Capítulo 4 Salir

Lo único que pudo ver en ese momento, fue los ojos dorados de aquel pelinegro. Apenas podía ver claro, su mirada aun estaba borrosa. 

Fue entonces que recordó algunas cosas que habían pasado, y que lo último que vio antes de caer inconsciente, fue el rostro de  ese tal Iron.

Fue en ese entonces que reaccionó y se levantó bruscamente, sin embargo, un dolor fuerte tanto en su cara como en la cabeza no le permitió tanto hablar.

- No te esfuerces tanto - escuchó aquella voz apagada - ¿Te duele algo? - preguntó Johan -

- La cara, la cabeza - dijo el rubio -

- Es normal, supongo que al dejarte tirado aquí, pudiste haber salido peor -

- Si ... - Evan se sobó el rostro cerca de su boca, pero con solo tocarlo, se estremeció del dolor, soltando un quejido -

Fue en ese momento que sintió que el pelinegro tomaba su mano y la alejaba de su rostro:

- Es mejor para ti que no hagas eso -

- ¿Enserio se ve tan mal? -

- Un poco ... - dijo Johan mirando el rostro del más alto. de verdad que le daba pena verlo en ese estado -

- Yo ... lo siento - entonces lo escuchó, a ese chico rubio pidiendo disculpas enserio - Gracias por salvarme  ....... creo -

- ¿Crees? - 

- Olvídalo -

Otra vez había reinado el silencio entre los dos, uno incómodo y el otro medio arrepentido, pero ese silencio no duró mucho para Evan al ser tomado de la mano y levantándolo del suelo -

- ¿Q-qué, qué haces? - 

- Vamos a mi cuarto - ahora los dos chicos se encontraban agarrados de las manos, uno por parte de haberse acostumbrado a eso, y el otro solo obedeciendo al menor -

Al salir del calabozo, Evan recibió las miradas sospechosas de los guardias, lo que le hizo sentir incómodo. Sin embargo sintió mucho miedo cuando se cruzaron a Iron en el camino.

No pudo haber sentido tanto miedo en ese momento, tan solo sentir y ver la mirada acusadora del mayor lo había aterrado. Ese miedo le había hecho hacer algo de lo que ni el se dio cuenta. Pues había apretado el agarre de manos que tenían el y Johan.

Al notar eso, Johan no le dijo nada, suponía que era normal ya que Iron asustaba a cualquiera, y Evan no era la excepción.

Una vez habían llegado al cuarto del más bajo, este abrió la puerta, y una vez adentro Johan le dijo que se sentara en su cama, mientras el iba por algunas cosas. 

Evan se quedó viendo la habitación de Johan, estaba muy limpia, como si nunca pasara tiempo ahí. Las cosas estaban bien ordenadas, y su cama, oh Dios, su cama es tan suave.

Podría dormir ahí durante todo un día, de no ser porque el pelinegro volvió, traía consigo un paño y un recipiente con agua. Luego se acercó a el y se sentó a su lado.

- Acercate un poco - ordenó el de ojos dorados, Evan solo hizo caso y se acercó, pero debido a el reciente acerameniento, los dos estaban muy juntos, lo que ponía incómodo  al rubio -

Vio como el más bajo agarraba el paño y lo mojaba con el agua, pronto lo uso y comenzó a frotarlo por su cara, limpiando la pequeña mancha de sangre de su rostro. 

Paso un momento y Johan terminó, luego dejo todo en un lado y acostó al rubio en su cama.

- ¿Me dejaras dormir en tu cama? -

- Ni te acostumbres, solo sera hoy - decía Johan levantando las cosas con las que había atendido al mayor - 

No podía saber si esas palabras eran ciertas

- Bueno, gracias - los dos estaban muy incómodos, pues Johan no estaba acostumbrado a que Evan fuera tan distante. 

El más bajo salió de su propio cuarto, pero justo pudo ver a alguien, a Iron. No tenía muchas ganas de hablarle en ese momento, sisn embargo, el mayor lo detuvo agarrandolo del hombro -

- Oye, no me ignores ahora, tengo una noticia - dijo Iron aun con su tono serio -

- ¿Qué quieres? -

- Pasado mañana debemos ir a una reunión de principes, dadas las ordenes del Rey Lucifer - 

- Uh, avísame cuando vayamos  - dijo sin más para después irse -

Iron no le dijo nada, sabía que el más bajo estaría enojado con el. Solo siguió su amino y hacer sus labores.


