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⁨-⁨ˋˏ✎ . . . 2435 palabras.
⁨-⁨ˋˏ✎ . . . Es increíble que a tanta gente le interese mi ida de olla… pero oye yo aprovecho y sigo publicando. Jeh.

ʚĭɞ*ೃ༄﹃I never leave you again…
'cause I'm alive…
I'm alive for you.﹄

꒷͝͝͝  ꒦͝  ꒷͝͝͝  ꒦͝  ꒦꒷͝͝͝  ꒦꒦꒷ ♡ ꒷͝͝͝  ꒦͝  ꒷͝͝͝  ꒦͝  ꒦꒷͝͝͝  ꒦꒦꒷

Ha despertado. Su cuerpo duele y está débil. Apesta y no le hace falta mirarse mucho para saber que está lleno de polvo, arena y algo de barro. Su pierna aún duele junto a su espalda y cabeza. Está todo mal. Pero está vivo.

Algo ha protegido su cuerpo de las rocas, apiñadas a su alrededor, pero sin tocarle, por los pelos. No puede levantarse porque el pequeño hueco que dejan las rocas libre no se lo permite, y encima tiene que cavar un poco el suelo; tiene que avanzar a cuatro patas incluso cuando sale; intenta levantarse y por muy poco su cara no vuelve a dar con la arena blanca. Le duele estar en esa postura.

Está confuso y desorientado, perdido en el miedo de caer del todo y no despertar jamás. siente la arena clavarse entre la carne y sus uñas, haciéndole daño, pero sigue las escaleras que conectan la playa con la parte costera de la ciudad, sin descanso, aunque siente el suelo aún más duro que de costumbre.

Quiere ver a Conway.
Quiere ver a Horacio.
Quiere ver a Xavier.
Quiere ver a Greco.
Quiere ver a Volkov.

Joder, en este momento quiere ver a todos en esa ciudad. Siente que "ha vuelto a nacer" después de esa experiencia cercana a la muerte que acaba de vivir.

Sería bonito decir que se siente indeciso sobre a dónde dirigir sus adoloridos pasos; a la casa de su jefe, a comisaría, la casa que el ruso comparte con su hermano, la de su amigo el barbudo o el de su amigo y autodenominado "rival" en lo a coleccionar logros se refiere. Quizá esas personas que no recibirán su visita se sientan… Halagadas; le gustaría mucho provocar esa emoción (aunque en este momento cualquier cosa que no tenga que ver con la cueva, le sacará una sonrisa, incluso que le secuestren). Pero la cruda realidad, es que no le cuesta nada decidirse por tomar el camino hacia la casa de su exnovio; es algo automático. Quiere ir hacia la última persona en la que pensó cuando se empezó a pensar que si no le mataban las piedras al moverse solar y aplastar su cuerpo, lo haría el polvo que inevitablemente tenía que respirar.

━━ Jack…

La gente le mira mal, pero nadie le ayuda. Tiene frío y mucha hambre, tanta que la comida de los hogares, con esa suave y pequeña silueta de aroma que a veces suelta vapor, es adivinada con exactitud. Pollo asado. Filete con patatas. Sopa de marisco.

Su estómago rugió con fuerza y sin descanso mientras llegaba al complejo de pisos en el que vivía Conway. La puerta estaba abierta porque un repartidor al que no dieron propina, así la dejó y como no podía levantarse para darle al botón del ascensor, subió por las escaleras, hacia el ático dúplex donde el mayor y el husky vivían.

. . .

━━ ¿Y dice que lleva así desde la tormenta de ayer? ━ preguntaba mientras acariciaba al husky siberiano, el cual estaba encogido debajo de la cama de su dueño.

━━ Si… Es… extraño. Parece que le dieron miedo los truenos y relámpagos…

━━ Conway, ya se lo dije la otra vez… A los perros les dan miedo los truenos, los petardos… Los ruidos fuertes en general. Si usted se tirase un pedo cerca suyo, quizá pase lo mismo también. ━ quejó mientras cruzaba sus brazos.

