ADVERTENCIA 🔥🔥.

"Eunwoo tomó del brazo a Sanha y lo hizo entrar a la camioneta, antes de subir le dio una mirada de advertencia al chico que se quedó con una sonrisa arrogante." 

Sanha se quedó callado todo el camino, no comprendía la actitud de Eunwoo, ni siquiera alcanzó a presentar a Beomgyu con él, y lo peor de todo era que no habían intercambiado números, él de verdad esperaba volver a encontrarse con Gyu.

Todos los demás habían estado en el momento de celos del azabache, en esos instantes sentían la tensión que emanaba Eunwoo, pero nadie quiso decir nada. Eunwoo daba miedo cuando estaba molesto o enojado, por lo mismo Sanha se había abstenido de decir algo ¿estaría enojado con él?

—Parece que la luna de miel terminó literalmente, la feliz pareja esta dentro de un bache. —Comentó con burla Moonbin después de un largo rato de camino.

—¿Te callas o prefieres que te calle? —Eunwoo se giró bastante colérico. Moonbin prefirió callarse y refugiarse en los brazos de Rocky.

Ese comentario había molestado demasiado al azabache, pero al mismo tiempo lo hizo darse cuenta del semblante decaído del menor y eso le dolió, sentía una opresión en el pecho de verlo así, y más que nada porque sabía que era a causa suya.

Llegando a "ASTRO" todos bajaron, agradecieron y se despidieron. Eunwoo cargó las maletas de los dos y se encaminaron al auto del mayor.

El silencio continuó, Sanha estaba dudoso, no sabía si el hecho de que hablara molestaría más a su novio y por eso no lo había hecho, y por su parte, Eunwoo se sentía demasiado imbécil, no encontraba las palabras para disculparse por su actitud anterior.

Al estar en casa ambos desempacaron sus maletas y llevaron todo al cuarto de lavado.

—Sanha, yo... lamento lo que pasó más temprano. —Empezó a disculparse—. No sé por qué, pero, sentí muchos celos de ver cómo se te trepaba ese chico desconocido y que tú no lo alejaras. —Eunwoo dirigió su mirada al suelo con pena.

—¿Estabas celoso de Gyu? —Sanha quería reír, pero no en forma de burla, más bien le parecía tierno ver al mayor así.

—Sí... bueno, no me gusta que te abracen de esas maneras, además ¡no sé quién es él!

—Tranquilo hyung, Gyu es un viejo amigo, estuvimos juntos desde preescolar hasta secundaria, ahí él empezó mmm cómo decirlo, su carrera de músico y nos separamos. —La nostalgia era evidente en el rostro del menor.

 Eunwoo empezó a razonar lo que su novio estaba diciéndole, al parecer Beomgyu era un chico importante en su vida y él acababa de cagarla al no permitirles estar en contacto de nuevo por su ataque de celos, pero ¿Cómo no estarlo? Aquel chico era precioso...

—Oh... ya veo. —El azabache intentó sonar neutro, pero se sentía fatal. Necesitaba hacer algo para enmendarlo.

—Lo lamento, no te dejé ni despedirte de él.

—No pasa nada, espero volver a verlo y si no, lo buscaré en redes sociales, posiblemente ahí aparezca.

Eunwoo asintió, aunque tampoco le agradaba la idea de que Sanha se pusiera a buscarlo, malditos celos.

Ambos estaban tan cansados del viaje que decidieron irse a la cama, necesitaban un descanso enorme, además Sanha entraría ese lunes a la universidad y ya estaban a sábado.

Ninguno dejó de abrazarse en toda la noche, Eunwoo despertó ocasionalmente, pero solamente se dedicaba a ver tiernamente al menor mientras dormía, era un ángel.

A la mañana siguiente ambos se levantaron de un humor bastante bueno, por lo que decidieron irse a desayunar a alguna parte. 

Después de eso Sanha le comentó a Eunwoo que tenía ganas de teñirse después de ver a Rocky y Moonbin, al mayor le pareció innecesario ya que Sanha se veía precioso con su color natural de cabello, pero tampoco iba a decirle que no a su pequeño.

—¿Entonces de qué color vas a querer tu cabello pequeño Beagle? —Preguntó estando en la estética.

—No sé, quiero algo drástico. —Sanha se puso a ver todos los colores disponibles en un libro que le dio la estilista.

—¿Puedo darte una sorpresa que sé que te quedará perfecto? —Habló la mujer encargada de hacerle el cambio de estilo, lucía confiable para el menor, así que la dejó tomar la decisión.

Después de varias horas en la estética, Eunwoo empezaba a sentir sueño, ¿Cómo podían tardar tanto en teñirle el cabello? Miró por décima vez su reloj y le preguntó al menor que si quería algo de comer o de beber, ya que él iría a la tienda que estaba cruzando la calle. Sanha solo encargó una bebida.

