Eunwoo y Moonbin se fueron a casa del mayor, llegando el rubio preparó la cena para ambos y empezó a comportarse como no lo hacía en mucho tiempo, eso de cierto modo alegró un poco al azabache, le gustaba esa parte amorosa de Moonbin y sinceramente la había extrañado.

Por esos momentos olvidó lo que Sanha le había dicho antes de que su novio los interrumpiera, se dedicó a cenar con el rubio, intercambiaron bromas y se dieron varios mimos.

Terminada la cena Eunwoo se metió a bañar y Moonbin aprovechó para hacer una llamada.

—¿Qué crees que hago? Encontré a Eunwoo con Sanha ahorita en ASTRO. —Estaba que hervía del coraje.

—"¿Y luego? No puedes enojarte por eso cuando estuviste ayer y todo el día de hoy conmigo, deja de ser un hipócrita" —Contestaba al otro lado Jungkook bastante divertido al imaginar el rostro del rubio.

—Es MI novio ¿Qué esperas que me quede muy feliz? No seas estúpido Kook, además, ¿no se supone que a ti te gustaba el mocoso? —Dijo recordando una platica que había tenido anteriormente con el castaño.

—"Ya te dije que esa noche en ASTRO estaba molesto de que tú estuvieras con Eunwoo como si nada, y cuando vi a Sanha recordé que siempre estuvo detrás de mi como perrito faldero, aproveché y quise intentar algo para hacerte enojar" —No podía existir persona más arrogante que Jeon en esos instantes. Moonbin rodó los ojos ante su comentario.

—Sabes bien que no me cayó para nada en gracia, además ¿Qué querías que hiciera? ¿Qué dejara a mi novio de lado para ponerte atención a ti? ¿se te olvida por qué dejaste de trabajar en ASTRO?

La verdad sobre por qué Jungkook se había ido de ASTRO había sido su relación clandestina con Moonbin. Anteriormente todos eran muy buenos amigos, hasta que a Eunwoo le empezó a gustar el rubio de otra manera, porque la realidad era que Moonbin había estado saliendo ocasionalmente con Jungkook sin que nadie supiera en aquellos días.

Las relaciones del rubio siempre habían sido así, basadas en saciar sus necesidades corporales, sólo eso. Jungkook no había tenido inconvenientes con aquello porque era igual para él, no estaba interesado en nada serio.

En esos días cuando Sanha se le confesó a Jungkook, éste ya conocía a Moonbin y ya habían salido un par de veces, de hecho, estaba en proceso de entrar a trabajar en ASTRO gracias al rubio. Sanha era un buen amigo para Jungkook, pero al enterarse de que estaba interesado en él de otra manera rompió todo lo bueno que tenían.

Jeon sabía que Sanha no era de una sola noche o de un rato, sabía que era más del tipo romántico y que deseaba a las personas solo para él, y Jungkook no se iba a permitir intentar semejante cosa, así que optó por el camino fácil, se burló del menor, lo insultó y humilló delante de todo su grupo, y decidió alejarse totalmente.

Al terminar con su amistad, Jeon entró a trabajar a ASTRO, todos se hicieron amigos al instante, pero tiempo después eso cambió y fue por el hecho de que Eunwoo se enamoró de Moonbin, sí, de su ligue.

Jungkook siempre creyó que el rubio no aceptaría al azabache, porque eso de las relaciones no le iban, pero fue grande su decepción cuando se enteró que habían empezado una relación sin que Moonbin le hubiera dicho nada sobre su decisión.

Moonbin había aceptado a Eunwoo porque era un chico agradable, amable, guapísimo y persistente, había algo en él que realmente le hacía pensar en la posibilidad de dejar todos sus acostones de una noche por él, y lo intentó durante los primeros meses... pero la simple existencia de Jungkook le hacía imposible seguir fiel al azabache.

—"Ya sé que dejé ASTRO porque decidiste engañar a Eunwoo conmigo, gran cosa" —Rodó los ojos recordando la insistencia de Moonbin porque se fuera de ASTRO y así evitar levantar sospechas.

—Bueno ya, no quiero discutir contigo, me voy, Eunwoo no tarda en salir de bañarse, nos vemos mañana.

—¿Con quién te verás mañana? —El cuerpo del rubio se congeló al escuchar la voz de su novio detrás.

—Co-con... ¡Con Rocky! —Soltó intentando no levantar sospechas.

—Yo me veré mañana con él y con Sanha ¿de que hablas?

—Ahh... sí... es que... yo los voy a acompañar —Mierda, la había cagado.

—Perfecto, entonces ¿te quedarás a dormir conmigo hoy?

