La noche invadía la Profundidad de las Nubes. Un silencio sepulcral se apoderaba cada noche. Se podía oír solo la corriente del pequeño riachuelo que recorría dicho lugar. Las linternas de aceite apagadas, una que otra estaba prendida para poder estar al tanto de los malos espíritus que comúnmente acechaban.

Una habitación oscura solo iluminada por los rayos de luz de luna, daba vida a pulcro salón. Los libros ordenados de una manera exagerada, cada título y color de cada material estaban ubicados de una manera cuidadosa como si nadie los pudiera mover. Un hilo de humo destellaba un aroma a sándalo. Un olor peculiar muy conocido por quienes habitaban en descrito cuarto.

No podía estar sucediendo de nuevo.

La pesadilla hizo que saltara de la cama hasta quedar sentado. Colocó sus manos tallándose los ojos como queriendo que todo lo que había sucedido dormido se esfumara. Con la espalda totalmente erguida trató de estirarse para poder despejar su mente de tal sueño. Se soltó su larga cortina de cabello negro que momentos antes estaba sujeta en una coleta. Cayéndole así por sus blanquecinos hombros.

La sábana blanca de seda, que se podía confundir entre un gris y un celeste pálido estaba revuelta en su diminuto cuerpo desnudo. Sintió como una corriente de aire frío cruzó por su cuello haciendo que se estremezca. Tal vez aunque la habitación era de madera no era muy cálida.

Wei Wu Xian miró a la mesilla de noche, emitiendo un suspiro de alivio y a una sensación extraña. Allí se encontraba su flauta y su mascara que hace tiempo no la usaba. Dormir con dichos elementos al lado quizá era la causa de las pesadillas que sentía cada noche. Tomó la flauta y tocó observando los detalles en ella.

Tras él se dio cuenta de un movimiento al lado de él, y pronto un brazo fuerte de piel blanquecina igual que la de él, le rodeo la cintura. Tomó la sábana y lentamente sintiendo el aura fría de su compañero protectoramente lo cubrió hasta su pecho. Unos labios recorrieron su mejilla hasta el lóbulo de su oreja besándolo con suavidad. De inmediato sintió como unos dedos apartaron los cabellos de sus hombros para tener más acceso a su cuello desnudo.

-No fue nada ... solo una simple pesadilla- habló con voz suave que se estremecía al sentir el contacto de los labios contra la parte posterior de su cuello.

Lan Wangji suspiró. Sabía que su compañero de vida cada noche despertaba y eso no era todo sino que también sentía el miedo que emitía. Miró a su alrededor el dormitorio con una que otras decoraciones que otorgaban calidez, con muebles de bambú fino. No miraba la habitación como si fuera un ambiente por el cual temer.

-Cuando duermes aquí siempre tienes pesadillas- habló con voz grave reincorporándose en la cama- supongo que es el ambiente.

Wei Wu Xian se giró para mirarlo dándole una sonrisa somnolienta que Lan Wangji no pudo dársela. Le pasó la mano por la frente apartando un mechón de cabello oscuro que se le había pegado a la piel y luego sus dedos descendieron hacia su pecho desnudo. Extendió la palma de su mano hasta cubrirle todo el pectoral. Lan Wangji no decía nada estaba callado observando sin perderse ni un detalle de las facciones de Wei Ying tras este acto.

-¿Aún tienes esos pensamientos negativos del pasado?¿Son esos pensamientos que no te dejan en paz?- habló firme bajando la mirada hacia el pequeño que tenía ahora en frente de él que había bajado la mirada juntando ambas manos con nerviosismo.

-No es así- contestó sentándose a horcajadas en las piernas de su amado Lan Zhan, apartando las sábanas- Es que yo ya no estoy tan preocupado del pasado, miro más ahora. Cuando estamos juntos.

