Sagitario de forma lenta soltó su mano, le gustó la piel de este chocando con la suya.

La piel del Taurino era un poco fría y suave, tal vez era por el clima en el momento. Por el lado de Tauro le hubiese gustando no soltar su mano, está si estaba cálida e unas de sus fantasías más tiernas era caminar con Sagitario agarrado a esa hermosa mano. Si en este momento fuera posible enamorarse de una mano, él lo haría.

Salieron del establecimiento directos a una cafetería cercana, que justamente era la misma qué Sagitario Y Escorpio habían entrando en su primer día de convivencia. El de tierra seguía teniendo la mochila del de fuego y la suya, la acomodo en el asiento de este y en el suyo, se sentaron.

Sagitario recordó perfectamente que acá fue donde coqueteo la camarera con su "cita". Se mordió el labio sin querer sintiéndose incómodo y Tauro lo miro extrañado, aunque le gustó mucho ese gesto.

── ¿Sucede algo? ¿No te gusta el lugar? Podemos ir a otro lado si gustas ── Levantó la mirada y rápidamente negó con la cabeza.

── Está bien el lugar, me alegra haber venido, tenías razón, necesito despejarme ── Sonrió tímidamente.

── Me alegra entonces, por cierto si quieres aún desahogarte puedes hacerlo, ¿Sabes? Puedes llamarlo hijo de puta en frente mío no voy a juzgarte, ya que de todos modos no me cae bien Escorpio ── Sonrió mirando la carta de menú y pasándole una a Sagitario.

── ¿No te cae? Supongo que por Virgo ¿No es así? ── Preguntó sin medirse mucho.

── Admito que esa es una excusa un poco oculta, Virgo nunca quiso que golpearamos a nadie, ni que lo odiemos por él, pero el rencor queda, más que la última vez hablo mal enfrente mío ── Desvió la mirada un poco incómodo ── Tengo varias razones para odiarlo, supongo ──

── ¿Varias? Bueno, supongo que cualquier razón que te parezca justa está bien. Yo... El primer día ya estaba hablando con Escorpio, me cayó muy bien, venimos solos a esta cafetería, coqueteo con la camarera, y, me hizo ver cómo su pareja frente a ella ── Mordió su labio, Tauro lo miraba con cara agradable aún así tenía fuego en su interior ── Más antes de eso armó la escena en casa, me sentí incómodo por un lado, pensándolo mejor estaba tratando mal a mi hermano. Luego en la escuela encontré que otras chicas seguían coqueteando con el, más tarde esto... Ya no se que pensar ──

── Pienso que es un reverendo hijo de puta ── Llamo a la camarera e pidió su orden, Sagitario también lo hizo y esperaron sus almuerzos ── Una persona que supuestamente está interesada en vos no tendría por qué coquetear con alguien más, no tendría por qué tratar mal a las personas a tu alrededor, menos a tu familia. ──

── No puedo negar eso, aunque mi relación con Aries mejoro recién está semana, debí ser un mejor hermano, me segue ── Se Sonrojó mirando para abajo ── Necesitaba un amigo, me brindo tiempo, y lo tome. ──

── ¿Necesitabas un amigo?... ── Frunció su seño, aún así entendió varias cosas ── Mmm, entiendo qué, nunca hablamos de esto. ── Llegó la chica con sus almuerzos y Tauro toma la tasa de café lágrima que pidió y se la llevó a la boca.

── ¿De qué? ── Agarro su tostado y se lo metió en la boca.

── Del día de cuando éramos pequeños, dónde, siendo realistas, algo se rompió ── Sagitario empezó a masticar más lento, ¿Estaba pasando en serio? ¿Hablarían y resolverían eso? Se le formó un nudo en la garganta de emoción, y su estómago estaba doliendole por los nervios. ── Empezaré yo si te sientes más a gusto ── Notando el nerviosismo lo propuso.

── ... ── asintió con la cabeza.

── No solo estaba enojado ese día por lo que le hiciste a Virgo, también me heriste. ── Tauro tomo unos segundos en saber lo que diría, no podía revelarle así por qué si sus gustos hacía el, se limito a decir una verdad a medias ── No me habías contando que tenías pareja, me gustaba pensar que nos contábamos todo, que éramos ese tipo de amigos. Al ver que me equivoqué me sentí traicionado, al verlo llorar también me sentí impotente, solo... Solo se me ocurrió gritarte, intentando no pensar que tenía culpa en algo, si es que había hecho algo mal contigo para que no me cuentes eso.── Hizo una pausa tomando su café, Sagitario al oír eso empezó a hablar.

