Taehyung empezó a sentir algo de hambre por dentro, su estómago hacia pequeños soniditos en su interior, advirtiéndole que era hora de comer una cosa en específico. Así que en compañía de Jungkook, ambos se dirigieron a la morgue con algo de prisa.

Pudieron llegar bastante rápido gracias a que el azabache tenía su auto estacionado abajo en su garaje, por lo que no les costó demasíado llegar a su destino.

Entraron justamente por debajo del departamento de policía, donde se encontraba la segunda entrada a la morgue. Aunque casi siempre se utiliza para cuando las funerarias necesitan transportar un cuerpo o en algunos otros casos, como cuando la policía necesita dejar un cadáver, también utilizan esta entrada que lleva hacia afuera directamente para no tener que dar una gran vuelta dentro de la estación de policía hasta llegar a la principal.

Al parecer la puerta estaba semi abierta, por lo que el platinado llego a la conclusión de que Jimin de seguro estaba trabajando. De haber sido algo sobre papeleo de seguro hubiera llamado al platinado para encargarse de ello, pero de seguro que no era por eso. Taehyung se sintió un poco dudoso, pero ahora mismo no tenía tiempo para pensar en los trabajos que estará haciendo Jimin en su horario de descanso, su estómago era el que necesitaba urgente atención.

—¿Entonces todo este tiempo me has ayudado en los casos, gracias a los cerebros que consumes?—era la milésima pregunta que le decía el azabache en todo el día.

A decir verdad Jungkook se había pasado todo el camino haciendole preguntas a Taehyung sobre su mitad zombie, ahora que iban a formar algo más que una simple relación de compañeros de trabajo, el azabache quería saber de todo, para estar al pendiente y así poder ayudar a su lindo novio.

El azabache jamás pensé que algún día le llegaría a gustar un hombre, bueno, un hombre mitad zombie, aunque...que más da que fuese alguien diferente, desde que conoció a Taehyung lo que más le gustó fue su personalidad bromista y simpática, además de que portaba un corazón bondadoso y extremadamente valiente, sentía sed por conseguir justicia en este mundo que solo vive rodeado de males.

—Sip, sinceramente me da un poco de asco pero tengo que hacerlo de todas maneras—le contesta Taehyung mientras los dos cruzan la puerta hasta entrar en la morgue.

—Porque puede ser posible que te conviertas en un infestado—antes de que el platinado contestará, el azabache lo quiso completar por él.

—Exacto...—Taehyung se rascó la nuca un poco, sintiendo algo de vergüenza al notar como Jungkook le miraba con esos ojos brillosos.

Después de tanto tiempo que Taehyung paso ocultando su secreto de él, se sentía un algo arrepentido por no haberselo dicho antes, pero al menos pudo comprender que en este mundo que vivimos, existen personas a las cuales les pueden transmitir tu confianza y Taehyung sabía muy en lo profundo de su ser, que Jungkook jamás lo traicionaria, tal vez fue por esa razón que decidió contárselo de una buena vez por todas, para mantenerlo a su lado el tiempo que fuese necesario.

—¿Que crees que estás haciendo...?—le pregunta Taehyung observando con atención como el azabache tomaba su muñeca y apretaba sus dedos contra la piel de este.

—Buscando tu pulso...—le responde Jungkook mientras seguia tocando con la yema de sus dedos la piel del platinado.

—Yo no tengo pulso Jungkook, soy un muerto viviente—Taehyung suelta una risita en el aire al ver lo ridículo que estaba siendo Jungkook.

—¿Como que no?. Ya verás que si—le reta poniéndose frente de este y con mucha rapidez le deja un casto beso en los labios de una manera divertida.

Taehyung se quedo estático en su lugar mirando a la nada, deseando que ese beso hubiese sido aún más largo y más perfecto; como a veces salen en las películas o series, pero en estos momentos los dos debían de ir con calma para evitar cualquier tipo de contagio.

—¿A que ha venido eso...?—Taehyung muestra una leve sonrisa tomando a Jungkook de la barbilla.

—Si no puedo acelerarte el corazón o tomarte el pulso, que es lo que sientes cuando estoy contigo...—dice Jungkook con una voz suave mirando fijamente aquellos ojos tan hermosos que tenía que el platinado.

