-¿Quién? -pregunto confundido buscando discretamente con la mirada.

-Él -me giré y vi que venía Frank con dos botellas de agua, lo señale y de inmediato voltee a ver la reacción de Drake.

-¿Quién es? -pregunto antes de que llegará hasta mí Frank.

-Frank -me interrumpió.

-Su novio -dijo Frank y me abrazo por la cintura, no sabía quien estaba más confundido si Drake y yo-, aquí tienes tú agua amor -me dio la botella de agua.

-¿¡Qué!? -pregunto Drake soprendido.

-¿Eh? -murmuré.

-No, nada -dijo nervioso Drake-. Quise decir que está muy bien, me alegra que sean novios -susurró.

La cara de Drake me decía que estaba un poco celoso... pero, nada era seguro, tal vez eran visiones mías. Así que sólo le seguí la corriente a Frank.

-¡Oh, sí! Gracias cariño -la tome la botella-. Gracias Drake, es momento de irnos -comenté.

-Sí... claro -respondió Drake con desagrado.

Frank tomo sus maletas y Drake me ayudo con la mía, por educación supongo. Salimos al aeropuerto hacía el estacionamiento, hayamos el auto de Drake y subimos a él. Tenía tantas ganas de subirme en la parte delantera junto a Drake... pero si hacía eso, Drake se daría cuenta que no era más que una farsa. Así que no me quedo de otra más que sentarme atrás junto a Frank, quién se la pasaba abrazándome.

Drake condujo hasta mi departamento, bajamos las maletas y entramos a la casa, Drake me ayudo de nuevo y tuvo que quedarse un rato aunque no quisiera.

-¿Quieres algo de tomar, Drake? -le cuestione.

-Mmm... sí, un poco de agua, por favor -respondió incómodo, lo sabía... estaba que no se sentía a gusto ahí.

-De acuerdo.

-Yo iré a darme un baño... estoy muy cansado, con permiso -dijo Frank y se fue.

-Bien -camine hasta la cocina, serví un poco de agua para Drake y regrese a la sala a dárselo-. Aquí tienes.

-Gracias -lo tomo.

Le dio un buen trago al vaso casi hasta que se lo termino. Lo dejo a un lado y seguía tan incomodo, que no era capaz de iniciar una plática.

-¿Y... cómo has estado? -pregunte.

-Bien, gracias... ¿tú? Bueno, no sé ni porque pregunto, ¿verdad? -comento y yo reí un poco.

-No sé a qué te refieras, pero sí me ha ido bien.

-Ya veo... -hizo una pausa- creo que mejor me voy.

-Pero Drake, tiene mucho que no te veo -me excuse.

-Nos vemos luego -evidentemente ignoró lo que le había dicho, se levanto y se marchó.

Me asome por la ventana y miré, él se estaba marchando. Seguido de eso salió Frank.

-No sé por qué rayos te seguí el juego -le reprimí.

-Pues lo hiciste -se burlo- y ni modo ahora tendremos que fingir.

-Pues sí -imité su tono absurdo de voz-... por ahora -susurré-, ¿tienes reservación no? -pregunte.

-Sí.

-Pues no te corro, pero ya vete -sonreí.

-De acuerdo -comento entre dientes.

No duro mucho tiempo ahí, tomo sus maletas y sin bañarse se fue, ya que sólo lo había tomado como un pretexto para dejarme a solas con Drake. En cuanto se fue, yo me recosté en mi cama, me sentía tan mal por haberle jugado esa broma a Drake y después sonó mi celular, deseaba que fuera él... pero no.

-Hola Andy -salude.

-¿Qué le hiciste a Bell? -pregunto inmediatamente ignorando mi saludo.

-Sólo una pequeña broma, pero no le digas.

-¿Qué hiciste Maureen? -insistió en saber.

-Le dije que salgo con el chico que me acompaño hasta acá.

-¡Con razón! Está que no lo calienta ni el sol, pero no nos quiso decir nada.

-Pobre, ya me lo imagino... pero pensándolo bien es buena estrategia para organizar su cumpleaños.

-¿Qué quieres decir? -pregunto confuso.

-Pues que si está molesto, menos me buscara y así podremos organizarla bien.

-¡Cierto! Tienes mucha razón, ¿nos vemos mañana? -cuestiono.

