El gas a cada minuto que pasaba se volvía realmente pesado de soportar, el aire se hacía más escaso por lo cual todos tenían mucha dificultad a la hora de respirar porque sus pulmones de contaminaban lentamente.

Jun había tomado asiento en una silla rosada que habia en la mesa donde se había sentado anteriormente al entrar en la cafetería porque le empezaron a dar calambres en las piernas, aún tenía el cuchillo en el cuello de la chica universitaria llamada Sana, la cual se mantenía agachada en el piso recostando sus rodillas en el frío suelo del lugar.

Sus mejillas estaban empañadas por culpa de tantas lágrimas que brotaban de sus ojos, la pobre chica no paraba de llorar.

Bueno, tener un filoso cuchillo pegado a tu garganta, el cual la está sosteniendo un desconocido que al parecer está muy loco, no es muy lindo vivirlo en la vida real. Lo primero que se te viene a la mente en esos instantes es que vas a morir en sus propias manos. Digamos que está sensación es la peor de todas las que existen en el mundo, porque sabes claramente como morirás.

Momo y Eunji estaban aún paralizadas en la mesa donde antes estaban cenando sin ningún problema, pero ahora todo se había jodido porque la vida de su amiga Sana peligraba, bueno, al igual que la de todos adentro por culpa del gas.

Taehyung y Jungkook aún seguían con su par de manos esposadas, las cuales se mantuvieron todo el tiempo detrás de sus espaldas para que el agresor no se diese cuenta que trabajan para la policía. Justo al lado de ellos estaba Yoongi que abrazaba a Jimin por la cintura como una forma de otorgarle protección y también para calmarlo ya que no paraba de temblar en su lugar.

—Dame la llave—le murmuro Taehyung al azabache en la oreja mientras el chico del cuchillo giraba la vista para mirar hacia afuera todo lo que estaba ocurriendo.

Jungkook con la mano que tenía libre empezó a tocar los bolsillos de sus pantalones para poder encontrar la llave de las esposas que tenían puestas, pero para desgracia de los dos la llave había desaparecido por completo. El azabache quiso golpearse en ese momento con la blanca pared por ser tan descuidado, de seguro no recordaba en donde la había puesto, o tal vez se le habrá caído en alguna parte?

—No la encuentro...—murmuro Jungkook también para que solo el platinado lo escuchase.

—Estás loco! Y ahora que!—dijo en baja voz pero con un tono alterado.

Jun presencio como esos dos individuos hablaban entre si por lo cual decidió intervenir.

—Eh eh eh!!! Que hablan ustedes dos!—grito con fuerza sobresaltado a todos de repente—Pongan sus manos encima de su cabeza!—se paro de su asiento dando un fuerte zapatazo en el suelo cogiendo del brazo a Sana para que también se levantará.

Jungkook intento subir las manos pero Taehyung entrelazó la que tenía esposada con la de él para frenarlo.

—No van a poner sus manos encima de su cabeza?!—Jun los señaló a los dos con el dedo—Mis palabras les divierte?—rio amargamente sosteniendo el cuchillo con su otra mano para pegarlo de nuevo al cuello de Sana—No van a apresurarse y levantarlas?!!—grito nuevamente volviendo a amenazar a la chica para que le hicieran caso a su pedido.

—Nosotros nos amamos!—grito el detective aferrándose al cuerpo del platinado.

—¿Qué?—Taehyung se quedó estupefacto sintiéndose algo confundido por las palabras que había soltando el azabache, aunque después logro captar el mensaje.

Yoongi y Jimin observaron detenidamente a sus compañeros, quienes se preguntaban que era lo que tenían en mente.

—Ay...—Jungkook se tocó el pecho con su mano libre para simular que se sentía mal.

—¿De nuevo amor?—Taehyung posiciono su mano libre en la mejilla del azabache para darle algunas caricias mientras la que se mantenía esposada la escondía mejor con la suya atrás de sus espaldas—El corazón de mi novio es muy débil—le dijo al hombre que aún sostenía el cuchillo mientras observaba la escena que hacían delante de todos los presentes—¿Podría por favor permitirme sostener su mano?—le pregunto lo más preocupante posible ya que solo estaban actuando para poder ocultar sus manos esposadas.

