★ Único ★

La canción "Saturno" no tiene mucho que ver en el One Shot pero con eso me inspiré a escribir la historia, si quieren busquen en Youtube la canción para que en todo el tiempo que lean está historia la escuchen. Sin nada más que decir ¡comiencen su lectura!



☁ Como todo comenzó 

-Hijo, él es Park Jimin-el pequeño rubio alegremente sonreía al conocer al hijo de la señora Jeon, sin embargo eso era muy incomodo de ver para el pequeño Jeon-Cariño saluda-ordenó su madre.

El de cabellera negra extendió su mano, Jeon pensó que el pequeño de tan solo 11 años le daría la mano como se hace usualmente pero aquel pequeñín entrelazo sus dedos con los de su hyung.

Jeon Jungkook es hijo único, afecto de madre la tenía más no de su padre, aquel hombre había muerto hace unos años en un accidente automovilístico, desde aquel día en que se enteró que su padre murió no quiso recibir afecto de su madre ya que él quería a su padre ya que era con quien más convivió y más recuerdos tuvo.

Regresando a la actualidad, Jungkook pudo percatarse de aquella luz blanca de la cámara, su madre le había tomado una foto con aquel niño que apenas conocía.

-Es una foto para el recuerdo-sonrió la madre agarrando aquel poliester en su mano.

El de cabellera negra bufó y separó su mano bruscamente de la del otro, el rubio se acercó rápidamente a observar aquella foto.

-Voy a subir a mi cuarto madre-avisó Jeon pero para cuando piso el primer escalón escuchó los gritos de su madre para que siguiera allí con ellos sin embargo este rápidamente corrió hasta su cuarto.

Al llegar a su habitación se tiró a su cama pero las tocadas en la puerta se hicieron presente.

Jungkook sabía que si no abría se ganaría una regañada de su madre así que abrió la puerta, esperando el regaño o una jalonada de orejas pero eso no pasó porque ahí no se encontraba su madre si no el pequeño rubio.

-Hola yo solo...-Jeon le cerró la puerta en la cara y volvió a echarse en su cama, de nuevo las tocadas en la puerta se hicieron presente cada vez con mayor fuerza.

Jungkook fue a abrir de nuevo.

-Ya deja de tocar la maldita ...-está vez no era Jimin si no su madre.

Está vez si que estaba en problemas, aquella castaña le dio un jalón de orejas llevándolo a sentar en su cama y detrás de ella inocentemente entraba el rubio.

-Jimin se quedará aquí contigo así que ve a acomodando este basurero de cuarto para que él pueda dormir-dijo la señora Jeon y cerró la puerta bruscamente después de salir.

El pelinegro miró enojado a Park mientras el otro solo le sonrió como lo hizo en un principio.

-Si quieres te ayudo a limpiar-se ofreció el rubio.

-No gracias ya ayudaste mucho-habló sarcásticamente 

-Entonces...-miró una silla de madera en un costado-me sentaré ahí-señaló aquel objeto sonriendo.

-Siéntate donde tú quieras, solo te pido que no hagas bulla-Se podía notar el enojo en sus palabras.

-Está bien gruñonsito-habló inocentemente con una ligera risa. 

El de cabellera negra solo rodó los ojos ante ese apodo .

Horas después la luna ya se había posicionado en el cielo, ya era de noche, específicamente ocho de la noche y aún Jungkook no terminaba de limpiar.

-Ya me está doliendo el traserito-se quejó el rubio siendo ignorado por Jeon, el pequeño Jimin tenía en su muñeca un pequeño reloj así que al ver la hora rápidamente agarró de su bolsillo un objeto de plástico con varias pastillas dentro-Jungkookie puedes darme un vaso con agua, por favor-

Jeon seguía ignorándolo.

El pequeño park intentó bajar de la silla que era más alta que él pero lamentablemente acabó cayéndose de rodillas. El sonido del aterrizaje al suelo fue fuerte que hasta podía decir de que resonó por toda la casa por eso Jeon se acercó alarmándose mientras el otro contenía las ganas de llorar.

El pelinegro cargó delicadamente a Park hasta la cama.

-Eres muy torpe-carcajeó Jungkook al ver a Jimin con sus mejillas infladas y coloradas. Al rubio se le fue el dolor al verlo sonreír y reír pero de pronto se acordó lo que tenía que hacer.