—Pues...—Taehyung se queda unos segundos pensando—A veces siento esos lindos nervios cuando estoy a punto de verte y a veces, puedo sentir esos leves cosquilleos dentro de mi cuerpo cada vez que te tengo cerca.

Jungkook se quedó sin habla, solo mostró una tierna sonrisa de satisfacción hasta que soltó un suspiro de adolescente enamorado, tampoco pudo evitar no sonrojarse, dios mío, ese Kim Taehyung lo iba a poner tan blando como un flan.

—Tae...—le llama Jungkook en voz baja aferrando sus brazos alrededor de su cuello.

Se quedaron mirando unos minutos, aunque para ellos les parecía una eternidad no querían despegarse, este momento que estaban pasando es demasiado especial, aunque el escenario sea una morgue, los dos parecían estar muy entretenidos en su propio mundo.

—¡¡¡AHHHHHH!!! ¡¡¡Apúrate Yoongi!!! ¡¡¡Atrápala ya!!!—se escucharon los gritos de un pelinaranja demasíado histérico que provenían del laboratorio.

Taehyung soltó un suspiro pesado, rodeando los ojos mientras se dirigía junto con Jungkook hacia el laboratorio donde Jimin seguía aún haciendo escándalo.

—¡¿Jimin que es lo que está pasando?!—le pregunta Jungkook gritando también sacando la pistola de su bolsillo por si acaso.

—¿Que hacéis ahí parados?—les pregunta Taehyung algo confundido al ver a los mencionados encima de una mesa de aluminio.

—¡Taehyung! ¡Jungkook!—exclama el pelinaranja muy contento después de verlos, pero aún permanecía sujetando aquel mata moscas en sus manos.

Yoongi por nada del mundo desvío su mirada, aún necesitaba concentrarse en buscar a ese pequeño roedor.

—Verán es que jejeje, se nos escapó una rata mientras le hacía una prueba para ver la condición de su estado—les explica Jimin sonando un poco nervioso.

—¡Ahí está! ¡Cuidado!—exclama Yoongi advirtiéndoles que se dirigía justamente hacia ellos.

La rata caminaba a una gran velocidad con esas simples patitas que tenía, solo miraba un punto fijo y ese era solamente Jungkook, que se encontraba justamente en la entrada del laboratorio.

—Wow wow, shu shu shu, ¡atrás!—Jungkook trataba de espantarla con el arma, pero no podía darse el lujo de disparar, además de que su punto era asustarle, no llegar a matarla.

Por suerte Taehyung fue más ágil y atrapó a la rata con sus dos manos para frenarla.

El pelo del roedor era tan blanco como la cal y sus ojos eran tan rojos que parecían haber sido bañados de sangre por completo, hasta sus dientes parecían un poco más grandes de lo normal.

—Hey pequeñito, está todo bien—le dice Taehyung con una voz mimosa mientras manosea a la rata con sus dedosm

—Ehm Ajum—Jimin carraspea su garganta un poco, mirando la escena tan amistosa que tenía su amigo con ese animalito—Taehyung, esa rata que llevas en tus manos y la andas acariciando como si fuera un cachorro, podría destruir la humanidad que conocemos ahora—le decía con algo de tacto y con un poco de aprecio, pero tenía que ser sincero.

Jungkook trataba de aguantar la risa al ver como su ahora novio jugueteaba con ese rata blanca como si fuera un simple bebé.

—La verdad es que esta idea de crear 7 ratas zombies sigue sin gustarme, casi se escapa está—decia el pelimenta tocando el piso por fin con sus dos pies mientras se frotaba la cien con sus dedos.

—¡Shh! ¡Yoongi!—Jimin le hace callar golpeándolo con el mata moscas, aunque la había cogido para poder capturar a la rata, al parecer encontró una función mejor para darle aún más uso.

—Auch Jimin—Yoongi se queja del dolor sobándose el lugar donde había sido golpeado.

El pelinaranja le hace una señal con la mirada mientras regresa al suelo para que se diera cuenta de que no debía haber soltado aquel comentario, pero es que no pudo controlarse y ahora Jungkook los miraba un poco extraño.

—A lo que Yoongi quiso referirse es que...—a Jimin no se le ocurría ninguna excusa barata para decir, y si de seguro dice algo, meterá mucho más la pata.

