Capítulo 45.

Abril 1960.

Cuando el amanecer empezaba asomarse Jungkook junto a los demás emprendieron camino entre la montaña, el padre de Jimin decidió quedarse en casa de Jung Wheein junto a Baekhyun y su pequeño hijo, Namjoon, Seokjin, Jackson y Jungkook comenzaron a caminar entre el bosque con la poca comida que les había proporcionado Wheein y con algo de ropa y mantas para pasar la noche y no morir de frio, Jungkook estornudaba cada dos segundos debido a la alta gripe que contrajo por meterse al lago helado y no cambiarse rápido, Seokjin negaba cada que lo miraba pues los ojos de azabache se encontraban rojos por la gripe, su nariz roja y sus cachetes igual, tierno pensaba Namjoon pero se sintió culpable al saber que fue su culpa que el chico se encontrara así.

Jungkook respiraba débilmente debido a la gripe y a la falta de oxígeno, pero eso no lo detuvo para continuar caminando con los demás, Jackson cargaba una mochila como si fuera a hacer paracaidismo ya que se encontraba demasiado gorda por las mantas y algo de ropa que tenía dentro de la mochila.

Alrededor de unas tres horas más se detuvieron para descansar en un pequeño valle.

—Debemos continuar hacia el este, por lo que pude averiguar se encuentra una pequeña comunidad aun sin ser gobernada por los militares, por lo que me dijo la mujer de aquel mercado la conocen como la comunidad del lobo blanco, se encuentra entre las montañas más altas de Daegu rodeada de nieve.

Dijo Namjoon mientras miraba una hoja en donde había logrado trazar un mapa que según él estaba bien.

—He escuchado de aquella comunidad, dicen que se encuentran entre la frontera de corea del norte y la del sur, son muy estrictos con las personas que entran ahí.

Dijo Jungkook todo mormado y Seokjin lo miro.

—He escuchado que han intentado invadir su territorio y que evidentemente no han podido, pero es todo lo que se de ellos.

Dijo Seokjin mientras miraba al valle hermoso frente a ellos.

Los cuatro permanecieron en un gran silencio, Seokjin miro detrás localizando que algo se movía entre el bosque, abrió sus ojos en grande al ver a dos hombres a caballo con tajes militares.

—Vámonos, ¡ya!

Dijo y tomo sus cosas para empezar a correr hacia el valle, Namjoon se giró hacia atrás y tomo el brazo de Jungkook para empezar a correr hacia donde Seokjin había agarrado camino.

Jackson se detuvo y se escondió detrás de una piedra, miro a los hombres pasar a un costado y tomo sus dos armas cortas, se colocó detrás de ambos caballos y disparo a ambos hombres a la espalda, ambos cayeron al suelo muertos, les quito lo que pudo y lo que traían, los caballos empezaron a alarmarse, Jackson logro tomar a uno de ellos y al otro de la correa para después jalarlos con él hacia donde se encontraban los demás, Seokjin sintió su alma regresar al cuerpo cuando vio a Namjoon y Jungkook con vida, se giró a ver a Jackson quien se acercaba con ambos caballos.

—Transporte.

Dijo y miro a Seokjin quien se encontraba pálido y nervioso.

—Prefiero caminar, los veo en el este.

Dijo y comenzó a caminar sin mirar a los tres hombres detrás de él.

Jungkook subió con Jackson a uno de los caballos y miro a Namjoon montar el otro para después ambos acercarse a Seokjin quien se sobresaltó al ver semejante animal a su lado.

—Vamos Seokjin, por caballo será más fácil llegar.

Dijo Namjoon quien miraba al mayor negar repetidas veces.

Namjoon en un rápido movimiento se agacho lo suficiente para poder tomar a Seokjin de la cintura y subirlo de golpe al caballo, Seokjin se tensó y casi se desmaya al estar sentado frente al moreno.