-Mis pastillas me las pasas...-pidió Park señalando al objeto de plástico que estaba en el suelo ya que se cayó de igual manera. Jeon fue por aquel objeto y le entregó al rubio.

-¿Por qué tomas eso?-dijo con asco ya que él odiaba las pastillas porque cada vez que intentaba tomar una sentía que se iba a atragantar.

-Sin eso no podría vivir además de las inyecciones-sonrió Park como si eso fuera de lo más común.

-¿Estás mal?-preguntó el pelinegro, su madre siempre decía que cuando toman pastillas no se encuentran bien de salud.

-Estoy bien ¿tú me ves mal?-dijo un poco incomodo por la pregunta.

-No, te ves bien-sonrió Jeon aunque por dentro sentía que algo andaba mal y ese "estoy bien" del rubio no era del todo cierto.

-Me puedes traer un vaso con agua-habló el rubio, Jeon asintió luego salió del cuarto yendo a la cocina.

Conforme pasaban los días el pelinegro trató de ser más amable con el rubio, su madre respondió a Jeon sobre las dudas que tenía con el rubio y el porqué de la estadía de Jimin en su casa, desde ahí intentó no sacar el tema de las pastillas de nuevo.

La noche llegó nuevamente, ambos dormían en la misma cama todo el día Park estuvo callado, algo que no era usual en él.

-Pequeño ¿Estás durmiendo?-murmuró

-Aún no hyung-contestó en un tono bajo, él se volteó a ver al pelinegro.

-Haz estado muy callado ¿Te sientes bien?-preguntó-si te sientes mal dímelo, veré como te puedo ayudar, le puedo llamar a mamá para que venga-

-Jungkookie ¿puede abrazarme y decirme que todo estará bien?-dijo el rubio, no pasó ni un segundo y Jeon ya lo abrazó, tenía temor de tan solo pensar en perderlo ya se había encariñado con Jimin hasta podía sentir unas maripositas en el estomago al verlo, él posiciono sus brazos en la cintura del aún pequeño- Yo no quiero morir...-dijo mientras caían lágrimas de sus ojos.

-Todo estará bien-fue lo único que dijo Jeon, él no quería llorar pero contenerse las lágrimas le hacía un nudo en la garganta.

☁ cinco años después 

-Feliz Cumpleaños Jungkookie-le sorprendió el rubio al de cabellera negra, Jimin tenía una torta de pastel entre sus manos y una vela con el número dieciocho-Sopla las velas kookie-habló emocionado- no olvides pedir un deseo-sonrió.

-Mmm que podría pedir...-Jeon lo pensó por unos segundo y sopló las velas.

-¿Qué pediste?-aquel curioso rubio preguntó

-Si te lo digo no se cumplirá chismosito-con sus dedos de la mano agarró la nariz de Jimin aplastandolo.

-¡Auch!-se quejó Park sobándose la nariz cuando lo soltó mientras el pelinegro reía.-No te rías Jeon Jungkook-puchereo

Jimin con el pastel en las manos se la tiró a Jungkook manchando toda la cara de su hyung.El rubio comenzó a reírse de ver a Jeon todo empapado de torta, dejo de lado el pastel y se aparto un poco de Jungkook para que no lo manchara.

-Ahora si vas a ver Park-amenazó Jeon.

-Uyyy que miedo-dijo sarcásticamente Jimin.

Jungkook se comenzó a acercar al rubio sin embargo el contrario ya estaba listo para correr.

-¿No quieres un abrazo Jimin?-preguntó Jeon. Jimin negó rápidamente y se fue corriendo al otro extremo-Te voy a atrapar Park

-Inténtalo a ver si llegas-burlonamente contestó.

Fueron minutos de una divertida corrida por toda la casa, el pelinegro estaba al frente de la puerta de la habitación de Jimin, abrió la puerta de una y se llevó una gran sorpresa.

-Seguro pensaste que solo tenía un pastel de regalo para ti-dijo Park sonriendo.-¿Te gusta?

La decoración era negra porque era el color favorito de Jungkook, pero las fotos que habían en todo el cuarto tenían un marco fosforescente que hacía verlo espectacularmente brillante.

-Me encanta-se lanzó a abrazar a Jimin haciendo caer al otro a la cama que estaba justo detrás de él si no hubieran quedado estrellados en el piso.Jeon le comenzó a dar besos a Jimin en la frente hasta finalizar en la nariz.

