Total de palabras: 850.

Tema escogido: AU escolar.

Notas.

Esto está medio así nomas , pero no tenía idea de que escribir para este día, aunque amo, amo, amo mucho los AU escolares no sé, nomas salió algo random y ya, no aproveché tanto la temática pero bueno, cosas XD.

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El ambiente era mucho más alegre que el del resto de los días, algo lógico para un viernes, el día previo al fin de semana. Se organizaban  planes, reuniones entre amigos, fiestas nocturnas, después de todo el sábado se podía dormir hasta tarde sin preocuparse por no llegar a tiempo a algún lugar, cuando unas horas más pasasen sería el momento de todo aquello.

Algo maravilloso.

Aunque, al mismo tiempo, desesperante.

Las horas de clase parecen ralentizarse, no tanto como en un lunes pesado y soñoliento, pero la ansia por el momento de salir perjudica la percepción de uno sobre como pasa el tiempo. Por eso mismo, el viernes el recreo resulta  traer mayor satisfacción para cualquiera.

El timbre señalador  se escucha demasiado fuerte, aturde, pero los gritos emocionados se le acoplan cuando  la gran mayoría de estudiantes corren desesperados para salir al patio.

—¡Vamos, Connie, hay que llegar antes de que se llene!

—Ya voy, Sasha.

Historia oye los gritos de sus compañeros de clase, cualquiera que fuese para el mismo lado los escucharía sin esfuerzo.

Cuando llegó al quiosco la fila ya era grande, ni siquiera seguía un orden específico, en realidad se veía mucho más como un revoltijo de personas amontonadas  desesperadas por ver una misma cosa que como una  hilera,. Lo único que le quedaba por hacer era esperar y separar el dinero  necesario mientras la gente afortunada de delante pedía sus cosas y el tumulto se reducía de   apoco.

—Quiero unas papitas y un paquete de oreos.

Reconoció la voz de Sasha y se cuestionó como llegó tan rápido, supone que se trata de   estrategias de gente con mucha hambre. Pero al repensarlo nota lo poco lógico que suena eso, ella es la que tiene hambre, tanta como para pensar en esas  tonterías.

—Quiero un  café.

Sabe que esa  es Annie y está segura de que la han dejado pasar aunque ella no lo pidiese.

Alguien compró un jugo, otra persona unos chicles, otra papitas, como su amiga.

Historia se aburría y comenzaba a arrepentirse de haberle dicho a ymir que la esperase en el salón, cuando se dio cuenta que allí no tenía a nadie para hablar y aligerar el rato de espera, , no lo pensó mucho antes de tomar la decisión de enviarle un mensaje como solución a ese problema. Sería mejor si estaban juntas allí, el estado de la “fila “en ese momento indicaba lo lento que continuaría siendo su avance.

Cuando obtuvo una respuesta positiva al mensaje sonrió, consciente de que Ymir no tardaría en llegar, ya podría dejar de  escuchar pedidos y pedazos aleatorios de conversaciones mantenidas por gente desconocida.

—hola. —ymir apareció justo detrás de ella.

—Ymir, que bien —su alegría era fácil de identificar en su tono de voz.

Las dos tenían muchas ganas de abrasarse, pero no  podrían con todo ese lío.

—te dije que era mejor si venía contigo.

—No quería que te aburrieras esperando.

—Pero ahora eres tú la que se aburre esperando. —Apuntó  Ymir—. Y me usas a mí como entretenimiento.

—Bueno. —Historia no podría negarlo, aún si solo fue una broma—. Creo que sí, aunque ni siquiera te molesta.

—oh, ¿quién dijo que lo hacía?

—Nadie, nad- ah, . —Historio interrumpió la charla de manera repentina—. Mira, ya casi.

—Bien,  ¿Después  vamos al salón o nos quedamos aquí?

—preferiría estar en el patio.

—Bien.

Cuando parecía no quedar complejidad en ese asunto, tan  solo era comprar y pagar, hubo otro problema.

Historia se encontraba a punto de  pedir lo que quería, pero  la quiosquera siempre veía a alguien más, cualquiera se colaba o atendía a los de detrás, no entendía como rayos funcionaba su sistema para atender gente o si era problema de su estatura de enana, pero no estuvo allí como diez minutos para no ser atendida, claro que no.

—Oye, tengo una buena solución. —Le ofreció Ymir.

Estaba clarísimo que notó su cara de concentración cambiando a enojo,  eso  la llevó a ofrecerle una forma rápida de ser atendida, la cual historia aceptó.

—Hange. —llamó Historia levantando la mano, sentada sobre los hombros de la otra chica, porque esa fue la maravillosa solución  sugerida.

—¿Eso no es un poco injusto?

—Estoy aquí hace mucho, y, ¿No es más injusto poner dos más cuatro seguidos en el uno?, Eren. —Giró la cabeza al costado para responder a su amigo.

—No me lo vas a dejar de reclamar.

Aunque eso no fue una pregunta y lo dijo resignado Historia negó, con un tono dulce fingido.

Por fortuna la estrategia poco ortodoxa  para realizar un pedido funcionó y, Hange finalmente la atendió.

—Que lo disfrutes. —Hange le habló con alegría y  recibió el dinero con una sonrisa, antes de arrojarle su compra con una puntería pésima, a pesar de tenerla muy cerca.

Mientras Historia agradeció fue Ymir quien atrapó su comida, por poco  terminaba en el suelo.

Con aquello concluido caminaron, mejor dicho, ymir, llevando a Historia aún, caminó por el gentío y fueron en busca de un buen banco mientras rogaban tener aún un poquitito de recreo para conversar.
, Ventana Día dos YHW.txt