Capítulo 9
Naruto tallaba sus ojos con fastidio, no había podido dormir bien en esas semanas por pensar en si el Uchiha estaba con la zorra de la Mizukage -¿sucede algo Naru-chan? -el rubio negó -no dormí bien, ma, es sólo eso -Kushina negó con fastidio -aún estás pensando en Shikamaru ¿no es así? -Itachi apretó el ceño con coraje, desde hace unos días estaba de muy mal humor, llevaba más de dos meses persiguiendo al rubio y sólo consiguió perder su tiempo -no ma, simplemente pensaba en tonterías, desde que salimos he evitado pensar en él ttebayo -el Uchiha no creyó esa afirmación -ese chico Utama, veo que se hicieron amigos ¿supongo es el motivo por el que no has pensado en él? -la pelirroja sonrió, levantó sus cejas molestando a su hijo, el pequeño se avergonzó -no maaaaa, es sólo un amigo, además tiene novio, un bonito doncel, me mostró sus fotos -Itachi giró su mirada ante esas palabras, abrió sus onix con sorpresa, observó al rubio con cuidado -vaya ttebane, yo creí que coqueteaban, ir por una malteada en mis tiempos era algo así como una cita -sonrió divertida-
Naruto parpadeó con duda, giró sus azules viendo al Uchiha que no volteaba a verlos, no entendía ¿por qué el mayor había estado tan molesto estos días? aquel día en su habitación sintió extrañas sus palabras, una parte suya se sentía decepcionada al no saber qué sucedía, otra parte extrañaba que lo acosara y se impusiera como siempre, ahora entendía, abrió sus gemas al recordar el momento en el que Itachi comenzó a actuar extraño, repitió las palabras de su madre en su cabeza sobre malteadas y citas, el Uchiha había creído que salía en citas con Utama.
Naruto mordió su mejilla, se sentía mal ¿pero por qué? el bastardo se había estado revolcando con la Mizukage, apretó el ceño -Kushina vio a su guardia -deberías dejar de meter en genjutsus a Mei-san o se dará cuenta, simplemente dile que no te interesa -Itachi vio a su kage, mordió su mejilla con vergüenza, asintió -lo lamento Kushina-sama, no sé como rechazarla sin que se ofenda -la Hokage negó con fastidio -supongo, es mejor así, hoy nos vamos -Itachi asintió. Naruto quería estrellarse contra la pared, todos estos días creyendo que el Uchiha era un maldito mujeriego que se revolcaba con la Mizukage cuando no había hecho nada, ambos observaron a la pelirroja Hokage acercarse a la Mizukage.
Itachi giró su mirada al rubio con cuidado, mordió su mejilla sin saber qué demonios decir. Naruto sintió su mirada nuevamente, tenía días que no tenía esa sensación y por extraño que fuera, extrañaba sentirla, giró sus enormes gemas azules, lo vio con cuidado, ambos de inmediato giraron su rostro hacia las kages con un ligero sonrojo.
Mei se acercó al Uchiha -fue un placer tenerte aquí, eres totalmente bienvenido, si planeas dejar tu clan algún día, sabes donde encontrarme -Itachi asintió levemente -le agradezco Mei-sama -la Mizukage sonrió con morbo, vio salir a los de Konoha. Naruto giró su mirada al Uchiha con molestia, susurro -veo que disfrutó tus genjutsus -Itachi levantó una ceja con sorpresa, sonó a reproche el comentario -supongo, no tengo idea, el genjutsu que usé simplemente sirve para mostrarle lo que ella quería ver, no puedo entrar a su mente de esa forma -Naruto vio sus onix con cuidado a través de la máscara -ya veo -sonrió ligero, el Uchiha vio ese leve gesto, lo dejó algo confundido.
…..
Itachi se había dado cuenta que a momentos la mirada del rubio giraba hacia él durante el viaje -falta un día de camino, descansemos en esta ciudad -el Uchiha asintió, mandó a uno de los miembros de su equipo para hacer el registro de habitaciones, avanzaron con velocidad sin ser vistos hacia el interior, tomaron sus habitaciones, el capitán anbu tomaría la primera guardia, salió al pasillo por una bebida de la máquina. Naruto salió de su habitación con cuidado, estaba tras el Uchiha -¿me podrías dejar pasar? -Itachi lo vio con sorpresa, no lo había sentido -¿por qué ocultas tu chakra? -el rubio mordió sus labios -no lo sé, sólo quiero una bebida -ignoró la mirada del mayor que lo veía con curiosidad, estaba por poner dinero en la máquina cuando Itachi estiró su mano, le entregó su lata -toma esta -Naruto parpadeó, negó lentamente cuando la mano del Uchiha colocó la lata en su mano sin preguntar, el rubio sonrió poquito al ver como se la daba, mordió sus labios con vergüenza, tomó un poco, observó como Itachi sacaba otra lata de la máquina y la abría, no sabía porqué había salido de su habitación, simplemente quería ver un poco al Uchiha, tenía esa extraña necesidad de llamar un poco su atención nuevamente.