── No es lo que pasó. ── Lo miro decidido a los ojos ── No sé quién era el chico, aun ni recuerdo su nombre, o cómo era, pero parece que tenía un gusto hacía mi, me besó enfrente de él, no se si fue intencional o no. Pero fue el peor día de mi vida, y a partir de ahí, empezaron peores. ── miro para abajo triste ── Ver a Leo dándome la espalda me dolió, ver a Virgo llorando me dolió, y verte a tí... ── Tampoco podía decirlo, no podía admitir que le gustaba ── Fue el punto más culminante para que llorara sin parar, Aries poco después se distancia, así qué, si... ── Sonrió triste ── Necesitaba un amigo, por qué ese día perdí los que tenía, y de ahí no pude retomar una amistad que me diera tanto gusto como esa. ──

Ambos se miraron, tenían más cosas que decir, más que reclamarse, más que confesar, más sentimientos de no solo rencor, de solo vacío o odio. Pero no dijieron nada, el de fuego fue el primero en desviar la mirada con un rubor en sus mejillas, al mirarlo también reconoció su belleza e mordió su tostado. Tauro noto ese rubor, sonrió aún más complacido y tomo la mano de Sagitario que estaba sobre la mesa.

── Si te soy sincero, nunca quise que las cosas acabarán así, y quisiera empezar de nuevo, sé que medio nos tratabamos normal sin nada de conflicto, pero me alegra hablarlo ahora y poder estar comiendo contigo ── Sagitario miro la mano de Tauro y luego levantó su vista hacia él.

Si estaba un poco rojo, bueno, ahora sí estaba sonrojado en su esplendor. Por lo mismo Tauro estaba sonriendo, le trajo paz eso, y sonrió también.

── Yo también... Me alegra haber aceptado venir, y parecerá estúpido por mi parte pero, también me alegra lo que pasó con Escorpio, si no hubiese sido así no estaría hablando contigo ahora ── Tauro mordió su labio aún sonriendo.

── ¡Me alegra demaciado oír eso! Ahora podemos planear las muertes de Escorpio tranquilos ──

── ¿Planear mi muerte? Vaya, no pensé que con solo horas planearias mi muerte con un amante Sagitario ──

Escorpio, estaba parado frente a ellos, agarro una silla y la puso en contra, sentándose e apoyando sus manos en el respaldó.

── ¿E-escorpio? ── Sagitario separó su mano rápidamente de la de Tauro, decepcionandolo un poco.

── Hola bebe... ¿Cómo te encuentras? ── Le sonrió y recostó su cabeza en sus brazos mirando para su lado.── ¿Se siente bien que te pille así? Creí que teníamos algo, me duele. ── Hizo un puchero muy tierno, pero el de fuego solo estaba sorprendido de verlo.

Este pensaba que Escorpio estaba siendo un hipócrita, ya que lo pillo siendo infiel tanto a él como a su hermano. A la vez mirarlo le hacía ponerse nervioso, pero estaba Tauro quien le hizo sentir bien, cuando Escorpio no. Más qué, no necesitaba hablar en este momento de lo que pasó, menos que lo trate así de irónicamente.

── ... ── El de fuego se digno a no decir nada, por qué no tenía la cabeza aclarada para hacerlo, y el de tierra notó eso, noto su incomodidad e nerviosismo, dijo que sería su amigo, esto es lo que hace sus amigos.

── Escorpio, con todo el respeto, piérdete ── Hablo sereno viéndolo.

Este tenía su mirada en Sagitario, aún así miro por el rabillo del ojo a Tauro y sonrió ladinamente.

── ¿Puedo saber por qué tú amante tiene palabra en nuestro asunto? ── haciendo énfasis en esa palabra, seguía mirando al de fuego.

── ... ── no omitió palabra.

── Sea mi asunto o no, pi-ér-de-te ── uso el mismo tono que Escorpio anteriormente, más seriamente lo observó.

── ... ── Escorpio fruncío el seño y decidió mirarlo. Ambos se miraron seriamente ── Puedo saber qué mierda te metes ── Enojado.