Ni siquiera le respondió para cuando se abalanzó sobre él, Moonbin empezó a besar desesperado a su novio, necesitaba que lo hiciera suyo, tenían demasiado tiempo sin intimidad, según él.

Eunwoo respondió ese beso del mismo modo, desesperado, pero su estómago se contraía, era como si sintiera que lo que estaba haciendo con el rubio estuviera mal.

Moonbin quitó el pijama de su novio y empezó a besar su cuerpo, estaba seguro de que en cuestión de minutos el mayor estaría derritiéndose por él como siempre, las caricias sosas no tardarían en salir de su "aburrido" novio.

Pero no contaba con lo que Eunwoo estaba por hacer. De un momento a otro lo aventó sobre la cama sin tacto alguno, lo desvistió sin cuidado, incluso desgarró su camisa, esa parte del azabache jamás la había visto Moonbin, no sabía qué pensar.

Eunwoo empezó a frotar su cuerpo contra el de su novio y notó cómo el cuerpo contrario reflejaba su emoción, una sonrisa ladina se dibujó en su rostro y mordió con un poco de presión el hombro del menor sacándole un gemido adolorido.

Moonbin estaba en shock, su novio jamás había actuado así con él ¿Dónde estaba su novio?

—Eunwoo, por favor... —Suplicó—. No me hagas esperar más. —El rubio estaba lleno de placer.

—¿Qué deseas que haga? —Susurró en su oído, sabía que eso lo calentaba más.

—Que me hagas el amor ¡ya! —Sollozó repleto de placer. 

Eunwoo empezó a preparar al menor sin tacto alguno, pero éste se volvía más impaciente cada vez y pedía más y más. Cuando por fin estaba por entrar en el rubio, se acercó y lo tomó del rostro para que lo mirara fijamente.

—La próxima vez que me mientas, ni siquiera tendrás un poco de lo que acabo de hacer por ti. —Se levantó de la cama dejando Moonbin inmóvil.

—¿Qué? —Intentaba analizar la mirada y el tono de voz con el que el azabache acababa de hablarle—. ¡Regresa Eunwoo!

—No, me voy a otra parte, no quiero estar contigo, odio las mentiras y lo sabes perfectamente, puedes quedarte aquí esta noche si así lo deseas, pero yo no compartiré la cama contigo hasta que dejes las mentiras.

Sin más que decirle, el azabache se vistió, tomó las llaves de su auto y salió dando un portazo. Él sabía perfectamente que su novio no estaba hablando con Rocky, ellos dos últimamente no se estaban llevando nada bien y le lastimaba que le estuviera mintiendo como si fueran un par de desconocidos o peor, como si ocultara algo.

Si era un amigo de Moonbin él no se molestaría de que salieran, eran novios, no esposos, además eran libres de salir con sus amigos, no tenía nada de malo, entonces ¿por qué pretendía mentirle?

Varias ideas cruzaron por la cabeza de Eunwoo, pero no quería acertar, no quería que fuera verdad lo que estaba imaginando.

Después de un largo rato conduciendo un celular comenzó a timbrar

—¿Hola? —Respondió dudoso.

—"Eunwoo hyung, te llevaste mi celular" —Al otro lado Sanha estaba muriéndose de los nervios, estaba seguro de que el azabache estaría con el rubio, pero por lo mismo estaba interrumpiendo.

—¡Oh! Sanha, lo siento, es verdad... es que te fuiste demasiado rápido, no me dio tiempo de regresártelo.

—"Lo sé, estabas ocupado con tu novio" —Eunwoo pudo notar el cambio en la voz del menor. ¿estaba molesto?

—Sanha... Beagle... ¿Puedo ir a tu casa esta noche?

Sanha se quedó estupefacto con las palabras del mayor ¿en serio estaba preguntando eso? Él estaba solo esa noche, su padre había salido de nuevo con su compañera de trabajo y estaba seguro de que no regresaría esa noche, así que eso lo empezaba a poner más nervioso.

Ya había contestado que era bienvenido en su casa, así que ahora debía aguantarse, necesitaba acomodar todo el desorden que tenía en su habitación. 

Lo más rápido que pudo guardó las tres guitarras que tenía en sus fundas y las acomodó en su lugar, del mismo modo puso los libros en un estante, la ropa que tenía regada la llevó al cuarto de la lavandería, y ordenó el baño.

Se dio un baño de 3 minutos y salió justo en el momento que tocaron el timbre casualmente.

Bajó rápidamente con apenas una toalla enredada en su torso y otra con la que secaba su cabello. Abrió y ahí estaba el príncipe azabache, lucía apagado nuevamente, maldito Moonbin, pensó, era evidente que ese semblante era nada más y nada menos que por el rubio.