Cualquiera en su lugar recibiría un golpe por ser tan atrevido de hablarlo así. Pero Horacio no, él era diferente; Conway se limitó a bufar.

━━ ¡Esta vez es distinto!

━━ Siempre es distinto para usted… ¡Siempre que escucha algo de eso e Ivadog se asusta, me llama! ¡Ya le vale!

━━ ¡Que no! ¡Que te digo que está extraño!

Sí que lo estaba, pero más de lo que cualquiera creería. Mientras los agentes discutían, el perro salió por su propia cuenta. El sonido de sus garritas chocando con los baldosines en una carrera por las escaleras de caracol hasta la puerta principal, fue lo que les calló la boca a ambos.

━━ ¿Pero qué demonios…?

━━ ¡Ves cómo esta vez es diferente!

Caminaron siguiendo los pasos del canino.

━━ ¿Por qué huele la puerta? ━ susurró al ver que efectivamente, el perro olía la puerta principal.

━━ A lo mejor quiere ver a su novia.

El de cresta recibió una colleja.

━━ ¡Anormal! Sólo hay dos apartamentos ocupados en esta planta, y la señora de ahí, te aseguro que no tendría animales ni aunque pudiesen trabajar y pagarle alojamiento… Cada vez que Ivadog ladra, intenta llamar a la policía. ━ Lo último era bastante absurdo, ¿Quieres llamar a la policía para denunciar que al superintendente, siendo él el jefe? En un mundo -o más bien ciudad- diferente, quizá aquello sería posible; pero estamos en Los Santos.

Nadie del cuerpo le tose al viejo.
Menos Gustabo y Horacio, pero ese es otro tema.

━━ Pues yo veo una perrita blanca.

Efectivamente. Un pomerania pequeño y de pelaje rubio casi blanco estaba en la puerta; Ivadog lo intentó oler, y curiosamente, con un gruñidito del cachorro, corrió a refugiarse tras su amo. Parecía muy asustado.

━━ Que gran perro policía. ━ bromeó Horacio.

━━ ¡Cállate! ━ Se agachó a ver al perro pequeño, buscando alguna chapa. Repentinamente manso, este se dejó revisar.

━━ Al menos ya sabemos que su perro sólo está en celo y estaba buscando a su novia. Seguro que estos dos se echaban de menos en el parque para perros. ━ Rió.

━━ Horacio.

━━ ¿Hmmm…?

━━ No tiene chapa.

Primera alarma: Estaba abandonado o perdido.

Lo coloco en sus brazos boca arriba, cosa que los perros suelen odiar aunque este se dejó hacer.

━━ Y es macho.

Argumento desmontado.

━━ Además, mis vecinos no tienen perros tan caros… Y si los tuvieran, el perro tendría collar, chip…, todas las medidas para evitar que se escape o lo roben.

━━ Bueno, lo del chip no lo sabemos. ━ intentó discutir el subinspector.

━━ ¿No crees que es muy joven para eso...? No debe tener ni medio año. Tendrían que ponerselo ilegalmente…

El pelirrojo se encogió de hombros, intentando tomar al perrito de los brazos del mayor. Pero este corrió hacia adelante escabulléndose entre sus piernas. El pomerania fue perseguido por Pérez, y finalmente saltó de nuevo a los brazos de Conway que seguía agachado.

━━ Anda, mira tú por dónde… ━ comentó celoso el joven. Aquel perrito le gustaba, hubiera querido tenerlo de mascota… le daba envidia que su jefe fuera el "elegido".

━━ No me mires así, anormal. Lo llevaré a una tienda de animales, a ver si saben decirme si escapó de alguna casa, si lleva chip o incluso es suyo…

Se levantó del suelo.

━━ ¿Y no puede ser callejero? ━ preguntó el menor apoyándose en el marco de la puerta.

━━ ¿Tú crees que si fuera callejero estaría así de limpio? ¡Incluso su pelo parece recién cortado!

Mientras hablaba, el mayor bajaba las escaleras. Se fijó entonces en que había algo de pelo rubio ahí o más bien, mechones… Ya sabe cómo subió el perro, pero ¿Cómo podía subir tantas? No parece capaz ni de subir un escalón si es sincero...