── Por Sagitario, es por quién me meto ──

── ¿Te importa tanto ahora? Nunca le diste la importancia que merecía, ambos lo sabemos ¿No? Elegiste tu bando, ahora lárgate ── Tauro rechino los dientes y luego sonrió sarcástico.

── ¿Te importa tanto ahora? Coquetear y revolcarte con cualquiera no es el trato que merece Sagitario, ¿No? Elegiste ser una mierda, ahora lárgate ── Escorpio se levantó de la silla

── No puedes ser más hipócrita, no sabes nada ── Tauro copio su acción y se levantó, ninguno sobrepasó al otro, medían casi lo mismo, aún así los del café los miraron intrigados.

── Vos tampoco sabes algo, ni de mi ni de lo que le haya pasado a Sagitario, no sabes nada de mis amigos, no sabes nada de esta puta escuela y aún así te diste el lujo de criticar todo lo que se te rodea. Pero te haré frenar esto, a las buenas o a las malas Escorpio.── De fondo empezaron a gritar "Pelea" "Pelea", pero algo estaba en desventaja que raramente notaron.

Las platas escasas de la cafetería empezaron a crecer, sobre lo mismo la planta pequeña centrada en la mesa de los principales empezó a rodear la mano de Escorpio. Tauro no lo estaba haciendo intencionalmente, pero es lo que salió atraves de sus emociones, al notarlo bajo rápidamente las plantas antes de que alguien a su alrededor las mirase, por suerte no vieron las platas de atrás, ni tampoco la de su mano por estar sobre la silla.

Escorpio apretó los dientes, noto el poder de Tauro al instante, y admitiendo internamente.

Escorpio nunca pudo manejar sus poderes.

Se perfeccionó en lucha e habilidades por la falta de su poder, en fuerza, en capacidad física absolutamente todo, pero nunca logro comenzar a manejar el agua.

Del mismo enojo Escorpio ya estaba por lanzarse a Tauro, pero lo frenaron de atrás.

── Afuera, ustedes tres, ahora. Acá no se soportara alguna pelea ── Hablo una camarera enojada por el bullicio.

── ... ── Ninguno de los dos dijo algo, solo se miraron, y Sagitario se levantó, tomando su mochila y estiró la manga del Taurino, fue una forma pequeña de hacerle entender que no deseaba esto, y quería irse.

── ... Bien ── El de tierra de manera responsable dejo el dinero de la comida y bebidas en la mesa, Escorpio ya estaba afuera del lugar esperándolos en la entrada, ¿Que si las cosas se quedarían así? Claro que no.

Mientras la gente se dispersaba, la pareja de fuego y tierra salieron del local, dónde se cruzaron.

── Acá si se puede pelear ── Sin vacilar mucho tiro el primer golpe con un gran enojo, que sorprendentemente el de tierra lo esquivo, admitiendolo ya sabía lo que le venía encima una vez fuera de la cafetería.

── ¿Sabes Escorpio? Tengo todas las intenciones de romperte la cara ── El de agua tiro otro golpe y rozo la piel del contrincante, aún así sintió "dolor" muy mínimo. Pero seguía esquivando ── Tengo las inmensas ganas de romper cada hueso de tu cuerpo, pero no te das cuenta de algo ── Volvió a dar un golpe, y está vez si le dió, en toda la mejilla al Taurino.

Este en vez de devolvercelo sonrió. Lo tomo a Escorpio acercándose a su oído, reteniendo sus brazos.

── No te das cuenta que a Sagitario no se le conquista con golpes, no se le conquista solo con una sonrisa bonita. ── Susurrando, lo empujó y Escorpio quedó un poco desconcertado, y volvió a una pose de defensa ── Él, es el chico más raro que podría existir, pero es el chico del que dejaría que me parten la cara con tal de no asustarle como lo haces tú ahora ──

El de agua volvió a sentirse aún más confundido, mientras que Tauro señaló con la mirada a Sagitario. El mismo estaba mirando la escena con una cara sorprendida y de cierto susto, estaba asustado por la manera tan agresiva que estaba siendo Escorpio, y estaba preocupado por la mejilla roja de Tauro, ahí fue donde Escorpio recibió el balde de agua fría de su vida.

Si, es un poco exagerado decirlo así, ¿No? Pero, Sagitario le guste admitirlo o no, es alguien dulce y pacífico, aventurero y de cierta forma romántico. Lo que menos quisiera, es que su pareja sea alguien tan agresivo y descontrolado, que no le importen sus sentimientos, que no le importe golpear a gente por el o más aún, a sus amigos. Y también que no le importe hablar mal de su familia.