Al regresar, Eunwoo casi deja caer lo que llevaba en la bolsa... si antes Sanha parecía un ángel, ahora estaba seguro de que lo era, ¡ERA PRECIOSO! Ese cambio de estilo le quedaba como anillo al dedo, él, Cha Eun Woo tenía al novio más hermoso del universo entero.

—¿Te gusta luna mía? —Acababa de llamarlo Luna suya.

—Cariño, eres el ser más divino de la galaxia, te ves perfecto. —Eunwoo estaba maravillado con el menor. 

Se quedó observándolo un poco más, no podía dejar de hacerlo, era como un imán.

—Hyung~ deja de verme así. —Sanha empezaba a sentirse nervioso, la mirada del mayor tenía un brillo enorme.

—¿Así cómo? —Se hizo el desentendido.

—Pues así... con tanto amor, tanto cariño, tanta ternura, me matas de amor. —Susurró el menor tomando el color del tomate.

—Pues es que te amo, te tengo demasiado cariño, me provocas mucha ternura y tu amor me da vida, no mueras y sigue viviendo conmigo.

Eunwoo estaba perdido, perdidamente enamorado de Sanha, no podía evitarlo, su mirada lo delataba por completo.

Después de pagar por el nuevo estilo del menor, Eunwoo llevó a Sanha a una tienda exclusiva de ropa, empezaron a ver prendas formales y una que otra informal. Compraron para los dos y regresaron a casa.

—Sanha, ven aquí. —Eunwoo palmeó sus piernas y el menor se acercó con lentitud.

—¿Qué pasa mi Luna? —Se sentó a horcajadas sobre el mayor y se quedó observándolo con picardía.

—Tú sabes qué pasa Beagle.

Terminada esa frase se fundieron en un beso lento, sus lenguas danzaron y las caricias empezaron. Eunwoo adoraba lo lisa que era la piel del menor, se sentía en la gloria besándolo, teniéndolo con él, debajo o encima, entre sus brazos, en sus labios. A pesar de que Sanha era un poco más alto que él, se sentía delicado y frágil, Eunwoo quería protegerlo, darle siempre lo mejor.

Por ahora se dedicaba a disfrutar el tenerlo entre sus brazos, meciéndose con lentitud, rozando su cuerpo, provocando excitación inmensa. Se sentía tan bien, era demasiado placentero, Sanha era demasiado atractivo y al estar de esa manera, no era común ver ese lado de Sanha, pero adoraba ser el único que lo conociera.

Eunwoo cargó a su chico hasta llegar a la cama. Cuando estaba por recostar al menor...

—No Woonie, quiero estar sobre ti, quiero que me veas al disfrutar de ti.

Aquellas palabras dejaron seca la boca del mayor, amaba cuando Sanha hablaba de esa manera.

—Bien, quiero verte, amo ver tus labios entreabiertos mientras subes y bajas, amo ver el sudor recorriendo tu cuello y perdiéndose en tus marcadas y sexys clavículas, el color carmesí que adquiere tu piel mientras te hago mío, verte y escucharte pronunciar con tanto placer y amor mi nombre.

Lo dicho, fue suficiente para encender al menor; empujó suavemente a su precioso azabache y se colocó sobre él, lo besó con amor y empezó a llenar de besos su cuerpo conforme lo iba desnudando, llegando al miembro lo lamió como si se tratara de una paleta.

Eunwoo no perdía movimiento de su novio... el nuevo rubio continuó con sus movimientos de boca certeros hasta que Eunwoo se vino. Ahora era su turno.

El azabache empezó masturbando a Sanha con sus manos sin cortar el contacto visual, Dios ¿quién diría que Sanha tenía una mirada tan provocativa? Eunwoo no esperó más y tomó el miembro del menor entre su boca.

El menor no entendía cómo había esperado tanto para conocer ese placer, era lo más delicioso de la vida, lo llevaba al límite, al cielo, él estaba en el paraíso con Eunwoo.

Antes de venirse, el pequeño rubio detuvo a su novio, dejándolo un poco desconcertado al inicio, luego ocurrió que se puso sobre él como le había dicho al inició.

—Sanha, espera, necesito prepararte. —Lo detuvo el azabache.

—Solo dame el lubricante, hoy quiero ser yo quien haga esto.

Eunwoo miró impresionado a su chico. Le dio el lubricante, vio cómo Sanha lo ponía en sus dedos y después lo miró prepararse él mismo... impresionante, seductor...

El rubio empezó a jadear con la intromisión, aventó su cuerpo hacia atrás sin dejar de estar sobre el otro. La vista era esplendida para el azabache, se le hacía agua la boca, y su miembro gritaba por atención.

—Sanha... —Articuló como pudo y el menor comprendió al instante.

