14.

Dejar claras sus posturas no había cambiado casi nada de su relación o de su forma de tratarse pero al menos conocían bien lo que el otro sentía y aprendieron a comprenderse mejor mutuamente.

Los días continuaron como de costumbre, y de no ser por unos pequeños abrazos por inercia de la cercanía, y algunas caricias inconscientes, no había mucho que destacar como diferente en su cómoda convivencia actual. Sin embargo no todos los días podían ser tan tranquilos como quisieran.

En ese día Shownu había tenido un día realmente agotador en el trabajo debido a la temporada de cosechas y estaba tan cansado cuando llegó que Kihyun no quiso molestarlo demasiado con tanta conversación, aunque fuera realmente su único amigo con el que podía charlar.

Por la tarde, el alfa se recostó en el sofá de la sala de estar para ver una película junto con él, pero acabó quedándose dormido antes de ver siquiera la cuarta parte de ella. Kihyun no lo culpó en absoluto, sin embargo debía admitir que se sintió un poco solo y abandonado.

¿Acaso se había acostumbrado a la fiel atención del alfa que se sentía tan solo por un día que no lo acompañara o se trataba sólo de sensibilidad por su embarazo?

Después de cubrirlo con una manta, el omega se sentó en el suelo a su lado para recostar su cabeza sobre el abdomen del alfa, aspirando su aroma para consolarse a sí mismo, pero en ese momento recordó lo que había dicho el médico acerca del movimiento del bebé y se preguntó cuando sería el día que pudiera sentirlo.

Quizá si lo sintiera, sabría que no está realmente tan solo como se sentía...

Manteniendo esa posición no tan cómoda navegó en Internet por un tiempo, viendo videos de recetas de cocina, algunos blogs de consejos sobre embarazo y paternidad y también páginas de cursos en línea para aprender ciertas habilidades usando su tiempo libre, pero repentinamente su puerta fue tocada.

Aquel sonido era más que extraño para él porque no solían recibir visitas pues pese a que Shownu fuera una persona amigable y bastante reconocida en el pueblo, era reservado con su privacidad y más después de su llegada.

Cuando el omega quiso reaccionar, el alfa tocó su cabeza con suavidad y abrió los ojos con expectación debido al sonido. Kihyun se avergonzó de haber sido encontrado en tal posición, sin embargo Shownu no dijo nada y simplemente lo apartó con suavidad y lo ayudó a ponerse de pie, para levantarse y finalmente ser él quien abriera la puerta.

Aunque ya había pasado un tiempo desde lo sucedido, Kihyun no podía evitar tener la sensación de ser acechado, así que tomando la protección del alfa como escudo, se escondió detrás de la puerta mientras él abría.

—Buenas tardes. —saludó la persona desde el otro lado. —¿Es usted Son Hyunwoo? Somos agentes de la policía y estamos aquí para hablar con el omega protegido Yoo Kihyun acerca de las novedades de su caso. —informaron. —¿Se encuentra en el lugar?

Shownu verificó los documentos y después de hacer una señal a Kihyun de que era seguro salir, él se hizo presente frente a ellos y vio que se trataba de los oficiales que lo habían visto en el hospital y habían tomado las fotografías de evidencia para iniciar el proceso en contra de su alfa, o más bien, de su ex.

—Por favor, pasen. —susurró haciendose a un lado.

Ellos ingresaron a la vivienda y después de servirles un poco de té, ambos se sentaron a la mesa junto con los oficiales para escuchar lo que tenían que decir, entonces les explicaron que estaban pasando muchas cosas en su ausencia.

—Su familia reportó su desaparición inmediatamente después de que su hermano perdiera contacto con usted en esa noche en la cual lo esperó. —informó el oficial. —Según sus palabras, dijo que usted le había dicho que tenía algo urgente de que hablar, que lo citó en un lugar pero que nunca llegó así que supuso que algo malo le había ocurrido. Cuando contactó a su celular, su ex pareja contestó diciendo que usted había salido de su casa para reunirse con sus hermanos, así que no sabía nada. —Shownu escuchó atentamente pero con el ceño fruncido. —La denuncia entró en vigencia después del tiempo establecido en el que se empieza a buscar a un adulto. Y a partir de ahí, las cosas se volvieron tensas.