Lan Wangji no supo que decir ante esto solo se limito a demostrarlo con actos, pues esto era común en él. Se abalanzó hacia Wei Wu Xian besándolo de una forma desesperada. Sus labios no se separaban sus lenguas se entrelazaban entre si, colocó una mano en el cuello de Wei Ying acercándolo más para si, para profundizar más ese beso tan anhelado que "Todos los días"recibía. La otra mano la pasó por su delgada cintura amasando con impaciencia su piel, esto lo hizo estremecer pues pudo escuchar los suspiros que el otro emitía. Tras esos desesperados besos, sin querer los labios de Lan Wangji se curvaron formando una sonrisa, una sonrisa que no todo el mundo conocía.

-Lan Zhan, mira siente esto- habló de repente Wei Wu Xian apartándose agitado tomando la mano derecha de este colocándolo en su pecho, mientras que él hizo lo contrario- ¿Lo sientes?mi corazón y el tuyo bombean al unisono... eso significa solo una cosa.

-¿Mn?

-Ay Lan Zhan algunas cosas son difíciles para ti entender, significa que esto es un don único, pues no todos tienen la oportunidad de prestar atención a estos detalles mientras lo hacen- rió ante lo ultimo que dijo.

-Wei Ying Ya no quieres tener pesadillas ¿verdad?- habló finalmente Lan Zhan mientras lo sentaba ubicándolo a la altura de su caderas. Wei Wu Xian dejo de reír al ver tal actitud de su amado y tímidamente aguantando la risa afirmo con la cabeza.

-Bien, resulta que si hay más latidos que se escuchen al unisono se alejarán las pesadillas-habló con un semblante serio.

Este comentario hizo que Wei Wu Xian formara un sonrisa provocativa-Oye Lan Zhan nunca habías hablado tanto, estoy sorprendido- contestó de forma que ocultaba las carcajadas por ver esa faceta de él, que le estaba empezando a gustar-¿Qué quieres decir?- habló mientras acomodaba la diadema de Lan Zhan que estaba casi por caerse de su frente.

-Tu ya lo sabes- contestó casi impacientado por tenerlo de una buena vez. Sacó ambas pequeñas manos de su frente mientras que con fuerza nuevamente lo tomó del cuello para darle un beso profundo.

Con energía lo tiró prácticamente a la cama colocándose en la posición dominante. No paró de besarlo, continuó con dicho vaivén que cada vez lo exitaba más. Sus labios estaban ansiados de más a la vez que sus salivas se mezclaban entre sí, saboreándose y sintiéndose una única sensación que te da ganas de no saber qué sucede allá afuera sino solo te hace pensar la persona que está al frente de ti. Lan Zhan tras sentir las respiraciones agitadas de su acompañante con suma delicadeza introdujo su lengua hacia la boca de Wei Ying que con mucho gusto y ganas lo recibió casi abrazándola con la suya, logrando que el beso sea aún más pasional.

En esa misma posición ambos revueltos con las sábanas alrededor de ellos y algunas tiradas por los leves movimientos de las piernas de Wei Ying al tener la sensación de placer, Lan Zhan procedió a darle besos húmedos por todo el rostro empezando por las comisuras de los labios siguiendo por las mejillas que ya estaban de un color carmesí. Al ver esto la sensación de excitación fue mayor por esa razón cambio los besos por lamidas, haciendo que Wei Ying se estremezca y lo apartara con cara de sorprendido.

-¿Qué... Qué haces? ¿Eres tú Lan Zhan? ¿Eres tú oh segundo maestro Lan Wangji?

Lan Zhan no respondió al contrario examinó todo su rostro con esos ojos cansados que decían tener ganas de devorar más. No estaba dispuesto a escucharlo era normal que Wei Ying siempre lo interrumpiera diciendo cualquier tontería. Sin embargo, optó por no quejarse, con una mano extendida acarició los bordes de su enrojecido rostro.

