Era otro dia más, donde Error se encontraba en el trabajo, totalmente nervioso, ¿Porqué? Bueno, afuera estaba Ink.

Queria mandarle un mensaje o llamarlo, pero seria nuy raro cuando estan en el mismo lugar, aunque la idea de ir a hablarle le parecia nuy acosador, ¿Pero qué podia hacer? Literalmente era su cafeteria, no podia no estar allí.

Solo pudo quedarse encerrado y hacer como que no estaba, aunque seguro terminaria pasando vergüenza.

Nightmare tocó la puerta y luego pasó, no podia llamarlo antes por su nombre, ya que justamente Error le pidió no hacerlo porque se daria cuenta Ink que estaba allí.

-Nightmare, ¿Qué pasa?-Habló Error.

-Bueno...-

-¿Ink quiere verme? ¿Dijo algo? ¿Habló mal de mí?

-No.-

-¿Dream le presentó a alguien más?.... Lo sabia, no soy suficiente.-

-No.-

-¿Alguien le invitó a salir ya?-

-No. ¿Me puedes dejar hablar?-

-Ah, sí.-

-Sus padres vinieron.-

-... ¿Qué?-

-Así como oye. Están afuera de la cafetería.-

-...Mierda.-

-Dicen que quieren hablar contigo. Bueno, eso era todo, adiós.-

Nightmare estaba dispuesto a irse, pero Error le llamó la atención.

-¡Espera!-

-¿Qué?-

-Y si le dices que... ¿No estoy?-

-Ya saben que estas, ¡Todos saben que estas! Creo que incluso Ink, ya solo sal de acá, das pena ajena.-

Nightmare salió de la oficina de Error, el cual, solo suspiró rendido, no podia evitar a sus padres, asi que solo se decidió por salir, ya vería que excusa le daba a Ink.

Primero salio de su oficina para luego salir de la cafeteria, donde estaban sus padres.

-Hola.-Saludó Error.

-¡Mi precioso niño! Dime, ¿Dónde está la o el afortunado?- Habló su madre, mirando alrededor.

-Eh... ¿Qué?-

-Ya sabes, tu pareja.- Respondió su madre.

-Ah, el.... Uhm...-

-¿Sí?-

-Bueno, ya sabes....-

Error no sabia bien que hacer, maldito Fresh y su bocota, ¿Porqué tenia que ocurrirsele eso? No era gracioso en absoluto.

-Vamos, dinos, hicimos un gran viaje hacia acá.- Su madre volvió a insisitir.

Error decidió simplemente decidirle que era mentira, se disculpó y les pidio que se retiren, pues las personas dentro de la cafeteria estaban comenzando a ver la escena, comenzaba a ser incómodo. Error no sabia que hacer ahora, no parecian desistir, maldito Fresh.

-Hola, yo soy su pareja, lamento la demora, Error no me avisó que eran ustedes.- 

La voz de Ink entrando en escena lo sorprendió, ¿De verdad habia escuchado bien? ¿Lo estaba apoyando? Lo que sea que sea, estaba funcionando.

-¡Oh, que gusto conocerte!-

Los padres se veian complacidos con la presencia de Ink, tanto, que Error no supo que decir, además de que seguía en shock.

-Igualmente, es un gusto. Ahora mismo estabamos en una cita, así que... Su visita fue muy repentina. Soy Ink, por cierto.- Habló Ink.

-¡Oh, entiendo, entiendo! Por favor, disculpennos... Por cierto, están invitados a venir a casa, quisiera charlar más comodamente con ambos, ¡En especial con tan dulce pareja que mi pequeño se ha encontrado!- Dijo la madre.

-Si, esperamos verlos pronto.- Siguió su padre.

Luego de despedirse ambos, finalmente se fueron. Por otro lado, Error solo suspiró, soltando el estrés del momento, luego miró a Ink.

-Gracias, de verdad... Yo... Lamento eso.-Dijo Error.

-Oh, no te preocupes, queria ayudarte y era lo menos que podia hacer.-

-Ya, pero... Ahora mis padres piensan que... Bueno, ya sabes.-

-Supongo que no me queda de otra que ir a visitarlos.-Ink le sonrió.

-¿Enserio? No, no, es pedir demasiado...-

-No tengo problemas, y si la cafeteria era de tus padres, supongo que su comida debe saber muy bien.-

-Ah, ¿Te gustan los platillos de la cafeteria?-

-¡Sí! En especial los pequeños postres, tienen adornos muy lindos, tanto que me da pena comerlos...-

Error sonrió, ya más relajado, disfrutaba hablar con Ink.

-Bueno, ahora mismo estaba con Dream pero, ¿Te gustaría unirtenos?-

-Oh, no quisiera molestar.- 

-¡No estamos haciendo nada interesante! Solo charlar de algunas cosas, además, entre más, mejor.-

-Bien, supongo que no puedo negarme.-

-¡Nope! Así que vamos.-

Ink lo agarró de la mano y entró con él devuelta a la cafeteria. Pasaron la tarde hablando y comiendo pequeños postres o tomando batidos.

Y, mientras nadie veía, Error miraba de reojo a Ink.

¿Cómo es que era tan... perfecto? ¿Cómo no enamorarse?

Solo quería seguir viviendo eso, sin pararse a pensar en algo más.

Sin pararse a pensar en una posible doble intención.