Kihyun estaba cabizbajo.

—¿Mi familia todavía no sabe que estoy vivo? —preguntó con dolor.

El oficial negó.

—Para llegar al fondo de esto necesitabamos que ninguna información se filtrara, ni siquiera a su familia ya que no sabemos si el malhechor está vigilando sus movimientos. —explicó. —Si su familia se entera de que usted está en este lugar, ellos inmediatamente querrían buscarlo y eso complicaría más las cosas.

El omega asintió cabizbajo.

—¿Hay algo más? —preguntó desanimado.

—Hemos interrogado a su expareja y parece que tiene una coartada poco convincente. —dijo el otro oficial. —Al parecer está muy seguro de que usted murió, y no teme inventar cualquier excusa para salvarse, ya que confía en que nadie va a contradecirlo.

El omega se sorprendió al escucharlo.

—¿Qué dijo? —preguntó Shownu con seriedad.

El oficial sacó una laptop de su maletín y después de teclear un momento, la giró para que ambos pudieran apreciar el video del interrogatorio.

—Véalo usted mismo. —susurró.

El video que parecía haber sido sacado de una cámara de seguridad comenzó a reproducirse en la computadora y reflejaba a dos oficiales frente al hombre que estaba sentado con las manos apoyadas en el escritorio.

—Entonces, ¿su declaración es que no sabe a dónde fue Yoo Kihyun? —preguntó el oficial.

El hombre suspiró casi harto de la situación.

—Oficial, no sé cuantas veces quiere que se lo repita. No sé nada de mi ex. —afirmó con severidad. —La última vez que lo vi, me dijo que iría a ver a su hermano, y aunque era de noche no sospeché nada de lo que haría es más, lo envié con mi chófer privado para que no se expusiera en algún taxi o algo así. Yo sí cuidaba de él, pero mire cómo me pagó. —suspiró como si estuviera totalmente dolido y resentido. —Yo preocupado por su bienestar y el huyendo de casa con un amante... ¡Y soy yo quien se ve envuelto en interrogatorios policiales! Qué ironía.

El hombre bufó con desprecio y enojo, mientras los oficiales lo observaban.

—¿En qué se basa para asegurar que el señor Yoo Kihyun huyó con un amante? —preguntó el oficial apoyándose en el escritorio. —¿Sabe algo que nosotros no sepamos todavía?

Él soltó una risita.

—Me avergüenza decir este tipo de cosas, pero si es la manera en la que puedo liberarme de esta mierda de una buena vez por todas, la diré. —dijo con firmeza. —Yo sólo soy un simple hombre que trabaja duro para sobresalir en el competitivo mundo laboral en el que vivimos, por eso se me hace difícil estar en casa, pero Kihyun jamás entendió eso. —dijo con lastimera voz. —Le dije a la cara que la más grande prueba de mi amor había sido enlazarme con él a temprana edad... ¿Y qué fue lo que él hizo? Huir de casa primeramente, haciendo que todos sospecharan de mí, en especial su familia que han llegado incluso a amenazarme. —dijo con agobio. —Y no le bastaba con mi preparación, mi dolor y mi miedo, sino que además rompió nuestro lazo sin pudor alguno, mandándome al hospital por un par de días. —en ese momento sacó unos papeles de su carpeta y las puso sobre la mesa. —Pueden verificar las constancias y gastos médicos que sufrí... Si no hizo eso con un amante, ¿cómo más pudo haber sido?

El oficial leyó los papeles varias veces y miró al alfa con su cara inexpresiva de siempre.

—Un omega puede romper el lazo sólo de dos formas diferentes: la primera es que muera. —comentó el otro oficial. —La segunda es que fuera mordido por otro alfa en un estado de vulnerabilidad... —informó. —Ambas suponen una situación terrible para el omega, y tienen casi el mismo desenlace... ¿Cree usted que Kihyun estaba dispuesto a pagar el precio por un amante incluso si eso le costara la vida?

El hombre se encogió de hombros.

—Dicen que cuando se está enamorado se puede hacer cualquier locura. —dijo sin remordimiento. —Quizá no pensó en la magnitud de sus propias acciones.