-Eres hermoso, quédate así como estás... Quiero verte todos lo días con esas mejillas rosas y saber que fui yo el causante de ello.

-Lan... Zhan eso es... ¿Te duele la cabeza o algo así? ¿Estás bien?- iba a tocar su frente de nuevo para asegurarse, pero de un movimiento brusco Lan Wangji se lo apartó.

Sacándose la diadema de la frente amarró ambas muñecas de su amado Wei Ying el cual si se lo esperó pues sabía que si hacía eso era porque se venía lo mejor. Wei Wu Xian soltando una pequeña risita observo sus muñecas atadas.

-Eso si no es nuevo- se quejó- yo lo decía por las lamidas que hacías anteriormente eso me pareció muy ...

-¿En algún momento te callas?

-Si cuando me lo pid...- no pudo seguir pues nuevamente unos labios con rudeza lo tomaron y besaron. Muy diferente al beso anterior pues en este se expresaba más lujuria y deseo.

Lan Zhan condujo ambos brazos de Wei Ying arriba de su cabeza,logrando que tenga todo el poder. Tras terminar de dar besos y lamidas por el rostro de su amado prosiguió por la mandíbula hasta acabar en el cuello. En este punto casi hundió su cara por completo en él. Succionaba una y otra vez su blanca piel dejando manchas rojizas que para el día siguiente serían muy notables. Tras estos últimos Wei Ying no dejó de lanzar suspiros el cual medía porque no quería que se oyeran.

Disfrutaba cada toque de él en su cuerpo amasando con impaciencia la suave piel, todo esto sin dejar su trabajo principal que eran los besos. Sin embargo, un gemido fue de casualidad escapó al sentir una mano tocarle ahí abajo. Inmediatamente se cubrió la boca con ambas manos pues sintió que fue demasiado fuerte y tuvo miedo que algún cultivador vigilando en la noche los escuchara.

-Ah, ah no Lan... Zhan creo que... ya me dio sueño, vamos... a dormir ¿si?- intentó hablarle mientras el otro seguía concentrado en su trabajo. Al parecer no le había escuchado-Lan... Lan Zhan ah... por favor alguien nos va a oír...

-Te advierto- habló entre jadeos Lan Wangji limpiándose el sudor de su frente, levantando la mirada que mostraban sus brillantes ojos con unas pupilas dilatadas-No te dejaré dormir hasta que... te llenes de mi.

-¡Lan Zhan!- le cubrió la boca -podemos hacerlo mañana, mañana la mayoría de aquí se irá a una reunión nocturna.

-No retiro lo dicho, recuerdas ¿Todos los días?

-Pero lo hicimos antes de dormir y ahí fue mejor porque cubrí el rostro con una almohada por eso no se podían oír mis... mis... ya sabes- se acomodó en la cama- ahora como tengo las manos atadas no podré evitar ser bullicioso.

-Quiero oírlos esta vez

-¿Y si alguien me escucha? No te molesta romper las reglas, recuerda no hacer bulla por las noches- habló como si lo supiera todo y estuviera guiando a un pequeño niño que no podía contener las ganas de jugar.

-¡Al demonio con las tres mil reglas!

Como momentos antes Lan Zhan con brusquedad y desesperación lo tomó de la cintura acomodándolo en la cama en la posición inicial. Siguió en su vaivén que había sido interrumpido. Ahora besaba su clavícula que dejaba ver esas marcas de los huesos. De igual manera los beso está vez chupando y lamiendo. Escuchando a Wei Wu Xian que sus quejas de continuar al día siguiente acabasen dando pase a excitantes gemidos que anhelaba escuchar.

Descendió de apoco y sin avisar sorprendiéndolo lo tocó nuevamente haciendo que este se agitara un poco mas empezando a masturbarlo con lentas caricias la tierna piel. Asimismo, escuchando sus jadeos suplicantes no paró allá arriba en un abrir y cerrar de ojos su mirada se encontraba fija en dos pequeños puntos de carne sobresalidos. De inmediato, como si tuviera demasiada sed de los puntos que no perdía de vista los devoró por completo, logrando que Wei Ying suelte imparables gemidos.