-Sí.

Nos pusimos de acuerdo y colgué, estaba tan cansada que sólo me di un baño y me dormí, ni siquiera cene. Al día siguiente sonó mi alarma, me levante, me cambie... desayune y salí rumbo al café en el cual me había quedado de ver con Andy. Tenemos aproximadamente tres días para organizar todo, y en esos días no vi para nada a Frank ni mucho menos a Drake.

El día del cumpleaños de Drake, a mí me tocaba llevarlo a la fiesta en casa de Andy y entonces lo llame y acepto verme pero no sabía la sorpresa que le teníamos preparada.

-Pero antes vamos a pasar por Frank -le dije mientras íbamos en el auto.

-¡Pf! Está bien... -respondió de mala gana.

-¿Te cae mal Frank?

-No, no... para nada.

Se quedo callado, y continué manejando hasta mi departamento, me estacione enfrente y le toque el claxon a Frank para que saliera, mientras lo esperábamos.

-Será mejor que me pase a los asientos de atrás -comentó Drake tratando que quitarse el cinturón, yo lo impedí.

-No, no. Estás bien aquí -tome su mano y de inmediato volteo a verme.

-¿Segura? -Pregunto inseguro.

-¡Claro! No te preocupes -sonreí.

Volvimos a quedarnos callados, él volteo su mano para que quedaran palma con palma y jugaba sus dedos con los míos, mirando al frente. ¿A quién pretendía o trataba de engañar? No sé cuanto más pueda durar con esta mentira. Y llego Frank.

-Listo, vámonos -dijo subiendo al auto, yo quite rápidamente mi mano y encendí el auto.

Maneje unos cuantos kilómetros más hasta la casa de Andy, obviamente que no podría ocultarle por mucho tiempo que íbamos a su fiesta.

-¿Qué hacemos en la casa de Andy? -inquirió confundido.

-No hagas preguntas y bajemos del auto -respondí quitándome el cinturón y él me imito. Bajamos los tres del auto y caminamos hasta la entrada, antes de pasar.

-Bueno, antes de entrar tendré que taparte los ojos -comente y le tape los ojos, él accedió.

Frank abrió la puerta y pasamos, las luces estaban apagadas, todo estaba obscuro. Le quite las manos de los ojos y de repente se hizo la luz, acompañado de un feliz cumpleaños de todos los invitados presentes ahí.

-¿Tú hiciste esto? -me pregunto Drake con una sonrisa.

-Sí, bueno... en complicidad con Andy y los chicos -comenté.

-Ahora entiendo todo -rio-. Gracias.

Sonreí y él se acerco para saludar a todos los presentes. La fiesta estaba en su mejor punto, Drake había desaparecido de mi vista y para huir de Frank... decidí buscarlo por toda la casa. Había caminando mucho y casi por toda la casa, hasta que por fin lo fui a encontrar al jardín trasero donde hablamos con sus amigos en la mesa la primera vez.

Me acerque lentamente y vi que no estaba solo, había alguien más.

-Drake, te estaba buscando -susurré.

-¡Ah! Mo, te presento a Kim -la señalo.

-Mucho gusto, soy Maureen -me presente.

-Hola, el gusto es mío -respondió ella.

-Bueno... mejor los dejo solos -dije.

-No, espera... ¿me estabas buscando, no? -pregunto Drake.

-Sí, pero no tiene importancia -concluí.

-¿Me das un momento, cariño? -le pregunto a Kim y ella acepto. Se fue y nos dejo solos.

¿Cariño? ¿Le dijo, C A R I Ñ O? ¿Por qué? Mi corazón se rompió, aunque inconscientemente yo había empezado con todo esto.

-¿Me dirás qué pasa? -me pregunto de nueva cuenta sacándome de mis pensamientos.

-No, olvídalo. Es mejor que vayas con ella, se puede molestar.

-¡Ya dime! ¿Acaso no ves que eres más importante tú? -grito y me quede muda, ¿qué había dicho?

-Pero... yo... yo... -tartamudee y se acerco a mí, tomo mi mano y susurró.

-Bueno... y entonces, ¿vas a decirme? -Por onceava vez pregunto.

Pero, ¿qué iba a decirle? ¿Qué estoy celosa? Y, ¿qué lo de Frank es una mentira? Seguro me odiara.