—Puedes entrar ahora.

El azabache tomó al menor de las caderas, lo atrajo hasta su miembro y poco a poco se abrió paso en su entrada. Un par de lágrimas rodaron por el rostro del rubio y era normal que sintiera dolor aún, no era como si llevara mucho tiempo teniendo relaciones sexuales.

Pronto, esas lágrimas se convirtieron de dolor a placer y ahí fue donde los movimientos constantes de Sanha empezaron.

Arriba, abajo, en círculos, se estaba volviendo loco de placer, aumentaba el ritmo y lo bajaba, estaba disfrutando demasiado. Ver a su príncipe azabache debajo de él, penetrándolo, besándolo, ardiendo de placer, sudando, gruñendo y susurrando su nombre... era otro mundo, un mundo que quería ver muy seguido.

El travieso Beagle se vino en el pecho del mayor, éste minutos después terminó dentro del otro, se quedaron así un rato, en esa misma posición, pero abrazados, con la cabeza de Yoon descansando en el hombro de Cha, regulando su respiración.

—Hacer el amor contigo es... es perfecto Woonie, perfecto como tú. —Susurró en el oído del mayor, causándole escalofríos y una enorme alegría.

—Soy una pieza imperfecta que alcanza la perfección contigo a mi lado. —Respondió con todo el amor del mundo, era verdad, para él Sanha era su complemento, su perfección.

—¡Te amo!

—¡Y yo te amo a ti!

—¿Te parece si cenamos algo y nos venimos a dormir? Mañana tengo escuela de nuevo. —Sanha hizo un puchero que enterneció al mayor.

Eunwoo se encargó de hacer la cena en esa ocasión, habían acordado que por semana cada uno haría el desayuno, la comida y la cena, y a partir de esa noche era turno del mayor hacerlo.

Terminada la cena, se fueron a dormir, la mañana siguiente sería bastante larga.

Sanha se levantó temprano y se metió a bañar, las imágenes de la noche anterior rondaron por su mente y definitivamente era un despertar maravilloso. 

Para cuando Eunwoo despertó el nuevo rubio ya estaba listo.

—¿Por qué no me despertaste Beagle? —El azabache talló sus ojos para aclarar su visión y se puso de pie hasta atrapar en un abrazo al menor.

—Te veías demasiado cómodo, no quise despertarte tan temprano hyung. —Sanha le dio un beso corto y caminó hasta el escritorio.

Empezó a meter varias cosas a su mochila y Eunwoo decidió bañarse para preparar el desayuno y llevar a su novio a la universidad.

Llegaron a la facultad y el azabache se bajó y abrió la puerta de su novio.

—Espero que tu regreso a clases sea excelente mi pequeña adoración. —Removió un poco la cabellera rubia del menor, lo atrajo a su cuerpo y le dio un cálido beso.

—¡Muchas gracias Woonie! Estoy seguro de que lo será, pero creo que va a ser mejor cuando salga y esté de nuevo contigo. —Y la miel estaba derramándose de nuevo.

De ese modo se despidieron y Sanha ingresó a la universidad, pasó a la oficina de su asesor por su horario de clases. Le alegró demasiado saber que su primera clase era la de guitarra y letras.

Entró en el aula correspondiente y tomó asiento, miró a su alrededor y había algunos compañeros de sus clases anteriores, pero su cara quedó en shock cuando vio ingresar a

—¡Sanha! —Gyu se acercó de inmediato al rubio.

—Beom ¿qu-qué haces aquí? —La sorpresa y emoción no salía del rostro de Sanha.

—Mis padres decidieron que regresara a la universidad para terminar mis estudios musicales, no es suficiente ser un artista en ascenso, necesito también las bases universitarias y por eso estoy aquí. —Calló y miró con detenimiento al mayor—. Aunque no pensé que nos reencontraríamos aquí. —Su voz era tranquila y melódica.

—Me alegra tanto. —Sanha recordó su anterior encuentro y se sintió avergonzado—. Lamento lo del otro día Beom.

—¡Oh! No te preocupes... pero ¿quién era ese sujeto grosero que estaba contigo? —El ceño de Gyu se mostró por un leve momento.

—É-Él es mi novio. —Dijo casi a modo de susurro.

—Ah, eso explica todo, ahora entiendo porque se comportó tan a la defensiva conmigo. —Rio sonoramente captando varias miradas extrañadas.

El profesor interrumpió su platica  y continuaron con las clases, al parecer Beom compartiría con Sanha 4 de las 6 clases que tenía ese semestre. Fueron a desayunar juntos y empezaron a tocar algunas melodías juntos, recordaron viejos momentos tanto alegres como tristes, y definitivamente se sentían felices de volver a verse.

Las clases terminaron ese día, Sanha y Beomgyu iban caminando al estacionamiento de la universidad.