Namjoon pudo sentir la tensión de mayor y como este se aferraba a sus brazos desesperado.

—No va a pasar nada, yo estoy contigo.

Susurro Namjoon mientras ponían su mentón sobre el hombro del mayor, Seokjin asintió dudoso y sin decir algo más apretó fuertemente las manos de Namjoon.

Cuando los cuatro lograron ingresar nuevamente al bosque comenzaron a cabalgar entre los grandes pinos, Namjoon comandaba la cabalgata con Seokjin maldiciendo cada que podía cuando sentía que se caería del caballo, pero el moreno solo negaba y sujetaba con una de sus manos la cintura del alto para tranquilizarlo.

Al caer la noche decidieron acampar dentro de una pequeña cueva que Jungkook encontró, Jackson alimento a los caballos con las pocas frutas que traían y les dio agua, Namjoon hizo una pequeña fogata y Seokjin se recostó alado de un caballo ya que moría de frio, se giró y miro a Jungkook dormir con la boca ligeramente abierta mientras roncaba, sonrió tiernamente y le toco la frente notando la alta temperatura del chico, se enderezo en su lugar y miro a Jackson hablar con Namjoon, discretamente se acercó hasta la mochila que Jackson traía y la abrió sacando una manta, un trapo y un abrigo, tomo una botella de agua y camino hacia Jungkook, coloco agua sobre el trapo empapándolo y se la puso a Jungkook en la frente logrando que este se estremeciera ante lo fio del trapo.

—Vamos Kookie tienes que estar bien para cuando encontremos a Taehyung.

Murmuro bajito mientras tapaba al chico con la manta.

Pasaron unas dos horas en las que Seokjin estuvo pendiente de Jungkook y cuando por fin le logro bajar la temperatura Namjoon se acercó a ver que Seokjin se empezaba a acomodar.

—Creí que estabas dormido ya.

Dijo el moreno mientras miraba como Seokjin se cubría con un abrigo.

—Jungkook tenía temperatura no podía dejarlo así.

Dijo secamente mientras se tiraba por completo en el piso y le daba la espalda a Namjoon y al frente a unos metros tenía la cabeza del caballo dormido.

Unos minutos después sintió a Namjoon colocarse detrás de él, Seokjin se tensó de inmediato e intento pararse, pero el brazo del moreno fue más rápido y atrajo a Seokjin hasta él, lo giro y el mayor encaro al moreno.

—Deja de escapar de mi Seokjin.

Susurro Namjoon y Seokjin negó mientras sentía las lágrimas llenar sus ojos.

—No fue tu culpa.

Susurro Namjoon y Seokjin hundió su rostro en el pecho del moreno para después sollozar bajito.

Desde la muerte de Hwasa, Seokjin no había podido dormir bien al recordar que por su culpa la chica se encontraba muerta, cada que cerraba los ojos veía a Namjoon llorar desesperado, se sentía tan culpable de la muerte de la mujer que su chico siempre amo, Seokjin ha amado a Namjoon secretamente durante toda su vida, pero solo eso, porque sabía de la heterosexualidad del moreno y que definitivamente jamás podría estar con el sabiendo que el recuerdo de Kim Hwasa estará siempre en su corazón.

Namjoon no sospechaba de aquel amor que Seokjin le escondía, abrazo al mayor fuertemente y poco a poco Namjoon se quedó dormido, Seokjin miro el rostro de Namjoon tan pacifico al dormir y nuevamente sus lágrimas brotaron de sus ojos cuales manantiales, se acercó al rostro del moreno y dejo un ligero beso sobre sus labios, se liberó del agarre de Namjoon y lo cubrió con el abrigo, cerrando sus ojos para calmarse suspiro largamente y miro a Jackson dormir abrazado de su mochila y cubierto con la otra manta, Seokjin se acercó a Jungkook y se metió entre la manta para después abrazar al chico mientras dejaba que sus lágrimas brotaran una vez más.