━━ Eres un perro deportista, ¿Eh?... ¿Sueñas con ser un perro policía?

Podía parecer raro, más viniendo de un hombre como él; pero si, le había hablado al animal. Hablaba con Ivadog todo el día, le decía cosas mientras lo mimaba o alimentaba, y no veía por qué no hablar con el Pomerania.

Pasó por la puerta principal, cerrándola, ya que estaba abierta y entonces, se escuchó un ladrido suave y corto.

━━ Dime que no has ladrado diciendo que si.

Bajo la mirada al pequeño. Se había colocado panza arriba como si de un bebé se tratase, observándole con sus nunca mejor dicho, ojos de cachorro.

━━ No me mires así…

Ante la falsa alarma, caminó a la tienda de mascotas más cercana. Había un Pomerania en el escaparate, aunque algo más grande y rubio que el que tenía en sus brazos; Conway suspiró aliviado pensando que ya podía volver a casa mientras entraba. La chica que atendía la tienda se acercó a ellos con una gran sonrisa.

━━ ¿Viene a cortarse las uñas? ━ Cualquier otro sabría que se refería al cachorro. PerConway…

━━ ¿Cómo dice? ━ Su tono serio había hecho que la fémina retroceda asustada.

━━ Que si quiere… cortarle las uñas a su mascota…

Está feo decirlo, pero ni siquiera le estaba prestando atención.

━━ ¿Este perro no es vuestro?

━━ Ojalá. ━ Le habian dado ganas de reír, pero al ver los ojos grises bajo de nuevo la mirada, sumisa ━. Es una raza bastante cara, señor, sobre todo si es una cría… Solo tenemos uno, pero como ya tiene un año y medio, es casi la mitad de barato y lo quiere menos gente. Su perro no es de aquí.

━━ ¿Aquí ponéis chip? ━ La vio asentir con la cabeza ━, necesito que revise si tiene uno.

━━ No creo que lleve… Los cachorros no se pueden-

━━ ¡Por favor! ━ la interrumpió.

Con manos temblorosas y paso rápido, la mujer buscó algo entre los cajones, sacando el lector de chip junto a una galleta para perros.

━━ ¿Puede ponerlo en el mostrador?

Obedeció.

La chica intentó darle la galletita al perro, ya que para explorar en busca de un chip, el pequeño quizá se movía mucho y no podría trabajar bien. Pero el perro la intentó morder sin siquiera oler la galleta.

━━ ¿Ya ha comido?

━━ No lo sé. Hace menos de media hora que lo "conocí". ━ Pese a sus palabras, el animal no tardó en acercarse a él, haciendo ruiditos con las garritas al pisar el mostrador de cristal.

El hocico algo seco del perro se frotó con el estómago del mayor, cosa que lo hizo intentar apartarlo.

━━ Por favor, no le aparte.

. . .

━━ Osea que el perro es tuyo.

━━ ¡No!... ¡Si!... ¡Yo qué coño sé!

Al poco de que la dependienta buscase un chip literalmente hasta en la cola del perro (Conway le dijo que quizá se lo pusieron en un sitio extraño y que revisara todo), quedó claro que no tenía. Pero no podía ser un perro callejero; estaba muy limpio, no se había tirado a comer la galleta que le ofreció la mujer (osea que no tenía excesiva hambre) y su pelo estaba en la medida perfecta (recién cortado o hace poco).

En resumen, la chica no quería comprarle el cachorro aunque Jack prácticamente suplicase y no pudo abandonarlo en la calle, así que ahí estaba, en su regazo, en casa, escuchando sin inmutarse al mayor maldecir y gritar.

━━ ¿Me lo puedo quedar yo? ━ Solo con eso y acercarse, el animalito gruñó ━, ¡No me quiere, jooo!

━━ No te sientas mal. Mordió a la chica que nos atendió en el PetShop. ━ le intentó consolar a su manera.

━━ Tendrás que adoptarlo.

━━ ¿Otro perro? ━ Se levantó de golpe, olvidando que el perro estaba en su regazo ━, ¡Ni siquiera se lleva bien con el que ya tengo! ¿Y si le toca mucho los huevos a Ivadog? ¡Se lo comería de un bocado!