—¡Que bonito auto Gyu! —Admiró el deportivo azul del menor.

—Gracias Sanha, ¿quieres que te lleve?

—¡Oh, no! No te preocupes, Eunwoo hyung vendrá por mí, gracias.

Y como si hubiera sido invocado, el azabache llegó en su auto negro, estacionó y se percató de la persona que estaba con Sanha... el mismo chico de la playa... bajó del auto y caminó hasta donde estaban ambos chicos platicando alegremente.

—¡Oh! Tu novio ha llegado. —Sonrió ladino el castaño sin quitar su mirada altiva de Eunwoo.

—Woonie, ¿recuerdas a Beom? —Eunwoo asintió—. Nos hemos encontrado aquí, y va a estar en la universidad junto conmigo, tenemos casi todas las clases juntos. —Las palabras del menor simplemente hacían que el interior de Eunwoo se retorciera.

—¡Que bien! – Contestó falsamente, no lo hacía feliz que ese chico arrogante estuviera todo el día con su novio—. Soy Cha Eun Woo, como ya sabes, el novio de Sanha. —Recalcó el hecho de ser el novio del rubio y Beom simplemente sonrió burlón ¿Qué le pasaba?

—Lo sé, Sanha me ha contado bastante de ti hoy, un gusto. Bueno Sanha, me voy, te dejo con TU novio, nos vemos mañana y quizá uno de estos días nos vamos a comer algo durante la tarde, tenemos demasiado de qué hablar. —Sonrió y le guiñó el ojo al rubio ¿Qué carajos? Luego miró al azabache alzando sus cejas y despidiéndose con las manos.

Hasta despidiéndose era un arrogante, pensaba Eunwoo, sus manos se habían apretado en un puño y sus nudillos estaban bastante marcados.  

—¿Nos vamos Woonie? —La dulce voz de Sanha lo sacó de sus pensamientos.

—Sí, tengo que llevarte a un lugar, aunque primero iremos por tus cosas a casa de tu padre. —Sonrió, esta vez realmente feliz y subió al auto.

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Llegaron a casa de Sanha, pero su padre seguía en la universidad, así que Ámber los recibió y ayudó a que sacaran lo necesario.

Después de eso continuaron su camino, Eunwoo le comento al menor que tenía que hacer una parada importante y que quedaba un poco lejos de casa, pero que sería rápido, entonces Sanha aceptó.

Llegaron a una casa bastante grande, lucía muy moderna por fuera, tenía un enorme jardín en la entrada y al parecer hacia atrás también. Bajaron del auto y entraron en la casa, por dentro era bastante agradable y acogedora, había olor a pino, un olor bastante adorado por Sanha. Luego escucharon unas pisadas por la escalera.

—¡NuNu! —Un chico de apariencia bastante adorable se dejó ir a los brazos de Eunwoo, cruzando sus piernas sobre las caderas del azabache. Sanha quedó petrificado. ¿pero qué...?

—Me has asustado Yeonjun. —Se quejó Eunwoo apretando al menor de cabellos azules.

—Lo s-siento NuNu, te extrañaba. —Se disculpó y miró neutro a Sanha.

—Yeon-ye él es Sanha, mi novio. —Presentó a ambos chicos, Sanha sonrió, pero Yeonjun se limitó a asentir. ¿tenía un problema con él? Pensaba Sanha.

Estuvieron un largo rato los tres juntos, pero la platica era más bien Eunwoo – Yeonjun o Eunwoo – Sanha, ya que esos dos apenas y se habían dirigido la palabra.

Yeonjun era muy agradable, cálido y juguetón, pero solamente con Eunwoo, con Sanha era frío, cortante e inexpresivo y eso incomodaba demasiado al rubio.

—Bueno NuNu, ya me voy, está todo listo como me pediste. —Sonrió el joven peli azul, dirigió una mirada despectiva a Sanha, se giró y abrazó de nuevo al mayor—. Te quiero hyung. —Se despidió y salió.

—¿A dónde va? ¿Qué no vive aquí? —Se apresuró a decir Sanha aún molesto por la actitud del menor.

—No, Yeon-ye solo vino a ayudarme a organizar algunas cosas. Sanha... —Eunwoo se acercó a su novio y lo tomó de las manos, se quedó mirándolo por unos segundos y se decidió a hablar—. Bienvenido a nuestra casa. 

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Fotito de Sanha bebé teñido, porque sí, porque es precioso, porque da vida y Eunwoo lo sabe perfectamente💖💖

¡Otro capítulo por hoy! ¡Fuertes situaciones aquí! JAJA bueno, no tanto XD

¡Diviertanse, deleitense leyendo! 😏🤗 

¿Qué tal quedó? :3 ¿Esto lo esperaban? 🤔😘