Johan volvió a ir a su cuarto, tenía que discutir algo con Evan, algo serio.

Justo al entrar notó que el rubio seguía despierto, por lo que solo lo llamó, este lo miró y solo le prestó atención.

- Evan - lo llamó el pelinegro recibiendo la atención del rubio - necesito hablar contigo -

- ¿De qué? -

- Sobre lo que hiciste - Evan tragó en seco al escuchar eso, no estaba listo para contar lo que hizo - ¿Alguna vez .... has cometido un asesinato? - quería creer que el rubio no era un asesino, o al menos algo cercano - Dime -

Evan tenía su mirada fija abajo, sentía mucha presión en ese momento, ¿Qué le iba a decir? no, no podía contar nada, ¿Si se lo contaba Johan lo vería igual? ¿O solo lo ignoraría como si no existiera? 

fue cuando Johan notó que Evan había comenzado a temblar, pues vio que sus manos temblaban tanto que el pelinegro había sentido pena por él.

Por pura empatía al rubio, tomó su mano, para que dejara de tener miedo, además que por alguna razón tomarle la mano al rubio se había convertido en su actividad diaria.

Evan se sorprendió por el reciente toque, pero no dijo nada para no arruinarle el momento al pelinegro.

No sabía en que momento ambos se habían quedado dormidos, pero en verdad que no quería que ese momento se terminara. Era un momento que jamás había sentido.

Fue entonces que Johan había esaparecido, en su lugar estaba detrás de un niño, un niño asustado, era otra pesadilla? 

Viendo sus manos pudo ver que tenía un arma:

- Listo, ya te di el dinero - la voz de una mujer joven se escuchaba desde un telefono que había en el lugar, su voz sonaba quebrada, asustada -

A su lado el niño lloraba, extrañando a su madre, fue entonces que supo cual era ese momento.

Las palabras les salieron solas, pero el escuchar a madre e hijo extrañándose mucho, fue que explotó, tomó el arma, empujó al niño y le disparó, los gritos de la mujer se hicieron presentes. Y todo se volvió negro.









Ahora ya no estaba en ese lugar, pues al despertar estaba en una cama, fue que pudo ver las cosas con más claridad, ya no esta en ese mundo, ahora todo es diferente.

A su lado ya no estaba Johan, no había nadie, pero pudo ver como el pelinegro abría la puerta, teniendo un plato de cereal en sus manos.

- Hola, veo que despiertas recién - decía Johan acercandose a el con el plato en sus manos. -Te traje esto, no sabía que te gustaba a sii que solo hice lo más básico -

- ¡Cereal! - rápidamente el rubio le arrebató el plato a Johan - 

- Creo que si hacerte - dijo el pelinegro en un pequeño shock por la rapidez de Evan -

Mientras que Evan comía su plato de cereal, Johan no se atrevía ni a mirarlo. Pues no se iba a quedar vindolo una hora entera, una vez el rubio había terminado, por fin pudo hablar.

- Emm, pues, gracias por traerme el desayuno jeje -

- Agradécelo que será la única vez que lo haga - 

- Ay que malo :c - 

- Dame tu plato, lo llevaré a la cocina - dijo el pelinegro pidiéndole el plato -

- Toma - se lo dio sin más -

El más bajo salió de su propio cuarto, llevó el traste a la cocina, seguido lo lavó para no hacerse problema, luego volvió con el rubio.

Este aun se encontraba acostado, pues su cama era muy cómoda, disimuladamente y sin que el rubio se diera cuenta, le tocó el hombro, llamándolo.

- Oye Evan - 

- ¡Ahh! - se asustó por la repentina aparición de Johan - Tarado me asustas! -

- Ya, no seas miedoso, te quería platicar de algo -

- ¿Qué cosa? - miró confundido al moreno -

- He estado notando que estás un poco asustado por Iron, creo que podría dejarte salir afuera, conmigo - 

Fue que Johan notó que a Evan se le iluminaron los ojos, parecía muy contento.

- ¡De verdad? ¿¡Lo dices de verdad!? - preguntaba el rubio muy alegre -

- Si, tal vez asi dejes de estar de miedoso - 

- ¡Muchas gracias Johie! - escuchar aquel apodo que le había puesto el rubio lo hizo sentirse extraño, repentinamente Evan lo había abrazado, lo cual lo hizo sentir aun más extraño -

Sin embargo el más bajo lo alejó de un instante.