—Según la Ley de Igualdad de Castas cualquier alfa u omega que rompa el lazo sin consentimiento y sin una previa evaluación y autorización del Ministerio de la Familia, será gravemente penalizado. —le recordó. —Esta ley es de conocimiento general... ¿Cree que el señor Yoo Kihyun estaría dispuesto a crear problemas no sólo con su propia salud sino que también con la ley, por un amante?

El hombre cansado de la situación volvió a alzar los hombros.

—Ya le dije que no sé cuales fueron sus motivos. —dijo molesto. —Sólo sé que esto no tiene nada que ver conmigo.

El oficial apuntó algo en un papel y guardó silencio un momento.

—Una pregunta más. —comentó. —Cuando el lazo se rompió, sabiendo que sólo hay dos motivos riesgosos por el que un omega podría ser capaz de hacerlo, ¿no se imaginó que el señor Yoo Kihyun pudo haber sido asesinado o forzado por otro alfa en lugar de hacerlo voluntariamente por un amante?

Esa había sido una pregunta ruda y directa, sin embargo el hombre no vaciló.

—Cuando el lazo se rompió yo empecé a sufrir inmediatamente y fui llevado al hospital, no estaba en condiciones de pensar en algo como eso. —explicó. —Cuando recuperé la consciencia me preocupé por él y pedí que lo buscaran, pero su familia estaba siendo molesta y como su celular quedó en casa, revisé en busca de encontrar algo que pudiera guiarme a él, pero todo lo que encontré fue coqueteos, chats subidos de tono y fotografías de desnudos tanto suyas como de sus contactos. —explicó con furia convincente. —Me enojé tanto que rompí esa porquería antes de que pudiera contar cok cuantos hombres hacía lo mismo. Entonces ordené que detuvieran su búsqueda y aquí me tiene.

El oficial volvió a apuntar algo sobre el papel.

—¿Recuerda alguno de los nombres que vio en los contactos? —el hombre negó. —Entonces usted está seguro de lo que vio.

—Totalmente. —afirmó. —Me avergüenza tener que pasar por esto, pero qué se puede esperar de un omega, si ya se sabe que no son buenos en nada más que vender su cuerpo a cambio de estabilidad y sexo, sin ofender. —se excusó. —Quizá no fui suficiente para Kihyun y por eso me dejó por alguien más, o simplemente se encontró con alguien que le prometió un mejor futuro, pobre iluso.

—Eso es todo por el interrogatorio. —informó el oficial, y el video terminó ahí.

Shownu había prestado atención a cada detalle dicho por el canalla al que por fin le conoció la cara y su puño estaba apretado de rabia por todas las mentiras que el idiota había estado escupiendo en tan poco tiempo, pero al mirar a su lado notó que Kihyun seguía viendo la pantalla con la mirada perdida y las lágrimas fluyendo como ríos de sus ojitos.

—Ustedes no le creen, ¿verdad? —preguntó con la voz temblorosa. —Díganme que harán justicia para mi bebé y para mí.

El corazón del alfa se estrujó como si se tratara de un papel arrugado, e inmediatamente abrazó a su omega tratando de liberar todas las feromonas calmantes posibles para calmarlo.

—Todos te creemos, y tendrás justicia. Lo sé porque juro que no descansaré hasta que pase. —susurró contra su oído. —Por favor, cálmate. Ahora estás conmigo y nada malo va a ocurrir.

Los oficiales explicaron que no debía preocuparse porque llegarían al fondo de todo y después de eso se fueron, pero lo que se quedó fue la carga emocional del omega al revivir tan vívidamente la traición de aquel día, al ver y oír a su expareja hablar de él como si no valiera nada, cuando él incluso a veces había extrañado tontamente su presencia y de vez en cuando se imaginaba cómo hubiera sido su vida si le hubiera hecho saber lo de su embarazo.

Shownu no se separó de él en todo momento, pero sabía que hay cosas con las que no podía ayudarle a Kihyun y eso le dolía profundamente.

A veces pensaba en cómo sería todo si se hubieran conocido años antes y de diferente manera, pero ahora sólo le restaba imaginar.

Y la verdad era que ninguno sabía
qué hacer con tantas emociones.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top