-Lan... Lan Zhan ¿Cuántas veces..te he dicho que te amo... demasiado?

Al escucharlo sonrió al sentir que la carne suave que sostenía antes se volvía cada vez dura, a la vez que percibió como un liquido caliente descendía en sus manos -Las suficientes para... adorarte aún más.

Wei Ying bajó la mirada hacia Lan Wangji tras decir esto. La noche de ese día según él estaba extraño, nunca lo había escuchado decir tales palabras preciosas- Cada vez que dices ese tipo de cosas me haces sentir extraño.

-¿Por qué? Lo digo enserio-Sin inmutarse de sus propios actos Lan Zhan otra vez mirándolo fijamente le dio una leve sonrisa. Era esa sonrisa que aunque fueran pocos momentos que se las daba trataba de guardárselas en su memoria-¿Puedo continuar?

Wei Ying lanzó una carcajada, cerrando sus ojos haciendo que esta escena se vea adorable- Eso ni se pregunta- carcajada que fue cambiada de inmediato por un fuerte jadeo al sentir unos labios besando y casi comiendo sus pechos. Uno disfrutaba dicha atención mientras que el otro era masajeado. Continuó con más rapidez, al sentir que dos manos atadas torpemente lo apegaban más hacia él.Sin previo aviso, sintió a Wei Ying abrir ligeramente las piernas. Ya no podía más estaba en su limite.

Como si lo estuviera esperando desde hace mucho de manera rápida se colocó entre ellas abriéndolas más. Lan Zhan alzó apenas la cabeza para toparse con la de Wei Ying que lo miraba suplicante y de manera juguetona pues sintió rozar la punta dura del miembro rozándole el muslo, como si estuviera buscando la entrada rosa, donde el borde variaba de color a un rosa más fuerte,exigiendo ser llenado lo aguardaba.

Después de algunos placenteros movimientos más, la entrada al paraiso estaba frente a él abriéndose y cerrándose reclamándole.

-Lan Wangji...-gimió cuando sintió una de las manos grandes sujetándole con firmeza la cintura mientras que la otra tocaba sus pechos y vientre- hazlo de una vez...

-Oh no, mi pequeño conejo blanco- Lan Zhan bajó la cabeza con una sonrisa que expresaba malicia. Le besó el ombligo y luego en la entrepierna- Haz estado hablando demasiado y te demostraré que sucede cuando no obedeces.

-¿A si? Bueno ya no hablaré más yo pensé que te gustaba los comentarios que decía.

-Hablas mucho

De un impulso Wei Ying levantó las caderas al sentir como una lengua lo torturaba en su entrada. Miró hacia arriba sintiendo como las lagrimas nublaban su vista, no era por el dolor si no por el suficiente placer que estaba recibiendo. Lan Wangji empujaba más cada vez más su lengua a la vez que su entrada quedaba completamente húmeda para poder recibirlo. Conocía todos los puntos débiles de su amado.

Satisfecho por su hazaña, alzó la cara regando besos por sus muslos y piernas. Se posicionó sobre él inclinándose sobre su pecho, acurrucando la cabeza sobre él escuchando los latidos de su corazón que estaba vez estaba aún más rápido que al principio. Parecía como si estuviera apunto de explotar. Sin embargo, antes de entregarse de una vez trató que Wei Ying se tranquilizara pues quería invadirlo así completamente relajado.

Ya era tiempo, se levantó como pudo y se apoyó en sus codos todavía con los ojos medios cerrados por el cansancio, comenzó. Agarró con fuerza su dolorosa erección que estaba toda llena. La posicionó enfrente de él y de una dura estocada entró de lleno en el. Wei Ying dio un grito ahogado y de alivio, lo tomó por sorpresa.