- si, si, mejor, vamos antes de que me llamen otra vez - 

- Sipi - dijo Evan levantandose de su cama, digo, de la de Johan - 

- Solo no vayas a escapar otra vez  - 

...

Así ambos salieron del castillo, como, pues agarrados de las manos como siempre. Al salir notaban el cielo rojo, había muchas casas en mal estado, la gente ahí parecían solo darles la espalda.

- ¿Hmm? ¿Que tienen? - se preguntaba dudoso el rubio -

- Así son todos, porque crees que esto es un infierno, aquí encuentras solo gente mala -

- ¿Y tú no lo eres? -

- No soy diferente al resto - decía Johan caminando - este mundo esta dividido en tres partes,, el infierno, la tierra y el cielo, mayormente aquí hay demonios pecadores, pero yo no soy uno de ellos -

- Entonces ... ¿Naciste aquí? -

- Exactamente, Iron también, este lugar funciona solo gracia a Lucifer, el rey del inframundo, gobierno todo el lugar, pero yo gobierno solo esta parte, al igual que mi, hay mas princesas, principes, reyes, ect.

- Si, si, mira, te mostrare algo - repentinamente Evan jaló a su acompañante y lo llevo cerca de un callejón que estaba por ahí -

- ¿Por qué me trajiste aquí? - 

- ¿Que no es obvio? Mira - el rubio apuntó a dos botes de basura -

- ¿Basura? -

- ¡No es solo basura, he encontrado muchas cosas útiles aquí! -

- ¿Como qué? - preguntaba demasiado extrañado el más bajo -

- ¡Como esto! - sintió muchas ganas de vomitar cuando Evan puso sus manos en uno de los botes de basura, y sacó un peine en muy mal estado - ¿Crees qu esto es basura? 

- Emm .... obviamente - dijo irritado Johan, sin embargo se había asqueado aun más cuando el rubio empezó a buscar cosas en la basura - ¿¡Quieres dejar de hacer eso!? -

- ¿Qué? ¿Qué tiene? -

- Es asqueroso, además podrías meterte en problemas - 

- ¡Ja! Como digas - el rubio en vez de obedecerlo solo siguió haciendo lo que quería, pero una voz los interrumpió -

- ¿Q-qué, que mierda haces? - la voz de un chico los había sacada de su pequeña discusión - 

- Amm, hola :D - 

- ¡Tarado! ¡Te lo acabo de decir! - rápidamente Johan jaló bruscamente a Evan para que ambos empezaran a correr, pero no sirvió e nada pues varios hombres los redearon -

. . .

- Lamento mucho las molestias majestad, pero ese chico pasará al menos una noche aquí - decía uno de los guardianes, hablaba con un tono de devoción tan falso que no le creía nada -

- He dicho que lo saquen de ahí, yo mismo lo tengo encerrado en el calabozo -

- ¿He? ¿Qué está diciendo? -

- No quiero más preguntas, suéltenlo ahora - los oficiales al escuchar ese tono, temieron lo peor, no le temían al moreno en lo absoluto, le tenían miedo al poder que poseía -

Al verse rodeados, ambos protagonistas fueron llevados a una comisaría cercana, donde no específicamente se hace justicia, mas bien sobornos e injusticias.

Johan al ser el príncipe, no le dieron ningún cargo, pero para mala suerte de Evan, el no contaba con esos privilegios.

Por lo que fue prácticamente inmovilizado y llevado a la fuerza a una celda, sin embargo había intervenido Johan y les calló la boca.

Por lo que soltaron al rubio, quien ya llevaba mucho tiempo quejándose o insultando a los guardias.

- Si el, alguna vez se mete en problemas, esa será mi responsabilidad, no la de ustedes - dijo sin más, llevandose al rubio a la fuerza -

Ninguno hablaba, al más bajo se le notaba su mal humor, pues todo ese problema seguro se lo iban a reclamar a Iron, y seguro que el lo iba a matar cuando llegaran.

- Yo ... podría ha-. - el golpe impacto en su rostro, dándole en el ojo - ¡Ay hijo de tu puta madre! -

- Créeme que tenía más ganas de partirte la cara - no puedes sentirte intimidado por un enano ¿O si? -

A Evan no le quedó de otra que cerrar la bca, a menos e que quiera morir molido a golpes. En todo el transcurso del camino, Johan no había dicho ni una sola palabra, estaba tan enojado como para querer hablar.

Fue que decidió mirar atrás, notando que tal parece, había asustado un poco al chico, pues mostraba una mirada arrepentida y un poco asustada, además el golpe que le había dado no ayudaba, pues ya hacía un moretón en su ojo derecho.

