La tarde se mostraba tan tranquila, se veía demasiado hermosa, de vez en cuando miraba mi helado derretirse lentamente, a decir verdad me incomodaba el silencio entre dos personas, para colmo en el lugar no había mucha gente, luego regresaba mi miraba a la ventana que me reflejaba, para evitar las miradas que sentía sobre mi.
Me había vestido con una remera blanca,chaqueta negra y jeans del mismo color, con unos tenis, mi acompañante una remera con letras y jeans de mezclilla.
Pronto sentí una mano que no ere mía tocando mis pulseras, voltee a ver, ya que me tomó desprevenido.
-¿Qué sucede? -
— nada! Solo veía tus pulseras, me gustan mucho, junto con tu blanca y suave piel... — se notaba demasiado nervioso, su voz temblaba.
- ... Gracias... - Aleje mi mano de él, y luego ví que sacaba algo de su pequeña maleta.
—traje algo para tí... Por seguir conmigo—

— La compre, ya que es tu color favorito- sonrió temeroso, mientras ponía la pulsera en mi mano. —

➷ continuará ➹