Recuperado, Wei Wu Xian enredó sus piernas alrededor de su amado Lan Zhan , buscando de forma desesperada su boca. Mientras que Lan Zhan se impulsaba con las piernas y manos empujando una y otra vez dentro de él.

-¿Estás bien?-le susurró incosciente de su gruesa voz.

-No pares, continúa- rogó Wei Ying, queriendo atrapar con sus músculos internos a Lan Wangji.

-Recuerda esto, "nunca"

Ahogando sus gemido en el cuello del que se encontraba debajo de él, Lan Zhan siguió embistiendo, saliendo y volviendo a entrar con renovadas fuerzas más al fondo. Ambos cuerpos estaban cubiertos de sudor sus pieles se pegaban al estar al contacto y a la vez resbalan en cada movimiento. Sus manos colocadas al borde de la cama para poder impulsarse resbalan por las desatendidas frazadas, pero la unión entre ellos no se separaba era como si fuera un imán siendo atraído hacia otro metal. Por esa razón parecía imposible que alguien los separara.

Cubiertos por la pasión, la noche que estaba silenciosa en un instante se llenó de gritos y jadeos de ambos dos almas juntas, dos compañeros de vida. Lan Wangji le dio un fuerte beso al sentir que algo venía, sentía que pronto se libraría, pronto lo llenaría por completo. Sin avisar, Wei Ying sintió como una fuerza llenaba sus entrañas, lo bañaba de él. El liquido era tal que casi rebalsaba y se desparramaba por sus entrepiernas manchando todo lo que estuviera cerca.

Con un último empujón se acostó sobre él ya no podía más estaba totalmente en su limite. Escucharon ambos sus corazones bombear.

-Vez te dije que esto calmaría tus miedos-susurró mirando hacia arriba como Wei con el rostro rojisimo jugaba con el cabello largo de Lan Zhan concentrado en el techo.

-¿Ya me puedes desatar? me duelen las muñecas-habló ignorando lo que dijo.

-Si- habló mientras desataba los nudos con delicadeza colocando la diadema nuevamente a la frente- No me haz dicho nada.

-Que quieres que diga, si haz dicho que me calle durante todo el proceso- habló dándole la espalda cruzándose de brazos.

-¡Wei Ying!

Mirando de reojo vio como Lan Zhan bajó la mirada a una que de forma extraña se veía seria y a la vez triste, lo cual hizo que sienta remordimiento-¡Solo bromeaba!- saltó abrazándolo- Te amo mucho mi Lan Wangji se acurrucó en su pecho. Te amo por todo lo que haz echo durante toda mi vida. Eres mi compañero de vida como tu sabes, nunca lo olvides.

-No me gusta que bromees así

-Lo último si es real- habló mientras se peinaba el cabello de nuevo en su típica coleta con mechones despeinados. Sorprendiendose por un beso robado por su amante.

-Me gusta como eres, tu actitud como si no te preocupara nada- habló Lan Zhan seriamente mirando hacia un punto fijo en la pared- Eso es lo que más hizo que me acercara a ti, sin reglas solo como un espíritu libre rondando. Sin reglas que te limiten a ser tú.

-¿Por qué de repente dices esas cosas? Lan Zhan

Lan Zhan solo se limitó a mirarlo.

Wei Ying lanzó un suspiro -La primera vez que te conocí me caías mal- rió ante lo dicho- Sin embargo, esa vez en el lago, la vez que te lancé un níspero, antes de eso me pregunté: "¿Si lanzo un níspero lo atraparías?" y vi que fue así. Desde ese momento supe que eras especial.

-Atraparía todo lo que viniera que ti- se acercó sujetándolo. Ambos acostados en la cama para dormir. Wei Ying apoyo su cabeza en el pecho de su amado.

-Lo sé- contestó con una suave voz

-Así será hasta el final de nuestras vidas