Pov Sanha

Llevé a Moon Bin con una amiga mía que se dedica al diseño de joyería, estoy completamente seguro de que aquí encontraremos el mejor regalo para mi preciosa suegra.

Llegando, Lisa nos recibió con su bella sonrisa como siempre, nos preguntó qué estábamos buscando exactamente y una vez le dimos las indicaciones ella fue en busca de lo que consideraba, sería ideal para la mamá de mi hyung.

Había bastantes accesorios por todas partes, más de plata y oro blanco.

- ¿Has visto algo que llame tu atención hyung?

- Me gustó mucho ese collar de piedra azul, es el color favorito de mi madre, así que creo que le encantará, además, me gusta la forma de gota y también viene con los aretes y un anillo, sería un juego de joyería perfecto para ella - sonrió satisfecho.

- Tienes razón, además se ve muy elegante, como ella.

- ¿Entonces, éste?

- Sí Lisa, por favor.

Luego de la compra, nos despedimos de Lisa, no sin antes prometerle que beberíamos un café con ella uno de estos días.

Saliendo del lugar me sentía realmente tranquilo, caminábamos tomados de la mano, el día era un tanto cálido y una brisa agradable corría, también el cielo era adornado por nubes blancas y esponjosas y el azul que lograba apreciarse era completamente hermoso y fuerte.

Me sentía como el joven esposo del hombre más atractivo de la tierra, tantas personas se quedaban mirándonos y no de una mala manera, era cómo si apreciaran algo completamente divino y pues... Ese era mi hyung, estoy tan seguro de eso.

Sé que no estoy casado con Moon Bin, pero el estar haciendo todas estas cosas con él me llenan de ilusiones, y mi más grande ilusión es que algún día, en quizá algunos años, nos casemos.

La mano de Moon Bin encaja perfecto con la mía, mi mano es un poquito más grande que la de él, al igual que mi altura y así, pero de alguna manera, él siempre me ha hecho sentir protegido, nunca dejaré de ser su bebé y aunque es quizá poquito raro que sea yo quien lo diga, es así, no quiero dejar de ser su pequeño.

Me gustar estar con él, siempre es tan amable y agradable, sus bromas en ocasiones son tan tontas que lo hacen verse adorable y me llenan de calidez el corazón, también es muy cariñoso, adoro cuando me abraza y me besa, cuando me da mimos y me atrapa entre sus brazos, Moon Bin es un chico demasiado maravilloso.

No lo dejaré ir jamás.

Pasaron algunas horas y finalmente estábamos llegando a casa de mi suegra, pero algo me parecía un poco extraño de mi hyung.

Antes de bajar se quedó estático con las manos en el volante, mirando un solo punto y sin decir palabra.

- ¿Todo bien? ¿Qué ocurre? - pregunté extrañado.

- Sanha... - me miró fijamente, pero su mirada parecía llena de preocupación - Ahí adentro estará Kang Joon.

Escuchar ese nombre me robó el aliento por un instante, sentí cómo un tipo de emoción se plasmaba en mi cuerpo. Tenía años sin ver a mi hyung Kang Joon y el saber que estaría por verlo de nuevo era una mezcla de emociones que no logro expresar con palabras.

- ¡Oh! ¿De verdad? ¿Y qué tiene?

Intenté actuar como si nada ocurriera, yo sabía que Moon Bin estaba inquieto y comprendía, supongo que estaría del mismo modo si fuera él, pero bueno, el pasado debería quedarse ahí ¿No?

- No sé, me siento raro.

- Binnie, no pasa nada, estamos juntos ahora, solamente eso importa - contesté sereno, necesitaba darle tranquilidad a mi hyung.

- Lo siento Sanha, es que yo... Siento que no soy demasiado en comparación con él.

- Moon Bin, tú eres más que cualquiera, desde siempre y para siempre, no
intentes compararte con él porque ni de broma se puede hacer tal cosa, para mí nadie es más que tú.

- Sanha, te amo, mucho, demasiado.

Acercó su cabeza a la mía y juntó nuestras frentes, después tomó mi cara con sus manos y empezó a acariciarme con la delicadeza de siempre. Cerré mis ojos y una sonrisa automáticamente apareció, porque era él la única persona a la que necesitaba en mi vida y me hacía feliz saber que yo era lo único que él necesitaba en la suya.