El cachorro sin embargo no se quejó, solo se fue en busca del otro perro, aunque no sabía bien qué hacer hasta que.

❝Este no es lugar para ti, Gustabo.❞

Se asustó, pero se recuperó rápido.

❝Ivadog…❞

El nombrado lo miró, echado en una colchoneta para perros, justo a los pies de la cama de Conway. Lo miraba con una evidente molestia.

❝¡Rápido! Hazme un sitio… tenemos que hacer que Jack crea que nos llevamos bien.❞

Tan rápido como se acercó, fue gruñido. Nunca le asustaron los perros, pero sus patitas temblaron y se agachó un poco; se ve que encima de no poder hablar con las personas como un perro, también tenía ese miedo hacia los caninos más grandes.

❝Acércate y te devoro.❞

❝¡Pero tengo que hacerlo…! No quiero que me abandone de nuevo…❞

❝Te lo mereces. Mi amo merece algo mejor que tú… Todos los días me saca de paseo y una chica que pasea a su caniche le intenta hablar; es dulce, cariñosa, me da comida… Con algo de suerte, algún día vivirá aquí con Jack y no tendré que aguantar tus patéticos intentos de verlo.❞

Gustabo descubrió que los perros lloran (no lo sabía antes), en carne propia. Gimoteaba de pena de forma suave, por mucho que trataba de aguantar.

❝¡Pero yo lo amo!❞

❝Haberlo pensado antes de tratarme como un lastre. No me quisiste por mucho que yo intenté ganar tu aprobación; no te mereces mi ayuda.❞

❝Lo necesito…❞

❝He dicho que-❞

━━ ¿Oyes eso? Seguro que Ivadog ya le ha mordido… ━ La voz de su propio dueño le interrumpió.

━━ ¡Seguro que solo está triste! Yo también lo estaría si no me quisieses, papu. ━ comentó el de cresta, siguiendo al mayor.

El perro grande suspiró, acercándose al Pomerania, lamiéndole la cara en el preciso momento en el que Jack encendió la luz y fue a buscar al cachorro.

━━ Pero que-

━━ ¡Lo sabía! ¡Son novios! ━ celebró el menor.

━━ ¡No digas gilipolleces! ━ gruñia el azabache. Se agachó frente a los caninos, acariciando la cabeza de su perro a modo de premio ━, está haciendo lo que le enseñé que debía hacer si hay un niño de rehén en un atraco; lo intenta consolar.

Recibió un lametazo en la cara tan largo que media cara la tenía mojada, pero solo se rió.

━━ Ivadog es un buen perro…

━━ Sí que lo es. ━ Miró al cachorro que parecía aún algo triste por su orejas agachadas ━, ¿Quieres que se quede, Ivadog?

Lo cierto es que esperaba un "no".

¿Qué perro macho que siempre ha vivido solo, quiere la compañía de otro perro macho?

Pero él se apartó de su amo para empujar al cachorro con su hocico hasta el mayor, sorprendiendo a todos.

❝¿Esto significa que me ayudarás?❞

❝Significa que te doy una oportunidad. Cagala otra vez y te devoro, seas perro, humano o gato.❞

━━ ¡El yayo ya tiene un nuevo perrito! ¡Ese es mi papu! ━ celebraba el menor, viendo con ternura lo hecho por Ivadog y cómo Conway después, lo tomó en brazos de nuevo.

━━ Este ha dicho a Ivadog dónde guardo sus croquetas… Tiene cara de manipulador.

«O de Gustabo.» se entristeció un poco al pensarlo. Aquel cachorro se veía como un angelito, pero había conseguido llegar a su casa subiendo escaleras, gruñó a Horacio y encima, mordió a la dependienta del Pet Shop.

━━ Es todo un Granuja… ¿Verdad?

୨୧

ʚĭɞ*ೃ༄﹃Nunca te dejaré de nuevo…
Porque estoy vivo...
Estoy vivo para ti.﹄

⁨-⁨ˋˏ✎ . . . Surprise.

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