Ya no quiero verte sufrir, pero creo que es todo lo que te mereces. Te di mi amor y todo lo que una persona enamorada entrega al estar con alguien, pero en vez de corresponderme, me pisoteaste como la basura que creíste que era.

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[Capítulo dedicado a twaeiceu & Chiqui_Solivan]

Tae Hyung yacía acostado en la cama matrimonial que compartía con Ho Seok, ambos estaban distanciados, el de cabellos rubios le daba la espalda a su esposo y este último hacía lo mismo. No se habían dicho nada desde que el menor decidió salir del cuarto de baño. La familia Jung tampoco decidió intervenir, pues estaba de más decir algo, cuando ya algunos suponían lo que sucedía.

Sin embargo, Ho Seok tampoco era estúpido, él sabía lo que ocurría, pero su cabeza se negaba a darle tregua a su corazón, comenzando así una disputa dentro del alfa. El lobo de este se encontraba feliz al saber de la gran noticia, sería papá, mas el lado humano del mayor se negaba a creer que tendría cachorros, no quería, no podía, él seguía creyendo fervientemente que amaba a Seul Gi, pero ¿En verdad lo hacía?

Nuevamente el sentimiento de dolor y tristeza llegó por el lazo, Ho Seok se sintió mal, su lobo aulló de dolor y él sentía ganas de salir corriendo de la habitación, alejarse de Tae Hung y dejar de hacerle daño, pero no podía evitarle ese dolor, el amor que tenía por Seul Gi seguía estanto "intacto" o eso era lo que se metía Ho Seok en la cabeza para tratar de ocultar su verdadera sexualidad y sentimiento.

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Los días siguientes fueron más pesados, los exámenes finales llegaron y la última semana de escuela por igual, la navidad se acercaba, estaban a tan sólo tres días y todo iba normal para Tae Hyung, el chico trataba de casi no comer nada para evitar los vómitos, pero estos le atacaban principalmente en la mañana y Ho Seok no estaba ahí para apoyarlo, el alfa se iba temprano a la escuela y no regresaba hasta la noche, junto a su padre.

Los problemas para la manada habían aumentado, Ho Seok se encontraba más estresado a la vista de Tae Hyung, pues el lazo no solo transmitía preocupación, sino también pesadez, algo que el omega no podía sentir en su estado. Por otro lado, su cumpleaños también se acercaba, el menor iba a cumplir dieciséis años, iba dejar de ser un niño, pero tampoco iba a convertirse en un adulto.

— ¡Tae Hyung! — y ahí estaba de nuevo, el mencionado trató de apresurar sus paso, pero el alfa logró alcanzarlo y detenerlo.

Tae no se sentía cómodo con la presencia de Jung Kook a su lado, su lobo le decía que se alejara, que no era bueno estar a su lado, sin embargo, su lado humano aún pedía un poco de la amistad del alfa.

— H-hace mucho que no hablamos. — los nervios le iban en contra al alfa mayor, estaba temblando y sus labios apretados le daban una idea muy parecida a Tae Hyung.— ¿Cómo has estado? Escuché muchos rumores sobre tu relación con Ho Seok. Y fue entonces que el miedo entró al cuerpo del menor, Jung Kook y él habían dejado de hablar hace unas semanas atrás a pedido de Ho Seok y él lo había cumplido al pie de la letra.

— T-tengo que irme. — fue la única respuesta del omega.

El alfa gruñó ante aquello y no tardó en volver a detener al menor, tomando con fuerza su muñeca y llevándolo a jalones de lado contrario de la salida.

Tae entró en pánico, Jung Kook no era alguien malo, pero había escuchado que estaba más alejado de la manada, que su padre también estaba teniendo disputas con el líder de la manada y que su familia estaba optando por otra opción... la manada vecina.

Eran problemas o simples rumores que no tenían nada de verdadero, sin embargo, Tae Hyung ya se lo iba tomando enserio cuando el mayor lo empujó dentro de un salón vacío, cerrando la puerta tras él.

— Hablaremos aunque no quieras ¡Me entendiste! — definitivamente no fue una pregunta, fue una orden que le dio Jung Kook, pero el omega ya estaba marcado, la voz de mando no funcionaba con él, pero el temor infundado no era buena tregua para el chico rubio.