El pequeño no sabía cómo iniciar conversación, generalmente era fácil hacer amigos en el exterior de la aldea, estando dentro de Konoha era el conflicto, se sentía un poco reprimido por los prejuicios que la aldea había tenido con él en su infancia -gracias -tomó un poco de la bebida observando el rostro serio del azabache. El mayor giró su mirada levantando una ceja con duda, se veía amable y tímido el pequeño, lo observó con cuidado, lo vio abrir y cerrar su boca dos o tres veces tratando de decir algo -¿te encuentras bien?-
Naruto levantó su rostro con un leve sonrojo, apretó el ceño, levantó un puchero, para Itachi se veía completamente hermoso -mmmmm tal vez, bueno -rascó su nuca con ansiedad suavemente -perdón -el Uchiha levantó sus cejas con sorpresa por un momento -¿por qué te disculpas? -Naruto bajó su mano, sobó suavemente su brazo, bajó su rostro y lo giró un poco para ocultar su vergüenza -he sido un poco cretino contigo -Itachi sonrió ligero, levantó su mano libre, la colocó en la pared orillando un poco al rubio entre su cuerpo y el muro. Naruto levantó el rostro con sorpresa, apretó el ceño, levantó un puchero ofendido.
-Entonces ¿ahora serás bueno conmigo? -Naruto giró su mirada hacia el otro lado -yo no dije eso bastardo, sólo me disculpé por tratarte mal cuando me advertiste sobre Shikamaru y no quise escuchar -Itachi sonrió ligero, lo observó con cuidado, levantó su mano, con su dedo delineó sus marquitas del lado izquierdo suavemente, el rubio se dejaba hacer, no detenía la acción -entonces es así, sólo por eso te disculpas, bien, acepto tu disculpa -Naruto sonrió ligero -con una condición-
El Uzumaki apretó el ceño, debió recordar que era un cretino el mayor -acepta mi invitación por la malteada, desde ahora aclaro, no es una salida de amigos, te estoy pidiendo una cita nuevamente -el Uzumaki levantó un puchero -¿no puedo sólo disculparme y tú aceptar mi disculpa? ¿por qué quieres salir conmigo? hay donceles que en verdad son hermosos a diferencia mía-
Itachi movió su dedo suavemente, pico su mejilla rellenita un poco -tal vez los hay, pero no me interesan ¿cómo decirlo? son fáciles y sosos, en cambio tú, eres divertido e interesante, me has hecho reír y cabrear como ninguna otra persona -Naruto parpadeó con sorpresa y duda, le gustaba la caricia que recibía.
Itachi mordió sus labios un poco, bajó su dedo hacia los labios del pequeño y los acarició suavemente -¿entonces, aceptarás la cita? sólo así me siento capaz de perdonarte -sonrió con arrogancia, se acercó invadiendo el espacio personal del pequeño, lo veía hacia abajo, le sacaba una cabeza completa, desde su ángulo podía ver el sonrojo en el pequeño, se acercó a su rostro lentamente -¿entonces? -el Uzumaki despertó del shock por la invasión de espacio personal, se escapó bajo su brazo, levantó un puchero -abusivo ttebayo, ya me disculpé bastardo -corrió hacia su habitación escapando del mayor. Itachi sonrió ligero con diversión, se había dado cuenta que no le era tan indiferente al pequeño, estaba feliz.
Kushina casi se desmaya al descubrir quién era el acosador de su hijo, sonrió con diversión cerrando la puerta de su habitación, este chico le agradaba, mira que aparentar seriedad cuando era todo un abusivo, negó mientras sonreía. Había escuchado la voz de su hijo y la del Uchiha, se le había hecho extraño, simplemente se asomó a ver qué sucedía, tal vez quería salir su hijo y el capitán no lo dejaba, cuando los vio tan serios la duda entró, más al ver a Itachi levantar su máscara y ofrecer la bebida, quitar su máscara era un signo de confianza. Recordó a Minato a esa edad, era todo seriedad y cuando estaban solos, era un maldito acosador, bien, estaba aceptado, sólo esperaba que el cretino de Fugaku y Mikoto, no fueran un problema con aquello de ser clanes puros. Mikoto fue su amiga, tal vez ella no era el problema.
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