-¿No crees que te faltó en un lado?-preguntó Jimin inocentemente,señalando sus labios rojos y pomposos.

Jeon frunció el ceño.

-¿Fue muy atrevido de mi parte?-preguntó Park avergonzado.

-Me encantas así Park Jimin

Empezaron succionando sus labios, ambos eran inexpertos en eso pero mientras cada segundo pasaba eran los besos que se iban saltando los límites de la ropa abriéndose camino por doquier, aquellos que dejaban marcas centímetro a centímetro del cuerpo que besan.

Fue esa noche en la que pudieron sentir el placer y la cálida sensación de sus pieles juntas.

Fue la noche en la que Jeon Jungkook y Park Jimin hicieron el amor por primera vez.

tres años después

-Es un milagro que sigas vivo-habló el doctor Kang-las pastillas te están haciendo bien como me dijiste ¿Por qué hoy no viniste con Jungkook?-

-Doctor, últimamente me están saliendo manchas rojas en mi piel y no quería preocupar a Jungkook en eso ya sabe como es-dijo Park.

-A ver ven para acá te voy a chequear, súbete el polo-Jimin subió su polo,el doctor Kang observó todo el torso y brazos de Jimin estos se encontraban llenos de pequeñas manchas rojas-son consecuencias de tu leucemia se llaman petequias eso desaparece en un corto tiempo pero si no logra desaparecer hasta el fin de semana vuelves

-Está bien doctor-arregló su polo-Vendré en unos días.-El doctor Kang asintió.-Y doctor también estoy teniendo escalofríos por la noche, podría recetarme algún medicamento por favor-Asintió el mayor.

Jimin luego de comprar sus medicamentos y algunas compras de alimentos se dirigió hacía su casa que tenía con Jeon. Ambos tiempo atrás decidieron comprar una casa obteniendo ayuda de la mamá de Jungkook que al saber de la noticia de que eran pareja se puso inmediatamente contenta.

El rubio siempre estaría agradecido con la señora Jeon por haberlo acogido en su casa cuando tan solo era un pequeño niño perdido, lamentablemente sus padres no podían comprar los medicamentos que necesitaba para su enfermedad y lo dejaron en una estación de tren, no querían cargar con el peso de un "enfermo".

-Amor ya llegué-exclamó el rubio. Jeon se acercó para darle un casto beso y luego ayudarle con las bolsas llevándolas a la cocina y dejándolas ahí.-Sé que estoy enfermo pero no debilucho-dijo Jimin.

-Te extrañé en todo el día amor ¿Donde estuviste y con quién?-preguntó mientras abrazaba a Park por la espalda.

-Te estás volviendo un novio tóxico por lo que veo-Jeon frunció el ceño-estuve con mi amante

-¿Y como se llama tu dichoso amante?-cuestionó un celoso Jungkook

-Taemin-dijo el rubio conteniéndose las ganas de reír.

Lee Taemin enemigo de Jungkook y mejor amigo de Jimin, Taemin fue el único amigo que tuvo cuando empezó a ir al colegio, era mayor que él pero se llevaban súper bien, llegando a que Jungkook se pusiera celoso del tiempo que ambos compartían.

Pero claro, Jimin siempre estuvo enamorado de Jungkook.

-No vuelvas a mencionarlo a él, no ahora-dijo Jeon mientras comenzó a succionar un poco de la piel del cuello de Jimin, era un fetiche que tenía el pelinegro, mientras él seguía succionando, logró que el rubio soltara un ligero gemido -¿ quieres hacerlo?- Preguntó pícaramente mientras sus manos subían por debajo del polo de Park.

- Hoy no por favor-se sentía mal al rechazar a Jungkook pero tenía que hacerlo no quería que lo viera y que se preocupara.

-Está bien entiendo-se separó Jeon de Jimin pero antes de soltarlo hizo que el rubio volteara y que lo mirara de frente- ¿Y donde estuviste realmente?

-Fui donde el doctor Kang-dijo el rubio sin mirarlo a los ojos.

-Amor siempre vamos juntos porque está vez no me dijiste, me preocupo mucho por ti-

-Yo...-no pudo llegar a hablar porque las inmensas ganas de vomitar llegaron y se fue corriendo al baño mientras Jeon iba tras él.