Jungkook se había despertado cuando escucho los sollozos no tan silenciosos de su Hyung y también miro como dejaba un ligero beso sobre los labios de Namjoon, cuando sintió al mayor a su lado se giró y beso su cabeza para después abrazarlo.

—Tu secreto está a salvo, todo estará bien Hyung.

Susurro Jungkook y Seokjin escondió su rostro entre el pecho del menor, al pasar de unos minutos ambos se quedaron profundamente dormidos, una imagen demasiado tierna para quien la viera y Seokjin se sentía seguro y a salvo con Jungkook y Jungkook sentía como si estuviera abrazando a su madre.

Esa noche Jungkook soñó con su castaño y entre sueños sonreía cuál bebé.

Jungkook se encontraba en medio del bosque sentado mirando la noche oscura y triste. Unos minutos después escucho los pasos torpes de alguien a sus espaldas, se puso de pie rápidamente girándose de golpe encontrándose a Taehyung frente a él, el castaño freno de golpe al ver la cercanía de sus rostros, sin dudar un minuto más, Jungkook lo tomo de la nuca y acorto la distancia en un desesperado beso mientras sus lágrimas escurrían de sus ojos.

Jungkook prefirió pensar en el beso tierno que solo roza la piel suave de sus labios, que casto se acerca reconociendo sus alientos, probando el sabor de sus respiraciones, uno dulce que se deja caer poco a poco, tomando todo el tiempo del mundo para recorrer cada milímetro de sus bocas. ​

Un beso que será seguido de otro más explorador y provocativo, uno que se apropie de sus labios como si fueran suyos, los saboree, los acaricie, hasta que en pequeños mordisquitos su boca haga estremecer la suya. Donde su lengua recorrerá sus labios de lado a lado como quien prueba un helado. En un instante se alejó un poco para mirarle a los ojos y sonreírle felizmente sintiendo tan real aquello.

—Taehyung...

Susurro Jungkook y Taehyung sonrió mientras sus lágrimas se derramaban.

Taehyung tomo entre sus manos el rostro del azabache para así seguir con su beso, para que sus lenguas jueguen entre sí, se acaricien mutuamente mientras las manos de Taehyung se pierdan sobre la nuca del azabache y su cabello, donde las manos de Jungkook deshacen la espalda del castaño y su cintura a cada roce. ​

Así se pasan los minutos, minutos que para Jungkook y Taehyung fueron horas, porque sí ambos estaban soñando lo mismo, estaban sintiendo lo mismo. ​

Taehyung solo puede detenerse a pensar en la ansiedad que durante ese beso se acumularía en su vientre, en esa sensación de cosquilleo que se iría derramando por su cuerpo, en como su mente se subiría a una nebulosa donde lo único que sería capaz de percibir es el calor de su cuerpo contra el del menor, de cómo la calidez de su respiración quema su boca y de cómo su alma sonríe nerviosa en cada beso que le da.

Taehyung acaricio esa sensación, se embriago en ella, la contemplo, la añoro, la deseo y la degusto un momento en su imaginación, de su sueño. ​

Un instante sin consciencia, una imagen, un Taehyung, un Jungkook. Un ellos y un beso. ​

Jungkook pensó entonces, en los besos pecaminosos como se les llamaría al ver a dos hombres besarse. ​

Se separaron y Jungkook miro a su chico a los ojos, aquellos ojos verdes brillaban de una manera especial, la misma en la que brillaban los suyos al verlo, rieron bajito por aquel efecto conocido como amor, tomo su rostro entre sus manos y junto su frente a la suya.

Aquel momento se hizo único para ambos, el mundo desapareció a sus alrededores, solo eran ellos dos ahí dejando que el amor saliera de sus corazones sin parar alguno, Jungkook abrió sus ojos y se separó un poco del rostro del mayor, Taehyung suspiro y abrió sus ojos, Jungkook lo necesita para siempre en su vida, sin dudarlo dos veces lo beso nuevamente dejando que su corazón hiciera de las suyas una vez más.