— J-Jung Kook, y-yo... Yo me tengo que ir. — la escuela ya se encontra casi vacía, los alumnos se iban retirando y Tae Hyung tenía que llegar a tiempo a las clases de Seok Jin o este le haría correr en círculos durante una hora.

— Sé que Ho Seok es tu mate, también que te marcó y que posiblemente estés cargando en estos momentos a sus cachorros... pero tú eres mío, Tae Hyung ¡Solamente mío! — el grito asustó aun más al omega y sus pies comenzaron a retroceder, tratando de alejarse de aquel que antes fue su amigo, pero que ahora parecía un extraño que quería hacerle daño.

Jung Kook también comenzó a avanzar en dirección al omega y al tenerlo contra la pared, rodeado y sin escapatoria, sonrió, como si aquello que estuviera a punto de hacer fuera realmente gracioso.

— P-pod-demos... —  el omega sabía que al tartamudear demostraba su temor, así que llenando sus pulmones de aire y su cuerpo de valentía trató de hablar.— Podemos volver a ser amigos, como antes... cuando tú y yo salíamos juntos y almorzábamos en la misma mesa, c-cuando...

—¡CÁLLATE! ¡NO QUIERO ESCUCHARTE! — y aunque Jung Kook mantenía la mano alzada y a punto de  estamparla contra la mejilla del menor, no logró hacerlo, y no es porque alguien había venido en su ayuda, si no porque se dio cuenta de lo que iba a ser, se iba a convertir en alguien peor que Ho Seok, iba a golpear a alguien indefenso como Tae Hyung. — ¡LÁRGATE! ¡QUIERO QUE TE LARGUES YA!

Tae Hyung no sabía cómo reaccionar, se encontraba aún sorprendido por todo lo que le había sucedido, pero realmente no sabía qué hacer.

— ¡HE DICHO QUE TE LARGUES! — Y tomándole del brazo, el alfa logró sacar del lugar al omega.

Tae Hyung no reaccionó en ningún momento hasta que se encontró lejos de las instalaciones de la preparatoria y delante de Ho Seok, quien al parecer se encontraba enojado y preocupado.

El alfa estaba agitado y miraba cada parte del cuerpo de su omega, como si hubiera olido el miedo en este.

— ¿Qué te sucedió? ¿Quién te quizo hacer daño? ¿Fue ese imbécil nuevamente? — Tae Hyung negó con la cabeza y prefirió empujar a su esposo, alejándose de este para luego correr lo más rápido que le permitían sus piernas.

A pesar de escuchar los gritos de Ho Seok, a pesar de escuchar el sonido que hacía sus zapatos al chocar contra el suelo y a pesar de que el lazo le iba ardiendo por huír de su alfa, no se detuvo.

Quería estar solo, quería alejarse de todos y comprender lo qué tanto hacía mal para que todos lo odiaran; le cumplió a sus padres al casarse con un chico que no quería, le cumplió a su linaje al sacar su lado omega ante todos, le cumplió incluso a su lobo al dejar de lado sus gustos por las mujeres y comenzar a preocuparse por su mate, le cumplía a Ho Seok al ser un buen omega y le cumplía a ambas familias al traer a la vida a cachorros en su condición (corta edad), y aún así seguía sin entender por qué es que todos lo querían golpear, gritar o minimizar en todo.

Corrió y corrió hasta que logró detenerse dentro del bosque, sabía que su lobo amaba estar en la naturaleza y qué se sentía en paz al encontrarse ahí, por lo que no dudó en darle oportunidad de salir a su parte animal y comenzar a correr sin importar nada, ni siquiera que ya estaba demasiado lejos y que la frontera había sido cruzada, la frontera que separaba a ambas manadas que estaban en disputa.

Y no se detuvo hasta que distintos olores calaban por su olfato, obligándole a detenerse y mirar a los distintos alfas que lo rodeaban.

Tae Hyung tuvo miedo y su lobo también.

Esto no estaba bien, irrumpir en la manada enemiga cuando se encontraban en discusiones sólo significaba una cosa: la muerte inminente.

Este capítulo ya estaba escrito, porque la verdad es que sigo algo dolida por la muerte de Jong Hyun, pero aún así traje actualización, espero que les guste *-*

¡Hoy es navidad! ❤

Nota actual:

Jamás me cansaré de agradecerles, bebés. En cuanto a la historia, muy pronto Ho Seok sufrirá y no querrán verlo de esa manera.

Buenas noches ✨😚