Jun de un momento a otro se relajo y dejó hacer lo que quisiesen porque pensó que solo eran un par de chicos enamorados que querían estar juntos para protegerse, al menos ellos se tenían a si mismos...no como él, que había vivido toda su vida bajo el rechazo y la soledad que le daba constantemente la sociedad desde que su madre falleció meses atrás.

—Todo lo que tengo, es una sala de estudio y una deuda inmensa—soltó Jun como si nada para desahogarse mientras se secaba su sudorosa frente con el brazo.

—Que mezquino!—dijo molesta Momo enfrentándose a Jun—Lo que necesita es dinero?—pregunto con fastidio.

Jimin salió de al lado de Yoongi para taparle la boca a la chica, no podía dejar que hablase más de la cuenta.

—Está es una situación en la que no puedes irritar al criminal—le advirtió Jimin en un susurro a la rubia.

Momo estaba demasiado irritada con la situación, solo quería salir de esto de una buena vez.

Aparto la mano del pelinaranja con fastidio para volver a hablar.

—Yo me encargaré de esto—le dijo al hombre que mantenía agarrada a su amiga del colegio—Cuanto le basta?—le preguntó quitándose algunos mechones de pelo que le caían en su rostro—Le diré a mi padre que lo traiga inmediatamente—le propuso su idea para que dejara a todos en paz—¿100 millones, 200 millones? Cuánto? 1 billón?!—comenzo por proponerle varias opciones.

—Oye, en apenas 30 minutos, 1 billón?—es que acaso le estaban jugando una broma de mal gusto a Jun. Por supuesto que no lo iba a permitir—La vida es muy sencilla de recorrer.

—¿Realmente lo que necesita es dinero?—tartamudeo Sana con cuidado de no hacerlo enojar—Si es dinero lo que quiere, mi padre también puede darle—solloso levemente al sentir como el brazo que Jun mantenía alrededor de su cuello la estaba empezando a ahogar.

—¿Me toman por un vagabundo!? Aish!!!!—grito Jun furioso dándole un gran empujón a Sana para tumbarla al suelo de un golpe—Mueran y vean si aún pueden mover esos labios—les amenazo sacando de uno de los bolsillos de su chaqueta un encendedor que traía consigo.

Si por alguna casualidad llegará a prenderlo en este ambiente que se está llenando poco a poco de gas, explotará todo el lugar en mil pedazos, lo cual significa que nadie se podrá salvar...sino que los mandará a todos a volar dentro de la cafetería.

—Está vida terminará de cualquier forma, así que simplemente muramos todos juntos!—Jun comenzo a reírse ya que le parecía demasiado divertido jugar con la vida de los demás, como hicieron con la suya todas las personas que se le cruzaron en su camino, pero eso ahora estaba apunto de terminar para siempre.

La gran tos de la chica llamada Eunji alertó a los demás porque su rostro se empezó a poner pálido de pronto, sus piernas se debilitaron por completo ocasionando que cayera al suelo mientras se tapaba la boca para calmar su respiración.

—Creo que es asma—confirmo el pelinaranja mirando con detenimiento el estado de la chica que tosia con fuerza—El asma es peligroso ya se ha expuesto a una gran cantidad de gas—dijo con preocupación acercándose con cuidado al cuerpo Eunji para revisarla.

Jun estuvo a casi unos minutos de prender el encendedor, pero fue desconcentrado por una potente voz que resonó de un megáfono.

📢 ¿Puedes escucharme Jun?

Jungkook pudo reconocer esa voz tan gruesa en unos pocos segundos, lo cual pudo alegrarle el entusiasmo y darle buenas vibraciones a su querido pulso que estaba aún agitado por culpa de todo esto que estaba pasando.

—Teniente RM...—susurro Jungkook para si mismo—Es el teniente RM—le comunico a los chicos en voz baja para avisarles de que estaban a punto de ser salvados por su superior.

📢 Estás acciones son demasiado imprudentes.

Namjoon desde afuera de la cafetería habia pensado en un buen plan para poder salvarlos a todos y arrestar a Jun.