Pero, tampoco es que debería sentir pena por el, debía aprender las cosas, no actuar de forma inmadura.

Al llegar, pudieron notar como un Iron totalmente enojado los esperaba en la puerta del castillo.

- ¿A dónde mierda fueron ustedes dos? - preguntó con una voz hostil -

- Eso no te incumbe ahora - le devolvió la misma mirada amenzante al mayor, lo cual lo dejó un poco sorprendido -

- Desapareces medio día, ¿¡Cómo no quieres que sepa dónde carajos estabas!? ¡Se nos está haciendo tarde! -

- ¿A que te refieres? - Johan no entendía a lo que se refería Iron -

- ¡La maldita reunión se adelantó! ¡Te busqué por todo el lugar y no estabas! - le reclamaba el mayor -

- Maldita sea, vámonos antes de que haya consecuencias - le ordenó el pelinegro, quedando Iron con cara de "no mames", pero solo tenía ordenes de obedecer y ya -

- Vamos - 

- Adelántate, enseguida vengo - Iron solo asintió y se fue a preparar a los caballos -

- ¿A dónde vas? -  preguntó Evan -

- A una reunión, entra al castillo, en caso de que escapes, todos los guardias te atraparan, así que se buen chico y pórtate bien esta vez -

- Ush ¡Bien! ¡Pero si quemo tu cocina no será mi culpa! ¿He? - decía el rubio viendo como el moreno se iba sin escuchar sus palabras -

- Johan escuchaba como es que las palabras del rubio desaparecían como polvo, volviendo a mirar atrás, notando que este era mandado por los guardias a entrar, por órdenes directas de el - Que idiota -

- Ya me dirás a donde fueron - Iron esperaba al pelinegro junto a dos caballos a su lado - 

- Si así dejas de joder, pues el muy idiota se metió en un lío y casi termina en la cárcel -

- Uh, pudiste haberlo dejado ahí, alguien más tendría ese problema - no sabía porque le molestaba que Iron hablara así de Evan, aunque pudiera estar deacuerdo con el mayor, no le agradaba para nada que hablara asi de mal con el rubio -

- ¿Dijiste que íbamos tarde? pues mas vale que subas tu trasero e irnos - ordenó Johan manteniendo su semblante serio -

- ¡Mierda es verdad! ¡Vamos! - así ambos se dirigieron a esa reunión, galopando en caballo -

. . .


Aquellos soldados estaban siempre detrás de el, como si cuidaran al criminal mas peligroso del mundo. Evan ya se había cansado ed que le siguieran.

- ¡Oigan es que no tienen algo mejor que hacer!? - se quejó el rubio, pero ninguno de los guardias le hacía caso, mucho menos le respondían - 

Simplemente se quedaban estáticos, rodó los ojos fastidiado, y solo siguió con lo suyo. Al pasar por la cocina, se dio cuenta de que había alguien más aparte de Evan y los guardias.

- ¿Uh? - pues se trataba de Nil - ¡Evan! - el albino se apresuró a ir a donde el rubio, que se quería hacer a los locos para que no tuviera que decir nada -¡Enserio Evan, Abe y yo nos habíamos preocupado por ti! - dijo preocupao Nil, quien lo miraba paa saber si se encontraba bien - ¿Qué te hicieron? - 

Nil había notado que el rubio tenía dos moretones bastante recientes, uno en su ojo derecho que era el mas reciente, y uno abajo al lado de su labio igualmente en la derecha. 

- Oh eso ... ehh ... me choque al venir aquí jejeje - fingió reír, cosa que no le resulto tan util -

- Emm ¿Está bien? hablando enserio, deberías ponerte un poco de hielo, el moretón en tu ojo se puede inflamar -

- Oki doki, ¿Dónde hay hielo? -

- Aquí, ven vamos -

Ambos amigos fueron a la cocina, para ayudar al rubio a tratar su herida, después de un rato se habían puesto a platicar. La verdad es que Evan si extrañaba a Abe y a Nil, pues eran sus únicos amigos.

Hasta ahora






































Les traje mas rapido este cap que el anterior, me sorprendo, bueno, se que no tiene la misma calidad que el 3 pero hice lo que pude, no siempre escribo obras maestras (a decir verdad nose si sentirme orgulloza)

bueno escribiendo esto me esta doliendo el estomago, los dejo antes de explotar

Ty por leer 

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top