Eunwoo por su parte se quedó sin aliento ¿Sanha quería matarlo de un infarto? Intentó disimular lo más que pudo el hecho de que el cuerpo del menor lo dejaba embobado completamente y se adentró en la casa.

—Lo siento, cuando te llamé estaba a punto de meterme a bañar. —Dijo inocentemente el menor mientras secaba su cabello.

—No te preocupes, no pasa nada. —Claro que pasaba, el ritmo cardíaco de Eunwoo estaba subiendo cada vez más al ver así, semidesnudo al pelinegro.

—¿Qué paso? Te veías demasiado bien con Moonbin y ahora vienes con esa cara hyung. —Por primera vez, Sanha hablaba como si estuviera reprochándole al mayor haberse ido con su novio.

—Sé que él me ha estado mintiendo últimamente, no soy idiota. —Se tiró sobre el sillón de la sala del menor—. ¿Sabes que me dijo ahorita que lo encontré llamando con alguien más? —Alzó ambas cejas mirando al chico semidesnudo—. Me dijo que se vería con Rocky mañana, todos sabemos perfectamente que ellos han estado en malos términos las ultimas semanas, dudo demasiado que fuera a verse con él.

Sanha sabía perfectamente con quien estaba hablando el rubio, pero no quería que de su boca saliera ese nombre, además si Eunwoo no sabía era porque no había entrado a su galería, y si no lo hizo era porque no quería enterarse de la verdad y él no era nadie para obligarlo a abrir los ojos por más que quisiera. 

—Mmm... —No sabía qué más decirle al mayor, estaba debatiéndose entre, abrir la boca o quedarse callado por siempre—. Vamos a mi habitación, mañana debemos salir temprano de compras.

—Está bien.

Caminaron y entraron en la habitación del menor, Eunwoo observó con detalle cada parte y podía decir que le agradaba bastante el estilo del menor, libros y guitarras mayormente, un enorme armario, paredes negras y azules, era bonito el lugar.

Sanha sacó uno de sus pijamas para prestársela a Eunwoo, ya que no quería que durmiera incomodo con su ropa casual. El mayor la tomó y entró al baño para cambiarse, al salir se encontró con el pelinegro aún enredado en la toalla ¿Qué no pensaba vestirse?

—Sanha. —Dijo apenas audible.

—¿Dime, hyung? —Se giró hacia el mayor.

—Deberías vestirte.

—¿Por qué?

—Po-Porque... —Eunwoo no sabía qué excusa poner, nada se le venía a la mente, más que el hecho de querer saltar sobre el menor.

—¿Por qué...?

El pelinegro se acercó lentamente al mayor, sabía perfectamente lo que le quería decir, y él lo estaba haciendo apropósito, ese era un lado desconocido que Eunwoo había despertado, él jamás se había comportado así con nadie anteriormente.

Quitó la toalla de su cabeza y la arrojó al suelo, con una de sus manos acarició la mejilla del azabache, ante lo qué este último cerró lentamente sus ojos, quería sentir más ese tacto, era tan delicado.

Sanha tomó ese acto como una luz verde y se pegó un poco más al cuerpo del otro, con su otra mano tomó la otra mejilla del mayor y redujo más su distancia.

—Tú no mereces nada de lo que te esta ocurriendo con esa persona. —Susurró mientras sus respiraciones se mezclaban.

—Lo sé. —Contestó más grave de lo normal.

—¿Quieres saber qué está pasando? —Preguntó sin despegarse, mirando fijamente los labios del contrario.

—Yo sé lo que está pasando, yo ya lo sé.

Al escuchar aquello, el menor rompió toda distancia posible, besó al azabache lentamente, ambos suspiraron ante el primer contacto, se sentía tan bien.

Eunwoo rodeó la cintura contraria con sus brazos y lo apegó más a su cuerpo, el beso subió de nivel y sus labios empezaron a bailar un precioso y lento vals del que no se cansarían fácilmente. 

Poco a poco el azabache encaminó a Sanha hasta su cama, sin despegarse del beso, lo recostó lentamente y se puso sobre él, los corazones de ambos estaban acelerados, la adrenalina los estaba recorriendo, pero les gustaba.

Se separaron un poco y Sanha pudo ver como los ojos del chico sobre él empezaban a brillar de nuevo, era como una galaxia, sus ojos tenían estrellas resplandecientes, aaa~ demasiado bello.

Eunwoo encontró una calidez y dulzura en la mirada de Sanha que no había visto anteriormente, y empezaba a mezclarse con un brillo de pasión que él evidentemente estaba respondiendo.