—Ya lo sabe todo—le corto el platinado antes de que su mejor amigo soltará cualquier estupidez.

Al principio Jimin suelta una risitas encogiéndose de hombros, porque pensaba que lo que había dicho el platinado era una broma. Luego cambio de parecer cuando miro directamente al rostro del platinado y pudo notar que lo que había dicho, no tenía gracia e iba muy en serio.

Yoongi y Jimin abrieron los ojos como dos platos redondos, ambos se quedaron impactados porque ninguno de los dos podía haber llegado a creer, que Taehyung le haya confesado a Jungkook su secreto y muchas más cosas relacionadas con su asunto zombi.

—Bueno, ¡bienvenido al club!—exclama Jimin con mucha emoción invitándolo a unirse al equipo "Zombie".

—Gracias Jimin—le agradece Jungkook mostrándole una linda sonrisa para luego acercarse a Taehyung y agarrarle por el hombro—No es lo único nuevo que ha pasado—les comunica a los chicos observando directamente a los ojos del platinado para transmitir una buena vibra en el ambiente.

Jimin no estaba tan sorprendido porque ya se lo esperaba desde hace mucho tiempo atrás, el conocía muy bien los sentimientos de Taehyung, por algo era su mejor amigo. Yoongi suspiro en el lugar observando el nuevo paisaje rosado que pintaban Taehyung y Jungkook juntos, supuso que esto iba a pasar tarde o temprano y es bueno que lo haya hecho por fin.

Cuando tienes a alguien especial enfrente de tus narices, nunca lo dejes ir y jamás permitas que se te escape. Cuando se trata de algo valioso, siempre vale la pena esforzarse para obtenerlo.

—Hacéis una bonita pareja—les felicita Yoongi a ambos, mientras se guarda sus manos en los bolsillos de su pantalón.

—Gracias Hyung—Jungkook agacha un poco la cabeza, sintiendo algo de vergüenza por lo que paso unas horas atrás.

Yoongi le hizo un movimiento con la cabeza a Jungkook para que salieran un momento del laboratorio y así poder hablar con más calma.

Mientras tanto, Taehyung se quedo jugando aún con la rata blanca.

Por suerte, el pelinaranja aprovecho que la rata estaba distraída para hacerle algunas revisiones.

—¿Como es que no te ataca?—le pregunta Jimin al platinado sintiendo algo de curiosidad por saber.

—Tal vez sea porque compartimos un lado zombie y nos podemos entender—le responde Taehyung con bastante seguridad.

Jimin rápidamente anotó ese dato en una lista que estaba haciendo, síempre apunta todo lo nuevo que aprende sobre las habilidades de los zombies y está información necesitaba estar urgentemente escrito.

—¿Por qué estás convirtiendo ratas normales en ratas zombie?—pregunta Taehyung mirando confundido a su mejor amigo, ya que le debía una explicación.

—Verás, he creado una buena forma de experimentación para poder buscar posiblemente una cura que resuelva todo el dilema zombi—le dice Jimin mostrándole varios papales que estaban unos encimas de otros.

Taehyung escucho a la perfección todas las ideas que Jimin tenía, hasta llegaron a varios conclusiones precipitadas, pero a veces hay que tomar riesgos cuando algo realmente te importa por recuperar y en estos momentos el platinado quería volver a ser un humano.

Aunque le había confesado a Jungkook que era un zombie y que estaba perdidamente enamorado de él, ahora lo que más le daba miedo en estos instantes...es que el azabache tal vez se canse de él muy pronto y lo abandoné, por no poder darle lo que realmente a una persona se le debe dar como pareja.

Taehyung no estaba vivo, no podrá nunca darle calor, no podrá nunca darle un beso fugaz en los labios, porque tienen que evitar mucho ese afecto de contacto. Para Taehyung ser un zombie le garantizaba varias cosas, pero así mismo solo le interesaba Jungkook y por esa misma razón, ya no se siente tan especial como antes, solo quiere volver a ser quien era.

Si tuviera que volver a comenzar mi vida, intentaría encontrarte mucho antes...

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Holis mis bellos tesitos🍵, he estado de baja inspiración pero seguiré actualizando lo mejor que pueda estos días.

Espero que les haya gustado el cap💚

Les mando muchos besitos y abrazos de lejitos jsjsjsjs