no es que me guste bailar, todo lo contrario, es solo que, a Alice le hubiera encantado ir, aunque no se si fué.

Suspiré mirando la ventana, ya era de noche y el cielo estaba despejado.

¿Qué estarás haciendo?

-Tosiek...

Y si, mi pregunta fue respondida al escuchar aquella voz que podría reconecerla aunque hayan pasado años. Me volteó por donde vino aquella melodiosa voz, estaba ella. Parada en aquel marco de la puerta que estaba abierta.

Se encontraba realmente desareglada, no normal en ella, tenia ojeras, se notaba cansada, estaba despeinada y aquellos ojos que apenas podia observar por la poca luz que había, estaban oscuros. En resumen, esa no es mi Alice, al menos, no la que yo conocía. Pero esa especie de duda o afirmación se fué, cuando senti su peso encima de mi, había usado su velocidad, contuve mi quejido para no asustarla y que se apartará de mi, realmente extrañaba esto.

-Despertaste...

-No, estoy muerto y estas alusinando.

-No te golpeó porque pareciera que estas apunto de hacerlo- oh, cariño, si supieras...-

Ambos sonreimos entre sí, me acomodé para darle espacio para que ella se acostará a mi lado.

-Lo siento...- Soltamos ambos- ¿Por qué te disculpas?- Y nuevamente al unisono-

-Es mi culpa por ir a ese estúpido salón de Ballet y apenas decirte por mensaje- Comencé soltando una risa amargada-

-No... Es mi culpa por dejarte ir así y no poner atención... No pude protegerte... Créeme, cada día pasaba pensando en eso, en ti, en como sufrías por mi culpa. Solo porque eres mi compañero.- continúo con un suspiro-

-Nada de esto es tu culpa, ni de nadie...- La abracé a mi- Además mírame, estoy bien, estoy a salvo. Llegaste a tiempo, linda.

Ambos estabamos acostados obsevandonos, podía ver en aquellos ojos dorados, como el mismo sol, solo que ahora era una especie de eclipse. Se oscurecian, como si aquella luna tapara el sol o como simplemente anochecía. Tal vez por la tristeza y preocupación, podía notarlo fácilmente con solo mirarla.

Suspiramos ambos, al mismo tiempo, esto siempre era constante, hacer o simplemente decir cosas al unísono. Soltamos una pequeña risa por eso mismo.

-Te amo tanto que... Pense que te perdería... No quería ni imaginarlo, ni mucho menos pensarlo.

La mire, observando aquellos ojos que tambien me miraban, pero no solo era con ese brillo de siempre, también había dolor en él. Acaricie su cabello, atrás de su cabeza y la atraje hacia mi pecho mientras dejaba caricias en ella, haciendo pequeños círculos con mis dedos provocando que ella soltará un pequeño suspiro tranquilo.

-No me perderás. Te lo prometo.

















Lamento la demora, con este largo capitulo completamos el Acto 1. Agradezco a las personitas que han leído, votado y comentado en cada capítulo.

Espero que nos veamos en el siguiente
"Acto 2"

Ahora preguntitas que les hago, les espero sus teorías. :)

¿Será qué Tosiek cumplirá aquella promesa?

¿Quién será Annabeth? ¿La veremos pronto?

¿Qué cosas no sabemos del pasado de nuestro protagonista?

¿Alice lo "marcará"? 🤭 Importantísima

Ah y pequeño Spoiler, que tal vez algunos hayan visto en la cuenta de tiktok: elio_wttpd
acerca de Janeth y guiño guiño.
Se viene parejita secundaria.

...Y otros nuevos personajes...











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