Jimin al terminar de vomitar comenzó a llorar, había vuelto de nuevo, la leucemia lo estaba matando cada vez más rápido, aunque el doctor no le haya dicho específicamente eso sabía que ya estaba llegando su hora.

-todo estará bien-lo abrazó- no llores mi amor, tú eres fuerte.

-No quiero morir-dijo entre lágrimas.-No quiero dejarte Jungkookie, Quiero quedarme aquí contigo para siempre-Jeon limpiaba las lágrimas de Jimin.

En este mundo existen dos tipos de personas:

Los que quieren morir y los que quieren vivir.

Jimin era de los que querían vivir, lucharía hasta el final por quedarse aún con las pocas esperanzas que quedaban.

2 meses después ☁

Jeon llegaba del trabajo, Jimin siempre acostumbraba a recibirlo con un abrazo de koala pero esta vez no fue así.

Jungkook entró a la cocina y al ver a Park tendido en el suelo se alarmó, dejó todas sus cosas de lado, sacó su celular y comenzó a llamar a una ambulancia.

No atendieron a su llamada así que cargó a su amado hasta llevarlo al hospital.

-Es urgente, mi novio está mal-exclamó, las enfermeras rápidamente agarraron una camilla e hicieron que Jeon lo tendiera ahí.-Ya llevenlo-exclamó en lágrimas.

゜・。。・゜Actualidad゜・。。・゜

El doctor salió a paso lento, Jeon se acercó a él tenía esperanzas que su amado estuviera bien pero su expresión cambió cuando el otro negó con su cabeza, fue en ese momento cuando todo dentro de él se derrumbó.

De rodillas en el piso comenzó a llorar, las esperanzas que tuvo se esfumaron no quedaba nada, su mundo se fue.

Todos los momentos que vivieron juntos, ahora solo eran un recuerdo.

Jungkook se paró y le dijo al doctor si podría entrar al lugar donde se encuentraba Jimin, el doctor Kang aceptó.

Al entrar pudo observar la piel de Jimin completamente pálida, no dudo en acercarse, lo abrazó mientras el otro cuerpo estaba completamente frío.

Darle un último beso al amor de su vida era todo lo que quería dio un dulce y suave beso en los que antes eran esos bombosos labios rojos a los ahora labios de un color amarillento, estaba perdiendo también su color.

-Te amaré hoy, mañana y siempre-dijo por último Jungkook para seguir abrazando al cuerpo inerte de Park.

El señor Kang ingresó a la habitación.

-Él quería que te entregara esto-le entregó una carta-lo escribió la última vez que estuvo aquí, léelo con calma-Kang salió de la habitación.

°|Está carta es para Jeon Jungkook quién es mi gruñonsito, mi celosito y el amor de mi vida.

 Amor, sabía que este día llegaría pero quiero decirte que intenté de todo para seguir contigo luché con mi enfermedad por ti cuando tan solo me habían dado 5 años de vida, te dí el mejor regalo número dieciocho, eso iba a ser mi despedida pero cuando volví a ir donde el doctor Kang me dijo que me había recuperado, que mis defensas estaban muchos más altas y podía seguir contigo mucho tiempo más.

Pero cuando volví a ir de nuevo hace un mes, ya no me quedaba tiempo, me sentía mucho más débil, tenía muchos mareos y además mucha sangre frecuentemente salía de mi nariz, lamento no decirte nada pero no quería preocuparte.

Teníamos muchos planes juntos pero el que más anhelábamos era tener pequeños niños correteando por la casa ese siempre fue uno de mis mayores sueños, pero te prometo que en nuestra próxima vida lo tendremos.

Te amo Kookie, siempre fuiste mi única razón para vivir.|°

゜・。。・゜ ゜・。。・゜

-Y tú serás mi única razón por la que me iría de aquí, mi amor-Jeon no lo pensó más y se lanzó del alto acantilado de Nakhwaam.-Volveremos a estar juntos.-dijo Jeon en su último aliento.

Ese fue el día en que Jeon partió del mundo para ir en busca del amor de su vida y tener el final feliz que tanto anhelaban. 

FIN 

゜゜゜゜゜゜゜゜

Espero les haya gustado, l@s amo y gracias por su apoyo.

EDITADO (03/11/21)

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top