Su corazón el cual latía sin desenfreno alguno, aquel corazón que guardaba un amor que le costaba hasta hace poco aceptar; aquella noche sus corazones hicieron de las suyas bajo aquella noche de luna llena.

Aquel chico tan pequeño como un ramo de rosas, aquel chico que llego de la deriva tan frágil como los pétalos de la flor lo atrajeron a él como imán; rogando salvarlo de la tristeza.

Durante años el corazón de Taehyung espero por Jungkook, hasta que un dios se compadeció y los unió en un solo movimiento, fue aquel movimiento causado cuando se enamoró por primera vez, y espera que algún día Jungkook pueda confesarle que lo ama con detenimiento y dedicación como Taehyung lo hace, quiere que se lo confiese cuando el tiempo sea lo suficientemente bueno y sepa que es su primer amor, entonces Taehyung le dirá que él es el amor de su vida.

Jungkook quiere que Taehyung recuerde siempre, siempre de los siempre lo hermoso que es.

Sus corazones se coordinaron en una melodía para determinar si son el destino del otro y creo que en esta vida lo son y le pido a la divinidad que lo sean en otras vidas lejanas.

El primer beso del primer amor bajo la luna se convirtió en una realidad que se veía lejana.

A veces los sentimientos surgen cuando no hay nadie alrededor, ni siquiera tú. La vida pasa muy deprisa y encontrar momentos de intimidad se complica cuando la soledad se ve como un estigma, como un mal regalo del que debemos deshacernos cuanto antes, pero llego Taehyung a la vida de Jungkook. Justo cuando él pensaba que la soledad no era sino una tierna aliada que lo mecía suavemente y lo protegía, Jungkook llego a la vida de Taehyung para romper su hechizo y a demostrarme que querer y entregarse es posible y necesario.

Gracias a Taehyung, Jungkook entenderá que el amor no es perfecto, pero tampoco lo pretende. Buscar un ideal es perseguir lo imposible, y perseguir lo imposible solo lleva al fracaso. Poco a poco Taehyung aprenderá a amar sus imperfecciones, que lo hacen imperfectamente perfecto. No solo eso, sino que Jungkook le enseñara a quererse a sí mismo y aceptarse tal y como es, porque al verse reflejado por primera vez en los ojos del menor va a descubrir más sobre si como ser humano de lo jamás hubiera soñado. Por todo ello, en sus silencios, en sus momentos de soledad, en la mirada del corazón se quedarán callados.

Ahí justo ahí Jungkook se dará cuenta de que Min Yoongi tenía mucha razón, al darte cuenta de tus sentimientos te hundes en tus pensamientos tratando de obligarlos a no traicionarte, pero al final los pensamientos no te traicionan, lo que te traiciona es el corazón y él mismo porque lo niegue o no, su mente desde el primer instante que miro a la persona se convirtió en un aliado más del corazón, ahí hundido él entre sus brazos y pecho se dará cuenta de que la mirada del corazón es profunda cuando quiere encontrar al amor de verdad, ahí en ese instante se dará cuenta de que su corazón lo traiciono desde que toco aquella puerta y aquel castaño le abrió y desde ese momento Jungkook a mirado a Taehyung con el corazón.

Creo que en estos momentos en cuando más miedo tienen de perderse, aun dentro de Jungkook sigue aquella parte de la cobardía de niño que se adueña de una parte de él. Pero si Jungkook tiene que dar la vida, lo hará; no cortara las alas de Taehyung porque eso sería ser un completo patán, jamás arrancaría sus oportunidades de vivir una vida mejor en donde no lo juzgaran por tomar la mano de un hombre, en donde no lo miraran mal por ser gay y un Mpreg.

En donde no lo hagan sentí mal por amar a un hombre.

Porque ninguno eligió ese camino, el camino los encontró a ellos.