Le di un beso, uno cálido con sonrisas intermedias...

- Yo también te amo. Ahora... ¿Vamos? Tu madre nos está esperando.

- Vamos pequeño Beagle.

Dicho eso bajamos y entramos a la casa de Hyungwon, había varias personas dentro, algunos conocidos y otros no tanto. Saludamos y caminamos hasta llegar con mi suegra, quien nos recibió demasiado entusiasmada, nos abrazó a ambos, ella ha estado tan feliz desde que supo que Moon Bin y yo somos novios, y yo se lo agradezco demasiado pues, es como mi madre también.

Entregamos el regalo a la mamá de mi hyung y después nos fuimos con Hyungwon y Chang, charlamos de varias cosas, entre ellas que Hyungwon quería darme una lección por lo del centro comercial, pero tampoco lo haría en la fiesta de su madre.

Las risas eran demasiadas, cualquiera pensaría que Hyungwon es un amargado, pero es todo lo contrario, su humor es demasiado increíble y Bin le hace bastante bien la segunda, dignos de ser hermanos.

- Sanha.

Esa voz...

- Hyung...

Ahí estaba ese chico de ojos color miel, mirándome como siempre, lleno de amabilidad y gentileza.

Los recuerdos de cuando lo conocí me llegaron como un rayo, la misma sensación llena de emoción y
nerviosismo... Supongo que eso es normal cuando vez después de tanto tiempo al que fue tu primer novio ¿No?

Se veía tan diferente y maduro, en esos vaqueros ajustados, esa camisa blanca, abierta de los primeros botones y ligeramente desarreglada, ese cabello largo y un poco despeinado... Sus facciones más marcadas y masculinas. En esta ocasión creo que somos de la misma estatura, si no es que soy más alto por un simple centímetro, al igual que con Moon Bin.

- Me alegra verte después de tanto - sonrió de una manera que me hizo sentir atacado, demasiado bonito.

- Gracias, también me alegra verte.

Dicho eso sentí la mano de Moon Bin rodearme po la cintura y sonreír ligeramente a Seo Kang Joon, quien hizo lo mismo. Ellos habían sido tan buenos amigos, incluso desde antes de que Moon Bin me conociera a mí, fue por Moon Bin que conocí a Seo Kang Joon en aquellos días.

- Hola Bin.

Kang se acercó y acarició la cabeza de mi hyung, lo sentí ponerse rígido y bueno, yo hice lo mismo.

- ¿Cómo estuvo todo en España? - preguntó mi azabache novio intentando desviar el reciente acto.

- Bastante agradable, es un lugar precioso, las personas siempre me trataron muy bien y mi trabajo es excelente, no me quejo en absoluto.

- ¿Y estás de vacaciones?

- Sí, justo, después de tres años logré tener estas vacaciones, extrañaba demasiado a mi familia y amigos. En especial a este pequeño, no tan pequeño ya.

Me señaló y dijo justo lo que menos
deseaba escuchar.

Moon Bin trató de mantener la compostura.

Hyungwon quería hacer algo, pero no sabía exactamente qué.

Chang... Bueno Chang sabía qué ocurría, pero no quería meterse en problemas con nadie.

- Bueno, lo estás viendo - dijo con voz baja Moon Bin, apretando su agarre de mi cintura, pegándome más a su cuerpo.

- ¿Ustedes...?

Nos miró a ambos, de pies a cabeza, como si estuviera analizándonos antes de preguntar completamente.

- ¿Ahora son novios? - soltó la pregunta - Pensé que no te iban los chicos Moon - sonrió, al parecer a él nada de esto le incomodaba.

- No me van, solo me va Sanha. ¿Verdad amor? - sonrió genuinamente después de bastante rato y dio un pequeño beso en mi mejilla.

- S-sí.

Ah... Ne siento como los protagonistas de animes harem, o como los protagonistas de las series donde hay triángulos amorosos.

Empecé a sentirme poco incómodo, aunque feliz, porque Bin no se cansaba de mostrar que yo era su novio, es decir ¿A quién no le gusta que lo presuman, más si tu novio es Moon Bin?

Aunque, no sabía cómo sentirme respecto a Kang Joon.