Volvieron a unirse en un nuevo beso y las caricias comenzaron, las manos de Eunwoo tocaron desde las pantorrillas del menor y fueron subiendo hasta llegar a sus muslos, subió la toalla que llevaba encima el menor y empezaba a resultarle estorbosa, de modo que se la quitó y dejó solamente en ropa interior al pelinegro.

Su piel era extremadamente suave, sedosa, le encantaba y no podía dejar de recorrerla. Sanha por su parte estaba disfrutando demasiado de ese tacto, corrientes eléctricas comenzaban a apoderarse de su cuerpo ante cada roce del mayor.

—H-hyung —Jadeó intentando recuperar el aire.

—Beagle. —Respondió con una voz aterciopelada, acariciando el rostro contrario.

—¿Co-cómo supiste? ¿Si viste las fotos de mi teléfono?

—Lo sabía desde hace tiempo, pero no me atrevía a abrir los ojos, hasta que apareciste tú. 

Aquella afirmación había descolocado a Sanha, ¿él había hecho que Eunwoo quisiera aceptar aquello? Entonces, eso quería decir que el azabache si tenía sentimientos por él, y eso lo estaba llenando de una felicidad inmensa.

—¿Vas a terminar con él? —Sanha necesitaba saber, necesitaba estar seguro de no estar jugando con fuego con el riesgo de quemarse completamente.

—Sí, creo que sí, de mi nadie se burla Yoon Sanha. —Su voz volvía a ser gruesa y eso provocaba escalofríos en el menor—. Aunque, no estoy seguro de cómo, quiero darle una lección.

—¿A qué te refieres? —El pelinegro se reincorporó en la cama y esperó respuesta.

—Quiero hacerle sentir lo que me ha hecho sentir a mi todo este tiempo... —Calló un momento, no estaba seguro de qué hacer—. Pero no quiero dañarte o que pienses que estoy utilizándote.

—¿Tú, qué esperas de mí, qué quieres de mí realmente Eunwoo hyung?

—Me gustas, espero gustarte del mismo modo, quiero que me quieras como yo he empezado a quererte, pero no quiero que creas que te estoy usando.

—¿Y si te digo que todo lo que deseas ya está realizado y que estoy dispuesto a ayudarte?

¿Eran reales las palabras de Sanha? Eunwoo no podía creer que en verdad estuviera escuchando eso de aquel dulce chico. No quería dañarlo, porque en verdad estaba empezando a quererlo y desearlo aún más de lo que había hecho con Moonbin, pero tenía miedo de perderlo en el proceso.

—¿Estás seguro?

—No te estoy diciendo que vas a engañar a Moonbin conmigo y restregárselo en cara, tú no eres como él y eso lo sé, también sé que hemos tenido estos encuentros que nos hacen parte de una infidelidad, pero tú no eres como él, ni siquiera cuenta como que le fuiste infiel porque a él no pareció importarle mucho hacerte eso durante tanto tiempo y peor aún seguir haciéndolo, y tú y yo tampoco volveremos a tener este tipo de acercamientos hasta que termines oficialmente con el idiota... —Pensar en eso entristeció poco a Sanha, pero así debían hacerse las cosas—. Bueno, lo que trato de decirte es ¡que te voy a arrebatar de los brazos de Moonbin! ¿entiendes eso? —Volvió a acortar la distancia entre ambos.

—No logro comprender totalmente. —Miraba atentamente esos bellos labios a una corta distancia.

—Tú seguirás con Moonbin, no digo que sigas fingiendo amor eterno ni nada, pero yo empezaré a cortejarte delante de él, porque quiero ganarme tu corazón realmente, por un buen camino, y quiero que ese idiota como lo han llamado en múltiples veces se de cuenta de lo que perdió y lo que gané yo... porque Eunwoo, cualquiera que esté contigo y te deje ir por estúpido lo pierde todo, y cualquiera que te tenga y te valore totalmente, lo gana todo.

Las palabras del menor derritieron por completo el corazón de Eunwoo, nadie le había dicho cosas tan bellas, se sentía importante para alguien, se sentía querido. Definitivamente, era mejor lo que proponía Sanha.

Quedaron de acuerdo en ese plan y decidieron irse a dormir esa noche, durmieron abrazados por primera vez, sin propasarse el uno con el otro, solo disfrutaban de la compañía y calidez mutua.

La siguiente semana empezaría todo y más valía que Moonbin estuviera preparado, porque Sanha no iba a detenerse. 

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Sanha bebé, eres un romántico de lo más hermoso ¡Conquista más a Eunwoo! ¡Demuéstrale a Moonbin cómo se hace! ¡Quítaselo! XD😈😈😈

¡¡¡Aaaaaa!!! Se viene bueno🙈🙈

¿Qué les está pareciendo?🤭🤭