Aunque en la mente de Sagitario este fuera de contexto, y Escorpio lo quiera de verdad, ya no habría algo que se pudiera hacer, el de agua lo noto solo con ver su expresión, solo con ver el toque de decepción en sus ojos. Está vez, en serio le dieron dónde más le podría doler.

Notando todo, bajo su posición de defensa y se alejo moderadamente de ellos. Sagitario no lo dudo acercándose a Tauro.

── ¿Estás bien?... No, no te ves bien, ¡Mira eso! ── señaló y tocó suavemente la mejilla del mayor.

── Lo estoy, esto no es nada, tranquilo ── Le sonrió dulcemente, aunque le gustaba el tacto del de fuego, seguía su mirada en el de agua, que desapareció.

── Necesitas hielo, o se te hinchará, se nota que el golpe fue muy fuerte, ¿Por qué no te defendiste? ¡O-osea! S-se que eres lo suficiente capaz... ── se corrigió solo, pensó que tal vez no podía defenderse o que Tauro era débil, de pequeños veía poco golpear a alguien, solo a los que se lo mereciera o que empezara la pelea el contrario, tal como el caso de Géminis quién se metió con virgo, básicamente con esa pregunta no quiso tratarlo de débil por lo mismo intento torpemente corregirse. Tauro se rió.

── Ya sé, lo soy, pero no me sirve pegarle ¿No? Las ganas me sobraban, pero, estás interesado en el después de todo, no puedo arruinarle la cara que te gusta ── Algo que reconocer en los signos de tierra es su mente tan estratégicamente calculadora.

Manipuló deliberadamente la situación, si le pegaba a Escorpio, Sagitario odiaria a Tauro, aunque lo haya visto pelear antes está situación era distinta, y tal vez no lo odie, pero no se iba a arriesgar a probar su suerte. Por otro lado, Escorpio estaba en desventaja con su impulsivo carácter de golpes, ya reconocía que Sagitario es pacifista hasta su límite, entonces, estar con alguien tan explosivo y hipócrita, le haría quitarle todos los puntos ordenados en días que ganó en tan solo unos segundos. Ahora, ¿Cómo debería actuar? Debe actuar como alguien que le importa el bienestar de Sagitario por encima de todos, y esa era una realidad.

── ... ── El de fuego se quedó callado, lo miraba con una expresión un tanto confundida, pero agradable. Bajo su cabeza y sonrió torpemente. ── Gracias, por pensar en cómo me siento. Aunque ahora, estoy mal, saliste herido ── volviendo lo a mirar tocó otra vez suavemente su mejilla.

── Repetiré que no es nada, me dieron golpes peores ── ahora sí podía disfrutar el tacto del de fuego, y no saben la gloria de disfrutarlo. Sagitario mordió su labio y se sonrojo.

── No deberíamos ir a la escuela, menos contigo así... ── empezó a bajar su tono de voz ── ¿Q-quieres venir a mi casa? ¡Pa-para curarte! ── se adelantó tímidamente a corregir algún malentendido.

Tauro no entendía este nerviosismo, paso por su casa miles de veces, no solo por ser su amigo si no por Aries también, recordó qué Sagitario nunca le invito directamente, tal vez le costaba por ser la primera vez en muchos años. Aún así lo veía más que adorable.

── No necesitas excusarte, si querés saltarte las clases y pasarla bien solo dímelo ── sonrió juguetón ── Aparte conozco esa casa como la palma de mi mano, se hasta dónde están las galletas de Aries, ese se piensa que el mejor escondite es atrás de las botellas de licor, piensa que nunca tomarias alcohol entonces ahí las guarda ──

── ¡Con qué ahí estaban! Maldito siempre me dice que no hay en el supermercado ── Se cruzó de brazos molesto.

── ¿Y encima vos le crees? JAJAJA anda vamos ── Sonriendo ambos se dirigieron a la casa del menor.

ೋ❀❀ೋ═══ • 𝒞ℴ𝓃𝓉𝒾𝓃𝓊𝒶𝓇𝒶́ • ═══ೋ❀❀ೋ

»Tengo la mala costumbre de empezar o terminar capitulos a horas de la madrugada, perdón. :(