- Ah... Ya veo - alzó ambas cejas, como si estuviera dudando de las palabras de mi hyung - ¿Qué les parece si mañana nos reunimos, como en los viejos tiempos?

- ¿En serio? - intervino Hyungwon por primera vez, bastante entusiasmado, él siempre quiso demasiado a Kang Joon.

- Sí, de verdad, tenía tantas ganas de verlos, ¿Qué tal si hacemos una parrillada o algo por el estilo en el jardín de mi casa, nos metemos a la piscina y bebemos?

- ¡Woaah! Suena maravilloso - se unió Chang apoyando.

- Vamos Bin, no voy a robarte a Sanha, deja de poner esa cara de incomodidad, lo nuestro ya fue - dijo de repente Kang al no escuchar nuestra respuesta.

Okay... eso se sintió bastante, demasiado
raro.

De cierto modo, esas palabras me hicieron sentir tranquilo también, es decir, para él estaba claro que todo era parte del pasado, al igual que para mí y me alegraba que se lo dijera directamente a Moon Bin.

- Bien, entonces, mañana deberíamos de vernos en tu casa - respondió resignado mi hyung.

- Esa es la actitud mi querido azabache - Kang se acercó y rodeó con un brazo a Moon Bin.

La fiesta continuó y Seo Kang Joon nos dejó durante un largo rato, él siempre fue demasiado social, tenía varias amistades en esa casa, todo el circulo de amistad de la madre de mi hyung era el mismo que el de los padres de Kang Joon, de modo que todos se conocían, así que anduvo de un lado a otro
¿Cómo me di cuenta? Bueno... Es
imposible no hacerlo, donde quiera que él se para el ambiente se vuelve poco más agradable y escandaloso.

Después de algunas horas nos despedimos de mi suegra, también intercambiamos números con Kang Joon y regresamos al departamento.

En el camino ninguno dijo gran cosa. Llegando a la casa nos acostamos y aunque seguíamos en silencio, nada se sentía extraño, es decir, era una sensación tranquila, con Moon Bin siempre era así.

- Sanhie ¿Alguna vez lo extrañaste?

Esa pregunta me tomó por sorpresa, mierda. ¿Qué se suponía que dijera?

Es decir, él y yo terminamos porque Seo debía irse al extranjero, no terminamos por infidelidades o porque el amor se haya terminado...

- Algo, cuando recién se fue - me sinceré, no iba a mentirle.

- Oh... Ya veo. ¿Lo querías mucho?

Me giré y miré a Moon Bin, estaba nervioso e inquieto, me daba ternura mirar esos gestos en su rostro, adoro cuando actúa de esa manera.

- ¿Estás celoso? - sonreí un poco burlón.

- No. Bueno, poquito. Él fue tu primer novio y también...

- Mi primera vez. Lo sé. ¿Por qué traes esas cosas al tema, hyung?

- ¡Aish! Mocoso, si estuvieras en mi lugar estarías igual o peor - hizo un puchero que, en lugar de hacerme enojar, me llenó de dulzura, Dios, Bin era tan precioso.

- Entonces ese fue un "Sí" - reí - Hyung, tú eres mi todo, deja de pensar cosas raras. Claro que extrañé a Seo, claro que lo quería muchísimo, claro que me impactó verlo de nuevo - enderezó su cuerpo al escucharme decir lo último - Peeeero, te amo a ti, tú has sido mi gran amor desde siempre, más que él, él solamente fue mi primer novio y mi primera vez, tú eres más que todo eso.

- Te creo, perdón por ser tan inseguro de mí mismo.

- ¡Dios! ¡Eres tan adorable!

Tomé su rostro con mis manos y empecé a repartir besitos por toda su preciosa carita, sacándole muchas sonrisas y risitas llenas de alegría, tal y como quería.

- ¿Quién...? - beso - Es... - beso - El hyung... - beso - ¿¡MÁS ADORABLE!? - beso.

- Sanha - río - ¿Acaso yo lo soy? - respondió.

- Obviamente, súper adorable, eres el más bonito de todos.

- Tú eres más adorable, aunque en ocasiones te salga ese lado malévolo que amo tanto también.

Luego de eso, nos acurrucamos bajo las sábanas, ¡Qué sensación tan más agradable! ¡Quiero quedarme así toda la vida!