Sin importar cómo, intentaría conseguir que respondiera el teléfono que hay adentro del local para poder establecer una conversación con el culpable. Trataría lo mejor posible de no provocarlo y tomar con mucha tranquilidad todo el proceso ya que lo más importante en esta cuestión donde hay rehenes, es en donde hay que estrechar cierta simpatía con el agresor. Tendría que hacerle pasar a Jun que siente simpatía con el y con sus problemas a través de un diálogo que pueda persuadirlo para que detenga todo está locura que esta provocando.

📢 Se bien cuán difícil debe haber sido hoy. Dijeron que si solo aguantabas un año, te harían un empleado regular, pero te despidieron está mañana. Debe haber sido una conmoción, eh?

Jun se quedó en total silencio para poder escuchar las palabras de ese tal policía que estaba afuera junto con muchas más patrullas.

📢 Aún así, no creo que está sea la manera correcta. En primera, la seguridad de los rehenes, en segundo, también es la seguridad hacia ti mismo. Por ahora, vamos a resolver esto con una conversación

El teléfono que estaba justamente pegado a la puerta de la cocina comenzó a sonar.

📢 Responda el teléfono

—Conversación?—rio Jun con amargura mientras mordía su labios con furia—No me hagas reír—dijo revirando los ojos hacia otra parte—Hubo siquiera un tiempo en el que el mundo escuchó mis palabras.

Nuevamente el teléfono de la cafetería volvió a sonar lo cual ocasionó que Jun se molestará aún más de lo que estaba. Con su pierna derecha le proporciono una fuerte patada a una silla para que está cayese al suelo.

—Déjenos vivir...por favor—suplico la rubia frotando sus manos en el aire para rezar.

—Entonces, simplemente dígale sus condiciones—hablo por fin el pelimenta, quien decidió analizar la escena desde un principio para revelar despues sus fichas—No necesita tener una conversación con la policía.

—Cierra la boca, quien te ha dicho que hables!—grito Jun para hacerlo callar y que lo dejara en paz.

—Como ha dicho, ha habido algún momento en el que el mundo prestará oídos a sus palabras—Yoongi pronuncio las mismas palabras que el hombre había mencionado anteriormente—Esta es una oportunidad para que todos escuchen lo que deseas.

📢 Si sigue así, será una desventaja para usted. Si hay algo que quiera, nosotros le escucharemos. Así que Jun, conteste el teléfono.

De nuevo la voz de Namjoon se oyó por el megáfono interrumpiendo el debate mental que estaba teniendo Jun por culpa del pelimenta.

—¿Lo escucho cierto?—Yoongi sonrio de lado sabiendo que iba a dar buen resultado—Todos están esperando allá afuera una palabra suya. A el mundo que nunca escucho sus palabras, con confianza dígales sus demandas.

Jimin se encontraba con la boca abierta con las palabras de Yoongi, y no era por presumir, pero en serio su novio tenía el gran poder del convencimiento. Taehyung estaba muy maravillado con Yoongi, jamás pensó que lograría decir algo tan increíble para poder ayudarles. Jungkook por el contrario ya se lo estaba esperando, conoce al pelimenta como la palma de su mano, lo cual ya sabía que su mejor amigo estaba pensando en crear un punto que pudiera unir para encontrar una pista que resolviera el caso.

Jun al rascarse la nuca con su mano derecha, se frotó los cabellos de su cabeza mientras llegaba hasta donde estaba el teléfono de la cafetería para poder atender finalmente la llamada, claro que por supuesto, no perdería de vista a las personas que estaba reteniendo consigo.

—Hola? Jun? Hable por favor Jun.

—Les daré tres horas para que traigan al director de la Industria de Comesticos, hagan que se disculpe conmigo por haberme despedido.

—Entiendo, entiendo lo que dices, pero como están lo rehenes?, cual es la condición de los rehenes?

—Deja de hacer tantas preguntas o haré que explote todo el local!

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Que les pareció el cap, demasiada intensidad xd! Creo que debo agradecerle a la serie CSI porque en serio me está dando mucho inspiración en mi fan fic :-D

Gracias por darme ánimos bellos/as taekookers! Os amo! Siempre leo sus lindos comentarios y créanme que me hace muy feliz cada vez que me pongo a leerlos T-T porque son tan buenos lectores! *no woman don't Cry*

Lo prometido es deuda señores así que redoble de tambores ^u^

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